1. Introducción
Introducción Desde las ciencias de la información se reconoce que las publicaciones científicas reflejan la investigación que se realiza en todos los niveles del conocimiento por grupos o centros de investigación. Su estudio y análisis se realiza desde variadas perspectivas: temáticas, institucionales, geográficas, de género, de colaboración, de impacto o citación, etc. (Glänzel, Rinia & Brocken, 1995; Goel, 2002; Maz-Machado et al., 2011; Miguel & Herrero-Solana, 2010).
La bibliometría es una herramienta útil para determinar patrones de publicación y como ayuda para el diseño de estrategias que redunden en la visibilidad internacional de las investigaciones científicas y por tanto resulta válido para diseñar líneas de actuación en las políticas científicas de un país o una institución determinada (Rojas-Sola & De San-Antonio-Gómez, 2010).
La producción científica de los países latinoamericanos ha sido objeto de análisis desde años recientes; la mayor parte de los estudios se han centrado en el análisis global de las revistas de la región, bien para identificar cuáles podrían ser consideradas como de corriente principal (Krauskopf & Vera, 1995), o para establecer indicadores de la producción científica (De Moya-Anegón & Herrero-Solana, 1999). También se ha procurado identificar la producción en revistas de países latinoamericanos, así por ejemplo se tienen los estudios específicos sobre revistas argentinas (Colombo, 2009), colombianas (Gómez, Anduckia & Rincón, 1998) o de manera global sobre áreas como Bibliotecología y Ciencias de la información (Miguel & Herrero-Solana, 2010), Economía y empresas (Koljatic & Silva, 2001) o Archivística (Martín, 2011).
Los estudios sobre las tasas de colaboración en la ciencia latinoamericana señalan que en el periodo 1999-2002 la colaboración regional, es decir, entre países latinoamericanos era tan solo del 2,7 % y 26,4 % para la colaboración nacional, mientras que un 35,3 % de las publicaciones se realizaban sin ningún tipo de colaboración (Sancho, Morillo, De Filippo, Gómez & Fernández, 2006).
Han transcurrido ya 20 años desde que la Misión Ciencia Educación y Desarrollo (Aldana et al., 1994) señalara que Colombia debía preparar un plan para ponerse a la altura de los países en desarrollo, estableciendo políticas de transformación del conocimiento y de la educación para obtener científicos que impulsaran el desarrollo tecnológico y científico del país. Es por tanto el momento de conocer si las propuestas de entonces han sido fructíferas y si hay evidencia de ello a través de la producción científica internacional de Colombia.
En los últimos años se realizan con mayor frecuencia algunos estudios centrados en la producción científica colombiana. Entre ellos se tiene el análisis sobre los proyectos científicos colombianos financiados por COLCIENCIAS entre los años 1983 y 1994, los cuales originaron 355 artículos en revistas internacionales y 472 en revistas nacionales (Anduckia, Gómez & Gómez, 2000). Así mismo se ha realizado el estudio bibliométrico de la producción en Ciencias de la Salud en Colombia a partir de la información contenida en la base de datos Literatura Latinoamericana y del Caribe en Ciencias de la Salud-LILACS y en MEDLINE, hallándose un total de 2418 y 1483 artículos respectivamente de los que el 61,5 % de estos últimos son producidos por instituciones universitarias (Alvis-Guzmán & De La Hoz-Restrepo, 2006).
El estudio de la producción científica colombiana, en el campo de las ingenierías, ha revelado que ocupa el segundo lugar entre los países latinoamericanos y el cuarto respecto a Iberoamérica (Rojas-Sola & De San-Antonio-Gómez, 2010). En algunas disciplinas relacionadas con las Ciencias de la Salud se ha analizado su producción tanto de forma genérica (Alvis-Guzmán & De La Hoz-Restrepo, 2006) como particular, destacando las investigaciones en los campos de enfermedades infecciosas (Ríos, Mattar & González, 2011) y la tuberculosis (Castañeda-Hernández, Bolívar-Mejía & Rodríguez-Morales, 2013), entre otras. En cuanto a las publicaciones de una institución se ha analizado la producción específica de la Universidad Nacional sede de Medellín (Ospina, 2009).
Es conocida en las bases de datos internacionales (WoS, SCOPUS) la existencia de un sesgo a favor de las revistas de habla inglesa en detrimento de otros idiomas (Mohed, 2005). En los últimos años estas han procurado incorporar un mayor número de revistas en idiomas diferentes al inglés, ejemplo de esto es que Thompson Reuters recientemente ha incorporado el SciELO Citation Index (SciELO-CI) con su amplia cobertura de revistas iberoamericanas en la oferta de servicios de WoS. ScieELO da cobertura bibliográfica de 1110 revistas, por esta razón consideramos que SciELO-CI ofrece una amplia información sobre la ciencia en Latinoamérica y es adecuada para analizar la productividad científica colombiana difundida en la región.
En este estudio se plantean los siguientes objetivos respecto a la producción científica colombiana en SciELOS-CI:
• Cuantificar la producción diacrónica.
• Conocer cuál es la producción de las universidades colombianas.
• Identificar la colaboración a nivel internacional en las publicaciones.
• Establecer el coeficiente de colaboración a nivel de autoría.
• Conocer las áreas temáticas en las que más se publica.
• Identificar las revistas latinoamericanas en las que se difunde la investigación científica colombiana.
2. Materiales y métodos
Se consultó el SciELO Citation Index a través de la página de la Web of Science el 30 de mayo de 2014. El procedimiento para obtener los datos consistió en analizar la información contenida en SciELO-CI, para ello se buscaron todos los registros partir de los parámetros: Adress [Colombia] y years [1997-2013]. Se hallaron 20 076 registros pero se detectó que proporcionaba documentos solo a partir del año 2002. Para obtener únicamente artículos científicos se filtró la información previa por research article, con un resultado de 15 302 registros, constituyendo estos nuestra muestra para este estudio.
La información se exportó a una base de datos ad-hoc para su procesamiento estadístico. Posteriormente se identificaron los autores para su normalización. El siguiente paso consistió en realizar un control manual para estandarizar los nombres de las instituciones, y así poder obtener su productividad científica.
Debemos indicar que la opción de análisis de resultados que se ofrece desde el portal de la WoS difiere de los resultados que aquí presentamos. Algunas de las razones hacen referencia a que los nombres de los autores de habla no inglesa y de las instituciones contienen muchos errores en la forma en que se reseñan en WoS. Esto ya ha sido indicado por otros investigadores (Mohed, 2005). Entre estos errores está la asignación de artículos a universidades diferentes pero con nombres homónimos, un ejemplo de esto es la existencia de la Universidad de Córdoba en Colombia, Argentina y España. Por otra parte, muchos autores hacen traducciones al nombre de su universidad, haciendo que el sistema informático las identifique como distintas. Por ejemplo hallamos University of Antioquia y Universidad de Antioquia, hallando además hasta cinco formas diferentes para designar a esta misma universidad. También algunos autores agregan el nombre de la ciudad de la sede de la universidad, como en el caso de la Universidad Nacional.
Para obtener los patrones de colaboración en la autoría se contabilizó el número de autores por cada artículo. La colaboración entre países se determinó a partir del número de autores de cada país. Si en un mismo artículo hay autores de un mismo país se asumió que no había colaboración internacional. Se determinaron cinco grupos de colaboración de Colombia con otros países: Latinoamérica, EE. UU.-Canadá, España-Portugal, Unión Europea (sin España ni Portugal) y finalmente otros países. El Grado de Colaboración (GC) propuesto por Subramanyam (1983) se determina por la fórmula:
GC = 1- fj/N, donde 0≤ GC ≤ 1,
f j = número de documentos con j autores en la colección K.
N = número total de documentos en K.
3. Resultados
3.1. Producción
En el intervalo comprendido entre los años 2002 a 2013 se publicaron 15 302 artículos que de ahora en adelante denominaremos genéricamente documentos. Se ha pasado de 185 documentos al inicio del periodo hasta alcanzar los 2176 al final. La mayor producción se dio en el año 2012 con 2340 documentos (Figura 1). Se observa que en los últimos cinco años se ha producido el 68,12 % del total de la producción científica colombiana. Esta producción no ha aumentado de forma lineal sino que ha habido periodos de diversas tasas de variación interanuales (TVI), como sucedió entre los años 2004 y 2005 donde la TVI fue del 114,5 %, así como entre 2012 y 2013 con una TVI negativa de -7,01 %.
Así mismo debe recordarse que una cosa es tener una alta producción y otra el impacto de la misma a través de la citación. Así, tenemos que el 77,74 % de los documentos colombianos no han sido citados nunca y el 12,64 % lo han sido una sola vez
La Universidad Nacional de Colombia es la institución que produce el mayor número de documentos con 3740. Se contabilizó de manera conjunta la producción de las sedes de Bogotá, Medellín, Manizales, Palmira y la de Caribe, así como aquellas que no especifican sede alguna. Esta institución produce el 24,44 % del total de Colombia. Las siguientes universidades en orden descendente de producción son la Universidad de Antioquia con el 15,99 %, la Universidad Javeriana con el 7,40 % y la Universidad el Valle con el 6,12 % (Tabla 1)
3.2. Colaboración
Durante el periodo 2002-2013 hay un predominio de los documentos escritos en coautoría (Figura 2). En los dos primeros años se dieron los más bajos porcentajes en el grado de colaboración (GC) con un 0,52 y 0,53 respectivamente. A partir de ese año el GC ha incrementado hasta el 0,79 en el año 2013 (Tabla 2). El GC durante el periodo completo es de 0,75.
Al analizar el tipo de colaboración nacional e internacional se observa que en gran medida en Colombia esta es de carácter nacional. Asimismo, se evidencia un estancamiento en la colaboración con unas medias porcentuales del 55,98 % en la nacional y del 14,8 % en la internacional (Figura 3).
La cooperación de Colombia con Latinoamérica se da en el 9,8 % de su producción, siendo el principal bloque de países socios en la difusión del conocimiento científico. Este valor es superior al hallado por Sancho, et al. (2006) para el periodo 1999-2002. La colaboración con otros bloques de países es escasa, con EE. UU.-Canadá alcanza el 3,1 % y con España-Portugal el 2,9 % (Tabla 3).
A nivel individual, España, Brasil y EE. UU. son los países con los que Colombia tiene las mayores colaboraciones, si bien los documentos escritos con estos tres países tan sólo representan el 8,35 % del total (Tabla 4).
Colombia tiene vínculos de colaboración en sus publicaciones con 70 países, que van desde prácticamente todos los países europeos hasta algunos africanos como Uganda o Zimbabue. En la Figura 4 se observa la red de colaboración internacional, en la que el tamaño del nodo indica el volumen de la producción del país, y el grosor de las líneas conectoras, el número de colaboraciones. Cada color indica la pertenencia a alguno de los bloques de países que se establecieron en la Tabla 4.
3.3. Revistas y áreas temáticas
La producción colombiana fue publicada en un total de 458 revistas. Las dos revistas que publicaron el mayor número de documentos fueron Biomédica y la Revista de Salud Pública. En la Tabla 5 se muestran las 15 revistas con más publicaciones de autores colombianos y puede observarse que en estas predominan las relacionadas con las Ciencias de la Salud.
El análisis de la distribución geográfica de las revistas que difunden la investigación de Colombia revela que el 81,91 % de estas son colombianas, es decir, la difusión de la producción es mayoritariamente de ámbito local, aunque hay revistas de otros países (Tabla 6).
La producción científica colombiana se clasifica en 137 áreas temáticas que están asociadas a las categorías en las que están adscritas las revistas que las publican. Así se observa la gran producción en las categorías relacionadas con las Ciencias de la Salud, entre las veinte primeras (Tabla 7).
4. Discusión y conclusiones
Si bien durante los doce años analizados se observa que la producción científica colombiana ha aumentado en un 11,72 % este aumento se ha dado especialmente en la segunda mitad del periodo. Podemos afirmar que de esta forma se estará alcanzando uno de los objetivos propuestos por la Misión Ciencia Educación y Desarrollo en el año 1994 sobre el aumento de las publicaciones y la visibilización del trabajo científico y tecnológico realizado en Colombia. Sin embargo, el impacto de esta producción es escaso medido en términos de citación (Aldana et al., 1994). Hay un exceso de publicación en revistas de edición local, por tanto hace falta un mayor esfuerzo en traspasar la frontera y publicar en las revistas extranjeras, al menos en aquellas extranjeras de carácter regional. Las universidades públicas encabezan la producción de documentos científicos en Colombia, aunque entre las veinte más productivas figuran siete universidades privadas. La colaboración en la autoría de los documentos ha aumentado, lo que puede interpretarse como resultado de equipos de trabajo y del establecimiento de redes académicas tanto nacionales como internacionales. Esto último se evidencia al observar el alto número de países coofirmantes de los documentos. Esta colaboración no se limita a los países punteros en ciencia y desarrollo sino que también se da con países con niveles de desarrollo inferior al colombiano, como algunos de África y el Sudeste Asiático. Los títulos de las revistas donde se publica, así como las categorías temáticas, indican que las Ciencias de la Salud son el más importante frente de producción bibliográfica de la investigación científica colombiana que se publica en las revistas de la región. Tomando en cuenta que las revistas de la región indexadas en SciELO se publican mayoritariamente en idioma español o portugués, parece conveniente realizar a futuro un estudio similar en bases de datos internacionales donde la presencia del idioma inglés fuese mayor para poder calibrar en mejor medida la presencia y repercusión de la investigación científica que se realiza en Colombia en el resto del mundo, evidenciando así su visibilidad internacional.