Hace catorce meses se determinó realizar cada año un suplemento que tuviera como objetivo proveer a nuestros lectores de una actualización o profundización acerca de un tema de importancia para el ejercicio de nuestra profesión. Con esta idea se realizó un primer número durante el año 2003, cuyo tema central: “Ley 100 y psiquiatría”, bajo la coordinación del doctor José Posada V., discutía algunas de las tendencias, de las reglamentaciones y de las dificultades que para los colaboradores existían después de los primeros diez años de implantación de la Ley 100.

Después de este primer número, el Comité Editorial de la Revista Colombiana de Psiquiatría propuso realizar un suplemento acerca de “Neurociencias y psiquiatría”, y para ello encomendamos su coordinación al doctor César A. Arango-Dávila, quien por sus cualidades como persona, médico de la Universidad del Quindio, psiquiatra de la Pontificia Universidad Javeriana, candidato a doctorado del Centro de Estudios Cerebrales de la Universidad del Valle, con la tutoría del doctor Hernán Pimienta y con múltiples escritos en revistas nacionales e internacionales sobre diversos temas neurobiológicos, con especial predilección hacia la lesión cerebral isquémica, lo hacían una de las personas más idóneas en Colombia para coordinar el presente suplemento que, además de lograr su cometido, ratificó la confianza que tuvimos al encomendarle esta importante tarea.

En este suplemento se observa una profunda y detallada visión de las neurociencias y su vínculo con la psiquiatría, lo que nos obliga a pensar una vez más en la importancia que tiene este campo dentro de nuestra especialidad y las enormes posibilidades que se abren para investigaciones profundas y de pertinencia. Asimismo, nos lleva a observar el extraordinario desarrollo que en esta área poseen algunos grupos de investigación en nuestro país y su responsabilidad para con la docencia y difusión de este campo en Colombia y Latinoamérica.

Finalmente, este número, como los otros cuatro de este año, son un sentido homenaje a la persistencia, calidad y silenciosa labor de todos los que han o están colaborando para mantener viva y en crecimiento nuestra Revista Colombiana de Psiquiatría, que este año cumple cuarenta años de existencia.