SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.37 número1LGBT old age and facilitators of elderly living groups: their social representations índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • En proceso de indezaciónCitado por Google
  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO
  • En proceso de indezaciónSimilares en Google

Compartir


Psicología desde el Caribe

versión impresa ISSN 0123-417Xversión On-line ISSN 2011-7485

Psicol. caribe vol.37 no.1 Barranquilla ene./abr. 2020  Epub 05-Mayo-2021

https://doi.org/10.14482/psdc.37.1.001.42 

Artículos

Una mirada al emprendimiento a partir de una revisión de la literatura

An outlook to entrepreneurship from a literature review

DEIDI.YOLIMA MACA URBANO* 
http://orcid.org/0000-0002-9199-4383

ERICO RENTERÍA PÉREZ** 
http://orcid.org/0000-0002-0538-925X

*Universidad del Valle Correo electrónico: deidi.maca@correounivalle.edu.co, orcid: https://orcid.org/0000-0002-9199-4383

**Universidad del Valle Correo electrónico: erico.renteria@correounivalle.edu.co, Orcid: https://orcid.org/0000-0002-0538-925X


Resumen

Este artículo presenta una aproximación a las formas como parte de la literatura, desde la perspectiva psicológica, considera el emprendimiento, los conceptos, las nociones, las teorías y los métodos que emplea para su estudio. Se utilizó el análisis de contenido. Se identifica la existencia de tres tendencias de abordaje: atributos personales, interacción persona-contexto y carrera; con una tendencia de abordajes de orden positivista como forma de producción de conocimiento, y la consideración del emprendimiento como forma de re-institucionalización del trabajo por cuenta propia, y como opción ante la falta de oportunidades de empleo en el marco de las transformaciones contemporáneas del mundo del trabajo.

Palabras claves: trabajo; emprendimiento; perspectiva psicológica; Psicología del Trabajo

Abstract

This paper presents an outlook to the ways as part of the literature, which belong to the psychological perspective, considers entrepreneurship, concepts, notions, theories and methods used for its study. Content analysis as a research technique is used. Three approach tendencies -personal attributes, person-context interaction and career- and a tendency toward positivism as a way of knowledge production were found. Entrepreneurship could be a re-institutionalization of self-employment and an option facing unemployment within the framework of contemporary changes of work field.

Keywords: work; entrepreneurship; psychological perspective; work Psychology

Introducción

¿El emprendimiento podría ser una forma de reinstitucionalización del trabajo por cuenta propia y una opción de trabajo ante la falta de oportunidades de empleo en el marco de las transformaciones contemporáneas del mundo del trabajo? Esta es la idea que se explora a partir de una aproximación a las formas como parte de la literatura que producida por o desde una perspectiva psicológica considera el emprendimiento, los conceptos, las nociones y las teorías que usa para su estudio y los métodos empleados para abordar el fenómeno.

De origen francés, el término entreprendre pasó al inglés como entrepreneurship, y traducido al español ha originado el término emprendimiento (Osorio & Pereira, 2011 y ligado a éste aparece el de emprendedor. Vérin (1982) ubica los orígenes históricos de este término a finales del siglo XVII y comienzos del siglo XVIII. Éste se asociaba con dos usos iniciales: la persona que asumía una construcción civil cuyo diseño es acordado previamente al igual que el pago, y el guerrero que emprende una conquista. El término entrepreneur apareció por primera vez en el texto "Essai Sur la Nature du Commerce en Général" (Cantillon, 1755) y designaba una persona que se caracterizaba por comprar productos a precios conocidos para venderlos en el mercado a precios desconocidos. Posterior a Cantillon (1755) fueron los economistas Say, Knight y Schumpeter quienes realizaron aportes a la definición del término (Osorio & Pereira, 2011; Pereira, Osorio, & Medina, 2011).

Los orígenes del término emprendedor se encuentran en la Economía, la cual sigue siendo una disciplina fuerte en la investigación sobre emprendimiento, junto con la administración. Recientemente disciplinas como la Sociología y la Psicología, también se han interesado por el estudio del fenómeno. Esto ha derivado en que la investigación en emprendimiento esté siendo llevada a cabo desde diferentes perspectivas: la psicológica, que se ha centrado en el sujeto e investiga fundamentalmente las características, atributos o rasgos psicológicos que hacen que ciertos individuos "se conviertan" en emprendedores. La sociológica, que se centra en el contexto social, estudiando la influencia de éste en la decisión de convertirse en emprendedor. La administrativa, que se interesa en el estudio del proceso y la económica, que se enfoca en los resultados (Herrera & Gutiérrez, 2014; Kuura, Blackburn, & Lundin, 2014; Öner & Kunday, 2015; Osorio & Pereira, 2011).

Considerando la información arrojada por el recopilador de bases de datos Scopus en torno a los términos entrepreneurship, entrepreneur, entrepreneurial, emprendimiento y emprendedor se encuentra que aparecen asociados alrededor de 20.000 artículos, lo cual es una primera muestra del interés académico en el emprendimiento. Cabe resaltar que estas publicaciones empiezan a incrementarse, siguiendo una trayectoria constante, desde la década de los ochenta, época clave para hablar de las transformaciones contemporáneas del mundo del trabajo. Como se plantea más adelante el emprendimiento está íntimamente relacionado con dichos cambios.

La presente revisión se realizó en el marco de un proyecto de tesis doctoral en Psicología que se interesa en el emprendimiento como forma de re-institucionalización del trabajo por cuenta propia. Considerando que son diferentes las perspectivas para el estudio del emprendimiento se optó por el foco en la perspectiva psicológica, para posteriormente centrarse en cada una de las otras -ver Herrera & Gutiérrez (2014); Sánchez, (2011) para revisiones que presentan las diferentes perspectivas-. Si bien es cierto que Hisrich, Langan-Fox, & Grant (2007) realizan un artículo de revisión señalando las oportunidades de investigación para los psicólogos y exponen vacíos en la literatura de emprendimiento, sería interesante explorar la literatura que ha sido elaborada desde la perspectiva psicológica casi una década después de su publicación.

El objetivo del presente artículo es realizar una aproximación a las formas como parte de la literatura, desde una perspectiva psicológica, considera conceptos, nociones, métodos, y teorías usadas para el estudio del emprendimiento. Se analizan 59 artículos, a los cuales se llegó por saturación, que aparecen en el recopilador de bases de datos Scopus, publicados desde el 2006 hasta febrero de 2016, escritos en inglés, español y portugués. Se seleccionaron considerando que su abordaje tiene como centro al sujeto y que hace uso de conceptos, nociones y teorías que tradicionalmente han pertenecido a la psicología, sin que necesariamente sus autores sean psicólogos o las revistas pertenezcan al campo de la psicología. Es decir, artículos en los que se hace uso de la psicología como disciplina científica para estudiar el fenómeno.

Las palabras claves para realizar la búsqueda fueron entrepreneurship, entrepreneur, entrepreneurial, selfemployment, unemployment, emprendimiento, emprendedor, autoempleo y desempleo. Se optó por la aproximación a través del recopilador de bases de datos Scopus, puesto que éste constituye una pauta reciente a nivel de formación doctoral, específicamente de reportes de investigación para el establecimiento de estados del arte o de la cuestión en el país y por parte de comunidades académicas internacionales. Este recopilador de bases de datos se considera uno de los sistemas de concentración de información más potentes para dar cuenta de la producción de los últimos años en un tema en particular, esto sin detrimento a que las investigaciones o publicaciones puedan usar otras bases de datos u otros documentos pertinentes como los provenientes de la denominada "literatura gris". Como técnica de investigación se hizo uso del análisis de contenido (Bardin, 2002).

La primera parte del presente artículo presenta una caracterización del universo de análisis y algunos aspectos relacionados con el método empleado para el estudio del emprendimiento. La segunda incluye un apartado dirigido a exponer el contexto en el que los investigadores ubican el emprendimiento y las razones que aluden para justificar su importancia. La tercera aborda a quienes son considerados emprendedores, cómo es definido el emprendimiento, autores, conceptos, nociones y teorías usados para dar cuenta de éste. Finalmente, se presenta una discusión sobre el emprendimiento como fenómeno social para la clase-que-vive-del-trabajo (Antunes, 2000), y como un floating signifier (Laclau, 2005) en el tratamiento dado por la literatura referida.

Caracterización del universo de análisis

Los artículos se encuentran publicados en su mayoría en revistas de Psicología, Administración y orientación vocacional de las cuales sobresalen Personality and Individual Differences, Journal of Vocational Behavior y Scandinavian Journal of Management. 31 investigaciones se concentran en Europa, 9 en Norteamérica, 7 en Sur-américa y 10 en Asia. En términos de países, las investigaciones se concentran en España, Estados Unidos, Alemania y Reino Unido. La mayoría de las publicaciones son escritas en conjunto por autores que pertenecen a Departamentos de Psicología y Administración de universidades principalmente europeas. 55 autores provienen de universidades de Europa, 24 de Norteamérica, 10 de Suramérica y 9 de Asia. De los artículos 46 corresponden a investigación científica, 8 a reflexión y 5 a revisión1. Los artículos de revisión científica hacen uso de conceptos, nociones y teorías para estudiar el emprendimiento que pueden agruparse en tres tendencias: atributos personales, interacción persona-contexto y carrera.

Los artículos de reflexión ofrecen modelos teóricos y formas de lectura del emprendimiento. Uno de los modelos integra el constructo de intuición con el proceso de emprendimiento (Sadler-Smith, 2015), otro explica los factores de pensamiento individuales que afectan el comportamiento emprendedor de los hispanos en Estados Unidos (Canedo, Stone, Black, & Lukaszewski, 2014), y otro propone la teoría social cognitiva como un marco teórico pertinente para reflexionar acerca de las necesidades de educación en emprendimiento (Osorio & Pereira, 2011). Se proponen formas de lectura del emprendimiento a través de la subversión y la resistencia propias del arte (Bureau & Zander, 2014), o la transducción (Styhre, 2008), y la vinculación de la ideología del emprendimiento con el proceso de reestructuración productiva (Luna, 2012). En estos artículos también se plantea la relación entre proyectos de trabajo y emprendimiento (Kuura et al. , 2014), y se propone un abordaje del emprendimiento en la tercera edad (Oelckers, 2015).

En los artículos de revisión se describen las perspectivas psicológica, sociológica y económica (Sánchez, 2011); así como la perspectiva psicológica y contextual (Herrera & Gutiérrez, 2014). Se destacan las oportunidades de investigación para los psicólogos exponiendo vacíos en la literatura de emprendimiento y describiendo como éstos pueden ser llenados a partir del estudio en torno a las características de personalidad de los emprendedores, la psicopatología, la cognición emprendedora, la educación emprendedora y el emprendimiento como fenómeno global (Hisrich et al. , 2007). De los cinco artículos de revisión dos son meta-análisis sobre aspectos de personalidad del emprendedor que hacen uso de un modelo de cinco factores de personalidad (Brandstátter, 2011recently summarized in five meta-analyses, has intensified during the past two decades. Internationally, entrepreneurship has been recognized as highly important for socio-economic prosperity. After discussing a few basic concepts relating task and context of entrepreneurship to personality characteristics the main results of the meta-analyses are reported. In the system of the Big Five, personality traits make a difference when entrepreneurs are compared with managers (C+, O+, E+, N-, A-; Zhao & Seibert, 2006).

Forma como se estudia el emprendimiento

Los sectores de la economía que se privilegian

La literatura revisada se concentra en emprendimientos pertenecientes a los sectores secundarios y terciarios de la economía en el sector formal. Sobresalen los emprendimientos vinculados a industrias creativas (Bendassolli, Borges-Andrade, & Gondim, 2016), servicios de software y computación (Castro, Galán, & Bravo, 2014; Gorgievski, Moriano, & Bakker, 2014; Kyndt & Baert, 2015), transporte y comunicaciones (Gorgievski et al., 2014; Kyndt & Baert, 2015; ), hospedaje (Kyndt & Baert, 2015; Pijpers & Maas, 2013), construcción (Kyndt & Baert, 2015; Sánchez, 2014), sector automotriz, trabajo gráfico, artes, ventas, servicios de limpieza (Kyndt & Baert, 2015), servicios financieros, servicio al cliente (Gorgievski et al., 2014), asistencia médica (Janssen & Moors, 2013) y universidades (Obschonka, Silbereisen, Cantner, & Goethner, 2014; Obschonka, Silbereisen, & Schmitt-Rodermund, 2010, 2012).

Fuentes y participantes

Las fuentes primaras (personas) abarcan emprendedores y no emprendedores, 17 investigaciones tienen como participantes a los primeros, mientras que 26 se centran en los segundos. Como fuentes primarias se destacan emprendedores (Armstrong & Hird, 2009; Bendassolli et al., 2016; Castro et al., 2014; Gorgievski et al., 2014; Janssen & Moors, 2013; Kyndt & Baert, 2015; Lejarriaga, Bel & Martín, 2013; Mathieu & St-Jean, 2015; Obschonka, Silbereisen, Schmitt-rodermund, & Stuetzer, 2011; Obschonka et al., 2014, 2010, 2012; Wei, Cang, & Hisrich, 2015) propietarios de negocio (Pijpers & Maas, 2013; Sánchez, 2014) y autoempleados (Harms, Luck, Kraus, & Walsh, 2014) denominados así por los investigadores.

Entre los emprendedores se cuenta con profesionales que trabajan en industrias creativas (Bendassolli et al., 2016), científicos con tareas centrales a lo largo del proceso emprendedor (Obschonka et al. , 2014, 2010, 2012), emprendedores acogidos en incubadoras de negocios (Wei et al. , 2015), estudiantes universitarios emprendedores (Lejarriaga et al. , 2013), emprendedores pertenecientes a programas de emprendimiento (Mathieu & St-Jean, 2015), y gerentes o representantes legales de emprendimientos (Castro et al. , 2014). También se consideran innovaciones de asistencia médica (Janssen & Moors, 2013) y representantes claves de entidades locales relacionadas con emprendimiento como universidades, gobiernos locales, institutos de investigación, y firmas localizadas en la región (Yoon, Yun, Lee, & Phillips, 2015).

Como no emprendedores se consideran jóvenes y población adulta en general. 17 investigaciones se enfocan en los primeros y 9 en los segundos. De 17 investigaciones con jóvenes 15 se centran en universitarios (Buttar, 2015; Culbertson, Smith, & Leiva, 2010; Decker, Calo, & Weer, 2012; Forsström-Tuominen, Jussila, & Kolhinen, 2014; Geldhof, Malin, et al., 2014; Geldhof, Weiner, Agans, Mueller, & Lerner, 2014; Hirschi, 2013; Morales-Alonso, Pablo-Lerchundi, & Núñez-Del-Río, 2015; Pinto, do Céu Taveira, & Sá, 2012; Rodríguez & Prieto Pinto, 2009; S. Sánchez & Fuentes, 2013; Tolentino, Sedoglavich, Lu, Garcia, & Lloyd, 2014; Urbig, Weitzel, Rosenkranz, & Witteloostuijn, 2012; Uy, Chan, Sam, Ho, & Chernys-henko, 2014). Se incluyen también jóvenes en general (Morales & Ariza, 2013), y jóvenes afro-americanos sin hogar interesados en programas de desarrollo de emprendimiento (Jennings, Shore, Strohminger, & Allison, 2015).

Otro foco de interés es la población adulta en general (entre los 16 y 84 años) (Ahmetoglu, Leutner, & Chamorro-Premuzic, 2011; Akhtar, Ahmetoglu, & Chamorro-Premuzic, 2013; Hatak, Harms, & Fink, 2015; Kautonen, Hatak, Kibler, & Wainwright, 2015; Leutner, Ahmetoglu, Akhtar, & Chamorro-Premuzic, 2014; Nishimura & Tristán, 2011; Obschonka, Schmitt-Rodermund, Silbereisen, Gosling, & Potter, 2013; Öner & Kunday, 2015; Verheul, Thurik, Grilo, & van der Zwan, 2012). Algunas investigaciones incluyen desempleados, empleados medio tiempo y tiempo completo, y auto-empleados (Ahmetoglu et al., 2011; Akhtar et al., 2013; Leutner et al., 2014); y otras excluyen estudiantes, desempleados, jubilados y otros no activos en el mercado laboral (Verheul et al., 2012).

Como fuentes secundarias se hace uso de la información propia de datos agregados del Global Entrepreneurship Monitor de Perú (Nishimura & Tristán, 2011), de España (Morales & Ariza, 2013), de Turquía (Öner & Kunday, 2015) y de Estados Unidos (Thebaud, 2010); del Eurobarometer survey (Verheul et al., 2012), de la Encuesta sobre Vocación Emprendedora en Andalucía (Morales & Ariza, 2013) y de la Cámara de Comercio de Turquía (Öner & Kunday, 2015).

Tendencias en cuanto a la cualidad del dato

39 estudios hacen uso de datos cuantitativos de los cuales 21 son artículos de investigación científica sobre atributos personales (Ahmetoglu et al., 2011; Akhtar et al., 2013; Armstrong & Hird, 2009; Bendassolli et al., 2016; Hatak et al., 2015; Gorgievski et al., 2014; Kautonen et al., 2015; Kyndt & Baert, 2015; Leutner et al., 2014; Morales Gutiérrez & Ariza Montes, 2013; Morales-Alonso et al., 2015; Nishimura & Tristán, 2011; Obschonka et al., 2014, 2010, 2012; Puga & García, 2012; Rodríguez & Prieto Pinto, 2009; Sánchez & Fuentes, 2013; Sánchez García, 2014; Urbig et al., 2012; Verheul et al., 2012), cuatro sobre interacción persona-contexto (Geldhof, Weiner, et al., 2014; Lejarriaga et al., 2013; Obschonka et al., 2013; Wei et al., 2015), 12 sobre carrera (Buttar, 2015; Chan et al., 2012; Culbertson et al., 2010; Decker et al., 2012; Hirschi, 2013; Mathieu & St-Jean, 2015; Mc-Kenna, Zacher, Sattari Ardabili, & Mohebbi, 2016; Obschonka et al., 2011; Pinto et al., 2012; Thebaud, 2010; Tolentino et al., 2014; Uy et al., 2014), y dos artículos de revisión (Brandstátter, 2011; Zhao & Seibert, 2006).

17 investigaciones hacen uso de datos cualitativos, de las cuales dos son artículos de investigación científica sobre atributos personales (Harms et al., 2014; Jennings et al., 2015), tres sobre interacción persona-contexto (Forsström-Tuo-minen et al., 2014; Janssen & Moors, 2013; Yoon et al., 2015), 1 sobre carrera (Pijpers & Maas, 2013) ocho son artículos de reflexión (Bureau & Zander, 2014; Canedo et al., 2014; Kuura et al., 2014; Luna, 2012; Oelckers, 2015; Osorio & Pereira, 2011; Sadler-Smith, 2015; Styhre, 2008), tres artículos de revisión (Herrera & Gutiérrez, 2014; Hisrich et al., 2007; Sánchez, 2011). tres investigaciones hacen uso de datos mixtos, con foco en interacción persona-contexto (Castro et al., 2014; Geldhof, Malin, et al., 2014; Öner & Kunday, 2015).

Donde se abordan datos cuantitativos, se recurre al uso de instrumentos disponibles que son empleados para medir los conceptos y las nociones que se usan para el estudio del emprendimiento: atributos personales (rasgos de personalidad, intención emprendedora, auto-identidad, autoimagen basada en la edad, identificación con la edad y el trabajo, auto-control y los cinco grandes rasgos de personalidad), cognición, competencias, y motivaciones y valores; interacción persona-contexto y carrera.

Se destaca el uso de la escala de auto-control y dirección (Bendassolli et al., 2016), la escala que mide los cinco grandes rasgos de personalidad -extraversión, simpatía, meticulosidad, estabilidad emocional e intelecto/imaginación- (Leutner et al., 2014; Obschonka et al., 2013, 2010), la escala de auto-reporte de psicopatología de Levenson (Akhtar et al., 2013), la escala de adaptabilidad de carrera (Tolentino et al., 2014; Uy et al., 2014), el cuestionario de rasgos de inteligencia emocional (Ahmetoglu et al., 2011), la encuesta de exploración de carrera (Pinto et al., 2012), y el Índice de Estilo Cognitivo (Armstrong & Hird, 2009).

Donde se abordan datos cualitativos se recurre a entrevistas semi-estructuradas (Castro et al., 2014; Forsström-Tuominen et al., 2014; Harms et al., 2014; Jennings et al., 2015) que se aplican para explorar motivación (Harms et al., 2014), discursos sobre emprendimiento (Forsström-Tuominen et al., 2014) metas futuras, experiencia emprendedora, cualidades emprendedoras, y actitudes hacia el emprendimiento (Geldhof, Malin, et al., 2014), trayectorias (Pijpers & Maas, 2013); así como razones por las cuales los jóvenes están interesados en participar en iniciativas de emprendimiento (Jennings et al., 2015)

Como forma de analizar los datos cuantitativos se recurre principalmente a herramientas que permiten hacer inferencias (Chan et al., 2012; Decker et al., 2012; Geldhof, Malin, et al., 2014; Hatak et al., 2015; Gorgievski et al., 2014; Kyndt & Baert, 2015; Morales-Alonso et al., 2015; Nishimura & Tristán, 2011; Obschonka et al., 2011; Pinto et al., 2012; Sánchez & Fuentes, 2013), y a la estadística descriptiva (Sánchez & Fuentes, 2013). Como forma de analizar los datos cualitativos se recurre al análisis inductivo (Geldhof, Malin, et al., 2014; Janssen & Moors, 2013), y al análisis de discurso (Forsström-Tuominen et al., 2014).

Contexto en el que se ubica el emprendimiento

En cuanto a los contextos de referencia donde se ubican los grupos de interés, sólo 24 artículos hacen alusión explicita al contexto donde se ubica el emprendimiento y a la importancia de éste. Al parecer hay una tendencia a dar por sentado su importancia y a no discutir las implicaciones de no presentar sus características concretas donde tiene lugar. Cuando se presenta, se hace alusión a cambios contemporáneos en el mundo del trabajo, a las crisis económicas y a las políticas públicas. Diversos autores señalan que el emprendimiento trae beneficios para la sociedad en términos de crecimiento económico y generación de trabajo nacionalmente, visto como un comportamiento adaptativo frente a los cambios contemporáneos del mundo del trabajo, y como un elemento importante para la orientación profesional.

Luna (2012), Obschonka et al. (2012, 2011) y Uy et al. (2014) ubican el emprendimiento en el contexto de los cambios contemporáneos acaecidos en el mundo del trabajo. Se señala que la rápida globalización, los desarrollos tecnológicos, y las presiones del mercado han causado cambios significativos en la naturaleza y organización del trabajo, y el empleo (Uy et al., 2014).

Durante las crisis económicas, o posterior a éstas, el emprendimiento ha aparecido como una opción para promover el crecimiento económico, o como una opción frente al desempleo y la pobreza acentuados por dichas crisis. El emprendimiento se considera un factor para el crecimiento económico (Armstrong & Hird, 2009; Castro et al., 2014; Kautonen et al., 2015; Leutner et al., 2014; Morales-Alonso et al., 2015; Nishimura & Tristán, 2011; Obschonka et al., 2011; Sadler-Smith, 2015; Sánchez, 2014; Yoon et al., 2015) por la creación de innovaciones, nuevos productos, servicios y tecnologías, o el incremento de la productividad de bienes y servicios existentes, y la creación y aumento de la competencia (Armstrong & Hird, 2009; Nishimura & Tristán, 2011).

Por otro lado, el emprendimiento se considera como una opción frente a los problemas de desempleo y pobreza. En este marco, se presenta como una alternativa para contrarrestar la falta de oportunidades laborales, en especial para los jóvenes (Geldhof, Malin, et al., 2014; Jennings et al., 2015; Lejarriaga et al., 2013), de ingresos (Oelckers, 2015), como fuente de trabajo (Chan et al., 2012; Geldhof, Malin, et al., 2014; Hirschi, 2013; Lejarriaga et al., 2013; Leutner et al., 2014; Morales-Alonso et al., 2015; Oelckers, 2015), o como promotor de la inclusión social (Kautonen et al., 2015). En este marco, se refiere al Estado en relación con el diseño y propuesta de nuevas políticas públicas enfocadas a la promoción del emprendimiento y su discurso bajo la idea de que éste es un elemento clave para el desarrollo económico y para la generación de trabajo (European Commission, 2014; Kautonen et al., 2015).

El emprendimiento es visto también como un comportamiento adaptativo frente a los cambios contemporáneos del mundo del trabajo y como un elemento importante para la orientación profesional. Los cambios económicos, sociales y tecnológicos traen nuevas demandas, pero también oportunidades para la carrera de los individuos. Una manera identificada de hacer frente proactivamente a esas demandas y utilizar las nuevas posibilidades es a través del emprendimiento (Obschonka et al., 2012).

Como un comportamiento adaptativo (Obschonka et al., 2011), el emprendimiento se relaciona con actitudes favorables hacia las carreras sin límites y las carreras proteanas. Los recursos psicológicos como la adaptabilidad de carrera han sido identificados como críticos para que los individuos prosperen en los contextos de trabajo de la economía global y logren una mejor adaptación al actual ambiente de trabajo (Uy et al., 2014). Se considera que esto tiene implicaciones para el desarrollo de servicios de acompañamiento de carrera e intervenciones que promuevan una reflexión acerca del emprendimiento como trayectoria de carrera (Luna, 2012; Pinto et al., 2012).

Emprendedores y emprendimiento

En 40 de los artículos se encuentra alusión a definiciones de emprendimiento o emprendedor, y en 19 no, así que pareciera que en estos últimos se considera que hay una definición clara y compartida en torno al emprendimiento, lo cual no haría necesario especificar su definición. El emprendedor se define como un innovador, es quien produce ideas y reconoce y toma oportunidades, las convierte en ideas trabajables y mercadeables, añade valor a través del tiempo, esfuerzo, dinero o habilidades, asume el riesgo del mercado competitivo para implementar esas ideas; y alcanza la recompensa de sus esfuerzos (Bendassolli et al., 2016; Kyndt & Baert, 2015). También puede definirse como quien identifica oportunidades viables de negocio (Armstrong & Hird, 2009; Nishimura & Tristán, 2011; Öner & Kunday, 2015).

Los autores refieren diferentes características para el emprendedor: oportunista, innovativo, creativo, imaginativo, inquieto, proactivo, aventurero y agente de cambio (Armstrong & Hird, 2009). Los emprendedores están explotando e identificando más oportunidades beneficiosas en comparación con los no emprendedores, así que el estado de alerta hacia las oportunidades es uno de sus componentes clave. El rol del emprendedor viene no de introducir cambios autónomamente dentro de las relaciones de mercado existentes, sino de su habilidad de notar, más temprano que otros, los cambios que han ocurrido (Öner & Kunday, 2015).

Consistente con la atribución riesgosa del trabajo emprendedor y con la aceptación percibida del riesgo asociado con emprendimiento, los investigadores han encontrado que los emprendedores tienen una tendencia más alta a tomar riesgos que los gerentes (Culbertson et al., 2010). De esta manera, el emprendedor reúne una serie de habilidades, cualidades, capacidades psíquicas e intelectuales que interactúan para establecer un equilibrio en el desempeño exitoso de sus actividades (Herrera & Gutiérrez, 2014).

Como parte de la conceptualización en torno a emprendedor y emprendimiento, los autores retoman las anteriores características pero en el momento de la operacionalización, hay una tendencia a definir a los emprendedores como propietarios y administradores de su propio negocio (Bendassolli et al., 2016; Geldhof, Malin, et al., 2014; Gorgievski et al., 2014; Oelckers, 2015; Pijpers & Maas, 2013; Sánchez, 2014) y como auto-empleados (Decker et al., 2012; Gorgievski et al., 2014; Oelckers, 2015).

El emprendimiento se define como un proceso de descubrimiento, reconocimiento, evaluación y explotación de oportunidades, innovación y creación de valor, como un conjunto de comportamientos, como propiedad y dirección de un negocio propio y como auto-empleo. El emprendimiento implica un proceso de descubrimiento, reconocimiento, evaluación y explotación de oportunidades (Ahmetoglu et al., 2011; Akhtar et al., 2013; Brandstátter, 2011; Hisrich et al., 2007; Leutner et al., 2014; Sadler-Smith, 2015; Sánchez, 2011, 2014), innovación y creación de valor (Ahmetoglu et al., 2011; Akhtar et al., 2013; Bendassolli et al., 2016; Brandstátter, 2011; Kuura et al., 2014; Leutner et al., 2014). Dicha búsqueda de oportunidades se caracteriza por la no consideración de los recursos que el emprendedor controla en ese momento (Sánchez, 2011; Uy et al., 2014) e implica asumir los riesgos financieros, psíquicos y sociales que acompañan el proceso (Hisrich et al. , 2007). De acuerdo con Brandstátter (2011), desde esta perspectiva, el emprendimiento podría ser atribuido tanto a los gerentes como a los fundadores de negocios y fundar una empresa privada pequeña puede no ser una actividad emprendedora per se, sino únicamente si es claramente caracterizada por la innovación y la creatividad. La definición de la Comisión Europea especifica el emprendimiento como un proceso dinámico y social donde los individuos, solos o en colaboración, identifican oportunidades para la innovación y actúan sobre éstas transformando ideas en actividades prácticas y con propósitos, sin importar el contexto social, cultural o económico (European Commission, 2006; Kuura et al., 2014).

El emprendimiento se define también como un conjunto de comportamientos como lo son el reconocimiento y explotación de oportunidades, y la innovación y creación de valor (Ahmetoglu et al., 2011; Leutner et al., 2014) lo cual ha dado lugar a la noción de comportamiento emprendedor (Ahmetoglu et al., 2011; Kautonen et al., 2015; Morales-Alonso et al., 2015) y a considerar que son las características propias del emprendedor las que determinan en mayor medida su propensión a desarrollar proyectos empresariales y por ende también el éxito o fracaso de sus iniciativas productivas (Nishimura & Tristán, 2011). Dado que el comportamiento emprendedor se considera una función de las diferencias individuales, los factores de personalidad y las habilidades, éstos deberían predecir la actividad emprendedora y el éxito emprendedor (Ahmetoglu et al., 2011).

Por otro lado, Forsström-Tuominen et al. (2014) conciben el emprendimiento como un fenómeno construido socialmente tomando su forma en discursos movilizados. Por su parte Luna (2012) considera que puede ser un término que representa la intensificación y la desregulación del trabajo y finalmente, para Jennings et al. (2015) el emprendimiento puede ser una actividad económica de empoderamiento.

En el momento de operacionalizar emprendimiento, algunos autores incluyen ítems relacionados con la operacionalización más tradicional del logro emprendedor: número de negocios empezados, número de negocios aun operando, número de empleados, ingreso (Ahmetoglu et al., 2011; Akhtar et al., 2013); así como propiedad y dirección de un negocio propio (Geldhof, Malin, et al., 2014; Morales & Ariza, 2013), o el "autoempleo" (Decker et al., 2012; Harms et al., 2014; S. Sánchez & Fuentes, 2013; Verheul et al., 2012).

Conceptos, nociones y teorías empleados para el estudio del emprendimiento

Se identifican tres grandes tendencias que enmarcan los conceptos, las nociones y las teorías que se emplean para el estudio del emprendimiento: atributos personales, interacción persona-contexto y carrera.

Atributos personales

Esta tendencia puede dividirse en cuatro aproximaciones: características de personalidad; cognición; competencias; y motivación y valores. Dentro de las características de personalidad hay interés por estudiar la intención emprendedora, la auto-identidad, la autoimagen basada en la edad, la identificación con la edad y el trabajo, el auto-control, cinco grandes rasgos de personalidad, y la psicopatología primaria. Esta aproximación parece se enfocarse en "características inflexibles" y "disposiciones inamovibles" del individuo (Kyndt & Baert, 2015).

El interés por el estudio de la intención emprendedora (Morales-Alonso et al. , 2015; Nishimura & Tristán, 2011; Obschonka et al., 2010; Rodríguez & Prieto Pinto, 2009; Sánchez & Fuentes, 2013; Tolentino et al., 2014; Urbig et al., 2012), la asume como un estado de conciencia que dirige la atención, la experiencia y la conducta hacia el comportamiento emprendedor planeado (Obschonka et al. , 2010). Es posible identificar estudios sobre intención emprendedora y diferencias por género (Sánchez & Fuentes, 2013); intención emprendedora y adaptabilidad de carrera (Tolentino et al., 2014) y una escala psicométrica para medir intención emprendedora (Urbig et al., 2012).

Algunos estudios sobre intención emprendedora usan la Teoría del Comportamiento Planeado -TCP- (Morales-Alonso et al., 2015; Nishimura & Tristán, 2011; Rodríguez & Prieto Pinto, 2009), que es una extensión de la teoría de la acción razonada (Ajzen & Fishbein, 1980). Esta teoría postula que el desempeño de un comportamiento específico es una función de la intención de desempeñar tal comportamiento (Ajzen & Fishbein, 1980). Aquí la intención está determinada por tres factores socioafectivos: actitudes hacia el desempeño del comportamiento, norma subjetiva concerniente a la acción y control comportamental percibido (Ajzen & Fishbein, 1980). Para el estudio de la auto-identidad (Obschonka et al., 2014), la autoimagen basada en la edad (Kautonen et al., 2015), y la identificación con la edad y el trabajo (Hatak et al., 2015), también se recurre a la TCP. En términos generales, estas investigaciones tienen como propósito conocer cómo la auto-identidad, la autoimagen basada en la edad y la identificación con la edad y el trabajo afectan la intención emprendedora.

Por fuera de la intención emprendedora y la TCP, se estudian el autocontrol, la estructura de personalidad y la psicopatología primaria. El auto-control se define como el intento que realizan los seres humanos como agentes para asumir la dirección de su comportamiento y romper el ciclo de control ambiental sobre ellos. Bendassolli et al. (2016) se interesan en estudiar las diferencias en el auto-control en función de si la persona es o no un emprendedor, sus características personales y sector de actividad. La estructura de personalidad se estudia haciendo uso de la aproximación a "los cinco grandes rasgos" de personalidad (Ahmetoglu et al., 2011; Obschonka et al., 2013). La psicopatología primaria comprende dos facetas de la psicopatología: la que tiene que ver con relaciones interpersonales (manipulación de otros, narcisismo y superficialidad) y la que tiene que ver con afecto trivial (insensibilidad, fallas en aceptar la responsabilidad y falta de empatía o culpa). Tales características podrían ser predictores importantes de resultados de carrera, incluyendo el emprendimiento (Akhtar et al., 2013).

De acuerdo con Sánchez (2014), la cognición ha emergido como una importante aproximación para comprender y explicar el comportamiento emprendedor. Dentro de esta perspectiva hay un interés por el estudio de la inteligencia emocional, la secuencia y el estilo cognitivo, considerados como factores importantes en la predicción tanto del comportamiento como del éxito emprendedor (Ahmetoglu et al., 2011; Armstrong & Hird, 2009; Sánchez, 2014)

La aproximación desde las competencias se concentra en aspectos que pueden ser desarrollados y aprendidos a través de la experiencia y el entrenamiento (Kyndt & Baert, 2015). Las competencias han sido definidas como componentes combinados e integrados de conocimiento, habilidades y actitudes, son cambiables, aprendibles y alcanzables (Kyndt & Baert, 2015). Las investigaciones se interesan en las competencias como predictores del comportamiento emprendedor (Kyndt & Baert, 2015; Obschonka et al., 2011).

Con respecto a la aproximación desde la motivación y a los valores, se puede decir que de los estudios identificados, que se interesan en la investigación de la motivación se va desde el interés por factores negativos que fuerzan o presionan a los emprendedores al autoempleo, factores de oportunidades de negocios rentables, y deseos de independencia y trabajo (Harms et al., 2014), motivación social (Decker et al., 2012), compromiso y adicción al trabajo como conceptos que llevan a que los resultados puedan ser asumidos de forma diferente (Gorgievski et al., 2014), estudios con foco en los valores, planteándolos como variables (Morales & Ariza, 2013).

Interacción persona - contexto

Dentro de la segunda tendencia los autores se interesan por el estudio de los estresores de trabajo y el burnout (Wei et al., 2015), el capital social (Buttar, 2015; Castro et al., 2014; Yoon et al., 2015), la estructura de personalidad (Geldhof, Weiner, et al., 2014; Obschonka et al., 2013), la percepción (Lejarriaga et al., 2013), las estrategias de emprendimiento (Janssen & Moors, 2013), el discurso (Forsström-Tuominen et al., 2014), la intención emprendedora (Geldhof, Malin, et al., 2014), y las identidades, narrativas y trayectorias (Pijpers & Maas, 2013) planteando una relación entre aspectos personales y elementos propios del contexto.

Castro et al. (2014) y Yoon et al. (2015) señalan que el capital social da cuenta de características de la organización social tales como confianza, normas y redes, las cuales pueden mejorar la eficiencia de la sociedad facilitando acciones coordinadas. Abordan tres dimensiones del capital social: estructural, relacional y cognitiva. Obschonka et al. (2013) estudian los cinco grandes factores de personalidad desde la perspectiva de la Psicología socio-ecológica; mientras que Geldhof, Weiner, et al. (2014)) plantean una relación entre dichas características y los factores de contexto, haciendo uso de la intención emprendedora.

Geldhof, Malin, et al. (2014) proponen las teorías de los sistemas de desarrollo relacional, las cuales consideran que los atributos del individuo contribuyen al desarrollo de la carrera emprendedora, pero ellos son parte de un sistema de persona contexto más grande. Por su parte, Pijpers & Maas (2013) proponen abordar las identidades, las narrativas y las trayectorias desde una aproximación transnacional, lo que implica considerar la influencia duradera de las condiciones políticas, económicas y sociales tanto de las sociedades de origen, como por ejemplo en casos de recepción de migrantes propietarios de pequeños negocios.

Carrera

Dentro de esta tendencia, sólo Chan et al. (2012) proponen una definición. En los demás artículos pareciera que se da por sentado lo que se entiende por ésta. Chan et al. (2012) definen la carrera como la secuencia desarrollada de la experiencia de trabajo de una persona sobre el tiempo.

Diferentes autores señalan que en el mundo del trabajo del siglo XXI están apareciendo nuevos modelos de carrera, diferentes a los tradicionales que caracterizan la carrera como objetiva, lineal, rígida, unidireccional y organizacional (Chan et al., 2012; Pinto et al., 2012; Uy et al., 2014). Hay alusión a las carreras que consideran una perspectiva auto-dirigida y subjetiva, como las carreras proteanas o las carreras sin límites, las cuales abarcan actitudes de carrera conducidas por valores, y auto-dirigidas resultantes en una movilidad más grande y una mirada de carrera de larga vida y meta-competencias de carrera como adaptabilidad de carrera (Chan et al., 2012; Pinto et al., 2012; Uy et al., 2014).

En esta tendencia se encuentran dos grandes aproximaciones: la intención de carrera emprendedora y las actitudes, y la descripción, de lo que los autores denominan la carrera emprendedora. En la primera aproximación, intención de carrera emprendedora y actitudes, se encuentran diferentes investigaciones que indagan sobre qué tan interesados están los sujetos que no son emprendedores (población en general y jóvenes, en especial estudiantes universitarios) en el emprendimiento como parte de su carrera. Aquí se recurre a diferentes conceptos y nociones.

Uno de los conceptos es el de intención de carrera emprendedora. Chan et al. (2012) se enfocan en examinar la contribución relativa de la motivación y la eficacia a la intención de carrera, proponiendo un marco para representar el espacio subjetivo en el cual las carreras (emprendedora, profesional y de liderazgo) se despliegan sobre el tiempo (Chan et al., 2012). Tolentino et al. (2014) se centran en la auto-eficacia emprendedora como mediador de la relación entre la adaptabilidad de carrera y las intenciones emprendedoras. Hirschi (2013) abarca la intención de carrera emprendedora; y Buttar (2015) haciendo uso de la TCP, investiga el rol del capital social y los factores cognitivos en la intención de carrera emprendedora.

Otro de los conceptos empleados es el de actitudes específicamente relacionado con las carreras proteanas (Chan et al., 2012), el de carrera sin límites (Chan etal., 201 2; Uy et al., 2014), y el de ancla de carrera que examina el rol moderador de la auto-eficacia en la relación entre la orientación a metas y el desarrollo del ancla de carrera (Culbertson et al., 2010). Por otro lado es posible identificar experiencias aplicadas orientadas a estudiantes de doctorado y carreras auto-dirigidas que deberían estar acompañadas con temas de emprendimiento para promover el desarrollo de la carrera de los estudiantes (Pinto et al., 2012).

En la segunda aproximación están investigaciones destinadas a describir la carrera emprendedora de quienes son considerados emprendedores por los investigadores. La descripción de la carrera se realiza haciendo uso de la teoría socio-cognitiva de la carrera, según la cual el apoyo social puede promover la auto-eficacia en tareas específicas, las cuales, a su turno, pueden actuar como mediadores para la retención y satisfacción de la carrera de los emprendedores que reciben apoyo como parte de un programa de emprendimiento (Mathieu & St-Jean, 2015). Se estudian también las competencias emprendedoras tempranas en la adolescencia y la creación exitosa de actividades comerciales de riesgo durante la carrera (Obschonka et al., 2011); y se hace uso de las identidades, las narrativas y las trayectorias para la descripción de la carrera de migrantes propietarios de pequeños negocios (Pijpers & Maas, 2013).

Como nociones, conceptos y teorías de carrera, se encuentran la carrera emprendedora (Chan et al., 2012; Uy et al., 2014), actitudes hacia las carreras sin límites (Chan et al., 2012; Uy et al., 2014) y hacia las carreras proteanas (Chan et al., 2012), la adaptabilidad de carrera (Tolentino et al., 2014; Uy et al., 2014), la toma de decisión de carrera y la teoría socio-cognitiva de la carrera (Hirschi, 2013).

Discusión y conclusiones

Sobre el método

Existe un predominio de investigaciones y autores europeos, lo cual no quiere decir que el fenómeno del emprendimiento se concentre solamente en estas zonas del globo, en la medida en que el emprendimiento es un fenómeno que está relacionado con los cambios contemporáneos en el mundo del trabajo, es un fenómeno que se remite también a otras latitudes. Esto plantea la necesidad de ampliar el rango de búsqueda para otras revisiones haciendo uso de otros recursos que permitan acceder a producción académica registrada en otro tipo de bases de datos.

Con respecto al método empleado y específicamente a los sectores de la economía de donde se eligen los emprendimientos, las investigaciones revisadas que se enfocan en quienes son denominados como emprendedores, parecieran privilegiar los sectores secundario y terciario de la economía formal. No aparece alusión a emprendimientos de la economía informal, así que cabe preguntarse si el emprendimiento es una opción potencialmente desarrollable o viable en estos dos tipos de economía.

Hay un marcado interés por los jóvenes universitarios y los profesionales, es decir, por quienes no son emprendedores. Al respecto cabe preguntarse: ¿sería el emprendimiento un asunto de interés sólo para los futuros profesionales y para quienes ya lo son? ¿Qué pasa con otros grupos sociales que al igual que los jóvenes universitarios tienen pocas oportunidades laborales a futuro? Si el emprendimiento constituye una opción ante los problemas de desempleo y pobreza que aquejan a la-clase-que-vive-del-trabajo (Antunes, 2000) constituiría una posibilidad de trabajo para muchos grupos sociales, no sólo para los futuros profesionales y para quienes ya han terminado su formación universitaria.

Se identifica un marcado interés por tratar de conocer las variables que mejor predicen si las personas, en especial los jóvenes universitarios, están interesados en convertirse en emprendedores, y en el caso de quienes son denominados como emprendedores por los investigadores, hay un marcado interés por predecir las variables que mejor predicen si éstos serán exitosos en sus emprendimientos. Los instrumentos disponibles empleados, la tendencia al uso de datos cuantitativos y las herramientas para hacer inferencia constituyen un indicador de ello. Podría decirse entonces que hay una tendencia característica en este tipo de literatura en explicar, y en este sentido encontrar las variables que mejor predicen el comportamiento emprendedor y el "éxito emprendedor", los cuales han constituido un asunto de interés bastante marcado dentro de la investigación en el campo (Obschonka et al., 2013).

Considerando lo anterior, con respecto a las formas de producción del conocimiento (Burrell & Morgan, 2000), se encuentra una tendencia desde el positivismo. En cuanto a la manera en que se intenta investigar y obtener conocimiento sobre el mundo social, la metodología, hay una tendencia hacia lo nomotético (Burrell & Morgan, 2000), ya que es notoria la importancia de basar la investigación en el protocolo y las técnicas sistemáticas. Cabe preguntar entonces sobre posibles agendas en las que puedan ser consideradas la comprensión del significado, los valores o la intencionalidad del autor de la acción; así como lo que le permitiría al sujeto desplegar sus características durante el proceso de investigación y de posicionamiento en lo dicho y lo no dicho en la literatura sobre emprendimiento

Emprendimiento y emprendedor: ¿Concepto?, ¿Representación Social?, ¿floating signifier?

La literatura académica sobre emprendimiento es amplia e incluye una variedad de tendencias y perspectivas de conocimiento (Styhre, 2008). No obstante, como lo sugieren Decker et al. (2012) el término emprendimiento ha sido usado inconsistentemente en la literatura. En ocasiones, emprendimiento, propiedad y dirección de negocio y autoempleo han sido usados como términos intercambiables. Kuura et al. (2014) señalan que no hay definiciones, terminología ni focos únicos. Si bien es cierto que no hay una definición compartida y clara aceptada de forma unánime con relación al emprendimiento, puede decirse que hay una distancia entre lo que se propone conceptualmente en torno a éste, y la forma como se operacionaliza, lo cual podría dar pie para tratar el emprendimiento como Representación Social (Moscovici, 1961) o como significado flotante (Laclau, 2005).

De acuerdo con Moscovici (1961), las representaciones sociales son formas de conocimiento popular o común que le permiten a grupos sociales volver parte de su mundo interior un objeto nuevo y extraño que proviene del universo de la ciencia, la filosofía o el arte y que genera un desequilibrio. En este proceso el grupo juega un papel activo y vuelve interior lo exterior de acuerdo con los saberes que tiene en su propio mundo interno. Las representaciones sociales permiten comprender el conocimiento que un grupo, a partir de sus propias concepciones, construye en torno a un objeto determinado. Así, las representaciones sociales sugieren que existe una distancia entre el conocimiento científico y el conocimiento popular.

Al parecer, algo de esta distancia podría encontrarse con respecto al emprendimiento como objeto social. Como ha sido señalado antes, existe una distancia entre lo que se conceptualiza como emprendimiento desde la academia y su uso común asociado a otros fenómenos sociales como autoempleo, propiedad y dirección de negocios. Así mismo, parecería que existe una Representación Social del emprendedor como propietario y director de negocio y como autoempleado. En cualquier caso, hay elementos figurativos centrales que parecen servir de recursos conversacionales comunes, aunque en el momento de confrontar o precisar emergen las diferencias de posiciones sobre el fenómeno social del emprendimiento.

De acuerdo con Laclau (2005), los significantes flotantes son elementos discursivos privilegiados que fijan parcialmente el sentido de la cadena significante y cuya principal característica es su naturaleza ambigua y polisémica. Dan cuenta de luchas políticas y semánticas por hegemonizar un espacio político discursivo, que, en el caso del emprendimiento, podría constituir un discurso que sirve, en parte, para legitimar las nuevas condiciones de trabajo.

Cabe preguntarse si existiría un discurso sobre emprendimiento en el sentido de uso institucionalizado del lenguaje (Spink, 2000) o si lo que existen son "discursos" en la forma de versiones diferentes y posicionamientos sobre un discurso hegemónico. Entonces: ¿Será que el discurso hegemónico es el que gira en torno al trabajo deslaboralizado, y el emprendimiento es una versión particularizada de éste? En consonancia con Luna (2012), el emprendimiento podría representar una manifestación discursiva y una práctica social de la desregulación del trabajo.

En esta parte cabe retomar la definición que plantean Forsström-Tuominen et al. (2014), la cual se distancia de la tendencia general encontrada. Para estos autores, el emprendimiento da cuenta de un fenómeno socialmente construido que tomaría su forma en discursos o en diferentes versiones y posicionamientos de un discurso hegemónico.

Individualización y emprendimiento

En la literatura revisada pueden encontrarse tres tendencias que reúnen nociones, conceptos y teorías empleadas para abordar el emprendimiento. Con respecto a la que se ha denominado atributos personales, podría señalarse que si bien es cierto que hay diferencias entre sus aproximaciones, en términos generales, el emprendimiento es visto en función de la constitución psicológica de los individuos (Akhtar et al., 2013) y así, éste estaría predeterminado por el individuo, quien a su vez estaría guiado por su "naturaleza" emprendedora (Forsström-Tuominen et al., 2014). Desde esta tendencia, el emprendimiento pareciera ser un sofisma de distracción para legitimar el trabajo deslaboralizado a través de la individualización por hipervalorización de atributos personales como intención emprendedora, auto-control, extraversión, simpatía, meticulosidad, estabilidad emocional, imaginación y formas de procesamiento de información, ciertas competencias y aspectos motivacionales y de valores.

Podría pensarse que la tendencia de los atributos personales daría cuenta de una perspectiva individualista, que se inclina hacia una psicologización y responsabilización del y sobre el fenómeno del emprendimiento, y que deja de lado en muchos casos aspectos estructurales que estarían incidiendo. Forsström-Tuominen et al. (2014) y Geldhof, Malin, et al. (2014) señalan que una limitación para comprender el desarrollo del emprendimiento es la existencia de investigaciones que generalmente dependen de aproximaciones estáticas que equiparan emprendimiento con atributos personales, en especial características de personalidad estables, más que como un conjunto de acciones que depende de relaciones fluidas y maleables entre los individuos y los contextos.

Desde la tendencia a la interacción persona-contexto, se hace un intento por considerar otros elementos que contribuirían a estudiar el fenómeno, no obstante, el centro sigue siendo la persona y el contexto es visto más como una serie de variables amplias donde se ubica y adapta lo individual. Se podría decir que el emprendimiento está relacionado con los cambios contemporáneos en el mundo del trabajo y con la manera como las personas crean nuevos recursos y repertorios para afrontarlos. Así que la investigación sobre el fenómeno del emprendimiento requiere de aproximaciones enfocadas desde la interrelación de aspectos subjetivos -léase individuales- y elementos estructurales.

Desde la tendencia a la carrera el foco de esta aproximación se centra en la intención y en las actitudes, principalmente de jóvenes universitarios, hacia lo que se denomina carrera emprendedora, más que sobre la carrera de quienes ya son emprendedores. Sería interesante preguntarse si se puede hablar de carrera emprendedora, o si más bien el emprendimiento haría parte de la carrera de ciertas personas y grupos sociales. En consonancia con lo anterior ¿las nociones de carrera proteana y carrera sin límites, que hacen parte de los nuevos modelos de carrera podrían ser útiles para la comprensión del emprendimiento?

En este sentido sería también interesante una discusión en torno a si los emprendedores llegan a serlo como parte de un deseo personal, como una obligación consciente, o como una decisión de costo/beneficio. En la literatura revisada no es claro este asunto, aunque Morales & Ariza (2013) se refieren al "emprendimiento por necesidad", y Harms et al. (2014) hacen una distinción entre factores negativos que fuerzan o presionan a las personas al autoempleo, y otros que están relacionados con las oportunidades de negocio rentables y el deseo de independencia y trabajo.

Lo que se propone entonces es un abordaje próximo a la tendencia denominada interacción persona-contexto, que considere la comprensión de la relación tanto de aspectos subjetivos como estructurales del fenómeno del emprendimiento y que haga uso de la categoría carrera como un problematizador desde la Psicología Social del trabajo.

El emprendimiento como opción de trabajo para la-clase-que-vive-del-trabajo

Los fenómenos sociales están marcados por las complejas relaciones entre el Estado, la economía y la sociedad y el emprendimiento no es la excepción. Con respecto a éste se puede plantear que el Estado, desde su poder político, genera cambios en los modelos económicos y sociales lo cual tiene un impacto en el mundo del trabajo y en la vida de quienes trabajan. Cabe aclarar que estos cambios son realizados en beneficio de los grandes poderes económicos, así que es el Estado sería uno de los principales legitimadores de este tipo de acciones y modelos sociales.

Algunos de estos cambios tienen como consecuencia crisis económicas y es durante éstas o posteriormente que el emprendimiento ha aparecido como una opción para promover el crecimiento económico y/o como una opción frente al desempleo y a la pobreza. Cabe mencionar que es el Estado, a través del diseño de nuevas políticas públicas, una de las instituciones que promueve el emprendimiento y su discurso bajo la idea de que éste es un elemento clave para el desarrollo económico y para la generación de trabajo. Cabe aclarar que estas políticas son de acción privada y no sólo pública. Se propone así, al emprendimiento como una alternativa para contrarrestar la falta de oportunidades laborales y de ingreso y como promotor de la inclusión social por el trabajo.

Pareciera entonces que el emprendimiento es una forma de re-institucionalización del trabajo por cuenta propia, que puede constituir una opción ante la falta de oportunidades de empleo en el marco de las transformaciones contemporáneas del mundo del trabajo. Se opta por -y se sugiere- emplear el término trabajo por cuenta propia y no el de autoempleo en la medida en que quien trabaja no puede contratarse a sí mismo, esto no es posible puesto que siempre es otro el que contrata estableciéndose con éste una relación de trabajo.

El emprendimiento sería también un reemplazo de funciones otrora llevadas a cabo por el Estado en lo que respecta a la generación de oportunidades de trabajo. En este sentido, el emprendimiento haría parte de las soluciones biográficas (Beck, 2006; Beck & Beck-Gernsheim, 2003) enmarcadas dentro de una tendencia social a la individualización que parece traducirse en formas de "responsabilización", ya que muchos de los aspectos que antes eran de carácter estructural son desplazados hacia las personas (Rentería, 2009). El emprendimiento constituiría entonces una categoría que sirve para legitimar nuevas condiciones de trabajo, específicamente el trabajo deslaboralizado.

Finalmente, estas ideas nos han llevado a plantear que el emprendimiento participaría de formas de gubernamentalidad neoliberal a partir de la cual emergen subjetividades que se adscriben o resisten al gobierno de sí (Maca, 2019a). El emprendimiento comprendería instituciones, políticas públicas, saberes y actores que permitirían ejercer poder sobre la población (sujetos y grupos) guiando su acción en determinadas direcciones.

Se podría decir entonces que el emprendimiento participa de formas de gubernamentalidad neoliberal en la medida en que el Estado desplaza hacia el sujeto responsabilidades que otrora estaban a su cargo, por ejemplo, lo que tiene que ver con la generación de oportunidades de trabajo y las protecciones sociales (Castel, 1997, 2004) que de éste se derivan. Desde una clave neoliberal, es el sujeto quien debe gestionar sus propias oportunidades de trabajo (Maca, 2019b). Esto daría cuenta de ciertas nociones en torno al emprendimiento y al emprendedor que han emergido, a partir de las nuevas realidades del mundo del trabajo impuestas por el orden sociopolítico del nuevo neoliberalismo, tal como lo plantea Torres-Oviedo (2018).

Bibliografía

Ahmetoglu, G., Leutner, F., & Chamorro-Premuzic, T. (2011). EQ-nomics: Understanding the relationship between individual differences in Trait Emotional Intelligence and entrepreneurship. Personality and Individual Differences, 51(8), 1028-1033. https://doi.org/10.1016/j.paid.2011.08.016Links ]

Ajzen, I., & Fishbein, M. (1980). Understanding attitudes and predicting social behavior. Englewood Cliffs, NJ: Prentice-Hall. [ Links ]

Akhtar, R. , Ahmetoglu, G. , & Chamorro-Premuzic, T. (2013). Greed is good? Assessing the relationship between entrepreneurship and subclinical psychopathy. Personality and Individual Differences, 54(3), 420-425. https://doi.org/10.1016/j.paid.2012.10.013Links ]

Antunes, R. (2000). La centralidad del trabajo hoy. Papeles de Población, 24, 83-96. [ Links ]

Armstrong, S. J. , & Hird, A. (2009). Cognitive Style and Entrepreneurial Drive of New and Mature Business Owner-Managers. Journal of Business and Psychology, 24(4), 419-430. https://doi.org/10.1007/s10869-009-9114-4Links ]

Bardin, L. (2002). Análisis de Contenido. Madrid: Ediciones Akal. [ Links ]

Beck, U. (2006). La sociedad del riesgo: hacia una nueva modernidad. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica. [ Links ]

Beck, U., & Beck-Gernsheim, E. (2003). La individualización: el individualismo institucionalizado y sus consecuencias sociales y políticas. Barcelona: Paidós. [ Links ]

Bendassolli, P. F., Borges-Andrade, J. E., & Gondim, S. M. G. (2016). Self-Control, Self-Management and Entrepreneurship in Brazilian Creative Industries. Paidéia (Ribeirão Preto), 26(63), 25-33. https://doi.org/10.1590/1982-43272663201604Links ]

Brandstátter, H. (2011). Personality aspects of entrepreneurship: A look at five meta-analyses. Personality and Individual Differences, 51(3), 222-230. https://doi.org/10.1016/j.paid.2010.07.007Links ]

Bureau, S., & Zander, I. (2014). Entrepreneurship as an art of subversion. Scandinavian Journal of Management, 30(1), 124-133. https://doi.org/10.1016/j.sca-man.2013.12.002Links ]

Burrell, G. , & Morgan, G. (2000). Sociological Paradigms and Organisational Analysis. Elements of the Sociology of Corporate Life. Aldershot: Ashgate. [ Links ]

Buttar, H. M. (2015). formation of entrepreneurial career intentions: the role of sociocognitive factors, 52(March), 2-17. https://doi.org/10.1002/j.2161-1920.2015.00052.xLinks ]

Canedo, J., Stone, D., Black, S., & Lukaszewski, K. (2014). Individual factors affecting entrepreneurship in Hispanics. Journal of Managerial Psychology, 29(6), 755-772. https://doi.org/10.1108/JMP-11-2012-0333Links ]

Cantillon, R. (1755). Essai sur la Nature du Commerce en Général. London: Macmillan. [ Links ]

Castro, I. , Galán, J. L. , & Bravo, S. (2014). Entrepreneurship and Social Capital: Evidence from a Colombian Business Incubator. Innovar, 24(1Spe), 91-100. https://doi.org/10.15446/innovar.v24nispe.47554Links ]

Chan, K. Y., Ho, M. R., Chernyshenko, O. S., Bedford, O., Uy, M. A., Gomulya, D., ... Phan, W. M. J. (2012). Entrepreneurship, professionalism, leadership: A framework and measure for understanding boundaryless careers. Journal of Vocational Behavior, 81(1), 73-88. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2012.05.001Links ]

Culbertson, S. S. , Smith, M. R. , & Leiva, P. I. (2010). Enhancing Entrepreneurship: The Role of Goal Orientation and Self-Efficacy. Journal of Career Assessment, 19(2), 115-129. https://doi.org/10.1177/1069072710385543Links ]

Curi, A. B. (2009). Inmigración, vitivinicultura e innovación: El emprendimiento de Buonaventura Caviglia en la localidad de Mercedes (1870-1916). Mundo Agrario, 9(18). Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-73849102618&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Decker, W. H., Calo, T. J., & Weer, C. H. (2012). Affiliation motivation and interest in entrepreneurial careers. Journal of Managerial Psychology, 27(3), 302-320. https://doi.org/10.1108/02683941211205835Links ]

European, C. (2006). Entrepreneurship education in Europe: Fostering entrepreneurial mindsets through education and learning. Final Proceedings of the Conference on Entrepreneurship Education in Oslo. [ Links ]

European, C. (2014). The missing entrepreneurs: Policies for inclusive entrepreneurship in Europe. Paris: OECD Publishing. [ Links ]

Forsström-Tuominen, H., Jussila, I., & Kolhinen, J. (2014). Business school students' social construction of entrepreneurship: Claiming space for collective entrepreneurship discourses. Scandinavian Journal of Management, 31(1), 102-120. https://doi.org/10.1016/j.scaman.2014.08.001Links ]

Geldhof, G. J., Malin, H., Johnson, S. K., Porter, T., Bronk, K. C., Weiner, M. B., ... Damon, W. (2014). Entrepreneurship in young adults: Initial findings from the young entrepreneurs study. Journal of Applied Developmental Psychology, 35(5), 410-421. https://doi.org/10.1016/j.appdev.2014.07.003Links ]

Geldhof, G. J. , Weiner, M. , Agans, J. P. , Mueller, M. K. , & Lerner, R. M. (2014). Understanding entrepreneurial intent in late adolescence: the role of intentional self-regulation and innovation. Journal of Youth and Adolescence, 43(1), 81-91. https://doi.org/10.1007/s10964-013-9930-8Links ]

Gorgievski, M. , Moriano, J. , & Bakker, A. (2014). Relating work engagement and workaholism to entrepreneurial performance. Journal of Managerial Psychology, 29(2), 106-121. https://doi.org/10.1108/JMP-06-2012-0169Links ]

Harms, R. , Luck, F. , Kraus, S. , & Walsh, S. (2014). On the motivational drivers of gray entrepreneurship: An exploratory study. Technological Forecasting and Social Change, 89, 358-365. https://doi.org/10.1016/j.techfore.2014.08.001Links ]

Hatak, I., Harms, R., & Fink, M. (2015). Age, job identification, and entrepreneurial intention. Journal of Managerial Psychology, 30(1), 38-53. https://doi.org/10.1108/JMP-07-2014-0213Links ]

Herrera, K. , & Gutiérrez, J. (2014). El emprendimiento como iniciativa para la creación de empresas: Análisis de la perspectiva psicológica y contextual. Revista de Ciencias Sociales, 20(2), 288-302. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84928813265&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Hirschi, A. (2013). Career Decision Making , Stability , and Actualization of Career Intentions: The Case of Entrepreneurial Intentions. Journal of Career Assessment, 21(4), 555-571 https://doi.org/10.1177/1069072712475287Links ]

Hisrich, R. , Langan-Fox, J. , & Grant, S. (2007). Entrepreneurship research and practice: a call to action for psychology. The American Psychologist, 62(6), 575-589. https://doi.org/10.1037/0003-066X.62.6.575Links ]

Janssen, M., & Moors, E. H. M. (2013). Caring for healthcare entrepreneurs - Towards successful entrepreneurial strategies for sustainable innovations in Dutch healthcare. Technological Forecasting and Social Change, 80(7), 1360-1374. https://doi.org/10.1016/j.techfore.2012.12.003Links ]

Jennings, L. , Shore, D. , Strohminger, N. , & Allison, B. (2015). Entrepreneurial development for U.S. minority homeless and unstably housed youth: A qualitative inquiry on value, barriers, and impact on health. Children and Youth Services Review, 49, 39-47. https://doi.org/10.1016/j.childyouth.2014.12.018Links ]

Kautonen, T., Hatak, I., Kibler, E., & Wainwright, T. (2015). Emergence of entrepreneurial behaviour: The role of age-based self-image. Journal of Economic Psychology, 50, 41-51. https://doi.org/10.1016/j.joep.2015.07.004Links ]

Kuura, A. , Blackburn, R. A. , & Lundin, R. A. (2014). Entrepreneurship and projects- Linking segregated communities. Scandinavian Journal of Management, 30(2), 214-230. https://doi.org/10.1016/j.scaman.2013.10.002Links ]

Kyndt, E. , & Baert, H. (2015). Entrepreneurial competences: Assessment and predictive value for entrepreneurship. Journal of Vocational Behavior, 90, 13-25. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2015.07.002Links ]

Laclau, E. (2005). La razón populista. México D.F.: Fondo de Cultura Económica. [ Links ]

Lejarriaga, G. , Bel, P. , & Martín, S. (2013). El emprendimiento colectivo como salida laboral de los jóvenes: Análisis del caso de las empresas de trabajo asociado. REVESCO Revista de Estudios Cooperativos, (112), 36-65. https://doi.org/10.5209/rev-REVE.2013.v112.43068Links ]

Leutner, F. , Ahmetoglu, G. , Akhtar, R. , & Chamorro-Premuzic, T. (2014). The relationship between the entrepreneurial personality and the Big Five personality traits. Personality and Individual Differences, 63, 58-63. https://doi.org/10.1016/j.paid.2014.01.042Links ]

Lin, B.-W., Li, P.-C., & Chen, J.-S. (2006). Social capital, capabilities, and entrepreneurial strategies: a study of Taiwanese high-tech newventures. Technological Forecasting and Social Change, 73(2), 168-181. https://doi.org/10.1016/j.techfore.2004.12.001Links ]

Luna, I. N. (2012). Empreendedorismo e orientação profissional no contexto das transformações do mundo do trabalho. Revista Brasileira de Orientacao Profissional, 13(1), 111-116. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84866251010&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Maca, D. (2019a). Emprendimiento, subjetividad y gubernamentalidad: un abordaje de la política pública en Colombia, los Espacios de Emprendimiento de las Instituciones de Educación Superior y los sujetos emprendedores. Universidad del Valle. [ Links ]

Maca, D. (2019b). Subjetividades emergentes a partir del emprendimiento como forma de gubernamentalidad: Una aproximación desde el análisis de discurso de la política pública de emprendimiento en Colombia. In A. Bialakowsky, R. Antunes, F. Pucci, M. Quiñones, & A. Cárdenas (Eds.), Trabajo y capitalismo: relacionesy colisiones sociales. Buenos Aires: Editorial Teseo. [ Links ]

Mathieu, C., & St-Jean, É. (2015). Developing Attitudes Toward an Entrepreneurial Career Through Mentoring: The Mediating Role of Entrepreneurial Self-Efficacy, 1-14. https://doi.org/10.1177/0894845314568190Links ]

McKenna, B., Zacher, H., Sattari Ardabili, F., & Mohebbi, H. (2016). Career Adapt-Abilities Scale-Iran Form: Psychometric properties and relationships with career satisfaction and entrepreneurial intentions. Journal of Vocational Behavior, 93, 81-91. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2016.01.004Links ]

Morales-Alonso, G., Pablo-Lerchundi, I., & Núñez-Del-Río, M.-C. (2015). Entrepreneurial intention of engineering students and associated influence of contextual factors. Revista de Psicología Social, 31(1), 75-108. https://doi.org/10.1080/021347 48.2015.1101314Links ]

Morales, A. , & Ariza, J. (2013). Valores, actitudes y motivaciones en la juventud ante el emprendimiento individual y colectivo. REVESCO Revista de Estudios Cooperativos, (112), 11-35. https://doi.org/10.5209/rev-REVE.2013.v112.43062Links ]

Moscovici, S. (1961). El psicoanálisis, su imagen y su público. Buenos Aires: Editorial Huemul S.A. [ Links ]

Nishimura, J. S., & Tristán, O. M. (2011). Using the theory of planned behavior to predict nascent entrepreneurship. Academi'a, (46), 55-71 Retrieved from http://www.sco-pus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-79957618936&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Obschonka, M. , Schmitt-Rodermund, E. , Silbereisen, R. K. , Gosling, S. D. , & Potter, J.(2013). The regional distribution and correlates of an entrepreneurship-prone personality profile in the United States, Germany, and the United Kingdom: a socioecological perspective. Journal of Personality and Social Psychology, 105(1), 104-122. https://doi.org/10.1037/a0032275Links ]

Obschonka, M. , Silbereisen, R. K. , Cantner, U. , & Goethner, M. (2014). Entrepreneurial Self-Identity: Predictors and Effects Within the Theory of Planned Behavior Framework. Journal of Business and Psychology, 30(4), 773-794. https://doi.org/10.1007/s10869-014-9385-2Links ]

Obschonka, M. , Silbereisen, R. K. , & Schmitt-Rodermund, E. (2010). Entrepreneurial intention as developmental outcome. Journal of Vocational Behavior, 77(1), 63-72. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2010.02.008Links ]

Obschonka, M. , Silbereisen, R. K. , & Schmitt-Rodermund, E. (2012). Explaining Entrepreneurial Behavior: Dispositional Personality Traits, Growth of Personal Entrepreneurial Resources, and Business Idea Generation. The Career Development Quarterly, 60(2), 178-190. https://doi.org/10.1002/j.2161-0045.2012.00015.xLinks ]

Obschonka, M. , Silbereisen, R. , Schmitt-Rodermund, E. , & Stuetzer, M. (2011). Nascent entrepreneurship and the developing individual: Early entrepreneurial competence in adolescence and venture creation success during the career. Journal of Vocational Behavior, 79(1), 121-133. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2010.12.005Links ]

Oelckers, F. (2015). Emprendimiento en la tercera edad: Una revisión de la situación actual. Journal of Technology Management and Innovation, 10(3), 143-153. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84945267850&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Öner, A., & Kunday, Ö. (2015). A study on Schumpeterian and Kirznerian entrepreneur-ship in Turkey: 2006-2013. Technological Forecasting and Social Change, 102, 62-71 https://doi.org/10.1016/j.techfore.2015.09.005Links ]

Osorio, F. , & Pereira, F. (2011). Hacia un modelo de educación para el emprendimiento: Una mirada desde la teoría social cognitiva. Cuadernos de Administracion, 24(43), 13-33. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84864424921&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Pereira, F., Osorio, F., & Medina, L. (2011). Emprendimiento y sus implicaciones en el desarrollo de Santiago de Cali 2010-2011: Una perspectiva basada en GEM. Bogotá: Ediciones de la U. [ Links ]

Pijpers, R., & Maas, M. (2013). Identity construction and "coincidental" entrepreneurship among gay Filipino guesthouse owners in Amsterdam. Gender, Place & Culture, 21(8), 996-1011. https://doi.org/10.1080/0966369X.2013.817971Links ]

Pinto, J. C. , do Céu Taveira, M. , & Sá, E. (2012). Career-self management and entrepreneurship: An experience with PhD students. Electronic Journal of Research in Educational Psychology, 10(3), 985-1010. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84875233175&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Puga, J. L., & García, J. G. (2012). A comparative study on entrepreneurial attitudes modeled with logistic regression and Bayes nets. Spanish Journal of Psychology, 15(3), 1147-1162. https://doi.org/10.5209/rev-SJOP.2012.v15.n3.39404Links ]

Rentería, E. (2009). De recursos humanos a la Psicología organizacional y del trabajo: reflexiones a la luz de las realidades actuales del mundo del trabajo. In M. Aguilar & E. Rentería (Eds.), Psicología del trabajo y de las organizaciones. Reflexiones y experiencias de investigación. Bogotá: Universidad Santo Tomás. [ Links ]

Rodríguez, C. A. , & Prieto Pinto, F. A. (2009). La sensibilidad al emprendimiento en los estudiantes universitarios. estudio comparativo Colombia-Francia. Innovar, 19(SUPPL. 1), 73-89. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-78650570167&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Sadler-Smith, E. (2015). The role of intuition in entrepreneurship and business venturing decisions. European Journal of Work and Organizational Psychology, 25(2), 212-225. https://doi.org/10.1080/1359432X.2015.1029046Links ]

Sánchez, J. (2011). El emprendimiento como un campo legítimo del conocimiento. Psicothema, 23(3), 427-432. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/re-cord.url?eid=2-s2.0-79960553033&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Sánchez, J. (2014). Cognitive scripts and entrepreneurial success. Universitas Psychologica, 13(1), 321-332. https://doi.org/10.11144/Javeriana.UPSY13-i.csesLinks ]

Sánchez, S. , & Fuentes, F. (2013). Mujer y emprendimiento: Un análisis en el contexto universitario español. Revista de Ciencias Sociales, 19(1), 140-153. Retrieved from http://www.scopus.com/inward/record.url?eid=2-s2.0-84880607866&partnerID=tZOtx3yiLinks ]

Spink, M. (2000). Práticas discursivas e produção de sentidos no cotidiano. Aproximações teóricas e metodológicas. São Paulo: Cortez Editora. [ Links ]

Styhre, A. (2008). Transduction and entrepreneurship: A biophilosophical image of the entrepreneur. Scandinavian Journal of Management, 24(2), 103-112. https://doi.org/10.1016/j.scaman.2008.03.004Links ]

Thebaud, S. (2010). Gender and Entrepreneurship as a Career Choice: Do Self-assessments of Ability Matter? Social Psychology Quarterly, 73(3), 288-304. https://doi.org/10.1177/0190272510377882Links ]

Tolentino, L. , Sedoglavich, V. , Lu, V. , Garcia, P. , & Lloyd, S. (2014). The role of career adaptability in predicting entrepreneurial intentions: A moderated mediation model. Journal of Vocational Behavior, 85(3), 403-412. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2014.09.002Links ]

Torres-Oviedo, C. F. (2018). Concepto de hombre emprendedor: reflexiones para y desde la Psicología Organizacional y del Trabajo. Universidad del Valle. [ Links ]

Urbig, D., Weitzel, U., Rosenkranz, S., & Witteloostuijn, A. (2012). Exploiting opportunities at all cost? Entrepreneurial intent and externalities. Journal of Economic Psychology, 33(2), 379-393. https://doi.org/10.1016/j.joep.2011.03.003Links ]

Uy, M. A., Chan, K., Sam, Y. L., Ho, M. R., & Chernyshenko, O. S. (2014). AC. Journal of Vocational Behavior. https://doi.org/10.1016/j.jvb.2014.11.005Links ]

Verheul, I. , Thurik, R. , Grilo, I. , & van der Zwan, P. (2012). Explaining preferences and actual involvement in self-employment: Gender and the entrepreneurial personality. Journal of Economic Psychology, 33(2), 325-341 https://doi.org/10.1016/j.joep.2011.02.009Links ]

Vérin, H. (1982). Entrepreneurs, entreprise. Histoire d'une idée. Paris: Presses Universitaires Francaises. [ Links ]

Wei, X. , Cang, S. , & Hisrich, R. D. (2015). Entrepreneurial stressors as predictors of entrepreneurial burnout. Psychological Reports, 116(1), 74-88. https://doi.org/10.2466/01.14.PR0.116k13wiLinks ]

Yoon, H. , Yun, S. , Lee, J. , & Phillips, F. (2015). Entrepreneurship in East Asian Regional Innovation Systems: Role of social capital. Technological Forecasting and Social Change, 100, 83-95. https://doi.org/10.1016Zj.techfore.2015.06.028Links ]

Zhao, H., & Seibert, S. E. (2006). The big five personality dimensions and entrepreneurial status: a meta-analytical review. The Journal of Applied Psychology, 91(2), 259-271. https://doi.org/10.1037/0021-9010.912.259Links ]

1Se hace uso de la clasificación de Colciencias de los artículos.

Citación/referenciación: Maca Urbano, D. & Rentería Pérez, E. (2020). Una mirada al emprendimiento a partir de una revisión de la literatura. Psicología desde el Caribe, 37(1), 107-136.

Recibido: 29 de Mayo de 2017; Aprobado: 07 de Febrero de 2019

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons