INTRODUCCIÓN
El autoconcepto físico y la apreciación corporal como subdominios de la imagen corporal, la cual contempla la experiencia subjetiva de actitudes, pensamientos, sentimientos y valoraciones que hacemos, derivado de las cogniciones y los sentimientos que experimentamos 1,3, se encuentran estrechamente ligados al desarrollo humano, además de considerarse autodominios de la salud mental, igualmente permiten interiorizar la personalidad a partir de las interacciones sociales y con el cuerpo 2.
Además de esto, y de acuerdo con Fox y cols, específicamente en las personas mayores, se relaciona con la participación y adherencia en la actividad física, teniendo un impacto positivo en su imagen corporal al relacionarse con percepciones del orden superior como lo son la autoestima física y la autoestima general; mejorando su calidad de vida y salud mental 3. Del mismo modo, Hsu y cols afirmaron que la actividad física es un mecanismo de regulación para enfrentar los cambios que conlleva el envejecimiento; asimismo, se concluye que el autoconcepto físico de las personas mayores y el bienestar psicológico se median a través de su "yo" con respecto al ocio y las actividades sociales 4.
En cuanto a la relación entre el autoconcepto físico con la actividad física, se puede afirmar que las personas con un autoconcepto en promedio más alto, son personas con mayor participación en actividad física, además, de una vida social más positiva, demostrando, de esta manera, que el autoconcepto físico no solo conlleva beneficios mentales, sino mejorías en actitudes hacia la actividad física 5.
El autoconcepto físico, además de ser fundamental para el funcionamiento personal y social, se encuentra relacionado con los hábitos de vida saludable y se ha evidenciado su relación inversamente proporcional con trastornos alimenticios 6.
Por otro lado, la apreciación corporal está constituida por representaciones, percepciones, afectos, significados y vínculos que el sujeto construye respecto a su cuerpo durante toda la vida 7, la cual está estrechamente relacionada, como han explicado Ureña y cols; el sobrepeso y la obesidad se asocian positivamente con la insatisfacción corporal en este contexto 8.
De acuerdo con lo mencionado, para la evaluación se usaron los instrumentos Body Appreciation Scale (BAS) y el test de Autoconcepto Físico (CAF-MAY), los cuales permiten medir la apreciación corporal y el autoconcepto físico, respectivamente, favoreciendo su comprensión en esta etapa de la vida; por lo tanto, el objeto de este artículo es identificar la correlación entre el IMC con el autoconcepto físico y la apreciación corporal en personas mayores de 60 años en la ciudad de Tunja.
MATERIALES Y MÉTODOS
Investigación con un diseño de corte transversal. Se obtuvo una muestra de 288 participantes más un 10 % de pérdida, para un total de 312, para controlar los sesgos de selección y confusión. Teniendo como criterios de inclusión ser igual o mayores de 60 años, estar afiliados al Sistema General de Seguridad Social en Salud y estar radicados en el área urbana del municipio de Tunja.
Para la muestra se empleó el software EPIDAT versión 4.0, con un nivel de confianza del 95 %, como población se consideró 184 125 personas mayores de 60 años de Tunja (cabecera municipal) 9, efecto de diseño del 1 %, precisión de 5 y proporción esperada del 75 % 10, así, el muestreo fue consecutivo secuencial.
Se emplearon dos instrumentos de recolección de información. Primero, el BAS, el cual consta de 13 ítems, cuya estructura factorial comprende una sola dimensión y muestra una adecuada consistencia interna (coeficiente a de Cronbach= .94) y validez de constructo. Los ítems se promedian para obtener una puntuación total de la apreciación corporal 11.
Segundo, se aplicó el CAF-MAY, cuestionario diseñado por Goñi, basado en los dominios de habilidad física, condición física, atractivo físico y fuerza; test compuesto por 30 ítems que miden la percepción del sujeto en las siguientes dimensiones del yo personal: capacidad física (6 ítems), apariencia física (6 ítems), salud/enfermedad (6 ítems), capacidad funcional (6 ítems) y autoconcepto físico general (6 ítems), empleando una escala tipo Likert para su valoración con cinco opciones de respuesta: "totalmente en desacuerdo" a "totalmente de acuerdo"; desde la consistencia interna reporta un Alpha de Cronbach aceptable (0.7979) 12. En cuanto a la medición del IMC, que se refiere a la razón entre la masa corporal en kilogramos, dividido por la talla (estatura) en metros elevada al cuadrado (IMC = (kg/m2), se evaluó en las siguientes categorías: Bajo peso (por debajo de 18.5), Normal (18.5 - 24.9), Sobrepeso y Obesidad (superior a 30.0) 13.
La recolección de la información estuvo a cargo de los investigadores y personal de apoyo previamente cualificado para ello; así, el instrumento fue diligenciado por estos, teniendo en cuenta su extensión y la complejidad de las preguntas, lo que dificultaba el autodiligenciamiento.
Para el análisis de datos se utilizó el software SPSS con la respectiva limpieza y depuración de los datos. Primero, se realizó un análisis univariado de las variables categóricas y su magnitud a través de la distribución de frecuencias absolutas y relativas. Además, se calcularon medidas de tendencia central y de variabilidad o dispersión para variables cuantitativas. Segundo, se realizó análisis bivariado para establecer las posibles relaciones entre las variables de estudio, aplicándose el coeficiente de correlación de Spearman. Investigación que contó con la aprobación del Comité de Bioética de la Universidad de Boyacá (CB 501); asimismo, se diligenció el consentimiento informado por los participantes.
RESULTADOS
Los resultados obtenidos en cuanto al sexo indican que el 57,4 % son mujeres predomina el estado civil casado (52,9 %). Con relación a la escolaridad, predominaron el grado universitario y secundaria (33,0 %). Respecto a la ocupación, se encuentra distribuida en pensionado (42,0 %), seguido del hogar (40,1 %); asimismo, la mayoría se ubica en un estrato socioeconómico medio-bajo (41 %), seguido de bajo y medio (22,4 y 20,2 %, respectivamente).
Desde los resultados del BAS, la apreciación del cuerpo es buena, como se observa en la tabla 1, donde la mayoría de los participantes responde positivamente con un promedio=59,4 ±= 4,7; adicionalmente, puntajes más altos exponen una mejor apreciación del cuerpo 11. Esto se refleja en sus diferentes dimensiones donde se aborda el respeto, la imagen corporal, el peso, las capacidades, cualidades y defectos, entre otras.
De igual forma, a partir de los resultados del CAF-MAY expuestos desde sus dimensiones se encontró que la capacidad funcional fue la de mayor puntuación con promedio =27 ±= 3,8, mientras que la dimensión de salud enfermedad fue la menor con promedio =21,1 ±=4,5. En general, el CAF-MAY presenta un promedio =125,4 ±=15,7. Las demás dimensiones reportaron los siguientes datos: apariencia física promedio=26,5±=3,8; capacidad física promedio=24,2 ±=4,7; Autoconcepto físico general promedio=26,6±=4,1.
En la tabla 2 se observa cómo los diferentes ítems del test reflejan una adecuada imagen corporal, y en especial, la satisfacción con la capacidad física, capacidad vital para el desempeño de actividades básicas cotidianas y de la vida diaria, aspectos desde la funcionalidad que puede decirse que son más determinantes para la imagen corporal que la misma estética.
Para la relación entre las variables se empleó el coeficiente de correlación de Spearman; según la prueba de Kolmogorov-Smirnov, las variables BAS, CAF-MAY e IMC obtuvieron una distribución de los datos no normal (p=0,000). Se halló que la correlación existente entre el IMC y el CAF-MAY es una correlación negativa media (Rho -,133; p=0,019) estadísticamente significativa, mientras que la correlación con el BAS presentó una correlación negativa débil no estadísticamente significativa (Rho -,035; p=0,534) (ver gráfica 1).
DISCUSIÓN
De los resultados obtenidos en cuanto al sexo, se destaca que el 57,4% son mujeres, porcentaje concordante con la expectativa de vida, que es más favorable para estas, según los hallazgos de Eslava-Schmalbach y cols 14. Por su parte, la variable escolaridad demostró una tendencia mayoritaria del grado universitario y secundaria. Resultado concordante con la representación de los estratos participantes. En cuanto a la variable estado civil, se encontró que la mayoría son casados, coherente con las tradiciones de otrora, en las cuales el matrimonio es considerado parte fundamental de la familia colombiana como institución social según Ramírez y Bacca 15. Por último, respecto a la ocupación predominante, sobresalen pensionados y hogar, y en grado oficio (18,2 %); datos que se ajustan a la realidad de la clase media-baja de nuestro país, que según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) en 2015, el 19,04% de la población total de la ciudad de Tunja era pensionado 16.
Los datos obtenidos del instrumento CAF-MAY permiten identificar que la mayoría refiere un auto-concepto físico favorable, debido a que presenta una puntuación general promedio =125,4 ±=15,7, ya que según Ureña y cols, el autoconcepto físico de las personas mayores es más favorable en cuanto más alto sea su puntaje del CAF-MAY medido sobre un total de 150 puntos posibles. Siendo coherentes con esto, si un sujeto presenta una calificación superior representa un autoconcepto físico favorable 8. En cuanto a los resultados encontrados de acuerdo con la edad, se puede decir que las percepciones del autoconcepto físico general aumentan con el paso de los años, volviéndose más complejas al asociarse, como la personalidad, los intereses, las actitudes, entre otros. Estas evidencias coinciden con las halladas por Cazalla y Molero 17.
Teniendo en cuenta que gran parte de la muestra expone independencia funcional (ejemplo, al transitar sin ningún problema por su propio barrio), esto es importante y se corresponde con la dimensión del autoconcepto físico direccionada a la funcionalidad, lo cual concuerda con los resultados anteriores y expone un buen autoconcepto físico en la mayoría de la muestra. Continuando con los datos obtenidos del BAS, se puede inferir que las personas mayores aceptan su cuerpo sin problemas, indicando que estos poseen una buena apreciación corporal, como ha explicado Sarabia Cobo, la forma en que las personas perciben su apreciación corporal tiene consecuencias importantes sobre su salud y calidad de vida 18; adicionalmente, la satisfacción con la apreciación corporal no varía significativamente con la edad, pero en otras la insatisfacción aumenta cuando las mujeres envejecen.
En general, las personas mayores presentan una buena apreciación sobre su cuerpo 7, lo cual concuerda con lo explicado por Lombardo y cols, quienes consideran que este aspecto se deriva de la imagen y se relaciona con los sentimientos individuales, incluidos la satisfacción/insatisfacción, la autoconsciencia física o la vergüenza, las creencias, las ideas y el comportamiento que preocupa a la apariencia 19. Así, se observa una apreciación positiva del cuerpo, como lo menciona Tiggermann y McCourt, en términos de personalidad, características y estrategias de afrontamiento. Estos autores descubrieron que las mujeres con una apreciación corporal positiva tenían mayores niveles de optimismo, autoestima y afrontamiento, a través de aceptación racional positiva y niveles más bajos de auto-presentación, perfeccionismo, afrontamiento, y fijación de la apariencia que las mujeres con cuerpo de apreciación negativa y descontento normativo del cuerpo 20. No obstante, la aceptación del cuerpo puede responder a un aspecto como la resignación, característica de esta etapa vital, sumado a prácticas de autocuidado y embellecimiento para mitigar cambios y propender por la estética, que se acompaña de la funcionalidad e independencia 21.
Entonces, el autoconcepto físico contempla entre sus dimensiones la funcionalidad y la capacidad, atributos correlacionados con la cantidad de masa grasa corporal y el IMC 22, donde se da una relación inversa entre la pérdida de peso y el deterioro funcional, sumado a que a un IMC alto o bajo se convierte en factor de riesgo para la dependencia funcional 23. A su vez, de Souto Barreto reporta que el funcionamiento está relacionado con la satisfacción corporal, es decir el cuerpo funcional se convierte en un cuerpo útil para la persona mayor 24, lo cual la lleva a subestimar su peso corporal actual, ya que según Monteagudo y cols, se evidencia un bajo acuerdo entre el peso corporal percibido y el medido objetivamente (25). Finalmente, el envejecimiento se asocia a una disminución de la preocupación por el peso y menor percepción del sobrepeso, especialmente en las mujeres 26.
CONCLUSIONES
El autoconcepto físico y la apreciación corporal de las personas mayores, dependen de aspectos como la imagen percibida, los sentimientos que genera su cuerpo y la satisfacción o insatisfacción. Se encontró que la mayoría de las personas mayores en este estudio presentan un autoconcepto físico y una apreciación corporal favorables.
A su vez, este estudio ayudó a determinar que para las personas mayores es de vital importancia la funcionalidad en esta etapa de la vida, la cual se correlaciona con el autoconcepto físico. Finalmente, respecto al IMC se puede evidenciar que las personas mayores no se perciben con el peso real y tampoco se preocupan por él; esto se observa entre el CAF-MAY y el IMC, con una correlación negativa media estadísticamente significativa, mientras que para el BAS se identificó una correlación negativa débil no estadísticamente significativa.