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Investigación y Educación en Enfermería

versão impressa ISSN 0120-5307

Invest. educ. enferm vol.34 no.1 Medellín jan./abr. 2016

https://doi.org/10.17533/udea.iee.v34n1a02 

ARTÍCULO ORIGINAL / ORIGINAL ARTICLE / ARTIGO ORIGINAL

 

doi:10.17533/udea.iee.v34n1a02

 

Los niños en situación de calle: experiencias y significados de los ambientes que construyen

 

Homeless children: Experiences and meanings of the environments they construct

 

As crianças em situação de rua: experiências e significados dos ambientes que constroem

 

 

Constanza Forero Pulido1; álvaro Giraldo Pineda 2;Johana Victoria Martínez Hernández3 3

 

1Enfermera, Magíster. Profesora, Universidad de Antioquia UdeA, Calle 70 No. 52-21, Medellín, Colombia. email: constanza.forero@udea.edu.co

2 Sociólogo, Magíster. Profesor Universidad de Antioquia UdeA, Calle 70 No. 52-21, Medellín, Colombia. email: alvaro.giraldo@udea.edu.co

3Estudiante. Universidad de Antioquia UdeA, Calle 70 No. 52-21, Medellín, Colombia. email: johanavicma2@gmail.com

 

Fecha de Recibido: Septiembre 16, 2015. Fecha de Aprobado: Diciembre 4, 2015.

 

Artículo vinculado a investigación: Significado de ambiente para los niños en situación de calle.

Conflicto de intereses: ninguno.

Cómo citar este artículo: Forero C, Giraldo A, Martínez JV. Homeless children: Experiences and meanings of the environments they construct. Invest Educ Enferm. 2016; 34(1): 9-17

 


RESUMEN

Objetivo.Conocer las experiencias de los niños en situación de calle, y comprender los significados que dan a los ambientes que construyen en estos espacios. Medellín, Colombia 2015. Métodos. Investigación cualitativa con enfoque etnográfico. Se realizaron entrevistas no estructuradas, observaciones; se llevó un diario de campo. Resultados. La calle, aunque espacio de uso público, los niños la convierten en su espacio privado; desarrollan en ella casi la totalidad de sus actividades y construyen dos grandes ambientes: el de calle que engancha y educa y el de trabajo que es transitorio porque se hace para sobrevivir. Sueñan con un ambiente ideal que les permita vivir de manera tranquila. Conclusión. Los niños convierten la calle en un lugar privado donde realizan sus prácticas cotidianas: socializarse, trabajar, dormir, divertirse y relajarse, es decir, un lugar de construcción social.

Palabras clave: jóvenes sin hogar; ambiente de trabajo; antropología cultural; relaciones interpersonales; condiciones sociales.


ABSTRACT

Objective.This work sought to learn of the experiences of homeless children and understand the meanings they give to environments they construct within these spaces. The study took place in Medellín, Colombia in 2015. Methods. Ours was a qualitative research with ethnographic approach. Non-structured interviews and observations were conducted; a field diary was kept. Results. The street, although a space of public use, is converted by children into their private space; they carry in it almost all their activities and construct two big environments: that of the street that attracts and educates and that of the work that is transitory because it is performed to survive. These children dream with an ideal environment that allows them to live quietly. Conclusion. Children convert the street into a private place where they carry out their daily practices: socializing, working, sleeping, having fun, and relaxing, that is, a place of social construction.

Key words: homeless youth; working environment; anthropology, cultural; interpersonal relations; social condition.


RESUMO

Objetivo. Conhecer as experiências das crianças em situação de rua, e compreender os significados que dão aos ambientes que constroem nestes espaços. Medellín, Colômbia 2015. Métodos. Investigação qualitativa com enfoque etnográfico. Se realizaram entrevistas não estruturadas, observações; se fez um diário de campo. Resultados. A rua, embora espaço de uso público, as crianças a convertem em seu espaço privado; desenvolvem nela quase a totalidade de suas atividades e constroem dois grandes ambientes: o de rua que engancha e educa e o de trabalho que é transitório porque se faz para sobreviver. Sonham com um ambiente ideal que lhes permita viver de maneira tranquila. Conclusão. As crianças convertem a rua num lugar privado onde realizam suas práticas cotidianas: socializar-se, trabalhar, dormir, divertir-se e relaxar-se, ou seja, um lugar de construção social.

Palavras chaves: menores de rua; ambiente de trabalho; antropologia cultural; relações interpessoais; condições sociais.


 

 

INTRODUCCIÓN

En Colombia, al igual que en otros países de América Latina, se presenta el fenómeno de niños en situación de calle. En Medellín, según el censo de 2009 denominado Censo Poblacional en Situación de Calle, se reporta un total de 1 080 niños1 (siguiendo las indicaciones de UNICEF, el término niños comprenderá la población menor de 18 años).2 La calle es un espacio donde se presentan diversas situaciones, fenómenos y acontecimientos sociales: comercio informal, peleas, robos, expendio de drogas, tráfico de armas y de estupefacientes, es decir, confluye lo legal con la ilegalidad. Es el componente elemental de la ciudad y se convierte en lugar de encuentro, trabajo, juego y sobrevivencia.3 Se entiende como un sistema de relaciones4 y un lugar practicado,5 en la medida en que quienes la habitan o la transitan, interactúan con las otras personas y el entorno, convirtiendo "el espacio público como un lugar de acción y de comunicación".6

 Los niños consideran la calle su lugar de vivienda, no solo por el tiempo que permanecen en ella, sino porque allí encuentran su familia7 y convierten la calle, que es tradicionalmente un espacio público, en un espacio privado, donde realizan prácticas cotidianas como comer, jugar, trabajar, dormir, y relacionarse entre ellos, con los venteros, con otros habitantes de calle y con quienes la transitan. Ha sido preocupación de algunos autores8-13 describir situaciones como el consumo de droga, el maltrato, la morbilidad atendida y las conductas de riesgo, en los niños en situación de calle. Otros autores, como Melo,3 Delgado,4 y De Certeau5 han descrito la calle en forma global como un lugar de construcción social. Este trabajo pretende lograr la compresión de la dinámica de la calle desde la mirada de los niños a partir de sus vivencias. Las preguntas de investigación fueron: ¿cómo los niños construyen el ambiente en el que se desenvuelven?, y ¿qué significa para ellos ese ambiente? Los objetivos de este estudio se centraron particularmente en conocer las experiencias de los niños en situación de calle y comprender los significados que dan al ambiente que construyen.

 

 

METODOLOGÍA

Estudio cualitativo con enfoque etnográfico. La investigación cualitativa se caracteriza por ser inductiva y se centra en la comprensión de significados, para construir un sentido alrededor de la problemática o fenómeno estudiado.14 El enfoque etnográfico tiene como centro de interés la cultura, que según Geertz,15 es la "estructuras de significaciones socialmente establecidas". Otro elemento central de la etnografía es el contexto, que implica más que el ambiente físico, los procesos de análisis y abstracción.16 La población estudiada fueron los niños en situación de calle quienes accedieron voluntariamente a participar en la investigación. Ellos frecuentan el centro de la ciudad de Medellín (Colombia), entre el sector de la estación Prado del Metro y del Parque de Berrío, incluyendo el Bulevar de los Puentes, el Parque de Bolívar, la Plazoleta Botero y los sectores circundantes a estos sitios céntricos de la ciudad.

Para el desarrollo de la investigación se parte de los siguientes conceptos: a)Niños en situación de calle (que en adelante denominaremos niños). Forselledo10 entiende por niños en situación de calle a "aquellos menores de 18 años que tienen vínculos familiares débiles o inexistentes, que hacen de la calle su hábitat principal y desarrollan en ella estrategias de sobrevivencia". La experiencia en la calle es la historia de vida acumulada de los niños desde que salen del hogar, hasta el momento en que ingresan a una institución o se reincorporan a la familia;11 b) Espacio Público. Según Melo3 es "una construcción cotidiana, es un proceso de interacción entre hombre y medio", para Delgado4 el espacio público deber ser representado y para ello debe haber sido practicado y vivido. Según De Certeau5 el espacio público implica unas normas que deben cumplirse, pues de lo contrario hay exclusión para los contraventores. La calle es un espacio público al que los habitantes asignan su propio significado, es un espacio de sobrevivencia, socialización y aprendizaje; y c) Ambiente. El ambiente es el vínculo entre entorno y contexto, en el cual los niños realizan procesos de adaptación o de transformación. Se considera contexto a las circunstancias de un fenómeno determinado, en este caso a las interacciones de los niños. El entorno es el lugar donde se habita, es lo físico, lo material.

Para la toma de información se realizaron 64 entrevistas no estructuradas, que permitieron ahondar en temas específicos sin la necesidad de un listado de preguntas. Este tipo de entrevista implica una escucha activa y permite al entrevistado la libertad de hablar y de atribuir significados. Algunos temas abordados en las entrevistas fueron: las experiencias en la calle, los distintos tipos de ambiente que construyen y el ambiente ideal para su sobrevivencia. Inicialmente, se formularon preguntas abiertas y posteriormente las preguntas fueron más específicas, con el fin de profundizar en aspectos de su vida en la calle. Para lograr fidelidad en la información, las entrevistas se grabaron en video y audio y se realizaron cuando se logró acercamiento y confianza con los participantes, situación que en algunos casos se demoró varios días. Las observaciones se llevaron a cabo en los lugares frecuentados por los niños, con el fin de describir los espacios donde establecen interacciones y llevan a cabo sus actividades, para que describieran, a su vez, el entorno, los colores, olores, lugares y sonidos. Se emplearon 170 horas en las observaciones. Se llevó un diario de campo en el que se registraron encuentros con los participantes y aspectos importantes para la investigación tales como: observaciones, comentarios, reflexiones personales y metodológicas, aclaraciones y otros tópicos que ayudaron a la comprensión del fenómeno estudiado.

El análisis de la información se realizó simultáneamente con la recolección de la misma. Una vez transcritas las entrevistas y observaciones, se identificaron códigos; se agruparon en categorías y subcategorías y se diagramaron mapas con el fin de facilitar el análisis y la discusión, la cual se realizó conjuntamente entre investigadores y los participantes. En esta etapa, la participación de los niños fue fundamental, pues garantizó que los resultados fueran desde su mirada (Visión Emic) y que se identificaran categorías que los investigadores pasaron por alto.

El rigor17 de esta investigación se logró por la credibilidad y la auditabilidad mediante la utilización de grabaciones, la confirmación de los resultados y su revisión con los participantes. Las consideraciones éticas que se tuvieron en cuenta fueron las siguientes: a) el respeto por la autonomía de los participantes. Para esto antes de cada entrevista se les explicó cuál era la intención del estudio y se respetó la decisión de responderla total o parcialmente; b) se reservó la identidad de los participantes y se garantizó la confidencialidad de la información; ésta se les presentó a los niños con el fin de que la aprobaran. Se tuvo en cuenta la Resolución 8430 de 1993,18 por la cual se dictan las disposiciones para la investigación. El estudio fue avalado por el Comité de ética de la Facultad Nacional de Salud Pública en la sesión 93 del 28 de enero de 2014.

 

 

RESULTADOS

Los niños consideran la calle como su vivienda, por lo tanto la convierten en espacio privado mediante sus interrelaciones con otras personas y con el entorno. En la medida en realizan actividades en un espacio determinado, construyen un ambiente al que le dan significados según las diferentes experiencias.

Entorno

Los elementos físicos identificados por los niños en los lugares que frecuentan son: el Metro; los edificios; hoteles e inquilinatos; parques y plazas; fuentes; iglesias; medios de transporte; establecimientos de comercio; lugares de entretenimiento y de acopio como bodegas y guardaderos de motos, carritos de venta de tinto, chazas y carretillas; parqueaderos y caletas o lugares donde guardan sus pertenencias, como en las alcantarillas, los contadores de agua y luz o los árboles: Las cobijas las metíamos ahí en las cosas del alcantarillado y por la noche las sacábamos (E41). Para ellos, la calle tiene características sensoriales como olores, colores y sonidos. Olores corporales como orines y materia fecal. Olores a sustancias psicoactivas como bazuco, marihuana y cigarrillo y a comidas como pescado, pan, fritanga, carne y pollo: Sucia, cochina, olía feo porque uno en la calle huele feo, huele muy asqueroso (E28). Colores a los cuales les dan significado así: verde (naturaleza, equipo de fútbol); rojo (sangre); amarillo (luz); blanco (paz y amor); azul (esperanza); gris (cuando llueve); negro (tristeza).

La calle es una mezcla de sonidos, algunos emitidos por los automóviles, los equipos de sonido de almacenes o bares y los de las personas que habitan o transitan por ella. Los niños identifican sonidos como insultos, llantos, gritos de hinchas y manifestantes y los que promueven las ventas, los de los voceadores de periódicos; y la música de equipos de sonido. Los diferentes medios de transporte producen sonidos muy intensos como el de los buses, motos, el Metro, las sirenas de ambulancias, los carros de bomberos y Policía. El sonido de la naturaleza más notorio es la lluvia fuerte. Consideran ruido los frenazos de los autos y el pitar continuo, los cuales catalogan como malucos.

Relaciones

Las relaciones son fundamentales para su sobrevivencia. Se establecen con las personas que habitan las calles como otros niños, con habitantes de calle adultos, con las personas que tienen almacenes o puestos de ventas callejeras, con los que hacen el aseo en las calles, con la Policía, con organismos al margen de la ley como las denominadas "Convivir" (cooperativas de vigilancia y seguridad privada, que en un principio fueron creadas para la defensa de los campos y luego se extendieron en las zonas urbanas de manera no legal) o, en general, con las personas que las transitan las. Las relaciones pueden ser conflictivas, neutras o positivas.

Relaciones conflictivas. Como se ya planteó, la calle es tradicionalmente considerada un espacio público y como tal tiene unas normas que las personas que permanecen en ella o la transitan, deben cumplir. Al convertir la calle en su espacio privado, los niños crean sus propias normas que les permiten sobrevivir y, en ese sentido, están en desacuerdo con las normas del espacio público, por lo tanto no las acatan: En esos lugares hay varias reglas, por decir en unas partes no se puede tirar el vicio, no se puede estar bien como a uno le gusta estar (E51); Normas a nosotros no, porque antes venía uno de la casa para que no lo regañaran tanto (E6). El no acatamiento de las normas y las condiciones por las cuales deben pasar los niños hacen que en algunos momentos interactúen en forma conflictiva con algunas personas y con los organismos de seguridad del Estado como la policía y en ocasiones con las "Convivir": Los convivires, porque ellos le dan muy duro a uno, los tombos (policías), también (E43). Además, tienen relaciones conflictivas con los mismos parceros (pares o compañeros con los que forman un grupo en la calle al que denominan parche): Una pelada pues que me la tenía montada, entonces una vez me tiró una puñalada y me tocó tirársela yo a ella (E54).

Relaciones neutras. Se dan especialmente entre ellos mismos o con otros habitantes de la calle, se expresan generalmente por medio de saludos y algunas conversaciones. En este tipo de relaciones es muy importante la norma o principio de que "al que está quieto, se deja quieto", de esa manera se evita entrar en conflicto.

Relaciones positivas. Generalmente son lúdicas como jugar fútbol, recochar (reírse por nada, divertirse, bromear) bailar, bañarse en las fuentes; realizar competencias como la de la pirinola, el soldadito, el pico de botella y la cuarta; pelear para entretenerse, a golpes, con latas (armas corto-punzantes); encuentros afectivos con sus parejas o trabarse en grupo: Allá es chévere. Conversamos, nos mantenemos todos jugando con el balón (E61); Los pelaitos (término usado, tanto por niños como por otras personas para señalar a otros niños) que andábamos juntos para ir a meternos allá a la fuente (E5). Entre las relaciones positivas existen las de apoyo, en las cuales se ayudan entre ellos cuando hay conflictos con otros grupos, con las "Convivir" o para prestar algunos servicios, especialmente a los dueños de almacenes o puestos callejeros, como asear o cuidar del puesto mientras el dueño está afuera o haciendo compras de algo que haga falta: Allí se les hace el mandado a quien llega a comprar algo (E21); Gente de los mismos locales que me dejaban bañar y me daban ropa (E25).

Ambientes

El ambiente está dado por el entorno y el contexto teniendo como elemento importante las relaciones. Los niños se mueven en dos ambientes muy diferentes: por un lado se encuentra el de la calle; y, por otro el espacio que ellos consideran el del trabajo, no obstante, desean tener uno distinto al que viven, un ambiente ideal.

Ambiente de calle. Es el ambiente cotidiano que les enseña y educa para la vida. En la medida en que interactúan entre ellos y con el entorno, les facilita elementos para la supervivencia y poco a poco los engancha, obligándolos a permanecer todo el tiempo en ella, imposibilitándoles la salida y llevándolos a que la reconozcan como su espacio: La misma calle es un vicio, entonces ya usted no la puede dejar, no puede salir de ella, así esté en los centros de acogida y usted cambia unos días, pero tiene que volver a la calle (E51). Dentro de la calle los niños reconocen otros ambientes como el de diversión, el de rumba, el duro, el pesado y el calmado o tranquilo.

Ambiente de diversión. Les brinda alegría y la posibilidad de encontrarse con sus amigos y compartir con ellos. Lo que caracteriza este ambiente es que los niños pueden disminuir la tensión, "pasar bueno" y "tirar caja" (reírse). En este ambiente se consume droga o licor, se ven partidos de fútbol, se juega, se conversa, se tiene sexo y se comparte con los "parceros". El ambiente de diversión se construye principalmente en la noche y los fines de semana y en lugares como parques, fuentes públicas, canchas de fútbol y establecimientos en donde hay pantallas para ver los partidos de los equipos locales: Me gusta por los amigos, sin amigos no le gusta a uno (E52); Ese es un parque chimba (divertido, agradable) para uno irse a relajar, a fumar cripa (marihuana transgénica) (E2): Jugábamos fútbol también y hablando. Eso era lo que hacíamos (E9).

Ambiente de rumba. Lo que lo diferencia del ambiente de diversión, es que generalmente se busca fuera de los lugares que frecuentan cotidianamente. El ambiente de rumba les brinda animación. Los lugares de la farra son bulliciosos, con mucha gente y en ellos los niños, además de bailar y escuchar música, pueden consumir sustancias psicoactivas y licor. Los fines de semana son los preferidos para la rumba: El fin de semana es para salir a rumbear, todo el mundo sale a bailar, a tirar vicio, es un ambiente más animador para uno (E47).

Ambiente duro. Es un ambiente de carencias y dificultades en el que deben realizar ciertas acciones para lograr la supervivencia. Este ambiente lo viven los niños incluso desde antes de abandonar sus hogares porque carecen de alimentos, vestidos y otros elementos básicos, y las madres deben salir a buscarlos. Los niños de esa manera deben estar todo el día en las aceras al pie de los puestos de trabajo: La mamá de él y mi mamá, mientras ellas trabajaban, nos dejaban en cajas de cartón (E7).Los niños deben afrontar el ambiente duro para superarlo y de esa forma conseguir los elementos de los cuales carecen, para ello utilizan estrategias que aprenden de los otros compañeros y de las experiencias diarias: Es muy duro, porque vivir en la calle es uno como si no tuviera nada, ni esperanzas de nada, y que hay que salir adelante como sea (E9)

Ambiente calmado o tranquilo Es al que los niños aspiran y luchan por alcanzarlo, solo se logra por momentos y cuando se presenta, lo disfrutan. Según su visión, lo que caracteriza este ambiente es que les brinda tranquilidad, les permite relajarse y pueden descansar sin que se presenten situaciones que les alteren su seguridad. En él pueden consumir, hacer pereza y reunirse para conversar. Para que sea calmado deben estar presentes las amistades o personas que los respalden frente a cualquier peligro o agresión; por el contrario, no debe haber presencia de la Policía o de los "convivires", ni contaminación, especialmente la relacionada con malos olores, basura y falta de higiene. Se da principalmente en el día y el lugar más adecuado para lograrlo es el hotel: Mientras uno esté trabado en la pieza, sabe que no le va entrar la policía. Uno está relajado, está fumando marihuana y comiendo lo que usted tiene de comida, pero está tranquilo, porque nadie lo está molestando (E50).

Ambiente pesado. Se genera por las peleas entre ellos, la presencia de policías, grupos armados ilegales que los persiguen y los violentan y personas que les hacen daño. Este ambiente se presenta más frecuentemente en la noche. El ambiente calmado puede convertirse en ambiente pesado cuando hay situaciones que generan conflictos o cuando hay exceso de consumo de sustancias psicoactivas que ellos no pueden controlar. Los niños lo representan con los colores negro y rojo, este último como manifestación de la sangre. El ambiente pesado produce miedo, no se frecuenta y cuando se presenta lo evitan, alejándose, pero en algunos casos permanecen en él y hacen parte del conflicto: En la calle, donde yo habito, se vive un ambiente pesado, se ve los compañeros fumando marihuana, tirando sacol (pegante), ruedas (sustancias psicoactivas en pastillas), teniendo discusiones (E47); Ambiente pesado más que todo en la noche. Es muy peligroso, no me gusta. Tiene que andar uno más bien aislado (E47); En la noche era un ambiente muy pesado, porque la Policía no podía ver a nadie por ahí tarde, les pegaban (E50). Las niñas que venden el cuerpo, consideran como ambiente pesado el hecho de tener que enfrentar la situación con los clientes que no les pagan, las golpean o las amenazan: A mí me han pasado muchos cacharros (situaciones complicadas), me dejan botada, me han dado la pela (golpear), no me pagan, y cuando uno no quiere le sacan fierro (arma de fuego) (E43).

Ambiente de trabajo. Aunque hace parte de la vida de la calle, los niños lo consideran un ambiente aparte y diferente, es un ambiente de socialización: El ambiente mío del trabajo, es muy diferente a mi vida personal (E47). Algunos niños aprenden el oficio de sus madres cuando éstas, para suplir las necesidades salen a trabajar y los llevan con ellas: Mi mamá tenía una chacita (puesto de venta) entonces cuando vio que yo era capaz, ella ya me hizo una chacita, entonces ya yo fui cogiendo la calle (E19). Los niños se inician en las ventas con aquellos productos que vendían sus padres y luego buscan la forma de ganar más dinero con la venta de sustancias psicoactivas: Empecé a vender cigarrillos, las rosas, luego los chicles; luego empecé a vender mariguana, luego perico, luego basuca; luego empecé a robar (E1). Al acto de trabajar lo denominan camellar o conspirar y comprende acciones como: robar, vender, pedir, hacer mandados y hacer ratos (vender el cuerpo), utilizan estrategias para conmover, convencer e intimidar a las personas para lograr lo que necesitan: En una tipografía, nos manteníamos pidiendo calendarios viejos y nos los compraban esos borrachos y con eso conseguíamos plata (E16); Hacía los ratos y pagaba hotel (E42).

Tanto el robo como vender el cuerpo se consideran opciones fáciles para obtener dinero, puesto que no tienen que someterse a un horario ni depender de nadie: Robar es difícil, pero es fácil, porque se consigue la plata fácil, aunque todo tiene su riesgo en la vida, pero la vida fácil es eso, porque una persona que trabaja tiene que madrugar todos los días, cumplir un horario, mientras que el ladrón roba a lo hora que quiera y consigue la plata a la hora que quiera, la prostituta se va a la esquina a la hora que quiera y sabe que le va a llegar el cliente (E4). En algunos casos el trabajo de las ventas se utiliza más como estrategia de observación y así encontrar otras opciones, por ejemplo robar por las noches: En la calle hay muchas formas de trabajo, una fachada en la calle puede ser vender chicles, vender confites, para mirar qué podía hacer en la noche (E35). El ambiente de trabajo se realiza en determinados horarios y en lugares donde habitan posibles clientes, dichos lugares pueden ser los parques, los semáforos y algunas calles de la ciudad: El ambiente pal trabajo, para que nos vaya bien, empieza después de las tres y media y hasta las nueve de la noche o diez (E47); Yo recogía chatarra en un carrito y cuando iba un carro de gaseosa llegaba y me le pegaba y le robaba y lo vendía (E18).

Ambiente ideal. A diferencia del ambiente calmado que es transitorio, desean el ambiente ideal como algo permanente. En él no debe haber consumo de sustancias psicoactivas ni peleas; los niños esperan que los apoyen, los valoren, no les coarten la libertad y de esa manera tener una vida tranquila y lograr las metas que se propongan. Esta idea se vincula con la de tener una familia: Me gustaría que nunca hubiera vicio, porque eso es una tentación horrible, ojalá estos ambientes fueran así calmados, y todos viviéramos relajados (E51); Lo saben valorar a uno, lo apoyan, le dicen muchas cosas a uno que el corazón lo llena de alegría, de emoción, de felicidad y con esas palabras una llega a alcanzar metas y a saberse valorar, por sí mismo, a tener autoestima y muchas cosas que tiene que practicar en la vida (E28).

 

 

DISCUSIóÓN

Las categorías más importantes encontradas en este estudio fueron las relacionadas con el ambiente de la calle y del trabajo. Si bien, algunos hallazgos coinciden con los de otros autores, en algunos aspectos hay diferencias, explicables por el tipo de estudio, ya que se parte de la mirada de los niños. Hay coincidencia con Neiva-Silva y Koller19 en la importancia dada a las categorías de trabajo y calle. Aunque para diversos autores como Lindón,20 Berroeta y Vidal21 la calle es entendida como un espacio público, en este estudio se encontró que los niños la convierten en su espacio privado, de socialización y de supervivencia. Duarte,22 en la investigación con jóvenes en situación de calle, halló que los niños que la habitan están siempre en el exterior (público), todo lo realizan allí y no tienen una referencia del interior (privado). En este mismo sentido, Marrero6 concibe lo privado como aquello que se oculta, lo que no se muestra al público y por lo tanto no se somete a juicio. Lo público, en cambio se somete a la mirada de los demás, a su juicio y a las opiniones de quienes lo miran. Los niños participantes de este estudio, convierten la calle en su espacio privado, pero sus acciones no se ocultan a la mirada de los demás.

La ocupación y el uso del espacio público (la calle), exige el cumplimiento de normas que buscan el logro de una mejor convivencia. En Río de Janeiro, Vargas23 encontró que los niños de calle viven en desacuerdo con las normas. En nuestro estudio, los niños no solo no acogen las normas establecidas, sino que tienen sus propias normas que les permiten la supervivencia en estos espacios. Las interacciones conflictivas entre los transeúntes y quienes habitan la calle pueden convertirla en problemática, según lo plantean Motta, Rosa y García.24 Esta situación es la que los niños participantes en este estudio denominan ambiente duro. Lindón, Aguilar y Hiernaux21 plantean que la calle es un espacio de inseguridad. No obstante, en este trabajo se encontró que para los niños no toda la calle representa inseguridad, sino ciertos espacios de ella, los cuales consideran ambientes pesados.

En lo relacionado con el ambiente de diversión, el fútbol ocupa un espacio importante en su vida, no solo para practicarlo, sino para verlo jugar. Esta misma situación la plantea Martinelli,25 quien considera el fútbol de calle como un espacio privilegiado de homo-sociabilidad. En relación con los ambientes tranquilo, ideal y de rumba, desconocemos trabajos que se hayan realizado sobre dichos tópicos. En lo que tiene que ver con el ambiente de trabajo, especialmente en el tipo de labor que realizan los niños para la supervivencia, nuestros hallazgos son coincidentes con los trabajos de distintos autores como Cárdenas y Rodríguez,8 Duarte,22 y Domínguez, Romero y Paul.26 Esta coincidencia puede deberse a que las condiciones sociales y económicas para los niños de la calle son similares en América Latina y casi todos realizan las mismas labores para obtener dinero.

La conclusión de este estudio es que los niños transforman el ambiente de la calle con el fin de adecuarlo para llevar a cabo sus actividades y lograr un ambiente tranquilo. De esa forma la calle es para ellos un lugar privado que enseña y educa para la vida. En ella se establecen relaciones que son fundamentales para la sobrevivencia. En esta medida, los niños construyen los ambientes de diversión, rumba, calmado y de trabajo. El ambiente pesado y el ambiente duro no lo construyen y el ambiente ideal es con el que sueñan. El ambiente de trabajo, aunque lo viven en la calle, no es considerado parte de ella.

Agradecimientos: A los niños participantes por proporcionar la información, aclarar las dudas, apoyar la parte del análisis y revisar el informe final; a los niños en situación de calle que hacen parte de la línea Cultura y Salud; a Luis Fernando Abril por ser un apoyo permanente en el contacto con los niños; a Anghie Phamela López quien participó en el análisis de información y en la escritura final, a Diana Sánchez y Tatiana Aristizábal quienes participaron en el diseño del proyecto y la recolección de información, a las Facultades de Salud Pública y Enfermería de la Universidad de Antioquia y al CODI por la financiación del estudio.

 

 

REFERENCIAS

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