SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número51Carta a los lectoresSociedades agrícolas em resistência. Os povoados de San Miguel, Santa Cruz e San Pedro, 1878-1883 índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

Links relacionados

  • Em processo de indexaçãoCitado por Google
  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO
  • Em processo de indexaçãoSimilares em Google

Compartilhar


Historia Crítica

versão impressa ISSN 0121-1617

hist.crit.  no.51 Bogotá set./dez. 2013

 

Presentación del dossier "Nuevas historias agrarias de América Latina"

Shawn Van Ausdal*

* Profesor asistente del Departamento de Historia de la Universidad de los Andes (Colombia). Historiador, magíster y doctor en Geografía de la Universidad de California (Estados Unidos). Miembro del grupo de investigación Historia, Ambiente y Política (Categoría A en Colciencias). Es autor de: "Productivity Gains and the Limits of Tropical Ranching in Colombia, 1850-1950", Agricultural History 86: 3 (2012): 1-32, y "Labores ganaderas en el Caribe colombiano, 1850-1950", en Historia social del Caribe colombiano, eds. José Polo Acuña y Sergio Paolo Solano (Medellín: La Carreta Editores/Universidad de Cartagena, 2011), 121-161. sk.van20@uniandes.edu.co

DOI: dx.doi.org/10.7440/histcrit51.2013.01


La historia agraria latinoamericana ha vuelto a tomar fuerza en años recientes tras pasar varias décadas en la sombra. El afán por comprender las raíces de los problemas agrarios se había desvanecido, junto con los sueños de un cambio revolucionario; pero en la actualidad el interés por el campo ha vuelto a crecer. Desde múltiples disciplinas y variadas latitudes se han producido grandes esfuerzos, ricos en términos empíricos y teóricos, para repensar la historia del campo latinoamericano. El propósito de este dossier es sondear esta evolución al juntar varios exponentes de lo que se podría llamar, tal vez exagerando un poco, las "nuevas historias agrarias".

Hace veinte años, William Roseberry presentó de manera magistral una visión panorámica de los estudios agrarios latinoamericanos desde mediados del siglo XX1. La historia agraria se había beneficiado de la Revolución Cubana: la sensación de urgencia que desató ayudó a enfocar la atención de los investigadores sobre el campo y su pasado. Un extraño grupo de aliados -"librecambistas, pastores católicos, revolucionarios marxistas, académicos universitarios, técnicos de desarrollo, expertos de las Naciones Unidas, críticos extranjeros visitantes"- señalaron todos los "sistemas tradicionales de la tenencia de la tierra" como la fuente de muchos de los problemas que se estaban enfrentando en América Latina2. Con raíces en el período colonial que se extendieron durante el siglo XIX, el complejo latifundio-minifundio perpetuó la injusticia social, dificultó el desarrollo y generó descontento político. Dado que muchos consideraban que el futuro de América Latina dependía de la posibilidad de liberarse de su pasado rural, la historia agraria era central en el debate político.

No obstante, gran parte de la atención inicial sobre el campo y su pasado se dio a escala nacional y asociada a la justificación de políticas preestablecidas. La importancia del escenario político nacional, así como el deseo de reescribir las historias nacionales al resaltar las estructuras económicas, en vez de las figuras heroicas, determinaron en gran medida el nuevo ámbito narrativo. Dado que los problemas fueron claros desde el inicio, los datos empíricos solían confirmar la necesidad de cambio radical, en vez de servir como punto de partida para un análisis más de fondo. Al confiar en categorías sociales transhistóricas y estereotipos que actuaban de manera predecible, solían construir estos relatos de arriba para abajo. Y con frecuencia se buscaba resaltar las tendencias generalizables, en vez de recrear y aprender de la especificidad de casos particulares. Así, a pesar de la centralidad política de la historia agraria, muchos de los relatos de esta época eran "vacíos desde el punto de vista histórico y sociológico"3.

Sobre este trasfondo, en las décadas de los setenta y ochenta, una nueva generación de estudiosos empezó a prestar más atención a los detalles del cambio histórico y a las relaciones sociales en el campo. Delimitaron el alcance de sus investigaciones a regiones y períodos bien definidos, lo que incentivó la comparación de datos empíricos con conceptos teóricos. Los resultados de estas investigaciones empezaron a mostrar mayor diversidad regional de lo que se había sospechado antes. Además, el trabajo de archivo cuidadoso ayudó a explicar la complejidad social a escalas más pequeñas y finas en distintos contextos. Por una parte, se expuso que las tensiones generadas por la diferenciación social dentro de comunidades, y los aspectos étnicos, políticos, religiosos, de clase y de identidad individual, no eran fáciles de dilucidar. Por otra parte, se empezó a calificar, bajo ciertas condiciones, el poder supuesto de las terratenientes, a extender mayor agencia a los campesinos y a resaltar múltiples fracturas e intereses que se originaban dentro del Estado.

Lo irónico es que, para el momento en que los estudiosos comenzaron a investigar más a fondo y a plantear nuevas preguntas, significativos cambios sociales en América Latina y en otras latitudes quitaron impulso a la disciplina. Por ello, con la crisis de la deuda y el surgimiento del neoliberalismo, la revolución y la reforma agraria fueron desterradas. El sector agrario podía tener un papel en el nuevo orden, siempre y cuando fuera competitivo o generara divisas, lo que muchas veces implicó una reestructuración profunda. Sin embargo, el campo dejó de ser importante en los estudios históricos, por cuanto otros temas como la urbanización y la informalidad, la identidad y la política cultural, la industria de exportación y la globalización, los nuevos movimientos sociales y la democratización, se volvieron los grandes protagonistas de las investigaciones históricas. Por tanto, los estudios rurales perdieron su papel central en las narrativas sobre el desarrollo nacional.

Sin embargo, el campo no desapareció, y en años recientes ha recibido mayor atención. Contrario a los pronósticos recurrentes sobre la desaparición del campesinado o la creciente irrelevancia de la economía agrícola, ambos persisten. La población rural ha permanecido relativamente estable, pese al crecimiento explosivo de las ciudades. La variedad y el alcance de los movimientos sociales rurales ponen en evidencia el continuo protagonismo del campesinado y su relevancia política4. Mientras que regiones y actores han ganado importancia con la reestructuración del campo y la globalización, los viejos problemas de la pobreza y el acceso a la tierra se han entrelazado con temas actuales como la inmigración y la pluriactividad de los hogares campesinos5. Con este panorama, no queda duda de que la reconfiguración neoliberal del campo latinoamericano es una de las fuentes del renovado interés en el campo y en su historia.

Ahora bien, el renovado interés en la historia agraria va más allá que el pasado reciente de temas contemporáneos. Retomando el énfasis de Barrington Moore sobre las raíces rurales del mundo moderno, se puede destacar una creciente conciencia de la necesidad de entender en términos generales el desarrollo histórico del campo latinoamericano6. Otra fuente de vitalidad de la disciplina ha sido la acumulación gradual de ricos y sofisticados estudios de caso. Algunos de estos trabajos han explorado temas tradicionales -como el desarrollo agrario, el carácter del poder de los terratenientes, la movilización rural y las características de la producción agrícola-, pero empleando nuevas fuentes primarias y repensando las narrativas habituales7. Otros trabajos, en cambio, han enriquecido la historia agraria al plantear nuevas preguntas.

De manera especial, los estudiosos interesados en asuntos ambientales han vinculado las transformaciones del paisaje con cambios agrarios y han resaltado las luchas por controlar una variedad de recursos naturales diferentes a la tierra8. Igualmente, los enfoques sobre la comida han ayudado a develar tensiones culturales alrededor del consumo, así como a contextualizar las inseguridades nutricionales y aterrizar las relaciones globales9. Al prestar atención a las instituciones y los negocios rurales, enfatizar cuestiones de género y de identidad y explorar temas de formación del Estado y de la producción del conocimiento científico, entre otros, se ha contribuido a la diversidad y vitalidad de la disciplina10. Estos avances, junto con la renovada preocupación por el campo, están ayudando a revivir el estudio del pasado rural de América Latina.

Los artículos de este dossier, que analizan diferentes momentos entre las décadas de 1870 y 1970 en Argentina, Brasil, Colombia y México, se pueden enmarcar dentro de este campo de renovación historiográfica, y tratan cuatros grandes ejes temáticos: la privatización de la tierra, la política agraria, la ganadería y la historiografía.

En una relación sugestiva entre los estudios sociales de la ley y la historia agraria, Porfirio Neri Guarneros examina la manera en que varias comunidades indígenas del estado de México respondieron a la prohibición estatal de la propiedad corporativa cuando se formaban sociedades agrarias. En el momento en que los funcionarios del estado se negaron a reconocer estas sociedades como entidades legalmente constituidas, las comunidades indígenas lograron aprovechar las ambigüedades de la estructura jurídica apoyándose en los juicios de amparo en un ámbito federal. Asimismo, basándose en una metodología fundamentalmente cuantitativa, Cecilia A. Fandos explora las variadas trayectorias de la privatización de la tierra en la provincia de Jujuy, en el noroccidente de Argentina. Mientras que el Estado vendía las tierras baldías al mejor postor en la región de la Puna, en la Quebrada de Humahuaca se reconocían los derechos de uso de muchos residentes locales. Sin embargo, mediante un análisis cuidadoso de encuestas catastrales, Fandos demuestra que entre 1872 y 1910 el coeficiente Gini mejoró en la Puna y empeoró en la Quebrada de Humahuaca.

En el espacio estudiantil, Juan Pablo Ardila utiliza las correspondencias diplomáticas de Estados Unidos, para entender de manera más cercana algunas de las limitaciones de la influencia imperialista en Colombia durante la década de los treinta. Mientras que la lectura cuidadosa de Silvia B. Lázarro de la política agraria peronista durante los inicios de la década de los setenta resalta su esfuerzo fracasado por revolucionar el campo de manera pacífica. En este artículo se muestran los propósitos del Estado para aumentar la productividad agrícola intentado disminuir el conflicto de clases (al abordar el tema de la justicia social), que finalmente tuvo que enfrentarse con la resistencia de la burguesía agraria después de la muerte del presidente Perón.

El artículo de Marisa Moroni, en cambio, combina el tema clásico del bandolerismo rural con un interés particular en la ganadería. Esta autora, empleando archivos judiciales, entre otros, se introduce en el tema del abigeato para trazar el proceso lento de la formación del Estado en un área de poblamiento reciente a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Por su parte, Robert W. Wilcox analiza de manera más profunda las características de la producción ganadera en Mato Grosso (Brasil). Con las herramientas metodológicas facilitadas por las cadenas de mercancías -más conocidas como commodity chains-, resalta los obstáculos que enfrentaron los ganaderos para mover sus animales hacia mercados distantes. Wilcox también explica cómo la ganadería extensiva era una respuesta lógica a los altos costos y las ineficiencias del transporte por ríos, ferrocarriles y caminos, así como a la falta de asistencia estatal y la competencia de otras regiones.

Por último, Márcia Maria Menendes Motta reexamina los trabajos de Nelson Werneck Sodré y Alberto Passos Guimarães, quienes en las décadas de los años cuarenta y cincuenta fueron los principales exponentes de la tesis según la cual el campo brasileño se caracterizaba por relaciones feudales. Mediante una lectura cuidadosa, Menendes Motta demuestra que estos análisis fueron más abiertos y matizados de lo que generalmente se cree, a pesar de que quedaron atrapados dentro de un marco teórico impulsado en gran parte por las preocupaciones políticas de su tiempo.

Con este breve resumen, algunos puntos temáticos comunes pueden evidenciarse: el difícil proceso de formación del Estado y la cuestión de su autonomía relativa; el impacto y la resistencia a privatizar la tierra o dotarla de una función social; la ley como un escenario de lucha social; las dificultades económicas y políticas para promover la producción rural; y el papel del sector agrario en el desarrollo nacional. Seguramente, para el lector algunos de estos temas le resultarán familiares, y otros, más novedosos dentro de este campo disciplinar. Por lo tanto, este dossier tiene como principal propósito llamar la atención sobre esta variedad e impulsar aún más la renovada vitalidad de la historia agraria de América Latina.


Comentarios

1 William Roseberry, "Beyond the Agrarian Question in Latin America", en Confronting Historical Paradigms, eds. Frederick Cooper et al. (Madison: The University of Wisconsin Press, 1993), 318-368.

2 Solon Barraclough, Agrarian Structure in Seven Latin American Countries (Lexington: Lexington Books, 1973), XXIV. Traducción del autor.

3 William Roseberry, Beyond the Agrarian Question, 328.

4 Marc Edelman, Peasants Against Globalization: Rural Social Movements in Costa Rica (Stanford: Stanford University Press, 1999).

5 Susana Hecht, Susan Kandel y Abelardo Morales, Migración, medios de vida rurales y manejo de recursos naturales (El Salvador: IDRC/Fundación Ford/Fundación prisma, 2012); Daniel Jaffee, Brewing Justice: Fair Trade Coffee, Sustai-nability, and Survival (Berkeley: University of California Press, 2007).

6 Barrington Moore, Social Origins of Dictatorship and Democracy (Boston: Beacon Press, 1966).

7 Ver, por ejemplo: Samuel Amaral, The Rise of Capitalism on the Pampas (Cambridge: Cambridge University Press, 2002) ; Claudio Robles Ortiz, Hacendados progresistas y modernización agraria en Chile central (1850-1880) (Osorno: Universidad de Los Lagos, 2007); Antonio Bellisario, "The Chilean Agrarian Transformation: Agrarian Reform and Capitalist 'Partial' Counter-Agrarian Reform, 1964-1980. Part 1: Reformism, Socialism and Free-Market Neoliberalism", Journal of Agrarian Change 7: 1 (2007): 1-34; Aaron Bobrow-Strain, Intimate Enemies: Landowners, Power, and Violence in Chiapas (Durham: Duke University Press, 2007); Christopher Boyer, Becoming Campesinos: Politics, Identity, and Agrarian Struggle in Postrevolutionary Michoacán, 1920-1935 (Stanford: Stanford University Press, 2003) ; Gloria Isabel Ocampo, La instauración de la ganadería en el valle del Sinú: la hacienda Marta Magdalena, 18811956 (Medellín: Universidad de Antioquia/ICANH, 2007).

8 Reinaldo Funes Monzote, De bosque a sabana. Azúcar, deforestación y medio ambiente en Cuba, 1492-1926 (México: Siglo XXI, 2004); Stefania Gallini, Una historia ambiental del café en Guatemala. La Costa Cuca entre 1830y 1902 (Guatemala: AVANCSO, 2009).

9 Enrique Ochoa, Feeding Mexico. The Political Uses of Food since 1910 (Wilmington: Scholarly Resources, 2000); Steven Topik, Carlos Marichal y Zephyr Frank, eds., From Silver to Cocaine: Latin American Commodity Chains and the Building of the World Economy, 1500-2000 (Cambridge: Cambridge University Press, 2006).

10 Un buen ejemplo de ello: Lee J. Alston, Shannan Mattiace y Tomas Nonnenmacher, "Coercion, Culture, and Contracts: Labor and Debt on Henequen Haciendas in Yucatán, Mexico, 1870-1915", The Journal of Economic History 69: 1 (2009): 104-137; Marcelo Bucheli, Bananas and Business: The United Fruit Company in Colombia, 1899-2000 (Nueva York: New York University Press, 2005); Elizabeth Dore, Myths of Modernity: Peonage and Patriarchy in Nicaragua (Durham: Duke University Press, 2006); Heather McCrea, "Pest to Vector: Disease, Public Health and the Challenges of State-Building in Yucatán, Mexico, 1833-1922", en Centering Animals in Latin American History, eds. Martha Few y Zeb Tortorici (Durham: Duke University Press, 2013), 149-179; Stuart McCook, States of Nature: Science, Agriculture, and Environment in the Spanish Caribbean, 1760-1940 (Austin: University of Texas Press, 2002).


Bibliografía

Alston, Lee J., Shannan Mattiace y Tomas Nonnenmacher. "Coercion, Culture, and Contracts: Labor and Debt on Henequén Haciendas in Yucatán, Mexico, 1870-1915". The journal of Economic History 69: 1 (2009): 104-137.         [ Links ]

Amaral, Samuel. The Rise of Capitalism on the Pampas. Cambridge: Cambridge University Press, 2002.         [ Links ]

Barraclough, Solon. Agrarian Structure in Seven Latin American Countries. Lexington: Lexington Books, 1973.         [ Links ]

Bellisario, Antonio. "The Chilean Agrarian Transformation: Agrarian Reform and Capitalist 'Partial' Counter-Agrarian Reform, 1964-1980. Part 1: Reformism, Socialism and Free-Market Neoliberalism". Journal of Agrarian Change 7: 1 (2007): 1-34.         [ Links ]

Bobrow-Strain, Aaron. Intimate Enemies: Landowners, Power, and Violence in Chiapas. Durham: Duke University Press, 2007.         [ Links ]

Boyer, Christopher. Becoming Campesinos: Politics, Identity, and Agrarian Struggle in Postrevolutionary Michoacán, 1920-1935. Stanford: Stanford University Press, 2003.         [ Links ]

Bucheli, Marcelo. Bananas and Business: The United Fruit Company in Colombia, 1899-2000. Nueva York: New York University Press, 2005.         [ Links ]

Dore, Elizabeth. Myths of Modernity: Peonage and Patriarchy in Nicaragua. Durham: Duke University Press, 2006.         [ Links ]

Edelman, Marc. Peasants Against Globalization: Rural Social Movements in Costa Rica. Stanford: Stanford University Press, 1999.         [ Links ]

Funes Monzote, Reinaldo. De bosque a sabana. Azúcar, deforestación y medio ambiente en Cuba, 1492-1926. México: Siglo XXI, 2004.         [ Links ]

Gallini, Stefania. Una historia ambiental del café en Guatemala. La Costa Cuca entre 1830 y 1902. Guatemala: AVANCSQ, 2009.         [ Links ]

Hecht, Susana, Susan Kandel y Abelardo Morales. Migración, medios de vida rurales y manejo de recursos naturales. El Salvador: IDRC/Fundación Ford/Fundación prisma, 2012.         [ Links ]

Jaffee, Daniel. Brewing Justice: Fair Trade Coffee, Sustainability, and Survival. Berkeley: University of California Press, 2007.         [ Links ]

McCook, Stuart. States of Nature: Science, Agriculture, and Environment in the Spanish Caribbean, 1760-1940. Austin: University of Texas Press, 2002.         [ Links ]

McCrea, Heather. "Pest to Vector: Disease, Public Health and the Challenges of State-Building in Yucatán, Mexico, 1833-1922". En Centering Animals in Latin American History, editado por Martha Few y Zeb Tortorici. Durham: Duke University Press, 2013, 149-179.         [ Links ]

Moore, Barrington. Social Origins of Dictatorship and Democracy. Boston: Beacon Press, 1966.         [ Links ]

Ocampo, Gloria Isabel. La instauración de la ganadería en el valle del Sinú: la hacienda Marta Magdalena, 1881-1956. Medellín: Universidad de Antioquia/ICANH, 2007.         [ Links ]

Ochoa, Enrique. Feeding Mexico. The Political Uses of Food since 1910. Wilmington: Scholarly Resources, 2000.         [ Links ]

Robles Ortiz, Claudio. Hacendados progresistas y modernización agraria en Chile central (1850-1880). Osorno: Universidad de Los Lagos, 2007.         [ Links ]

Roseberry, William. "Beyond the Agrarian Question in Latin America". En Confronting Historical Paradigms, editado por Frederick Cooper, Florencia E. Mallon, Steve J. Stern, Allen F. Isaacman y William Roseberry. Madison: The University of Wisconsin Press, 1993, 318-368.         [ Links ]

Topik, Steven, Carlos Marichal y Zephyr Frank, editores. From Silver to Cocaine: Latin American Commodity Chains and the Building of the World Economy, 1500-2000. Cambridge: Cambridge University Press, 2006.         [ Links ]