Desarrollo rural: reto para un país en paz

John Jairo Arboleda Céspedes

Director RCCP

Universidad de Antioquia

La ciudad de Medellín es privilegiada en cuanto a presencia de instituciones de educación superior (IES) públicas y privadas de gran calidad. Dichas IES están al servicio de una sociedad que ve en la educación el mejor camino para la movilidad social y el crecimiento personal y familiar, ofreciendo variados programas de formación y extensión en los niveles técnico, tecnológico y universitario. Algunas de esas instituciones benefician particularmente al sector agrario antioqueño haciendo presencia no solo en Medellín sino en varios municipios del departamento.

Paralelamente a esa presencia institucional, el departamento de Antioquia ha sido uno de los mayormente afectados -durante tanto tiempo y en tantas formas- por los horrores de una guerra que ya parece parte de nuestra agenda; guerra cuyo final se está pactando actualmente en la mesa de negociaciones de La Habana, Cuba.

El primer punto de la agenda en dichas negociaciones de paz -inamovible por lo demás- es el tema de Política de desarrollo agrario¹, el cual urge desarrollar de manera prioritaria desde ahora y durante el mal llamado ''postconflicto''. Sin embargo, y pese a la capacidad privilegiada de nuestra región en términos de presencia de IES, hasta ahora no se conocen propuestas desde la academia ni movimientos sociales y políticos que deriven en proyectos y programas para aprovechar esta oportunidad única de desarrollar el agro colombiano y mejorar la situación de nuestras sufridas y abandonadas comunidades rurales. Desde las IES colombianas en general, pero sobre todo desde las IES antioqueñas en particular, deberíamos estar construyendo una gran propuesta agraria de desarrollo social y económico a ser implementada por nuestros dirigentes.

Las IES tenemos mucho que aportar desde nuestra misión institucional a los retos planteados en ese primer punto de las negociaciones² ''Hacia un nuevo campo colombiano: Reforma Rural Integral, RRI'', específicamente en los temas: Economía campesina, familiar y comunitaria en el desarrollo del campo; Promoción de la asociatividad y cooperativismo; Generación de ingresos y empleo; Producción de alimentos (asistencia técnica); y, Preservación del medio ambiente.

Pues como bien se sabe, no bastará con resolver el problema del acceso a la tierra sino que además se deben proveer los medios y sobre todo las capacidades para hacer buen uso de la misma. Todos estos temas son relevantes y afines a nuestra razón de ser como facultades, escuelas o institutos adscritos a las IES del departamento. Debemos atender la vocación agraria de nuestros pobladores rurales, formar el talento humano regional urbano y rural, brindar oportunidades de acceso a la educación superior y para ello contamos con dedicados profesores, investigadores, estudiantes y extensionistas, que con gran compromiso social nos permitirán cumplir nuestra misión institucional, para ser factor de equidad y desarrollo integral. He ahí grandes retos para el nuevo país.