La editorial de la Revista Franciscanum en su número 180, publicada para el segundo semestre del año 2023, destaca los 10 años de Pontificado del papa Francisco. En este sentido, Francisco se convierte en el primer pontífice latinoamericano en la historia de la Iglesia, configurando desde el contexto en situación, su pensamiento y acción. Francisco proyecta un horizonte de renovación y esperanza en la vida de la Iglesia, su punto de partida se ha centrado en el llamado permanente a una iglesia en salida, asumiendo en su acción una actitud compasiva y misericordiosa hacía lo más pobres de la sociedad, de tal modo que, la acción misionera de la Iglesia, favorezca la construcción de la justicia social y sea expresión del Reino de Dios en el contexto contemporáneo, y, a su vez, se consolide una cultura del encuentro. Los aspectos hasta ahora mencionados emergen del conjunto magisterial promulgado por Francisco, en primera instancia, devela su pensamiento en las tres cartas encíclicas promulgadas hasta ahora, a saber:

De este modo, las cartas encíclicas mencionadas se articulan con las siete exhortaciones apostólicas emitidas, en ellas, ahonda aspectos de especial relevancia para la vida y acción de la Iglesia, tales como: la evangelización, la familia, la santidad de los cristianos, los jóvenes, la amazonia, el cambio climático, la misericordia y el amor, entre ellas, se destacan:

En tal virtud, el magisterio del papa Francisco tiene un arraigo en el Evangelio, manifiesta una defensa permanente por la dignidad de la persona humana, aspectos que se articulan con el compromiso cristiano, apostólico, teológico y pastoral; «Su magisterio habla de Dios, Cristo, María, la Iglesia, la gracia, los sacramentos, el hombre. Desarrolla teologías prácticas: pastoral, espiritual y moral, incluyendo la moral social o doctrina social de la Iglesia»¹⁰; estableciendo, de ese modo, un diálogo con las dinámicas sociales, culturales, políticas y religiosas de los contextos, respondiendo a las demandas y emergencias del mundo contemporáneo.

Es importante subrayar que su opción pastoral se ha ubicado de manera concreta del lado de los pueblos, vinculando siempre al necesitado, al pobre, al sufriente y al excluido. De ahí, su llamado permanente a volver la mirada a los pobres, como una opción fundamental de la Iglesia. Desde esta perspectiva, denuncia la creciente injusticia y desigualdad social a nivel global, por tal razón, la insistencia en la distribución equitativa de la riqueza, la cual debe traducirse en signos y acciones con los más desfavorecidos. En efecto, en Laudato Si´ refiere:

Mientras tanto, tenemos un «superdesarrollo derrochador y consumista, que contrasta de modo inaceptable con situaciones persistentes de miseria deshumanizadora»[90], y no se elaboran con suficiente celeridad instituciones económicas y cauces sociales que permitan a los más pobres acceder de manera regular a los recursos básicos. No se termina de advertir cuáles son las raíces más profundas de los actuales desajustes, que tienen que ver con la orientación, los fines, el sentido y el contexto social del crecimiento tecnológico y económico¹¹.

A tenor de lo anterior, es posible inferir, en Francisco, la imperante denuncia a las políticas y sistemas económicos dominantes que han instrumentalizado la condición de la persona humana, los cuales han provocado un aumento desmedido de la pobreza; en consecuencia, acentúa el llamado a la igualdad económica y justicia social. En coherencia con la identidad de su pontificado, Francisco exhorta permanentemente a los miembros de las comunidades eclesiales y a los líderes mundiales de todo orden, para optar y actuar en solidaridad y compasión con lo otro y con los otros, para evitar la destrucción que actualmente amenaza al género humano.

Ahora bien, en el pontificado de Francisco, subyace una teología de la misericordia, es decir, comprende la misericordia en la compasión, en el sufrir de los otros, como una dinámica de reacción ante la vulneración del otro, de ahí, el llamado permanente a la Iglesia por una acción en el cuidado de los pobres y vulnerables, en correspondencia con una opción teológica por los excluidos. Este énfasis se visibiliza en el conjunto de las encíclicas, aspecto que incluye la relación entre la condición de lo profundamente humano y el «cuidado de la casa común», como una respuesta en modo de denuncia ante la crisis ecológica global, la cual se comprende como el camino al ecocidio y, en consecuencia, al genocidio mismo de la humanidad.

De otra parte, en Evangelii Gaudium¹², profundiza en la importancia que tiene la evangelización para la acción y la vida de la iglesia, y el vínculo de esta, con las comunidades marginadas, aspecto que se constituye en expresión social de la misión evangelizadora de la Iglesia. De modo amplio, la teología que subyace en el magisterio y pontificado de Francisco está anclada a las perspectivas fundamentales del Concilio Vaticano II, configurando una permanente conexión con la realidad¹³. En esta perspectiva, varios teólogos contemporáneos han señalado que en Francisco subyace una «Teología del Pueblo»¹⁴, «aquella incluye una eclesiología, una teología de la sociedad, la cultura y la historia, y, también una teología pastoral»¹⁵; conjuga la alegría del Evangelio con la profundidad identidad del Vaticano II, «nunca antes en ningún pontificado se había tomado tan en serio y con tal consecuencia la imagen de la Iglesia como Pueblo de Dios. La Iglesia como sujeto activo y corresponsable»¹⁶. A tenor de lo anterior, ha convocado a la Iglesia a emprender un camino sinodal, para discernir el actuar de la Iglesia en el mundo contemporáneo, ya su vez, escuchar a todos sus miembros como condición necesaria para interpretar los signos de los tiempos.

Francisco ha asumido un serio compromiso frente a la promoción y desarrollo del ecumenismo, con expresiones de cercanía y amistad con las diferentes Iglesias cristianas, integrando así, una visión más inclusiva de la Iglesia. En este mismo sentido, favorece el diálogo interreligioso, resaltando la importancia y responsabilidad que tienen las tradiciones religiosas en la construcción de la paz, la fraternidad y solidaridad humana. En efecto, en la en la Carta Encíclica Fratelli Tutti. Sobre la fraternidad y la amistad social¹⁷ advierte que los líderes religiosos deben asumir una actitud dialogante tendiente a consolidar la construcción de la paz, para extinguir el odio exacerbado, que, en ocasiones, emerge de los fundamentalismos de algunas tradiciones religiosas.

En conclusión, los 10 años del pontificado de Francisco se han caracterizado por su énfasis en la misericordia que se conjuga con la dinámica de la compasión, específicamente, en el llamado a volver la mirada a la opción preferencial por los pobres y vulnerables. En este sentido, su identidad se traduce en una expresión de la responsabilidad social de la fe desde el permanente llamada a la inclusión de la justicia social y el alcance del bien común, para, de ese modo, interpretar y transformar el dolor que golpea de la condición humana.

Ahora bien, para el número 180 de la revista Franciscanum, la sección de filosofía está compuesta por un conjunto de cuatro artículos. Por su parte, la sección de teología integra un total de 8 artículos. En este sentido, el primer artículo de la sección de filosofía, titulado «El abismo de todos los abismos: ¿«Dios no ama a todos los hombres»? El problema de la justicia de Dios como amor divino en el joven Leibniz», escrito por Camilo Silva, aborda algunos problemas de su tesis doctoral «Essence, néant et existence: Une lecture critique du concept de création divine chez Leibniz». En efecto, el artículo profundiza en el problema sobre la conceptualización de la justicia fundamentada en la compresión de amor del joven Leibniz, con la intención de explicitar el proyecto de una jurisprudencia universal de dicho autor, toda vez que él mismo descubrió elementos de universalidad en el concepto del amor como aspecto central de la justicia.

El segundo artículo de la sección de Filosofía, «El concepto de Persona de Agustín en el personalismo de Martín Buber», escrito por Juan Facundo Torres Brizuela, aborda la pregunta por el ser humano desde la concepción agustiniana de persona en la antropología de Martín Buber, para tal fin, delimita las comprensiones que sobre la persona desarrolló Agustín, estableciendo una articulación con los conceptos centrales en el pensamiento de Martín Buber que se constituyen, según el autor del artículo, en un reflejo del pensamiento de Agustín, derivando de ese modo una nueva comprensión antropológica.

El tercer artículo de la sección filosófica, «Michel Henry, lector de Meister Eckhart: Vínculo entre la mística especulativa y la fenomenología de la Vida», autoría de Mario Di Giacomo, despliega un análisis sobre las categorías de «alma humana» y «Dios», referidas a Eckhart, vinculadas con la concepción de la categoría «vida», proveniente de la perspectiva fenomenológica del Michel Henry. Con ello, se pretende determinar la conexión entre Henry y Eckhart, específicamente, en lo que Henry ve como un modo de manifestación del pathos de la Vida, que ya no implica una distancia fenomenológica.

Por su parte, Miguel Ángel Martínez, en el artículo «Pedagogías ante la desaparición. Un acercamiento a la filosofía de la educación desde la búsqueda de personas desaparecidas», desarrolla un análisis crítico sobre la desaparición forzada de personas, siendo uno de los problemas estructurales del contexto mexicano. Dicha problemática abre la condición de posibilidad para abordar el papel que debe desempeñar la filosofía de la educación, toda vez que las prácticas pedagógicas filosóficas han quedado ausentes frente a dicha problemática. En tal sentido, pone de manifiesto el papel que debe asumir la enseñanza de la filosofía, procurando una conciencia crítica ante las prácticas e ideologías dominantes y se consiga movilizar una pedagogía tendiente al cuidado de la convivencia, desde una perspectiva de la memoria que favorezca la cultura de paz territorial.

Ahora bien, el artículo «“Me han hecho mucho bien”. Un balance del papado de Francisco y su visita a Colombia», de Carlos Eduardo Román Hernández, abre la sección teológica. En este sentido, el artículo hace una lectura interpretativa y crítica sobre la visita del papa Francisco a Colombia en el año 2017, en tal virtud, apoyado en algunas nociones fundamentales de Lonergan, profundiza en los principales desafíos planteados por Francisco al país, particularmente, en lo relacionado a los procesos de reconciliación, siendo una condición necesaria para reinterpretar el circulo de violencia que ha vivido por más de seis décadas el contexto colombiano.

El segundo artículo de la sección teológica, titulado «Los trascendentales en cuanto clave cognoscitiva del Creador por medio de la criatura, y como condición de posibilidad de la estructura del universo», de Catalina Velarde, analiza ciertos atributos, denominados «trascendentales», a saber: la bondad, la belleza y la verdad, los cuales se constituyen en reflejo identitario del ser de Dios en la condición humana imperfecta: en efecto, el artículo argumenta, desde algunas nociones y perspectivas de Santo Tomás, la manera como cada trascendencia revela un matiz de lo divino, siendo una condición para conocer a Dios en la expresión de sus creaturas.

El artículo «Pablo, interprete de la historia en la carta a los Gálatas», elaborado por Marcos Aceituno Donoso, analiza cómo, en Pablo, el acontecimiento pascual de Cristo se constituye en aspecto esencial para la historia. En este sentido, desde el análisis exegético y teológico, él busca afirmar que Pablo redefine el concepto de ‘historia’, manteniendo el carácter teocéntrico en una tensión cristológica y pneumatológica.

De otra parte, Jacob Buganza, en el artículo «Metafísica, antropología y virtud moral en San Gregorio de Nisa», aborda y articula el concepto de virtud moral, teniendo en cuenta dos de las obras de Gregorio de Nisa (De professione Christiana y De perfectione). A partir de allí, se analiza la comprensión de infinitud Divina, desde la perspectiva de la teología racional, para, posteriormente, establecer la relación con la antropología filosófica desde el ámbito metafísico y la virtud moral en clave teológica.

En continuidad con la sección teológica, en el artículo «La familia hoy: una lectura a través de la imagen digital», Diego Agudelo Grajales y Natalia María Ramírez López analizan la crisis de la institución familiar, la cual está configurada por las nuevas comprensiones y dinámicas que circunda la familia. En este sentido, centra la atención en el influjo de las nuevas tecnologías, específicamente, en la manera como la fotografía digital ha conseguido vaciar de sentido y contenido la imagen, en consecuencia, explora la representación simbólica y gráfica de las prácticas fotográficas -hoy denominadas selfis-, analizando las transformaciones en el contexto de la familia, las cuales están determinadas por una crisis relacional del sujeto.

Vicente Valenzuela Osorio, en el artículo de investigación «Articulación para un encuentro entre la comunicabilidad divina en prácticas chamánicas con alucinógenos, y la revelación en sentido cristiano», establece una articulación entre la experiencia de una comunicación divina de las prácticas chamánicas con alucinógenos y la experiencia de la revelación propia del cristianismo. Desde esta perspectiva y en el contexto del magisterio de Francisco, el articulo abre una condición de posibilidad, que no es común, para establecer puentes de respeto por la diferencia en los campos de lenguaje culturales y religiosos, tendientes al establecimiento de la unidad en relación con el cuidado de la vida.

Por su parte, Cristián Álvarez, en el artículo «En torno a «Il più santo tra gli italiani, il più italiano tra i santi». Una mirada desde el exterior de Italia y algunos datos adicionales sobre la crónica de una histórica frase sobre Francisco de Asís», toma como punto de partida la frase acuñada por Pio XII sobre Francisco de Asís «el más santo entre los italianos, el más italiano entre los santos», para analizar y comentar una diversidad de datos asociados a la frase en mención, toda vez que san Francisco se constituye el santo patrono y símbolo patriótico de Italia.

En este mismo sentido, el último artículo de la sección teológica, «Fuentes literarias y pictóricas para las imágenes de san Francisco de Asís en la Baja Edad Media», de María Rodríguez Velasco, pretende establecer una comprensión sobre las imágenes de san Francisco de Asís. Por ello, delimita y analiza los datos circundantes a las imágenes, ahondando, de ese modo, en los aspectos constitutivos y las fuentes literarias que sirvieron de inspiración a los artistas de la baja edad media. En tal sentido, en el desarrollo del artículo se reseñan, desde el siglo xiii al xv, las variables más significativas sobre la imagen de san Francisco de Asís, en aspectos asociados a su origen y evolución posterior.