INTRODUCCIÓN
El tumor venéreo transmisible canino (TVTC), también conocido como granuloma infeccioso, sarcoma de Sticker, linfosarcoma transmisible, sarcoma venéreo transmisible, granuloma infeccioso, condiloma canino y linfosarcoma contagioso (Abeka, 2019), afecta a los perros en casi todo el mundo y es considerado el linaje de cáncer más antiguo y divergente conocido en la naturaleza, el cual, ha conseguido una configuración genómica, que le permite la supervivencia a largo plazo (Strakova & Murchinson, 2014).
El TVTC tiene una distribución mundial y su prevalencia es mayor en regiones del sur de los Estados Unidos, América Central y del Sur, parte de África, el Lejano Oriente, el Medio Oriente y el sureste de Europa (Toledo & Reina Moreira, 2018).
En Colombia, existe poca información acerca del comportamiento epidemiológico del TVTC. Arcila-Villa et al. (2018) realizaron un estudio de prevalencia, mediante una encuesta electrónica, donde la prevalencia estimada no supera el 7,05 % anual, teniendo en cuenta, para la región de la Orinoquia, una prevalencia relativa de 0,019 % (tasa promedio de 4,6 personas por canino); con este dato, se podría inferir una baja prevalencia de TVTC en los llanos orientales de Colombia; sin embargo, no hay información disponible sobre la prevalencia de esta enfermedad en Yopal-Casanare, por lo tanto, tampoco se conoce el tipo citomorfológico que prevalece, ni la relación con la presentación clínica de la enfermedad.
Las características citomorfológicas de las células neoplásicas del TVTC permite distinguir entre dos tipos, linfocítico y plasmocítico, de modo que se puede clasificar en plasmocítico, linfocítico y mixto. Los estudios realizados apuntan a que el tipo plasmocítico tiene una mayor capacidad para desarrollarse en sitios extragenitales y hacer metástasis, lo que sugiere mayor malignidad (Santos Do Amaral et al. 2007; Jantzen Gaspar et al. 2009; Valençola et al. 2015; Setthawongsin et al. 2018). Por lo mismo, se considera necesario clasificar TVTC en cada caso, puesto que la citomorfológia se refleja en el pronóstico y en la resistencia al tratamiento (Santos Do Amaral et al. 2007).
En un estudio con 20 casos de TVTC, se realizó clasificación y estadificación según el sistema TNM, para determinar la relación entre los hallazgos citológicos y el estadío clínico, donde se concluyó que, en los casos donde la estadificación era mayor, se relacionaba con el hallazgo de criterios de malignidad en los TVTC plasmocitoides, lo que sugiere la importancia de la evaluación citomorfológica junto con la estadificación, no solo para el diagnóstico, sino para establecer un pronóstico y plan terapéutico más adecuado (Montoya-Floréz et al. 2013; Patiño-Quiroz et al. 2020).
El objetivo del presente estudio fue realizar la caracterización citomorfológica de los casos positivos a TVTC en los perros atendidos en los principales centros veterinarios de Yopal, durante un periodo de 12 meses, para establecer información que permita correlacionar el tipo citomorfológico de TVTC, con la presentación clínica de las lesiones y otras variables, como sexo, raza y edad.
Este estudio es el primero con relación al TVTC en Yopal-Casanare y la información obtenida será de utilidad para tener una aproximación sobre el comportamiento epidemiológico y clínico de la enfermedad, favoreciendo el desarrollo de estrategias terapéuticas más eficientes para el control.
MATERIALES Y MÉTODOS
Tipo de estudio. Se realizó un estudio de tipo transversal descriptivo no experimental, mediante muestreo a conveniencia no probabilístico.
Localización. Fue realizado en la zona urbana de Yopal-Casanare, ubicado en las coordenadas 5° 20'60'' N y 72°24' 0'' O, a una altura de 390 m s.n.m., con una temperatura promedio anual de 26,8°C, humedad relativa de 75 %, precipitación media anual de 1.431 mm y clima cálido tropical tipo monzónico.
Población y muestra. Se tuvieron en cuenta los caninos diagnosticados positivos a TVTC mediante citología, procedentes de 27 centros clínicos veterinarios de la zona urbana de Yopal, atendidos desde agosto de 2022 a agosto de 2023.
La toma de muestras se realizó de dos formas: directamente en los centros veterinarios que reportaban el caso sospechoso, teniendo contacto con el paciente o, través del laboratorio clínico veterinario Medilab, ubicado en Yopal, que recibía las muestras tomadas directamente por los profesionales de las clínicas veterinarias; en esos casos, no se tenía contacto directo con el paciente.
Los datos tomados de los pacientes fueron: nombre, sexo, edad, raza, localización anatómica de la lesión, método de muestreo, diagnóstico citológico y tipificación citomorfológica.
Las técnicas utilizadas para la toma de muestras fueron impronta, hisopado y Punción Aguja Fina (PAF), según el tipo y la localización de la lesión, siendo más frecuentemente usada la impronta. El análisis citológico de las muestras se realizó mediante tinción de Wright. Para la determinación de la clasificación citomorfologica se tuvo en cuenta el protocolo de tipificación, según Santos Do Amaral et al. (2007), en el cual, se determina como TVTC plasmocítico: predominio del 60 % células con morfología ovoide, citoplasma abundante y núcleo excéntrico; TVTC linfocítico: predominio de 60 % de células con morfología redonda, citoplasma escaso, núcleo redondo y TVTC mixto: con células mixtas de tipo linfocítico y plasmocítico, en las que ninguno supera el 59 %.
Los extendidos celulares se observaron por microscopia de luz a objetivo 40X, seleccionando aleatoriamente 10 campos, para realizar el conteo de las células neoplásicas; la evaluación citomorfológica fue realizada por dos médicos veterinarios, especialistas en laboratorio clínico. Uno, perteneciente al laboratorio clínico veterinario Medilab y otro externo. La observación fue realizada por los analistas sin conocer el diagnóstico citomorfologico dado por el otro, con el fin de disminuir el sesgo en los resultados.
Análisis de datos. Los datos fueron sometidos a un análisis descriptivo, donde se generaron tablas de distribución de frecuencias para variables cualitativas y cuantitativas; para determinar la relación entre las variables cualitativas, se utilizó la prueba de Fisher exacto y el análisis de Kruskal Wallis (prueba no paramétrica); para determinar diferencias estadísticas significativas entre la edad y la tipificación citomorfológica, se manejó un nivel de significancia del 0,05. Los datos se trabajaron con el software estadístico R versión 4.2.2
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Sexo y raza. Durante el periodo de estudio se recolectaron un total de 50 muestras positivas a TVTC, de las cuales, 26 casos corresponden a machos y 24 a hembras (Tabla1). Estos resultados difieren de los estudios de Sousa et al. (2000), Vasconcelos Silva et al. (2007), Scarpelli et al. (2010), Huppes et al. (2014), Valençola et al. (2015), Collares Araujo et al. (2016), Ruckert Ramadinha et al. (2016), Pimentel et al. (2021) y Ramírez-Ante et al. (2021), en los que se estima que la frecuencia es mayor en hembras, atribuyendo este hallazgo a la conducta reproductiva, donde un solo macho positivo puede infectar a varias hembras; sin embargo, según Pimentel et al. (2021), estos datos pueden ser contradictorios, debido a que varían ampliamente en otros estudios, como el de Seullner Brandão et al. (2002) y el de Ballestero Fêo et al. (2016), donde se encuentra una mayor frecuencia en machos, por lo que no se puede definir que exista una predisposición por sexo.
La mayoría de los caninos que presentaron TVTC fueron de raza mestiza, seguidas por el dóberman pinscher, el pitbull y en menor proporción otras razas, como el bulldog inglés, el husky Siberiano, el labrador retriever y el samoyedo (Tabla 1). Si bien la raza no se considera como un factor decisivo para la transmisión por TVTC, autores, como Ganguly et al. (2013) y Schectman et al. (2022), encontraron una mayor prevalencia en perros de raza mestiza y perros de caza, como el pothound en la India, sugiriendo que la interacción molecular de un elemento transponible dentro del oncogén c-myc podría representar una predisposición genética del TVTC en razas, como la mestiza; sin embargo, no se puede pasar por alto que suele existir una tenencia más responsable por parte de los propietarios de animales de raza pura en comparación con los propietarios de animales de raza mixta, quienes, generalmente, les permiten a los animales deambular con mayor libertad.
Tabla1. Descripción de factores asociados a la Tipificación citomorfológica del tumor venéreo transmisible canino (TVTC), en centros veterinarios, de Yopal-Casanare (n=50).

Edad. Los caninos objeto del estudio presentaban edades que oscilaban entre los 8 meses a 12 años; las edades más frecuentes estaban en los rangos de 1,6 a 3,3 años (promedio de 2,5 años), con una participación del 48 %, siendo una edad con un comportamiento reproductivo más activo, aumentando el factor de riesgo por el contacto sexual, el cual, se reduce significativamente, a medida que alcanzan edades más avanzadas (Ganguly et al. 2013), como se observa en este estudio, ya que el 16 % de los caninos tenían una edad promedio de 4 años y el 2 % presentaron una edad promedio de 12,5 años.
Relación entre la tipificación citomorfológica del tumor venéreo transmisible canino (TVTC), la edad, sexo y raza. Para la edad y el subtipo citomorfológico, según la prueba no paramétrica de Kruskal- Wallis, no se presentaron diferencias estadísticas significativas, es decir, que la tipología citomorfológica no se ve influenciada por la edad del animal (Figura 1).

Figura 1 Relación de caninos que presentaron tumor venéreo transmisible canino (TVTC) y la edad del animal, en centros veterinarios, de Yopal-Casanare (n=50).
Se observó que la citomorfológia de los casos de TVTC presentados es independiente del sexo, encontrando que del 48 % de las hembras, el 34 % presentó tipología linfocítica y el restante 14 % presentó TVTC mixto, mientras que para machos, se presentaron las tres tipologías: 38 % linfocítico, 12 % mixto y 2 % plasmocítico.
Con relación a la tipificación citomorfológica del TVTC y la raza de los caninos objeto de estudio, se puede inferir que no existe dependencia entre estas variables (Tabla 2).
Tipificación citomorfológica. De todas las muestras procesadas durante el estudio, se determinó que el tipo citomorfológico linfocítico es el más frecuentemente presentado, correspondiente al 72 % de las muestras analizadas, seguido del tipo mixto, con el 26 % y, en menor frecuencia, el tipo plasmocítico, con un 2 %. Estos resultados son opuestos a los obtenidos en otros estudios, como los de Santos Do Amaral et al. (2007), Jantzen Gaspar et al. (2010), Sella Paranzini et al. (2015), Valençola et al. (2015) y Reis Filho et al. (2020), realizados en Brasil, en los cuales, la frecuencia de presentación es mayor para el tipo plasmocítico, seguido del tipo mixto y el menos frecuente, el linfocítico; sin embargo, en el estudio realizado por Ramírez-Ante et al. (2021), en la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de Caldas, Colombia, también se encontró con mayor frecuencia la tipología linfoide, seguido por el plasmocítico y por último, el mixto. Algunos autores, como Santos Do Amaral et al. (2007) y Reis Filho et al. (2020), atribuyen la variabilidad en la frecuencia de subtipos morfológicos a la localización geográfica de donde se realizan los estudios, lo que indica que, probablemente, el subtipo linfocítico sea el que más se presenta en Colombia; sin embargo, se requieren más estudios para poder confirmar esta afirmación.
Presentación clínica. Se clasifica la presentación clínica según la ubicación anatómica de las lesiones en dos grupos principales, genital y extragenital; no obstante, es común encontrar un tercer grupo, que corresponde a pacientes con lesiones en localización, tanto genital como extragenital, simultáneamente, que se denomina en este estudio, como mixto. Debido a la característica de aloinjerto de este tumor, así como su tropismo genital, las formas de presentación local asociadas al coito son consideradas las más frecuentes (Strakova & Murchinson, 2015; Valençola et al. 2015).
Se encontró una mayor presentación genital, seguido de la forma extragenital y por último, la mixta (Tabla 1), resultados que son consistentes con la dinámica biológica de la enfermedad y con otros estudios epidemiológicos realizados, como el de Pimentel et al. (2021).
Presentación clínica y clasificación citomorfológica. Se buscó determinar una relación de dependencia entre la presentación anatómica del tumor y su citomorfología, mediante la prueba exacta de Fisher, estableciendo que estas variables son independientes (Figura 2; Tabla 3); de esta manera, no es posible establecer que el comportamiento citomorfológico este directamente relacionado con la ubicación anatómica del TVTC; sin embargo, se encontró una relación proporcionalmente más alta dentro de los casos de TVTC con citomorfología mixta, en las localizaciones extragenitales del tumor, que entre la morfología linfoide y las ubicaciones extragenitales. Los resultados de Santos Do Amaral et al. (2007), en un análisis similar realizado en Brasil, con 158 pacientes, encontraron una diferencia estadísticamente significativa entre el tipo plasmocítico y mixto, con las localizaciones extragenitales, aunque su estudio identificó, como población predominante, el plasmocítico, con un 53 %, a diferencia de este estudio, donde la presentación relativa de esta forma citológica fue del 2 %.

Figura 2 Relación de caninos que presentaron tumor venéreo transmisible canino (TVTC) y el sitio anatómico de la lesión, en centros veterinarios, de Yopal-Casanare (n=50).
Tabla 3 Relación de variables del sitio anatómico de la lesión con la tipificación citomorfológica del tumor venéreo transmisible canino (TVTC), en centros veterinarios, de Yopal-Casanare, de acuerdo con la prueba exacta de Fischer (n=50).

Establecer una relación entre la citomorfología, la ubicación de las lesiones o el carácter agresivo es un tema controvertido. Setthawongsin et al. (2018) concluyeron, tras una evaluación citomorfológica, citomorfométrica y la respuesta de los pacientes a la quimioterapia, que las formas mixtas tenían mayor probabilidad de tener un comportamiento más invasivo o agresivo, al igual que lo sugerido por los resultados de este estudio, pero no lograron establecer una relación directa entre las variantes citomorfológicas y morfométricas con la respuesta de los pacientes a la quimioterapia.
Teniendo en cuenta los resultados obtenidos y los revisados, se podría inferir, tal como lo menciona Duzanski et al. (2017), que “se requiere una mayor claridad desde una perspectiva multicausal, entre los aspectos citomorfologicos, histopatológicos y moleculares, para poder determinar la asociación entre la tipología citomorfológica y el comportamiento biológico del tumor”