NOTAS ACADÉMICAS

Queremos expresar nuestro agradecimiento a los profesores Alfonso Correa, Jaime Ramos y Gonzalo Serrano, de la Universidad Nacional de Colombia, y al profesor Felipe Castañeda, de la Universidad de los Andes, por su valiosa colaboración como miembros del Comité Editorial de nuestra revista. Su apoyo incondicional ha sido un factor importante para el mejoramiento de la calidad editorial de nuestra publicación.

La Dirección

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IV CONGRESO COLOMBIANO DE FILOSOFÍA

Manizales, septiembre 24 al 28 de 2012

El Congreso Colombiano de Filosofía es una actividad académica cuya organización ha sido liderada por la Sociedad Colombiana de Filosofía junto con distintas universidades que han ofrecido sus sedes y su experiencia para garantizar la calidad del evento. Desde su primera versión, el Congreso ha tenido la finalidad de servir de escenario académico del más alto nivel, para presentar en sesiones plenarias, simposios, sesiones temáticas y comunicaciones, los resultados, avances, discusiones y publicaciones más relevantes por parte de la comunidad dedicada a la filosofía en Colombia. En el 2006 se celebró el I CCF en Bogotá, con el apoyo de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. El II CCF se llevó a cabo en Cartagena, en el año 2008, con el auspicio de la Universidad de Cartagena. En Cali se organizó, en el año 2010, el III CCF, con el liderazgo de la Universidad del Valle. En esta versión la asistencia fue de casi mil personas y se presentaron más de doscientos cincuenta trabajos. Este año, el IV CCF se realizará en la ciudad de Manizales, con el patrocinio de la Universidad de Caldas. En sus diferentes versiones, ha contado con el apoyo académico de por lo menos veinte universidades del país, lo cual le ha dado a este evento un posicionamiento nacional muy significativo en el acontecer filosófico de los últimos años, pues se han invitado profesores de otros países y se han patrocinado diferentes publicaciones como resultado de las presentaciones hechas en el Congreso. Vale la pena mencionar que también se han recibido generosos apoyos por parte de empresas privadas y de delegaciones diplomáticas, especialmente de Alemania y Francia, así como también apoyos de entidades públicas como Icetex y Colciencias.

Con la figura del país invitado, el Congreso aspira a posicionarse como un evento significativo en el ámbito regional latinoamericano. Para este año, y con el ánimo de fortalecer el diálogo con comunidades académicas de habla hispana, el país invitado de honor es Chile. Para corresponder el honor que la Asociación Chilena de Filosofía y la Universidad de Concepción le hicieran a Colombia, en el año de 2011, de ser su invitado de honor, la organización del IV CCF desarrolla gestiones para que por lo menos doce académicos chilenos puedan estar presentes en Manizales dialogando con sus colegas colombianos y de otros países vecinos.

Con el propósito de consolidar el desarrollo de las actividades filosóficas y de tener un amplio espacio de diálogo, la Sociedad Colombiana de Filosofía y la Universidad de Caldas invitan a la comunidad académica nacional e internacional a participar con ponencias, presentación de libros y revistas. Las propuestas de ponencias se recibirán hasta el 11 de mayo. Para mayor información se puede visitar la página web:

http://congreso.socolfil.org

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BIBLIOTECA COLOMBIANA DE FILOSOFÍA

En el ensayo Filosofía colombiana del pasado y del futuro, publicado en el volumen Espíritu y camino de Hispanoamérica (1953), Víctor Frankl, además de llamar a completar nuestra Edad Media, recomendaba la creación de un "Centro de Investigación de la Historia de las Ideas en Colombia". Esta propuesta, que en el autor citado tenía el fin de escrutar nuestra tradición española para encausarnos por ella y a partir de ahí producir la "filosofía colombiana del futuro", ha tenido efectivamente eco entre nosotros, no para realizar los anhelos de Frankl, sino para revisar y dar a conocer el proceso de las ideas filosóficas en nuestro país.

Desde esa fecha, es mucho lo que se ha logrado. Si tenemos en cuenta el retroceso que sufrió en los años cincuenta la llamada "normalización filosófica", es cierto también que, a pesar de la violencia que se desató en el país, la vida intelectual no se detuvo. La revista Mito logró, por fuera de la universidad, mantener la difusión de lo más selecto del pensamiento, la literatura y la cultura universales. Lo mismo puede decirse de la revista Eco, fundada en 1960. En estos dos medios se publicaron artículos sobre pensadores como Husserl, Heidegger, Nietzsche y Sartre, entre otros.

A ellas se añadió el esfuerzo de maestros que tuvieron ocasión de estudiar en Europa y en los Estados Unidos, como Danilo Cruz Vélez, Rafael Carrillo, Jaime Vélez Sáenz y Daniel Herrera Restrepo. Esto dio inicio a la llamada "normalización" de la filosofía en Colombia. Se inició, igualmente, una reflexión sobre las ideas marxistas que marcaron esos años. Ya Estanislao Zuleta, en su artículo "Marxismo y Psicoanálisis" (1964), intentaba superar el "marxismo papal" del Partido Comunista. Esa labor fue continuada por Rubén Jaramillo Vélez al regresar de Alemania en 1972.

Como es bien sabido, el ensayo Temas y corrientes de la filosofía colombiana en el siglo XX, de Rubén Sierra Mejía, vino a ser el primer análisis del proceso filosófico entre nosotros. Y fue el mismo Sierra quien propició la aparición, en 1985, del libro La filosofía en Colombia (siglo XX), una antología de los ensayos más representativos de la época.

En este mismo año nace, en la Universidad Santo Tomás, la Biblioteca Colombiana de Filosofía (BCF), fundada por el sacerdote dominico Joaquín Zabalza Iriarte O. P. y dirigida por Daniel Herrera Restrepo hasta el año 2008, año en el cual este último sugirió mi nombre para que asumiera la dirección de dicha colección. En esos momentos, se dijo que el objetivo de la Biblioteca era publicar lo más representativo de los filósofos colombianos de la época, pero que "esta colección va dirigida también a otro propósito: el de incrementar en las facultades y departamentos de filosofía del país el conocimiento y reconocimiento de una tradición interna en nuestro filosofar", tal como dijera Gloria Isabel Reyes en su artículo "La Biblioteca Colombiana de Filosofía" en 1986.¹

Como lo ha señalado Daniel Herrera, la BCF nació justo en el momento en que se debatía en Colombia sobre la existencia o no de una filosofía latinoamericana autóctona y con ella se buscó superar la discusión teórica mediante la publicación del material escrito disponible. A ello se sumó la realización del IV Congreso Internacional de Filosofía Latinoamericana, organizado por la Universidad Santo Tomás, que centró la atención en el análisis de "las tendencias actuales de la filosofía en Colombia". Las actas de este congreso, que convocó a los filósofos más significativos en el panorama nacional, han sido publicadas por la BCF y constituyen un verdadero hito para la historia de la filosofía en nuestro país.

La colección se inauguró con el Tractatus de actibus humanis, de Jacinto Antonio de Buenaventura O. P., texto muy significativo de la escolástica colonial, que fue seguido por La filosofía en Colombia: bibliografía del siglo XX. Se publicaron luego: De Hegel a Marcuse, de Danilo Cruz Vélez, Escritos sobre fenomenología, de Daniel Herrera y Escritos filosóficos, de Rafael Carrillo.

La Biblioteca incluye actualmente recopilaciones de textos de autores contemporáneos como Germán Marquínez A., Roberto Salazar R., Jaime Vélez S. y Abel Naranjo Villegas, así como de figuras prestantes de nuestra historia como José Félix de Restrepo y Ezequiel Rojas, a los que se añaden las bibliografías filosóficas de los siglos XVI al XX.

Se han publicado además las actas de los Congresos Internacionales de Filosofía Latinoamericana que ha venido realizando la Universidad Santo Tomás por más de tres décadas, con interesantes debates sobre derechos humanos, hermenéutica, religión y multiculturalismo. Mención especial merece el Simposio Internacional La Postmodernidad a debate (1998), en el que tomaron parte Enrique Dussel, Giani Vattimo, Guillermo Hoyos Vásquez, Leonardo Tovar González, Sergio de Zubiría y Santiago Castro-Gómez, entre otros, y cuyas actas han sido publicadas en el tomo XIX de la colección.

Actualmente, después de publicar el texto La educación de los sentidos en Xavier Zubiri. Un estudio noológico, de Rafael Antolínez Camargo, y la Bibliografía filosófica del siglo XIX, se encuentra en prensa La identidad hispanoamericana y otras polémicas, del fallecido maestro Rafael Gutiérrez Girardot, se prepara igualmente una colección de ensayos sobre Hegel, religión y filosofía moderna, de Jorge Aurelio Díaz, actual director de la revista Ideas y Valores y una selección de ensayos del insigne pensador Julio Enrique Blanco, a cargo del profesor Manuel Guillermo Rodríguez.

La BCF se propone mantener un ritmo de publicaciones de dos libros por año para continuar ofreciendo escritos de diversos autores colombianos. Entre ellos cabe destacar a Cayetano Betancur, Luis Eduardo Nieto Arteta, Antonio García, Estanislao Zuleta, Darío Botero Uribe y Jaime Rubio, así como a Rubén Sierra Mejía, RubénJaramillo Vélez, Guillermo Hoyos Vásquez y Ángelo Papacchini.

Hay que decir que, en sus veintisiete años de existencia, la BCF no ha estado exenta del problema que más aqueja a la investigación en Colombia: la restricción presupuestal. No ha sido posible mantener una periodicidad estricta y las obras publicadas no han alcanzado la necesaria difusión, problema este que aqueja a casi todas las publicaciones universitarias.

Con el propósito de normalizar en las Facultades de filosofía el estudio de obras representativas del pensamiento colombiano y latinoamericano, es importante que en los programas se incluyan textos de nuestros autores, para lo cual se cuenta no solamente con lo publicado en la BCF, sino con los esfuerzos llevados a cabo por profesores como Leonardo Tovar, Manuel Guillermo Rodríguez, Rubén Sierra, Santiago Castro-Gómez y Lisímaco Parra. A esos esfuerzos cabe añadir la labor realizada por el filósofo cubano Pablo Guadarrama.

Un elemento fundamental para la difusión y consolidación de la producción filosófica lo tenemos hoy en los medios electrónicos y, en este sentido, la BCF tiene entre sus proyectos poner en línea todo el material publicado hasta el momento. Así mismo, buscaremos integrar otros esfuerzos que se vienen haciendo en la misma dirección, tales como la Biblioteca Virtual Colombiana o la Biblioteca Virtual de la Biblioteca Luis Ángel Arango.

¹ Reyes, G. I. "La Biblioteca Colombiana de Filosofía", Revista Cuadernos de Filosofía Latinoamericana 28-29 (1986): 190-204.

DAMIÁN PACHÓN SOTO
Director Biblioteca Colombiana de Filosofía
Universidad Santo Tomás - Colombia
damianpachon@gmail.com