SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.62 número174Moros, San Francisco y los frailes en la serie de cuadros de la vida de san Francisco del Museo de Arte Colonial de San Francisco, Santiago de Chile índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • En proceso de indezaciónCitado por Google
  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO
  • En proceso de indezaciónSimilares en Google

Compartir


Franciscanum. Revista de las Ciencias del Espíritu

versión impresa ISSN 0120-1468

Franciscanum vol.62 no.174 Bogotá jul./dic. 2020  Epub 19-Feb-2020

https://doi.org/10.21500/01201468.4328 

Teología

El pensamiento franciscano en los procesos de autoevaluación institucional *

Franciscan Thought in the processes of institutional self-evaluation

Gerardo Ramírez Bonilla1  **

Pilar Tatiana Gómez Bohórquez1  ***

Carolina Ramírez Sánchez1  ****

1 Universidad de San Buenaventura; Bogotá; Colombia.


Resumen

Este artículo analiza desde una perspectiva fenomenológica-hermenéutica los aportes del pensamiento franciscano en los procesos de autoevaluación institucional de la Universidad de San Buenaventura, Bogotá. En primera instancia, se abordará el pensamiento franciscano como elemento que transversa las funciones sustantivas y todas aquellas actividades que propenden por el aseguramiento de la calidad y el mejoramiento continuo de la educación superior. En segundo lugar, se describen los significados y opiniones sobre el sistema de autoevaluación institucional en los diferentes agentes de la comunidad académica Bonaventuriana en la sede Bogotá. Finalmente, se reconocerá cómo la filosofía institucional se materializa en los procesos de autoevaluación en el marco de los procesos de acreditación con el propósito de aportar elementos significativos para los planes de mejoramiento.

Palabras Clave: Pensamiento franciscano; calidad educativa; autoevaluación; acreditación institucional; educación superior

Abstract

As a result, the study of the contributions of Franciscan thought in the processes of institutional self-evaluation of the Universidad de San Bueanventura, Bogotá, is analyzed from a phenomenological-hermeneutical perspective. In the first instance, the Franciscan thought will be approached as an element that transverse the substantive functions and all those activities that promote quality assurance and continuous improvement of higher education. Secondly, it describes the meanings and opinions on the system of institutional self-evaluation in the different agents of the Bonaventurian academic community in the campus of Bogota. Finally, it will be recognized how the institutional philosophy is materialized in the processes of self-evaluation within the framework of the processes of accreditation in order to provide significant elements for improvement plans.

Keywords: Franciscan thought; Educational Quality; Self-evaluation; Institutional Accreditation; Higher Education

Introducción

Asís, pequeña población de la Umbría Italiana fue la casa de uno de los personajes más llamativos de la historia, Francisco Bernardone o más conocido como Francisco de Asís. Joven de grandes principios y virtudes forjados gracias al empeño y dedicación de sus padres Pedro Bernardone y Pica; de básica formación intelectual, sabía leer y escribir, tenía cierto grado de conocimiento de la lengua latina y algo de francés debido a la gratitud que sentía su padre por este territorio, el cual fue determinante para la adquisición de su fortuna. Fue un muchacho inquieto deseoso por alcanzar una alta posición social, para ello se hizo caballero y participó en la guerra. En medio de las diferentes situaciones que experimento allí, descubrió en el servicio a Dios y al prójimo su misión. Sin pretender más que vivir evangélicamamente, a Francisco se le unieron hombres y mujeres de diferentes regiones, posiciones sociales y niveles educativos, lo que condujo a un rápido crecimiento en número de la comunidad y que lo llevó a redactar una norma de vida para él y sus seguidores, la cual fue aprobada por el Papa Inocencio III. Italia se constituyó en el epicentro de la acción evangelizadora de Francisco y sus hermanos, la cual se fue propagando gradualmente a diversas regiones de Europa. Al llegar hermanos letrados a la Orden y reconociendo la necesidad de los Estudios para poder realizar una mejor acción evangelizadora, Francisco accede con cierta resistencia, a que la vida académica haga parte de la vida de los frailes.

Este hecho es determinante para los fines del presente artículo, puesto que fue en parte lo que desencadenó la creación de los primeros centros universitarios y la organización de los estudios con fines pastorales inicialmente. Los primeros maestros franciscanos, dentro de ellos Antonio de Padua, Alejandro de Hales, San Buenaventura, Juan Duns Scoto, Guillermo de Ockham, entre otros, inspirados en la vida de Francisco fueron los pioneros en la constitución de una escuela filosófica y teológica que se caracterizó por un lenguaje particular, un modo de pensar y un alto grado de originalidad que da inicio al denominado pensamiento franciscano.

El pensamiento franciscano, aunque en apariencia no posea un método y carece del rigor científico al que hoy día es sometido todo conocimiento, se puede sostener que desde sus inicios se ha cimentado en valores y principios que cobran sentido en todos los escenarios en los cuales se desarrolla el hombre, el campo educativo no es la excepción. Según muestran los datos históricos y como ya se ha mencionado, la experiencia de vida de Francisco de Asís se constituyó en el germen de una escuela que trascendió el tiempo y el espacio, sus notas características guardan una vigencia única que la hacen diferente a los demás movimientos ideológicos de la época.

Es necesario resaltar que desde el momento que se fue configurando la universidad en la Edad Media, los franciscanos imprimieron un sello particular, tanto en la forma de trasmitir los conocimientos como en la manera de asumirlos, mostrando su preocupación por hacer accesible el saber a todos sin excepción. Su visión antropológica tal vez sea una de las características más llamativas, pues es el hombre el fundamento de sus reflexiones, no la idea de hombre o el hombre en abstracto, sino el hombre concreto que piensa y siente, aquel que es único, diferente y particular.

Desde esta perspectiva, el pensamiento franciscano permite comprender las prácticas educativas de una manera diferente, no centradas en la acumulación de teorías, cifras o datos que, aunque son importantes de conocer, no se constituyen en el fundamento de la existencia humana. Este pensamiento defiende la idea de una educación inclusiva, abierta y diversa, en la que todos son interlocutores válidos capaces de aportar, desde sus experiencias particulares a la construcción del conocimiento.

Con el paso del tiempo, la universidad como centro del saber ha evolucionado y se ha visto en la necesidad de asumir una serie de requerimientos para poder funcionar y competir en el sector educativo. La universidad en el contexto colombiano y respondiendo a los lineamientos establecidos por el Ministerio de Educación Nacional (MEN) y por el Consejo Nacional de Acreditación (CNA), le ha correspondido desarrollar procesos de autoevaluación y acreditación los cuales determinan la calidad, la oferta, la demanda y la afluencia de estudiantes. Dichos procesos implican a todos los actores inmersos en la institución educativa directivos, administrativos, docentes, estudiantes, egresados, personal de apoyo, entre otros; quienes desde sus conocimientos y experiencias aportan elementos valiosos para la consecución de la acreditación institucional.

La Universidad de San Buenaventura atendiendo al llamado del Ministerio de Educación Nacional (MEN) y basándose en los parámetros establecidos por el CNA, se ha puesto la meta de alcanzar la acreditación institucional y desde hace varios años ha realizado distintos procesos de autoevaluación que le han permitido identificar fortalezas, aspectos por mejorar y elementos diferenciadores con relación a los servicios que presta en la sede (Bogotá). Dentro de estos elementos diferenciadores es apremiante identificar el modo en el que el pensamiento franciscano trasversa todos los procesos que dinamizan la vida universitaria a partir de las funciones sustantivas (docencia, investigación, proyección social y bienestar institucional) desde las voces de los actores y cómo este mismo pensamiento es tenido en cuenta en el proceso de autoevaluación. Con base a lo anteriormente expuesto, surge la pregunta que moviliza este ejercicio de investigación, a saber: ¿De qué manera el pensamiento franciscano aporta en los procesos de autoevaluación institucional de la Universidad de San Buenaventura Bogotá? Para responder a esta pregunta se requiere el abordaje de los siguientes conceptos: pensamiento franciscano, calidad educativa y autoevaluación, los cuales serán desarrollados en el marco del presente artículo. Asimismo, se requiere llevar a cabo un análisis de algunos documentos institucionales como son: el Proyecto Educativo Bonaventuriano PEB, el Modelo Pedagógico Bonaventuriano y los informes de autoevaluación institucional y acreditación emitido por el CNA.

1. El pensamiento franciscano en la Universidad de San Buenaventura

Se entiende por pensamiento franciscano desde la perspectiva de Merino:

No es un sistema teológico - filosófico elaborado especulativamente desde unos principios puramente racionales y abstractos, sino que nace, se potencia y madura desde una experiencia vivida y compartida; y solo es comprensible y aprehensible en contacto con esta experiencia personal y comunitaria1.

La Universidad de San Buenaventura, consecuente con el pensamiento franciscano de formar al hombre y servir a la sociedad, asume las funciones sustanciales desde su concepción del saber que se define como el desarrollo integral de las múltiples posibilidades de la persona; promueve un modelo pedagógico que privilegia espacios facilitadores de la búsqueda, la creatividad, el diálogo, el desarrollo individual y colectivo2.

Para la universidad es importante seguir estos principios y los hace parte fundamental en el desarrollo de sus dinámicas.

Esta institución asume componentes fundamentales que la afirman como franciscana y los introduce en los procesos académicos, administrativos e investigativos, para ello define tres dimensiones sustanciales: su ser universitario, su ser católico y su ser franciscano. Bajo esta óptica, y consecuente con estos enunciados, formula la concepción del saber cómo el desarrollo de las múltiples posibilidades de la inteligencia que posee el hombre; señala el tipo de sociedad para la cual forma, orientando el quehacer universitario hacia un compromiso que le permita, a través del ejercicio del saber y del cultivo de la ciencia, dignificar al hombre y contribuir a la construcción de una sociedad más justa, fraterna, digna y solidaria. Finalmente, precisa la concepción del hombre desde la experiencia cristiana de San Francisco de Asís, que le considera como un ser sensible con sentido práctico del saber, orientado siempre al servicio de los demás y a la valoración de la vida cotidiana y de la naturaleza3.

Para conceptualizar el pensamiento franciscano como eje central y transversal de la investigación, fue necesario abordarlo desde su contexto histórico y varios referentes teóricos. En este orden de ideas, se puede decir que tiene sus orígenes desde la vida de Francisco de Asís quien con su ejemplo, sencillez, humildad y conversión ocasiona movimientos humanistas que se convirtieron en ordenes itinerantes y misioneras, llegando a expandirse por Europa y América Latina predicando la teología y la filosofía; creando centros universitarios inicialmente para los hermanos de la Orden, pues más allá de ser considerada ésta como una comunidad o movimiento religioso es una forma de pensar y vivir, que a través del ejemplo y experiencia del poverello de Asís busca establecer una relación entre el conocimiento y la vida misma, conocimiento que debe dignificar la condición humana, su relación con el otro, la naturaleza y consigo mismo contribuyendo a su vez con la edificación de una sociedad justa para todos.

A continuación, se aborda el pensamiento franciscano desde diferentes referentes teóricos y sus contextos de análisis:

Una de las primeras visiones que se mantiene del pensamiento franciscano y que fundamenta los conceptos que más adelante desarrollan otros pensadores, la representa Gialdi quien afirma que:

La visión franciscana de la vida es una experiencia fraterna de la vida y de la existencia personal y comunitaria frente a los hombres, los seres, las cosas, frente a los acontecimientos y frente a Dios. Es una relación cara a cara, inmediata -y concreta. Es una forma real e iluminada de vivir y convivir. Es un modo vital de realizar la paz, la justicia y la ecología, como experiencia y como perspectiva, como cultura y como utopía4.

Es decir, uno de los objetivos de este pensamiento es alcanzar un estado de unión y respeto por Dios, la vida, la naturaleza y el hombre; a través de la convivencia, y su relación con los demás, buscando constantemente el bien común y dar valor al ser humano y su condición humana.

A partir de estos principios fundantes del pensamiento franciscano y su influencia en la comunidad, aparece una nueva etapa donde éste se establece dentro de la universidad no solo con un fin evangelizador, sino con el propósito de promover la ciencia en el campo de la educación sin perder la esencia y postura de Francisco de Asís. Por lo anterior Moore 2009 citado por Patiño afirma que:

Francisco sigue siendo la imagen presente y configurante en la sistematización filosófica-teológica de los maestros Franciscanos. Una cierta experiencia personal y comunitaria está en la base del Franciscanismo; aquí la teoría y el sistema son el resultado de una vivencia y de una praxis condicionante del pensamiento. La relación entre Francisco y el desarrollo sistemático del pensamiento franciscano -entre la “experiencia-vida- y la “expresión-teoría”-, se da en forma circular (círculo hermenéutico): la experiencia fundamenta y condiciona la expresión, y a la vez, el edificio intelectual ilumina y conforma la experiencia5.

Es decir, el pensamiento franciscano deja entrever que el conocimiento surge de las vivencias e interacción con los demás, reconoce la teoría formal como fundamento intelectual que se construye a partir de un diálogo y la interpretación de la experiencia misma; siempre en busca del bien para el ser humano.

Se puede interpretar en la obra de San Buenaventura su visión frente al pensamiento franciscano desde su experiencia como maestro de la Orden, al considerar que: «Los estudios son un medio de la fe y de la madurez humana cuando objetivan la experiencia creyente y preparan a los hermanos para ser buenos y hacer el bien»6. De acuerdo con lo dicho por el Doctor Seráfico, la ciencia y la sabiduría deben ser utilizadas en pro de la supervivencia y fortalecimiento de vínculos humanos los cuales permitirán dar significado a la naturaleza y la acción humana.

En coherencia con San Buenaventura, en la actualidad el pensamiento franciscano retoma los principios fundantes y los contextualiza de acuerdo a las necesidades o situaciones que emergen en los diferentes escenarios; un ejemplo de ello es como desde el quehacer de la universidad se busca generar reflexiones y propuestas que atañen al campo de la bioética, la ciencia y el medioambiente, planteando rutas pedagógicas, que contribuyan en la estructuración del ser, transformando realidades desde las prácticas culturales, tecnológicas, científicas y sociales, pero también con la construcción de nuevos conocimientos enmarcados siempre desde principios éticos7.

A partir de las consideraciones anteriores, la Universidad de San Buenaventura consecuente con el pensamiento franciscano pretende potenciar el desarrollo integral de la persona, promoviendo espacios de interacción e intercambio de saberes entre diversas culturas y entornos, lo cual reafirma su compromiso con la formación de agentes sociales que aplican sus saberes en pro de proteger la dignidad del ser humano, aportar a la solución de problemas y alcanzar la realización personal de cada uno de ellos. En línea con lo anterior Lugo propone que:

Para esto nos corresponde leer con mirada renovada el pensamiento franciscano, para aplicarlo a las nuevas realidades, pues cambiamos o perecemos y la educación es el único sendero que debemos seguir para reformar nuestro entorno contando con el talante franciscano que podemos estar desaprovechando pues la mayoría de las instituciones tiene para el joven de hoy demasiados elementos accesorios y pocos elementos esenciales. A nosotros nos corresponde desde la pedagógica franciscana, entregarles dichos elementos esenciales8.

Ahora bien, el desarrollo de esta investigación permitirá identificar la concepción y apropiación que actualmente la comunidad académica de la sede Bogotá tiene frente al pensamiento franciscano y como éste aporta a los procesos de autoevaluación con miras a la acreditación institucional.

2. Calidad educativa y acreditación institucional

Como segunda categoría central, se encuentra la calidad educativa y la acreditación institucional, siendo estas las metas a alcanzar para lograr los propósitos de formación en la universidad.

El Sistema Nacional de Acreditación (SNA), tiene como objetivo garantizar que las instituciones cumplan los más altos estándares y parámetros de calidad, entendiendo la acreditación como: «el acto por el cual el Estado adopta y hace público el reconocimiento que los pares académicos hacen de la comprobación que efectúa una institución sobre la calidad de sus programas académicos»9. Es así como la acreditación debe generar procesos de evaluación y autoevaluación de manera continua, que permitan llevar las propuestas que se desarrollan a la calidad educativa.

En la actualidad el concepto de calidad educativa se ha reconocido como una expresión común y permanente en este ámbito para referenciar los procesos de transformación, eficacia y accesibilidad relacionando con el producto o servicio que pretenden alcanzar, reconociendo como principales indicadores de la calidad la satisfacción de la comunidad y el impacto social de la educación alcanzada. Sin embargo, es claro que la educación no puede reconocerse únicamente como un producto, sino como un servicio que se presta en búsqueda del crecimiento personal y en este caso profesional, es así como en la presente propuesta se comprende la calidad educativa no como un acto meramente administrativo, sino y sobre todo como un proceso que permite la construcción de servicio, solución de problemáticas sociales y reconocimientos de la persona, en este sentido Imbernon:

Reconoce que la calidad educativa no está únicamente en el contenido de cosas que se han de aprender, sino en la interactividad del proceso, la dinámica del grupo, la solidaridad entre ellos, el respeto a los demás, el uso de las actividades que propician aprendizajes relevantes, el estilo del profesorado (…) y en la capacidad de formar ciudadanos y ciudadanas que participan democráticamente en el progreso de la humanidad10.

De otro lado, se hace necesario comprender que la calidad no es una meta por alcanzar ni mucho menos un concepto estático, sino un trayecto que construye y que a su vez conduce al perfeccionamiento; la Universidad de San Buenaventura (USB) la comprende «como una estructura que facilita la comprensión y sinergia de los procesos académicos en la sede y seccionales»11. En este sentido, la calidad educativa debe llevar a alcanzar estándares superiores de desarrollo desde distintos ámbitos investigativos, filosóficos, metodológicos y humanos, permitiendo en este último el potenciamiento de valores, autoestima e igualdad, logrando a su vez educación sin exclusión, teniendo en cuenta a la comunidad como un gran potencial para alcanzar logros y trasformaciones sociales.

Es de gran importancia, mencionar la acreditación como un eje central de la investigación al ser el proceso que permite a la USB Bogotá ser reconocida por ofrecer un servicio educativo de alta calidad. Las Instituciones de Educación Superior (IES) al igual que los actores académicos que la componen deben conocer los lineamientos establecidos por el MEN para alcanzar la acreditación. En palabras del Consejo Nacional de Educación Superior (CESU):

El Consejo Nacional de Acreditación, de acuerdo con las políticas de Ley, las definidas por el Consejo Nacional de Educación Superior -CESU- y el Código de buenas Prácticas adoptado por el CNA, preside y organiza el proceso de acreditación de modo que, una vez realizada la evaluación correspondiente, puede reconocer la calidad de programas o instituciones y presenta su concepto al Ministerio de Educación Nacional sobre la pertinencia de emitir el correspondiente acto formal de acreditación12.

Lo anterior quiere decir, que las IES deben realizar dentro sus proyectos educativos un plan de autoevaluación con miras a alcanzar la acreditación, esto, con el objetivo de garantizar un servicio de calidad y de mantener un reconocimiento educativo. No obstante, la USB sede Bogotá ha implementado y llevado a cabo de manera autónoma en su quehacer los procesos de autoevaluación institucional con el fin de que el MEN los verifique, los avale y les permita continuar con la acreditación de sus diferentes programas académicos. Para ello, mantiene una evaluación interna de manera permanente en pro de que sus programas respondan a las necesidades, intereses y satisfacción que demanda la sociedad para garantizar una educación de calidad.

De igual manera, el CNA menciona que «la acreditación tiene un papel estratégico dentro de la política orientada a promover el mejoramiento del sistema de educación superior»13. Es decir, la educación superior está reglamentada por diferentes políticas nacionales que vigilan los procesos institucionales para que la población colombiana reciba un servicio de calidad y que, a su vez, responda a las necesidades demandadas por la nueva sociedad. De esta manera, se lleva a cabo este proyecto con el fin de analizar la participación de los actores académicos de la USB sede Bogotá con fines de acreditación.

3. Autoevaluación

Entendiendo que la propuesta de investigación pretender analizar el reconocimiento y los aportes del pensamiento franciscano en los procesos de autoevaluación institucional de la Universidad de San Buenaventura Bogotá, se hace necesario reconocer como se llevaron a cabo los ejercicios de autoevaluación institucional para identificar elementos positivos y por mejorar en las acciones académicas y administrativa en la universidad desde el desarrollo de las funciones sustantivas.

El Ministerio de Educación Nacional (MEN) define la autoevaluación como «un instrumento para el mejoramiento que permite obtener información válida y confiable sobre las consecuencias de acciones específicas, para así optimizar los esfuerzos14». De este modo la autoevaluación es reconocida como una herramienta que permite conocer el propio desempeño, bien sea en el rol de estudiantes, maestros, directivos e instituciones en general, con el objetivo de trazar metas y acciones que permitan el mejoramiento de la educación permanentemente. Es así como la autoevaluación se entiende como el:

Estudio que se lleva a cabo internamente en cada institución o programa académico partiendo de los lineamientos de acreditación establecidos por el CNA, permitiendo la formulación y el desarrollo de acciones para mejorar la calidad de los procesos institucionales o de los programas académicos15.

Por lo anterior, la autoevaluación debe ser asumida como un compromiso riguroso, autónomo y pertinente que lleve al mejoramiento continuo de las acciones desarrolladas, en este caso en la institución desde su misión de formar profesionales íntegros y de calidad, generando estrategias que conduzcan al perfeccionamiento de la labor educativa. Así, la autoevaluación aviva una postura crítica movilizada desde la reflexión de la práctica y las acciones, valorando la responsabilidad, autonomía e iniciativa.

Proantioquia - Fundación para el desarrollo citando al MEN, menciona el concepto de autoevaluación institucional de la siguiente manera:

Es una acción colectiva, situada, estructurada, planificada, participativa y deliberativa, que debe ser guiada por información fidedigna, interna y externa de la institución, y que se presenta como un proceso permanente que tiene en el seguimiento y la evaluación constante del plan de mejoramiento, y del plan de acción, su ruta crítica16.

Partiendo de lo anterior, se puede asociar la gran importancia que tiene la autoevaluación en pro de los avances de la sociedad puesto que los aportes no solo impactan los procesos educativos, sino que son transversales e integrales, lo que posibilita el progreso de cada institución educativa a través de un continuo y constante mejoramiento de sus planes de acción brindando a la sociedad un servicio de calidad.

Del mismo modo, se entiende que «La evaluación institucional: se refiere a aquella que se toma como focos evaluativos o centros de atención a las funciones que la institución debe cumplir en el caso de las universidades a la investigación, la docencia y la extensión»17. Partiendo de esta postura, se puede ver el proceso evaluativo referente a la institución como un filtro en el cual se lleva un control de los objetivos propuestos, los alcanzados y los que no; por tal razón, desde esta postura es viable comprender que la autoevaluación institucional es un proceso que abarca e integra los mecanismos de acción y participación, desde todos los servicios académicos e institucionales con el fin de mejorar continuamente para ofrecer una educación que sea de calidad.

4. Diseño metodológico desde la fenomenología hermenéutica de Van Manen

El ejercicio fue de tipo cualitativo, entendiendo éste desde la perspectiva de Sampieri como aquel que determina un fenómeno o sujeto de estudio para explorar a profundidad sus vivencias de manera que los actores responsables de la investigación se encuentren inmersos en dichas actividades diarias del fenómeno de estudio18. Por lo tanto, teniendo en cuenta el enfoque y la metodología de investigación, se buscó con este ejercicio la comprensión del fenómeno en el contexto institucional desde la apropiación que tiene la comunidad académica sobre el pensamiento franciscano en los procesos de acreditación.

Esta investigación se orientó hacia la descripción e interpretación de las estructuras esenciales de la experiencia vivida en el proceso de acreditación institucional de la USB, así como el reconocimiento, significado e importancia de esta experiencia desde el análisis de los informes de autoevaluación y el informe final de acreditación institucional, con el fin de identificar el influjo del pensamiento franciscano en dichos procesos. Para ello se toma como diseño metodológico de investigación la fenomenología hermenéutica vista desde la perspectiva de Van Manen, el cual plantea que:

La fenomenología hermenéutica es un método de reflexión abstemia sobre las estructuras básicas de la experiencia vivida de la existencia humana. El término método se refiere al camino o actitud para aproximarse a un fenómeno. Abstemia significa que reflexionar sobre la experiencia tiene como fin abstenerse de intoxicaciones provistas por teorías, polémicas, supuestos y emociones. Hermenéutica significa que la reflexión sobre la vivencia debe regirse por un lenguaje discursivo y por dispositivos interpretativos sensibles que hacen posible e inteligible el análisis, la explicación y la descripción propios de la fenomenología. La experiencia vivida significa que la fenomenología reflexiona sobre la vida pre-reflexiva o pre-predicativa de la existencia humana tal y como se vive19.

De acuerdo con lo anterior, el método implementado por los investigadores para acercarse al fenómeno, estuvo dado en un primer momento, desde la revisión documental en cuanto a los informes finales de autoevaluación y acreditación, así como documentos institucionales (PEB, Modelo Pedagógico, entre otros) lo cual permitió tener una mirada general de los resultados de estos procesos y cómo desde allí el pensamiento franciscano permea las acciones al interior de la universidad, procurando que este ejercicio no estuviera impregnado por teorías, prejuicios o juicos de valor propios. En un segundo momento, los investigadores con el propósito de conocer de primera mano el fenómeno objeto de estudio, generaron una serie de instrumentos que permitieran la recolección de datos y el acercamiento directo con la comunidad académica de la sede Bogotá, entre dichos instrumentos se emplearon las entrevistas semiestructuradas y los grupos focales; éstos posibilitaron reconocer las voces de los diferentes actores que desarrollan sus actividades al interior de la institución (directivos, docentes y estudiantes) frente las maneras de comprender el pensamiento franciscano en los procesos de autoevaluación y acreditación institucional. En tercer lugar, desde un ejercicio hermenéutico los investigadores hicieron una interpretación reflexiva de dichas experiencias, sentires y vivencias de los actores, con el propósito de identificar cuáles son sus percepciones y comprensiones frente a los procesos de acreditación y autoevaluación y cómo se articulan éstos con el pensamiento franciscano siendo éste un eje transversal que debiera dinamizar todas las acciones que se generan al interior de la institución.

A partir de lo dicho, este método posibilitó una aproximación coherente y rigurosa al estudio de las dimensiones éticas, relacionales y prácticas de la experiencia pedagógica cotidiana difícilmente asequibles mediante los usuales enfoques de investigación. Para este autor, «la fenomenología es un método más de preguntar que de responder, darse cuenta de que las intuiciones vienen a nosotros en el modo de meditar, preguntar reflexivo y obsesionarse con las fuentes y los significados del sentido vivido»20. No obstante, el método fenomenológico no puede establecerse como un libro de reglas, un esquema interpretativo, un conjunto de pasos o un conjunto sistemático de procedimientos. El objetivo final de una fenomenología de la práctica es modesto: fomentar la reflexión y la destreza en la práctica de nuestras profesiones y de nuestra vida cotidiana21. En este caso, identificar la incidencia del pensamiento franciscano en los procesos de acreditación institucional de la USB Bogotá 2017. Para conseguir dicho objetivo se presenta a continuación la ruta que se siguió.

Tabla 1 Fases Modelo de Fenomenología Hermenéutica Elaborado por investigadores. 

Fase Contenido Actividades
1 Descripción Recolección de la experiencia vivida directamente Selección de las bases de datos adecuadas para la revisión documental. Revisión de documentos institucionales PEB. Modelo pedagógico. Revisión de lineamientos de acreditación institucional.
2 Interpretación Recolección de la experiencia vivida indirectamente Revisión de informes de autoevaluación y CNA. Entrevistas semi-estructuradas. Grupos focales.
3 Descripción + Interpretación Escribir y reflexionar acerca de la experiencia vivida. Codificación de datos ayudado por la herramienta ATLASTI. Interpretación de la información con el objeto de hacer un acercamiento fenomenológico y hermenéutico más allá de los datos recolectados. Análisis y triangulación de la información, en donde se tiene en cuenta la teoría, la realidad objeto de estudio y el rol del investigador. Construcción del informe final de investigación.

5. El sistema de autoevaluación institucional en las voces de la comunidad académica Bonaventuriana en la sede Bogotá

Con este apartado, se busca presentar la población que participó en el estudio, así como algunas de sus voces las cuales fueron fundamentales para la interpretación y análisis.

Para el caso, es importante aclarar que, aunque la acreditación recibida en el año 2017 fue multicampus, el estudio se concentró exclusivamente en la sede Bogotá. Es así como la población seleccionada para el estudio perteneció a las facultades y unidades de apoyo, de la Universidad de San Buenaventura de esta sede; desde allí se tuvo la posibilidad de realizar el ejercicio investigativo con directivos, docentes y estudiantes, generando una reflexión de las situaciones de la vida cotidiana de manera libre, sin tener que regirse a reglas metodológicas convencionales, realizando un ejercicio de indagación desde la vivencia de los actores tal como lo propone la fenomenología hermenéutica.

Con relación a lo anterior, el primer proceso que se realizó fue sistematizar las voces recogidas por medio de las entrevistas semiestructuras aplicadas a 11 Directivos, 30 Docentes y 40 Estudiantes de las cuatro facultades de la universidad y las unidades de apoyo. Esta sistematización, permitió iniciar un proceso de codificación con los aspectos más importantes a la luz de las categorías de la investigación y a partir de ello se crearon redes que permitieron categorizar los términos más recurrentes en el discurso obtenido del muestreo e iniciar el análisis para la respectiva teorización logrando así, interpretar las convergencias y divergencias entre lo documental y el discurso, con relación a los aportes del pensamiento franciscano en los procesos de acreditación institucional.

Con base en lo anterior, a continuación, se responderá a cada uno de los objetivos planteados en la investigación, para luego llegar a las conclusiones que arrojó la misma.

Objetivo específico 1

Reconocer, desde lo documental, cómo se conciben los procesos de autoevaluación con fines de acreditación institucional.

La Universidad de San Buenaventura, Sede Bogotá obtuvo la acreditación en alta calidad en el año 2017, en esta entrega se hacen evidentes los primeros resultados obtenidos por la universidad, los cuales, según la viceministra de educación se traducen en:

  • La convicción de la universidad en su Misión.

  • El respeto por su actuación académica, lo que se hace.

  • La calidad de los egresados.

Los pilares sobre los cuales se construyó la acreditación de la Universidad San Buenaventura sede Bogotá son: la tradición institucional, el número de profesores, la cualificación de la planta docente, los semilleros de investigación y las instalaciones físicas, estos son los logros consolidados durante el proceso de acreditación, sin embargo, tambiénse remiten como un logro la identificación de los aspectos en los cuales se debe trabajar para lograr unos mejores procesos:

  • Buscar mecanismos de afianzamiento de los procesos misionales.

  • Establecer un mecanismo general del reglamento estudiantil que permita recocer la diversidad regional, dado entre otros factores a que la universidad posee sedes en varias ciudades.

  • Definir estrategias que permitan que los tiempos previstos para la graduación sean reales.

  • Armonizar los procesos de aseguramiento de calidad.

  • Definición de la articulación, los vínculos y comunicación entre sedes y seccionales.

  • Adecuaciones de infraestructura de acceso para personas con movilidad reducida.

  • Se debe anotar que en el año 2014 la universidad dio apertura al Diplomado Gestión de los Procesos de Autoevaluación con Fines de Acreditación Institucional Multicampus (AIM), en un esfuerzo por formar directivos de la misma universidad en los procesos de autoevaluación con miras a la acreditación institucional, como lo expresa su objetivo general:

Fortalecer al interior de la Universidad de San Buenaventura, la cultura de la autoevaluación, de la autorregulación y del mejoramiento continuo, a partir de la comprensión del sistema de aseguramiento de calidad a nivel nacional e internacional, y de la gestión de los procesos de autoevaluación con fines de AIM22. La Universidad de San Buenaventura en su calidad de IES aporta a la sociedad desde su filosofía institucional a la competitividad y excelencia, para formar profesionales con valor humano, creando un sello distintivo respecto a las diferentes IES, transmitir principios y valores, formar conocimiento desde el desarrollo integral y aportar a la sociedad un mejor entorno. De esta manera, se forma un ser integral desde el ser universitario, católico y ser franciscano para buscar el liderazgo en el desarrollo humano, la excelencia, la verdad, crecimiento intelectual y desde los valores franciscanos destacados en la USB.

Objetivo específico 2

Describir los discursos que subyacen sobre el sistema de autoevaluación institucional, con los diferentes agentes de la comunidad académica Bonaventuriana, desde la sede.

Teniendo en cuenta el objetivo planteado, a continuación, se presentarán las voces de los distintos actores de la comunidad académica, donde se reconocerán los discursos desde la perspectiva de la autoevaluación institucional que cada uno de ellos tiene.

- Actores académicos estudiantes

Al aplicar las entrevistas a los actores académicos de la USB Bogotá, acerca de su saber frente a la autoevaluación institucional se logró encontrar que, si bien algunos estudiantes tienen una noción básica sobre el concepto de autoevaluación institucional, otros no manifestaron mayor claridad.

Al transcribir las entrevistas se logró identificar que la autoevaluación institucional para la mayoría de los estudiantes está definida como un proceso en el cual la institución reconoce sus aspectos positivos y aquellos que se deben mejorar. A continuación, se exponen las voces de algunos actores que permiten identificar los discursos sobre el sistema de autoevaluación institucional:

La autoevaluación es un proceso por el cual una institución o empresa, etc., hace como un reconocimiento de los factores en los que tiene posibles falencias o también en los que no las tiene para mejorar día con día23.

Para mí la autoevaluación institucional es como un análisis crítico que se hace la universidad, para evaluar y reflexionar sobre lo que debe mejorar24.

Es mirar ciertos puntos en las actividades que uno o una institución ejerce y mirar en qué se está fallando25.

Se puede distinguir también que algunos de los estudiantes entrevistados realizaron aportes de cómo la autoevaluación institucional logra mirar, medir, revisar y analizar las fortalezas y oportunidades de mejora desde todos los campos de acción.

Por último, se puede decir que para los estudiantes la autoevaluación institucional es un proceso crítico que le permite a la universidad reconocer sus fortalezas y aspectos por mejorar con el fin de implementar estrategias que generen y garanticen servicios educativos de calidad.

- Actores académicos docentes

Una vez aplicado el instrumento de recolección de datos con los docentes de la USB Bogotá, se procedió a analizar las respuestas con el fin de recoger su percepción en la cual se evidenció gran conocimiento del papel que desempeña la autoevaluación en los procesos llevados a cabo en la institución.

Al analizar los aportes dados por los docentes desde esta categoría, sobre la cual, en la mayoría de los casos coinciden al afirmar que es un proceso tanto académico como administrativo que permite medir y cuantificar el desempeño académico e institucional siendo objetiva, reflexiva y constante, permitiendo conocer y aprender acerca de los aspectos de la institución otorgando así un sello de calidad a la misma. A continuación, se presentará la voz de dos actores:

Es un proceso de análisis y toma de decisiones que se lleva a cabo con la comunidad académico-administrativa de manera autónoma y colectiva, con el objeto de examinar y valorar de qué manera la Universidad o los programas van progresando hacia las metas fijadas por ella misma en el cumplimiento de los objetivos propuestos en el PEB; y de qué forma puede capitalizar las fortalezas encontradas o enfrentar las debilidades para cumplir con la misión acordada por la comunidad académica26.

Es la forma en que revisamos y analizamos qué estamos haciendo bien, mal o qué no estamos haciendo respecto de nuestras funciones sustantiva27.

Según lo dicho por los docentes, este proceso permite analizar crítica y objetivamente a la institución en busca de mejorar continuamente las acciones que ésta emprende. La gran mayoría de los entrevistados coinciden en que la autoevaluación es fundamental para que la universidad se encamine en la ruta de la calidad que la proyectará en el medio académico local, nacional e internacional.

- Actores académicos directivos

Los resultados de las entrevistas realizadas a los actores académicos directivos de la USB Bogotá, permiten ver la comprensión que ellos hacen frente a la autoevaluación institucional como el ejercicio, procedimiento o mecanismo que conducen a revisar los procedimientos establecidos en la institución de forma reflexiva y cuyo objetivo es seguir optimizando lo que se está haciendo de una manera correcta y a su vez mejorar lo que está presentando dificultad. A continuación, se presentarán las respuestas dadas por los actores académicos administrativos:

Es el ejercicio de toma de conciencia, es el ejercicio de revisión, es el ejercicio de autoconocimiento y de medición de lo que se ha hecho, es el ejercicio de verificación de los procesos de calidad, entendiendo como el cumplimento de meta que se ha trazado28. Es la oportunidad que tiene la institución de observar si su propuesta pedagógica está siendo coherente con lo que plantean los documentos institucionales y, de no ser así, encaminarse hacia una mejora continua con el propósito de ser coherentes con lo que proponen dichos textos29.

Analizando las respuestas de los directivos entrevistados, fue posible identificar que el proceso de autoevaluación institucional es un ejercicio que los moviliza de manera constante a emprender acciones para el buen cumplimiento de las distintas funciones que realizan (funciones sustantivas) y políticas establecidas en la educación superior.

Es notorio que existe mayor conocimiento por parte de los docentes y directivos sobre el proceso de autoevaluación institucional al mencionar que está relacionado con los lineamientos que son exigidos desde el marco legal a las instituciones educativas, en coherencia con lo anterior se señala que la autoevaluación institucional «es una acción colectiva, situada, estructurada, planifica, participativa y deliberativa, que debe ser guiada por información fidedigna interna y externa de la institución»30.

Objetivo específico 3

Interpretar las convergencias y divergencias entre lo documental y el discurso, con relación a los aportes del pensamiento franciscano en los procesos de acreditación institucional

6. Aportes del pensamiento franciscano en los procesos de Acreditación Institucional

Para dar respuesta a este objetivo específico fue necesario realizar un análisis desde los documentos institucionales y los lineamientos nacionales que rigen los procesos de acreditación institucional. En cuanto a los documentos institucionales se hizo una revisión del PEB, el Modelo Pedagógico y el reglamento estudiantil y desde los documentos nacionales, se analizaron los Lineamientos de Acreditación propuestos por el CNA y el Ministerio de Educación Nacional. A partir de este análisis documental surgen los siguientes resultados con relación a los aportes del pensamiento franciscano en los procesos de acreditación institucional.

Dichos procesos aportan a la evaluación, autoevaluación y mejoramiento continuo de la universidad, se trata de institucionalizar la mejora y revisión continua en función de los parámetros y estándares exigidos por una entidad certificadora, lo cual es una garantía adicional para los clientes internos y externos de las Instituciones de Educación Superior (IES).

La filosofía institucional se relaciona directamente con los procesos misionales de la universidad, razón por la cual, mucho de los aportes y procesos que terminan por contribuir a la certificación se encuentran en función de la aplicación de dicha filosofía, es la impronta de la institución, hace parte de la planeación estratégica y por tanto incide directamente en los procesos de autoevaluación destinados a colocar a punto para surtir el proceso de acreditación.

Se evidencia como existe un estrecho lazo conductor entre el pensamiento franciscano y los procesos de planeación estratégica, entre los cuales se definen aspectos de carácter misional que se enfocan en el “hacer” de la universidad respecto al servicio educativo que presta. Para reconocer las convergencias y divergencias respecto a la incidencia del pensamiento franciscano en los procesos de acreditación institucional, además del análisis documental realizado, también fue necesario aplicar una serie de entrevistas que permitieron reconocer las voces de los actores de la comunidad académica.

Actores académicos estudiantes

Durante la realización de las entrevistas a los estudiantes que participaron del estudio, se logró identificar, en primera instancia, que reconocen el pensamiento franciscano desde un sentido humanista, como una forma de relacionarse con la naturaleza, los valores y el hacer el bien hacia los demás; si bien, los estudiantes esbozan algunas características pertenecientes al pensamiento franciscano, tienen nociones elementales desde la parte académica, científica e intelectual que esta corriente filosófica ha construido y cimentado en su larga historia. Por otra parte, al momento de articular dicho pensamiento con los procesos de autoevaluación y acreditación de alta calidad, les es difícil encontrar punto de encuentro entre estos elementos; no obstante, se resalta que un porcentaje de los estudiantes relaciona la parte humanista y naturalista del pensamiento franciscano en la obtención de la acreditación de alta calidad, puesto que estos factores son diferenciadores ante otras instituciones de educación superior.

Actores académicos docentes

Se evidencia en los docentes un alto grado de conocimiento sobre el pensamiento franciscano, reconocen en éste el sentido humano de San Francisco de Asís, su enfoque hacia la conservación de todas las especies que habitan la tierra y, además, reconocen en este no sólo el sentido ético de lo humano y de los seres vivos, sino también el aporte que ha dejado en la pedagogía y en la educación. A partir de esta apropiación acerca del pensamiento franciscano se deriva la relación que hacen entre éste y los procesos de autoevaluación y acreditación institucional, sabiendo que permiten transversar y permear todas las acciones que se generan dentro de la institución.

Sin embargo, los docentes no desconocen que la autoevaluación y acreditación institucional también son procesos que deben responder con los estándares ya establecidos y con las directrices del CNA, que según las voces de algunos de los entrevistados son solo parámetros que hay que cumplir para recibir un título, sin adentrarse en la verdadera problemática social, como la mediocridad de la educación actual y los altos índices de violencia por no enseñar la comprensión, el respeto y la tolerancia.

Todo lo anterior muestra que el pensamiento franciscano se vive en la universidad desde diferentes perspectivas, preocupándose por ofrecer una educación de calidad; sin embargo, un porcentaje de los maestros consideran que este pensamiento se invisibiliza debido a una serie de procedimientos administrativos burocráticos que responden a parámetros empresariales, olvidando que el fundamento de todos estos se encuentra en las personas que hacen vida las dinámicas internas de la institución.

Actores académicos directivos

Se refleja en las respuestas que el pensamiento franciscano está interiorizado de una manera profunda y consiente, pues según estos actores no se podría apartar esta filosofía de los procesos que se desarrollan al interior de la institución. Los entrevistados reconocen que la experiencia vivida por San Francisco de Asís es fundamental para ser aplicada en cada una de las acciones que se realizan desde las funciones sustantivas, especialmente la de proyección social, al ser ésta la que lleva a la institución a acercarse a los diferentes contextos.

Las entrevistas dejan entrever que el pensamiento franciscano es un elemento clave para la obtención de la acreditación de alta calidad, puesto que permea las funciones sustantivas desarrolladas en la universidad. En efecto, se ve claramente que el pensamiento franciscano es un elemento diferenciador respecto a otras instituciones de educación superior, permitiéndole alcanzar altos estándares de calidad.

Conclusiones

De los datos que arrojaron los análisis de dichas entrevistas, se puede determinar que se hace evidente la influencia del pensamiento franciscano en todos los ámbitos de la universidad; asimismo en los estudiantes, docentes y directivos, la apropiación de argumentos en función del pensamiento franciscano es permanente, sin embargo, en el caso de los actores académicos estudiantes se percibe más una tendencia dada en función del ambiente, la ecología, el respeto por los demás y la fraternidad, no se reconoce con claridad cuáles son los aportes de este pensamiento a los diferentes procesos que se llevan a cabo dentro de la universidad.

El conocimiento de las funciones sustantivas en los estudiantes desde su denominación es prácticamente inexistente, sin embargo, implícito en su discurso se evidencia que tienen cierto grado de conocimiento y han participado de una u otra manera en las distintas acciones que se realizan desde cada una. En algunos casos, se presenta dificultad a la hora de relacionar el pensamiento franciscano con las actividades que desarrolla la universidad desde la docencia, la investigación, el bienestar institucional y la proyección social. Los procesos de autoevaluación institucional son en su gran mayoría desconocidos por los estudiantes, lo que los lleva a participar de los mismos de una manera inconsciente, mecánica y acrítica.

Asimismo, los estudiantes, manifestaron que conocen poco del tema debido a que, en su gran mayoría, no se sienten involucrados en estos procesos al argumentar que por obligación o compromiso resuelven encuestas y evaluaciones virtuales que les envían desde distintas instancias de la universidad. Aun así, no conocen otra forma de participación y mucho menos los resultados de dichos instrumentos, ni su impacto en los procesos institucionales, lo que lleva a que la institución piense en nuevas estrategias que fomenten la participación consiente y activa por parte de estos actores.

Resulta oportuno resaltar que, desde la función sustantiva de docencia, los estudiantes perciben en el quehacer de los maestros elementos de la pedagogía franciscana que favorecen una formación integral desde la dimensión humana e intelectual y los prepara de manera íntegra para aportar a la construcción de la sociedad.

Por otro lado, al analizar el discurso de los estudiantes, docentes y directivos que participaron del estudio, en relación con la apropiación y concepción que tienen sobre pensamiento franciscano y su relación con los procesos de acreditación institucional, se establecen las convergencias y divergencias concluyendo lo siguiente:

Dentro de las convergencias se resalta que la comunidad educativa reconoce el pensamiento franciscano desde el amor por la naturaleza, la solidaridad social y la fraternidad; lo que en definitiva se materializa en la pedagogía franciscana visibilizando varios elementos de ésta, como la formación de profesionales íntegros con la capacidad de aportar desde su saber a la humanización, construcción y la transformación de la sociedad.

Respecto a las divergencias se halla que los estudiantes se les dificulta relacionar los procesos de acreditación institucional con el pensamiento franciscano y excluyen de algún modo los aportes de éste a la ciencia y la educación, más específicamente los aportes que genera en sus carreras profesionales; también desconocen el término de funciones sustantivas y las actividades que se desarrollan especialmente desde proyección social.

Ahora bien, desde la mirada de los docentes frente a lo que aporta la autoevaluación institucional a los procesos de acreditación, muchos de ellos manifestaron que ésta les permite mejorar y ampliar su mirada sobre la incidencia en las dinámicas que se adelantan al interior de la institución. De igual manera, exponen que la autoevaluación es un mecanismo que reporta un panorama sobre las necesidades de la universidad y sus características para así construir los planes de mejoramiento que conllevan al logro de la calidad en los servicios que se prestan y procesos que se desarrollan sin perder el sello distintivo que la caracteriza como una institución católica y franciscana. No obstante, un grupo significativo de los docentes entrevistados considera que debido a los lineamientos y estándares que exigen el CNA y MEN para obtener la acreditación institucional de alta calidad, se cae en procesos burocráticos y exclusivamente administrativos, desdibujando la identidad institucional que debe estar enmarcada desde el pensamiento franciscano, vale la pena resaltar las voces de los docentes frente a esta crítica:

La educación de calidad es pensar exactamente lo que los estudiantes necesitan para ser buenos profesionales y buenos seres humanos, el CNA no se está preocupando por eso, entonces, yo digo simplemente es por tener un título, pero eso no dice nada de una educación de calidad, porque la universidad ya brinda educación de calidad, simplemente es papelería, solo es un proceso desgastante y nos desvía de nuestro verdadero objetivo, que es enseñar; lo que hace el CNA es burocracia31.

Pues es que los procesos de acreditación institucional responden… Es que puede llegar a hacer un poco incoherente porque a veces lo que se pide en procesos de acreditación son cuestiones de calidad en términos empresariales, en ultimas, entonces, en ocasiones el pensamiento franciscano no va muy de la mano con eso, creería yo32.

Frente a lo dicho por los docentes, vale la pena retomar la voz de Lugo quien hace una crítica a la forma en la que las instituciones educativas franciscanas están asumiendo la educación, a saber:

Sin falsas exageraciones, creo que estamos frente al fenómeno creciente de la des- institucionalización el cual, coloca a todo formador y a todo educador, en una situación muy compleja pues esta acelerada des-institucionalización puede llevar a los educadores franciscanos y a nuestras instituciones educativas en forma quizás inconsciente, a una peligrosa des-franciscanización de nuestros caminos educativos pues así como hoy tomamos café descafeinado y leche deslactosada podemos estar manejando, en nuestras instituciones educativas franciscanas una educación des- franciscanizada, impartiendo una pedagogía sin sabor a Francisco, a Clara, a Buenaventura y a tantos otros inspiradores del ideal educativo franciscano33.

Desde la mirada de los directivos frente a los procesos de autoevaluación y acreditación institucional, se evidencia que estos actores académicos participan activamente a través las MECAS (Mesas de Calidad) estrategia que desarrolla la universidad para generar aportes de cada actor desde sus conocimientos personales y profesionales para lograr que desde allí se cumpla con los planes que propone la universidad y, de esta manera, asegurar que se mejore en cada uno de los aspectos a nivel institucional para poder seguir evolucionando y poder obtener la re-acreditación.

Otro rasgo que vale la pena resaltar es la manera en que los actores académicos participan en los procesos autoevaluación y acreditación institucional. En este aspecto se puede vislumbrar que los estudiantes aportan sus opiniones mediante las encuestas y la evaluación docente, las cuales se hacen de forma virtual a través del correo institucional o por medio de la plataforma Asís durante cada semestre. Por su parte, los docentes participan en las MECAS, realizan la autoevaluación virtual y hacen la realimentación de sus procesos. Los actores académicos directivos juegan un papel muy importante en la ejecución de dichos procesos puesto que canalizan la información de cada una de sus facultades y, al comunicar estas opiniones en los comités de decanos con la participación de la Vicerrectoría Académica, construyen documentos, basados en los resultados de la autoevaluación institucional en busca de aportes que incidan en los planes de mejoramiento.

Finalmente, los directivos son conscientes que, en la USB Bogotá, los procesos de autoevaluación son permanentes y deben ser siempre de esta manera, debido a que éstos no sólo son un requisito para obtener la re-acreditación, sino más bien una oportunidad para fortalecerse frente a las necesidades propias y a las exigencias que la sociedad demanda.

Todo lo anteriormente expuesto, logra responder a la pregunta planteada al inicio de la investigación. De los análisis hechos se puede identificar la forma en que cada uno de los actores académicos participan en dichos procesos y cómo estos contribuyen a la acreditación institucional, por lo cual, se obtiene que los estudiantes son la razón de ser de las acciones que se desarrollan al interior de la universidad a pesar de que no estén completamente empoderados de su rol y, en su mayoría, no estén interesados, lo que implica que simplemente se preocupan por conocer los resultados para poder recibir un título académico de la universidad en el que se constate que es una institución acreditada.

Con base en lo anterior se reconoce la importancia de realizar investigaciones relacionadas con este tema de manera que estos procesos tengan mayor impacto en la comunidad educativa y no queden restringidos a una parte de la población como son los docentes y directivos, sino que todos logren tener una participación equitativa y una comprensión más clara y consiente del pensamiento franciscano en todos los procesos que subyacen, para no caer en el riesgo de perder el sello distintivo que nos caracteriza como institución:

Convirtiéndonos en educadores - ingenieros que calculamos estructuras normativas para la educación, o en educadores - economistas felices dimensionando el negocio educativo o también en rectores - arquitectos que construyen y remodelan edificios, interesados más en el cemento que en el talento, olvidando ser verdaderos educadores - constructores del edificio de la persona con nuevos derroteros y nuevas culturas educativas con sabor franciscano34.

Bibliografía

Alzate, Nicolás Alberto. «La Paideia Franciscana como experiencia y aporte epistemológico a una pedagogía crítica emancipadora». El Ágora USB Revista de Ciencias Sociales 1, Vol. 18 (2018): 212-224. [ Links ]

Consejo Nacional de Acreditación. Lineamientos para la Acreditación Institucional (2018). Consultada en julio 15, 2019. https://www.cna.gov.co/1741/articles186359_Lin_Ins_2014.pdfLinks ]

Gialdi, Silvestre. «Fundamentos filosóficos franciscanos de justicia, paz y ecología» Cuadernos Franciscanos 96 (1991). Consultada en julio 15, 2019. http://www.franciscanos.net/teolespir/ecologiagialdi.htmLinks ]

Hernández Sampieri, Roberto; Fernández Callado, Carlos y Baptista Lucio, Pilar. Metodología de la Investigación. México: Mcgraw-Hill Interamericana Editores, 2010. [ Links ]

Iafrancesco, Giovanni Marcello. Acreditación de los centros educativos: autoevaluación y autorregulación. Bogotá: Cooperativa Editorial Magisterio, 2004. [ Links ]

Imbernon, Francisco. Calidad de la enseñanza y formación en el profesorado. Barcelona: Octaedro Editorial, 2014. [ Links ]

Lugo, Héctor Eduardo. «El pensamiento franciscano y la educación». Conferencia presentada en el Congreso internacional de educadores de colegios franciscanos: vigencia y prospectiva de la educación franciscana en América latina, Cali: Universidad de San Buenaventura. 2001. [ Links ]

Merino, Antonio. Humanismo franciscano, franciscanismo y mundo actual. Madrid: Ediciones cristiandad, 1982. [ Links ]

Ministerio de Educación Nacional. «La evaluación», Al tablero 38 (enero-marzo 2006). Consultada en julio 15, 2019. https://www.mineducacion.gov.co/1621/article- 107321.htmlLinks ]

Ministerio de Educación Nacional. Sistema nacional de información de la educación superior - SNIES, Glosario. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional, 2019. Consultada en julio 15, 2019. https://www.mineducacion.gov.co/sistemasdeinformacion/1735/articles-213912_glosario.pdfLinks ]

Ministerio de Educación Nacional, Consejo Nacional de Educación Superior, CESU, 2018. Consultada en julio 15, 2019. https://www.mineducacion.gov.co/1621/article- 136460.htmlLinks ]

Patiño, William Arley. «La Propuesta de Francisco de Asís, como alternativa de vida ante la crisis de sentido del hoy». El Ágora USB Revista de Ciencias Sociales 2, Vol.15 (2015). Consultada en julio 15, 2019. http://revistas.usb.edu.co/index.php/Agora/article/view/1630/1440Links ]

Presidencia de la República. Decreto 2904 de 31 de diciembre de 1994. Consultada en julio 15, 2019. https://www.cna.gov.co/1741/articles- 186370_Marco_Normativo_CNA_2016.pdfLinks ]

Proantioquia - Fundación para el desarrollo. «La evaluación institucional: retos y oportunidades». Revista Magisterio (2017). Consultada en julio 15, 2019. https://www.magisterio.com.co/articulo/la-evaluacion-institucional-retos-y- oportunidadesLinks ]

Rivera Aya, Eliasib Naher. «Alcances y limitaciones de la acreditación en algunos programas de Educación Superior. Revista educación y desarrollo social 2, Vol. 6 (2012): 45- 64. Consultada en julio 15, 2019. https://revistas.unimilitar.edu.co/index.php/reds/article/view/760/512Links ]

San Buenaventura. Epistula de tribus quaestionibus ad magistrum innominatum. En Opere di san Bonaventura. Introduzione generale. Roma: Città Nuova, 1990. [ Links ]

Universidad Militar Nueva Granada. Sistema institucional de autoevaluación, innovación y calidad. Bogotá: UMNG 2009. Consultada en julio 15, 2019. https://repository.unimilitar.edu.co/bitstream/handle/10654/10613/sistemainstautoev aluacion2.pdf?sequence=1&isAllowed=yLinks ]

Universidad de San Buenaventura. Proyecto Educativo Bonaventuriano. Colombia Bogotá: Universidad de San Buenaventura, 2010. [ Links ]

Universidad de San Buenaventura. Informe de Autoevaluación Acreditación Institucional Multicampus. Bogotá: Universidad de San Buenaventura, 2015. [ Links ]

Van Manen, Max. Investigación educativa y experiencia vivida. Ciencia Humana para una Pedagogía de la Acción y la Sensibilidad. Barcelona: Idea Books, 2003. [ Links ]

Van Manen, Max. Fenomenología de la práctica. Popayán: Universidad del Cauca, 2016. [ Links ]

1 Antonio Merino, Humanismo franciscano franciscanismo y mundo actual (Madrid: Ediciones cristiandad, 1982), 63.

2 Universidad de San Buenaventura Colombia, Proyecto Educativo Bonaventuriano (Bogotá: Universidad de San Buenaventura, 2010), 53.

3Universidad de San Buenaventura Colombia, Proyecto Educativo Bonaventuriano, 53.

4 Silvestre Gialdi «Fundamentos filosóficos franciscanos de justicia, paz y ecología» Cuadernos Franciscanos a.25, n.96, (oct. - dic. 1991): 49, consultada en julio 15, 2019. http://www.franciscanos.net/teolespir/ecologiagialdi.htm

5 William Arley Patiño, «La Propuesta de Francisco de Asís, como alternativa de vida ante la crisis de sentido del hoy», El Ágora USB Revista de Ciencias Sociales 2, Vol. 15 (2015): 553, consultada en julio 15, 2019, http://revistas.usb.edu.co/index.php/Agora/article/view/1630/1440

6 San Buenaventura, Epistula de tribus quaestionibus ad magistrum innominatum. En Opere di san Bonaventura. Introduzione generale (Roma: Città Nuova, 1990), 29.

7 Nicolás Alberto Alzate, «La Paideia Franciscana como experiencia y aporte epistemológico a una pedagogía crítica emancipadora», El Ágora USB Revista de Ciencias Sociales 1, Vol. 18 (2018): 212-224.

8 Héctor Eduardo Lugo, «El pensamiento franciscano y la educación», Conferencia presentada en el Congreso internacional de educadores de colegios franciscanos: Vigencia y prospectiva de la educación franciscana en América latina, Cali: Universidad de San Buenaventura, 2001.

9 Presidencia de la República, Decreto 2904 de 31 de diciembre de 1994, consultada en julio 15, 2019, https://www.cna.gov.co/1741/articles-186370_Marco_Normativo_CNA_2016.pdf

10 Francisco Imbernon, Calidad de la enseñanza y formación en el profesorado (Barcelona: Octaedro Editorial, 2014), 20.

11 Universidad de San Buenaventura, Informe de Autoevaluación Acreditación Institucional Multicampus (Bogotá: Universidad de San Buenaventura, 2015), 13-56.

12 Ministerio de Educación Nacional, Consejo Nacional de Educación Superior, CESU, 2018, consultada en julio 15, 2019, https://www.mineducacion.gov.co/1621/article-136460.html

13Ministerio de Educación Nacional, Consejo Nacional de Educación Superior.

14 Ministerio de Educación Nacional, «La evaluación», Al tablero 38 (2006), consultada en julio 15, 2019, https://www.mineducacion.gov.co/1621/article-107321.html

16 Proantioquia - Fundación para el desarrollo, «La evaluación institucional: retos y oportunidades», Revista Magisterio (2017), Consultada en julio 15, 2019, https://www.magisterio.com.co/articulo/la-evaluacion- institucional-retos-y-oportunidades

17 Giovanni Marcello Iafrancesco, Acreditación de los centros educativos: autoevaluación y autorregulación (Bogotá: Cooperativa Editorial Magisterio, 2004), 19.

18 Roberto Hernández Sampieri, Carlos Fernández Callado y Pilar Baptista Lucio, Metodología de la Investigación (México: Mcgraw-Hill / Interamericana Editores, 2010), 7.

19 Max Van Manen, Fenomenología de la práctica (Popayán: Universidad del Cauca, 2016), 29.

20 Max Van Manen, Investigación educativa y experiencia vivida. Ciencia Humana para una Pedagogía de la Acción y la Sensibilidad (Barcelona: Idea Books, 2003), 30-34.

21Max Van Manen, Fenomenología de la práctica, 31-34.

22Universidad de San Buenaventura, Informe de Autoevaluación Acreditación Institucional Multicampus, 13.

23Voz estudiante entrevistado N. 1.

24Voz estudiante entrevistado N. 2.

25Voz estudiante entrevistado N. 3.

26Voz docente entrevistado N. 1.

27Voz docente entrevistado N. 2.

28Voz directivo entrevistado N. 1.

29Voz directico entrevistado N. 2.

30Proantioquia - Fundación para el desarrollo, «La evaluación institucional: retos y oportunidades».

31Voz docente entrevistado N. 3.

32Voz docente entrevistado N. 4.

33Héctor Eduardo Lugo, «El pensamiento franciscano y la educación».

34Héctor Eduardo Lugo, «El pensamiento franciscano y la educación».

* El presente artículo es producto de un ejercicio de investigación adelantado al interior de la Universidad de San Buenaventura denominado: «Reconocimiento y aportes del Pensamiento Franciscano en los procesos de autoevaluación institucional de la Universidad de San Buenaventura Bogotá», la cual se desarrolló en el primer y segundo semestre de 2018.

**Licenciado en Filosofía, Especialista y Magister en Filosofía Contemporánea. Docente investigador Universidad de San Buenaventura Sede Bogotá. Perteneciente al Grupo de Investigación Tendencias Actuales en Educación y Pedagogía TAEPE. ORCID: 0000-0002-1625-6081. Contacto: gramirez@usbbog.edu.co.

***Licenciada en Educación Preescolar, Magister en docencia. Docente investigador Universidad de San Buenaventura Sede Bogotá. Perteneciente al Grupo de Investigación Tendencias Actuales en Educación y Pedagogía TAEPE. ORCID: 0000-0002-2574-5119. Contacto: pgomez@usbbog.edu.co.

****Licenciada en Educación preescolar y básica primaria, especialista en Gerencia Educativa, Maestra en Educación y Magister en Educación. Docente investigador Universidad de San Buenaventura Sede Bogotá. Perteneciente al Grupo de Investigación Tendencias Actuales en Educación y Pedagogía TAEPE. ORCID: 0000- 0002-2442-134X. Contacto: cramirez@usbbog.edu.co.

Para citar este artículo: Ramírez Bonilla, Gerardo; Gómez Bohórquez, Pilar Tatiana y Ramírez Sánchez, Carolina. «El pensamiento franciscano en los procesos de autoevaluación institucional». Franciscanum 174, Vol. 62 (2020): 1-23.

Recibido: 09 de Octubre de 2019; Aprobado: 20 de Enero de 2020

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons