Nota del presidente

Marcelo Hurtado Fernández (1)

(1) Presidente. Asociación Colombiana de Gastroenterología. Bogotá, Colombia.

Fecha recibido: 31-08-09 Fecha aceptado: 01-09-09

Con este número de la Revista Colombiana de Gastroenterología (RCG) se dan dos cambios que consideramos importantes. En primer lugar, los lectores notarán un nuevo formato que moderniza nuestra publicación y la pone a la altura de otras revistas médicas con alcance internacional. Esta nueva imagen se hizo necesaria para responder a la gran visibilidad que ha adquirido en el ámbito internacional, resultado a su vez del progreso en el número y la calidad de los artículos que se publican desde hace ya varios años.

Por otra parte, con este número, empezamos la traducción formal al inglés de parte del contenido de la revista para su publicación en nuestra página web, mejora que consideramos indispensable dentro de su proceso de globalización. Este esfuerzo está encaminado a aumentar las consultas internacionales de la RCG, justa recompensa al trabajo arduo y decidido de los autores nacionales y extranjeros que contribuyen con sus trabajos al progreso de la gastroenterología colombiana.

Este número es, además, el último que se publica bajo la vigencia de la actual junta directiva de la Asociación Colombiana de Gastroenterología.

Entregamos a las próximas directivas de la ACG y de la RCG esta publicación renovada y en pleno progreso, la cual fue, sin lugar a dudas, uno de los proyectos favoritos según el plan de ruta que nos trazamos hace dos años.

Obviamente, no estaríamos presentando con orgullo nuestra revista tal como lo he descrito, si no hubiéramos contado con la labor madura y abnegada del Editor, el doctor Luis Fernando Pineda y del Comité Editorial tan acertadamente elegido. Además del valioso aporte de los dignatarios mencionados, es indispensable recordar la labor eficiente y silenciosa de muchos revisores de artículos que contribuyeron con su trabajo a preservar el nivel científico de la publicación.

Solo me resta agradecerle al grupo de editores el haber permitido que la junta directiva de la ACG fuera el apoyo que buscaban para llevar a cabo esta labor tan valiosa, y el haber interpretado tan acertadamente las expectativas que teníamos todos aquellos involucrados de una u otra forma en este proyecto de progreso y evolución.

Quisiera desearles la mejor de las suertes a los colegas que se encargarán, a partir del próximo número, de darle vida y brillo a la Revista Colombiana de Gastroenterología que tantas satisfacciones nos deja en el seno de la junta directiva de la Asociación Colombiana de Gastroenterología.

Un abrazo fraterno