EDITORIAL

Clara Eugenia Escobar G.¹

¹ Decana

Los innegables avances científicos de las ciencias médicas y de la salud y la tendencia global hacia la especialización y subespecialización profesional, así como las pretensiones de ampliación de cober tura de los programas y planes de salud de la mayoría de los países, han generado que los sistemas de prestación de servicios se hagan cada vez más complejos e intrincados.

Una persona suele recibir atención sanitaria ya no de un profesional, sino de todo un esquema que incluye administradores, proveedores, productores de insumos, profesionales y personal de apoyo asistencial.

Las últimas décadas, en consecuencia, han visto cómo el número de daños no intencionados a los pacientes durante las distintas etapas de los procesos de atención ha ido en aumento, y cada vez es más difícil controlar todos los diferentes elementos que pueden incidir en la aparición de acciones de atención sanitaria no segura para quienes consultan.

En consecuencia, la Organización Mundial de la Salud ha impulsado una iniciativa global para la seguridad del paciente, que busca generar conciencia en todos los miembros de los sistemas y programas de salud del planeta y en las entidades formadoras de talento humano en salud, acerca de la necesidad de incentivar el trabajo en equipo, la comprensión de los sistemas de atención sanitaria, y de los ámbitos de investigación, para minimizar la ocurrencia de eventos lesivos para las personas, sus familias y sus entornos sociales y laborales. Colombia ha sido uno de los países pioneros en América Latina al proponer, unos lineamientos propios para la adopción de una política nacional en seguridad del paciente.

Como es evidente, la seguridad del paciente está siendo cada vez más tenida en cuenta ya no solo a nivel de los sistemas de prestación de servicios, sino también en los sistemas educativos, buscando siempre reducir al mínimo el riesgo implícito en las acciones propias de la atención en salud.

La Facultad de Odontología, a propósito de la fase que atraviesa el proceso de rediseño curricular institucional, ha iniciado la difusión de esta información, buscando acercar la temática a los profesores y al personal de apoyo, para que entre todos determinemos de qué manera es conveniente integrarla con el plan de formación actual y el que se propone para ser adoptado próximamente. Es necesario que los grupos académicos debatan el tema, y planteen los diferentes enfoques que sirvan de escenario para la formación en seguridad del paciente.