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Revista Colombiana de Psiquiatría

Print version ISSN 0034-7450

rev.colomb.psiquiatr. vol.39 no.3 Bogotá July/Sept. 2010

 

Editorial

Promoción y prevención en salud mental: ¿cuál es nuestro lugar?

Mental Health Promotion and Prevention: Which Is Our Place?

 

Oportunidades para promocionar la salud y prevenir la enfermedad se pueden dar por medio de diversas actividades educativas, ambientales, legislativas o de otra índole. Nadie cuestiona la necesidad de realizar estas acciones de promoción y prevención en salud mental. De hecho, esto se privilegia en el marco de la ley 100 y seguramente se mantendrá en cualquier reforma que se haga de ésta. No obstante, resulta interesante preguntarse:

1. ¿Se realizan propuestas de prevención sobre riesgos descritos?

2. ¿Se cumplen todas las actividades que se proponen?

3. ¿Las actividades son idóneas, o se basan en la intuición del proponente?

Para responder estas preguntas tomaré algunos ejemplos que puedan suscitar ideas que nos pongan a pensar sobre el tema.

Respecto a la primera pregunta, conocemos que el alcohol es un factor de mortalidad muy presente en accidentes de tráfico, suicidios y homicidios, entre otros. Abundante bibliografía da cuenta de esta afirmación. Así mismo, en algunos países se tienen definidos los costos que representa para el sistema el consumo alcohol; por ejemplo, en Canadá se calculan los costos sociales en 14.554 millones de dólares canadienses (equivalen a 13.826 millones de dólares estadounidenses). Ello incluye atención sanitaria, costos legales, costos de prevención e investigación y costos directos e indirectos por pérdida de productividad; estos últimos corresponden a la mitad de lo calculado.

Ahora, tenemos en Colombia una reglamentación en el Código de Tránsito que permite un nivel de alcohol en sangre hasta de 0,04. Este grado ha mostrado aumentar el riesgo de accidentalidad. ¿Por qué no respaldar la medida de tolerancia o para el conductor? Brasil ya lo hace exitosamente en Latinoamérica.

En segundo término, cuestionamos si se cumplen todas las actividades que se proponen. De manera general, podemos decir que no es un secreto el incumplimiento reiterativo de las medidas de promoción y prevención que tienen que realizar las empresas promotoras de salud (EPS). ¿Qué actividades han realizado y qué impacto han tenido? Muchas veces se han privilegiado actividades educativas, con metodologías cuestionables y contenidos de eficacia parcial o que no han sido corroboradas.

Nos preguntamos también si las actividades propuestas son idóneas o fruto de la intuición del proponente. Miremos la propuesta que se ha hecho de la legalización de la marihuana, o también la del tabaco y sus derivados, pues en días pasados la Corte Constitucional declaró exequible el artículo 3° de la ley 1335 de 2009 con el objetivo de salvaguardar la salud pública y evitar el acceso de menores de edad al tabaco: "Prohíbase la fabricación e importación de cigarrillos en cajetillas o presentaciones que contengan menos de diez (10) unidades. PARÁGRAFO. A partir de los dos (2) años siguientes a la vigencia de la presente ley se prohíbe la venta por unidad de productos de tabaco o sus derivados".

No entraremos a discutir la primera propuesta, con la cual en principio no estoy de acuerdo; ni la segunda decisión, la cual considero acertada intuitivamente, no obstante que la evidencia que las respalda es bastante débil desde el punto de vista de la epidemiología y la salud pública. Incluso en el segundo caso el hecho de obligar a comprar medio paquete o más podría incrementar el consumo. La respuesta tal vez no se tenga y sólo la sabremos una vez implementada la medida. Pero, ¿qué evidencia científica existe al respecto? Si no la hay, ¿cuáles son los hallazgos que inclinan la balanza hacia una u otra opción?

Finalmente, la Asociación Colombiana de Psiquiatría (ACP) tiene una labor rectora al respecto, pues su actividad en la fiscalización y presentación de propuestas en promoción y prevención se debe mantener e incrementar. Así mismo, la ACP debe cuestionar permanentemente qué parte de lo propuesto como estrategias en promoción y prevención desde la salud pública es o no es recomendable, cuáles son las estrategias propuestas y sus orígenes, cuál es el balance riesgo-beneficio y cuánto nos podemos arriesgar.

Carlos Gómez-Restrepo cgomez_restrepo@yahoo.com
Director-editor Revista Colombiana de Psiquiatría

 

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