La publicación de un comentario sobre Der Wanderer und sein Schatten [El caminante y su sombra] ha estado ausente en la Nietzsche-Forschung y en lo que se refiere a obra investigativa era un desiderátum. El reciente libro de Tobias Brücker, fruto de su disertación en la Universidad de Zúrick, se posesiona como la primera monografía sobre Der Wanderer [en adelante WS].
El libro de Brücker está constituido en cuatro capítulos: la introducción [1], la sección “Der Wanderer und seine Schatten” [2], le sigue “Konstellationen von Schreiben und Philosophie” [3] y, finalmente, “Auf dem Weg zur Philosophie”. En ese sentido, el texto persigue dos objetivos: los procesos de escritura de WS en el marco de una situación-contexto y el alcance de dicha práctica en cuanto ‘contextualidad’. No solo se trata de un interesante y profundo análisis de WS, sino que dibuja vivamente aspectos del siglo XIX.
Nietzsche publicó Menschliches, Allzumenschliches I [Humano, demasiado humano] en un primer tomo; luego añadió dos escritos: Vermischte Meinungen und Sprüche [en adelante VMS] y WS que conforman Menschliches, Allzumenschliches II [en adelante MA I o MA II]. Los tres textos se encuentran complejamente conectados. Mediante las circunstancias de composición, la construcción del libro evidencia una ‘génesis’ material: “manuscritos impresos, materiales de escritura, cartas, las lecturas” (2).2 La noción de ‘génesis’, por su parte, no se refiere a los orígenes e intenciones primeras, ni a una práctica de procesos de escritura y lecturas en retrospectiva, sino se trata de una ‘genealogía’ que señala los cambios discontinuos.
En los manuscritos de Nietzsche de 1879 se encuentran, por un lado, técnicas de trabajo filosófico, pues el sentido de las palabras no es definitivo, sino que ellas cambian de dirección o significado; de una revisión a otra, en medio de tachaduras o palabras suprimidas, el escrito se modifica como etapa previa del libro acabado. En el marco de la interpretación sobre Nietzsche, WS estuvo alejado de ser considerado una obra filosófica. La intención de Nietzsche jugó un papel importante ya que en 1886 él combinó tanto VMS como WS en MA II; sin embargo, según Brücker, WS debe considerarse, o insistir en ello, como una publicación independiente. La primera parte del libro parte desglosa “cinco razones” que se han postulado en contra del status de obra filosófica de WS.
El segundo capítulo, “Der Wanderer und seine Schatten”, describe la composición y las características internas de WS. Por un lado, se presentan el estado y el método de investigación sobre el libro. El acceso a los manuscritos de WS, entendidos como técnicas de escritura, es posible gracias, por un lado, al proyecto “Der später Nietzsche” que se concentra en las publicaciones de 1885 hasta 1889 [KGW IX] y, por otro, a la edición digital Nietzsche Source, cuyo nombre previo fue HyperNietzsche. Brücker conoce y utiliza muy bien dichas fuentes; en especial se sirve del “dossier génétique”, que apareció originalmente en HyperNietzsche, el cual se trata de una herramienta de referencia que rastrea los procesos de escritura en los manuscritos del siglo XIX. Dicho dossier nació como método en Francia en la década de los 70 y luego pasó al campo de los textos filosóficos. Este marco de investigación científica, en el que WS se discute, estudia las situaciones escritura-experimentales a partir de varios elementos como los espacios geográficos, móviles, a saber, el laboratorio o una biblioteca; de instrumentos, es decir, el lápiz o la máquina de escribir; de formas de organización, ya sea las notas, cuadernos o papeles. Dicho conjunto teje una red de campos interdisciplinarios y se conecta con el proyecto “Zur Genealogie des Schreibens: Die Literaturgeschichte der Schreibszene von der Frühen Neuzeit bis zur Gegenwart” [Sobre la genealogía de la escritura: la historia literaria de la escena de escritura desde los primeros tiempos de la Edad Moderna hasta el presente]. Los libros de Nietzsche, por su parte, se orientan a partir de una ‘teoría de los medios de comunicación’, pues la relación entre la investigación filológica y filosófica se condensa en la edición crítica de sus obras [KGW-KGB] que se posee hoy, gracias a Giorgio Colli y Mazzino Montinari, la cual impulsa “la forma frágil de leer a Nietzsche” (13).
En el contexto general de las publicaciones sobre MA I y M II, WS posee el carácter de fragmentariedad, como un apéndice menor. Incluso para la propia investigación se trata de una obra con una “existencia sombría” (16). Pero su decisiva importancia sobresale en el marco de los manuscritos que componen el texto: por un lado, se deben mencionar las Vorstufe [etapas preliminares] que son la faceta previa al formato impreso y, por otro, el Nachlass [Legado] un conjunto de notas que no tienen necesariamente una conexión con el texto publicado. También existen las Gelegenheitsnotizen [notas ocasionales], las Notate [anotaciones] y Aufzeichnungen [registros] cuya característica es no obedecer a la ley lineal. Los manuscritos así son solo una parte de la génesis en la constitución de una obra.
La siguiente sección, “Befangenheit der Wanderer-Rezeption” [Sesgo en la recepción del caminante], se pregunta por la autonomía e independencia de WS. Por razones filosóficas y filológicas, no es posible llegar a un consenso objetivo. Una tendencia marcada es la relación con el espíritu libre; pero, sin duda, hay aspectos que diferencian a WS con MA I y VMS, como por ejemplo, sus respectivos “cuatro contenidos centrales” (24). A ello añadir la composición de WS en relación a las portadas, en plural; cada una contiene una historia: modificaciones en el título, el formato del libro y su relación con el escrito previo, VMS. La edición de 1886 evidencia que VMS y WS se combinaron en un volumen doble (MA II) y esto forma parte de elementos biográficos del propio libro. Por otro lado, ante una continuidad la división de los aforismos resulta sugestiva, pues MA I posee nueve “piezas principales”, que no se sigue en los otros dos textos.
La escritura de WS inició el 21 de junio de 1879 cuando Nietzsche viajó a St. Moritz, fue terminada en 4 meses y el 18 de diciembre se publicaron los primeros ejemplares. En cuanto a la “situación de la escritura y génesis del caminante” [Schreibsituation und Entstehung vom Wanderer] (34) se distinguen dos momentos: por un lado, el acto de escribir en cuanto sistema de signos y, la forma visible y estática, por otro. La escritura se mueve así en situaciones determinadas por diversos factores; se funda en la vida cotidiana y de ese modo la vida contiene potencial interpretativo, un cruce y tejido de hechos como de encuentros: una integración que se crea entre el ambiente espacial y el acto de escribir. La escritura de WS, según lo anterior, está conectada a los paseos que Nietzsche dio en St. Moritz.
¿Qué tiene en particular St. Moritz? Poseía un auge de turistas en el siglo XIX en medio de la Alta Engadina, un valle al este de Suiza. La popularidad y las visitantes obligaron a que se mejoraran los senderos, los balnearios y el correo; una “metrópolis en miniatura” (S. 39). Junto a la Alta Engadina se encuentran lugares como Chur, Flims, Splügen y Bergün, que crean una imagen portentosa de las montañas y los lagos del lugar. Nietzsche ‘disfrutó’ de los balnearios cuando escribió MA I, VMS y WS. Brücker hila datos importantes de la vida de Nietzsche en el verano y otoño de 1879: vivía solo en una habitación y no en hoteles turísticos; fue la época en la que tuvo más sufrimientos corporales y enfermizos; el periodo en el que dejó la cátedra universitaria y recibió una pensión, un fugitivus errans; es el tiempo donde masivamente vendió y regaló sus libros. Una opinión generalizada sobre los aforismos del filósofo señala que estos son el resultado de varias enfermedades o la debilidad en los ojos; pero, según el autor, el estilo aforístico tiene que ver con los espacios geográficos: Nietzsche tuvo, ante la ausencia de su biblioteca, que citar de memoria las fuentes, como por ejemplo, los aforismos sobre Jean Paul, Gotthold Ephraim Lessing, etc.
La minuciosa reconstrucción de manuscritos, cuadernos, notas, es el reflejo de la composición de WS. Pocas personas fueron testigos del silencioso y paciente proceso que tomaba a Nietzsche publicar un libro. Testigos privilegiados fueron Peter Gast y el editor Ernst Schmeitzner, quienes registraron el intercambio epistolar sobre el proceso de corrección y publicación. Nietzsche fue un cuidadoso y meticuloso juez de la forma del libro impreso, pues lo atestigua la reconstrucción grafica de dicho proceso entre el 21 de junio y 18 de diciembre. WS se publica el 12 de diciembre con 185 páginas y 350 aforismos. Todo lo anterior está bien documentado y aquí hay otra virtud de esta monografía.
En la tercera parte, “Konstellationen von Schreiben und Philosophie” [Constelaciones de la escritura y filosofía], se describe la situación de la escritura y los procesos de producción como potenciales elementos del filosofar. Un primer aspecto tiene que ver con la “Schreiben und Autorschaft” [Escritura y autoría]. Los textos de MA se conforman en gran medida con base en comentarios sobre artistas, compositores y filósofos; al criticar la estética del genio elogia la escritura antigua, pues esta se mueve dentro de las “técnicas, reglas y convenciones” (65). Nietzsche describe los procesos creativos como “Handwerk” [artesanía] (69). Menciona, inspirado en el libro de notas de Ludwig van Beethoven, distintas prácticas de selección, remodelación y las denomina como Urteilskraft [juicio]; como proceso material de pensamiento es efectivo, pues el autor puede borrar o eliminar lo que escribe. Otro ejemplo viene del § 163 de MA I en el que Nietzsche se refiere al oficio de escribir a partir de novelas de ficción: se señalan técnicas de escritura -borradores cortos- recopilación de material, técnica narrativa y técnica de la autoestima (cfr. 71-72). El filósofo alemán distingue así entre el buen novelista y el escritor aficionado; el primero posee la seriedad y la estricta dedicación, como el artesano cuando trabaja, sus novelas son ‘oficios’, un “ejercicio diligente y persistente” (72); para el segundo es mero pasatiempo. Por otro lado, Platón menciona las sombras, en su famosa ‘Alegoría de la caverna’, como símbolo del encierro; Nietzsche, en cambio, sitúa al inicio y al final de WS a la sombra como un valioso interlocutor; él es el acceso al conocimiento. Desde MA I hasta WS el texto refleja movimientos de pensamiento mediante técnicas de escritura, el entorno físico, los materiales. Entonces, ¿qué rol cumple el autor? Apunta, recopila situaciones de escritura en sentido amplio (cfr. 86). La importancia del lugar [la Alta Engadina], los elementos [cuadernos y lápices], los procesos [las caminatas], y el tiempo [el verano] en WS son determinantes.
Tanto la autoría como el pensamiento y la situación de escritura están delimitadas por el contexto. Al inicio de WS se encuentra el diálogo entre el caminante y la sombra, el cual se lleva a cabo durante la luz del sol. El caminante escribe cuando pasea, toma sus notas en el camino: una práctica que Nietzsche fue adquiriendo a partir de 1876. Hay una diferencia entre los pensamientos nacidos en el escritorio y los que se recogen en los paseos, pensamientos de paseo [Geh-danken]. Hay un programa de escritura: el filósofo recoge sus pensamientos en las caminatas; pero los ordena en su habitación en notas o cuadernos. Los siglos XVIII-XIX ofrecen ejemplos de la “escritura del caminar” (89), como por ejemplo, Jean-Jacques Rousseau, Michel de Montaigne, Ludwig van Beethoven, Jonathan Swift y Stendhal, alias de Marie- Henri Beyle (cfr. 89-91). Nietzsche tituló un proyecto “St. Moritz Gedanken-Gänge” enfatizando el año 1789 [prueba de ello se encuentra en M I 2]; en dicho título se aprecia lo fundamental de los elementos materiales: lápiz y el paisaje. Para Nietzsche el “espacio-temporal” forma parte de la autoría y la situación de escritura, como por ejemplo, cuando fechó, como marco de redacción, la creación de Jenseits von Gut und Böse [Más allá del bien y del mal] en el verano de Sils-Maria de 1885.
En el segundo punto, “Schreiben und Lesen” [Escribir y leer], se aboga por una lectura ‘suelta’ (cfr. 107), con miras hacia una ‘política de la lectura’. Es conocida la influencia en Nietzsche de los moralistas franceses en el uso de los aforismos; la lectura filológica es la que caracteriza su forma de escritura: el lector pertenece al arte de la lectura lenta y la reflexión prolongada.3 El aforismo4 se postula como el meticuloso oficio o trabajo de lenguaje ingenioso y pulido. Este cumple dos funciones: siguiendo VMS, despierta un estado de ánimo filosófico y, por otro, es una instrucción filosófica. El aforismo es para Nietzsche un ‘ideal’ de escritura, y no su estricto estilo (cfr. 117); por otro lado, dicho estilo cambia y tiene otras características en WS: la distribución de aforismos, no se guía por un orden coherente. Brücker analiza el sentido de la expresión locker [suelto] como quien escribe de manera espontánea, sin restricciones o ataduras. Nietzsche se va desprendiendo de las cadenas estilísticas y desde 1876 posee un estilo “más suelto” (121). Una nota que se encuentra en los archivos (N IV I) refleja que él tituló su obra como “El caminante y su sombra. Una charla en el camino” [Ein Geschwätz unterwegs]. Esta sección destaca el interés de Nietzsche por la literatura cómica, por los libros sátiricos y divertidos, a saber, la literatura humorística inglesa de Mark Twain, Laurence Sterne y Jonathan Swift.
En “Schreiben und Diätetik” [Escritura y dietética] Brücker considera que entre MA I y WS Nietzsche cambió del espíritu libre a la vida individual. Este acento se halla en el título de la nota: “Die Lehre von den nächsten Dingen” [La enseñanza de las cosas cercanas]. Por un lado, Nietzsche evalúa los límites de la ciencia y este entusiasmo va perdiendo fuerza a partir de WS. Lo valioso no es el texto o la información que se recibe, sino lo cercano e incluso lo ‘más cercano’. En un Nachlass [Fragmento póstumo] de 1879 el filósofo menciona una receta de las cosas cercanas: el interés por la comida, la vivienda y la calefacción. Las “cosas próximas” son lo cercano, el diario vivir, la comida. La dietética entonces no solo es un conocimiento de cuidados, sino también una descripción de la aplicación a uno mismo. Nietzsche conocía muy bien la importancia de la vida cotidiana, por ejemplo, al mencionar que los ‘huevos alargados son los más sabrosos’. La dietética tiene una relación con la política cultural, en el marco del proyecto del espíritu libre. La mejora de la cultura es el tema de MA I, en cambio, MA II se centra en la salud y la vida cotidiana a partir del cuerpo. Como prueba de ello, se realiza una descripción del espíritu dietético en el siglo XIX.
La enseñanza de las “cosas cercanas” (172) es un discurso de uso popular contemporáneo, que incluye las lecturas de textos, autores y la literatura conocida del siglo XIX. Nietzsche estuvo conectado con dicha literatura, en especial por sus comentarios sobre la salud, tal como se puede encontrar en su biblioteca privada. Dos libros, en ese sentido, son de especial interés: Die ärztliche Zimmergymnastik de Daniel Gottlob Moritz Schreber y Das Buch vom gesunden und kranken Menschen de Carl Ernst Bock. La dietética de Nietzsche no obedece al mundo griego exclusivamente, sino a la literatura dietética de ese entonces.
La última parte, “Schreiben und Demokratie” [Escritura y democracia], analiza la posición política de Nietzsche en relación a la democracia. Desde MA I Nietzsche señala los límites de la misma; pero en WS se acerca a ella no de forma sistemática, sino en varias secciones a lo largo del libro (cfr. 199). Brücker desglosa 10 posibles consideraciones sobre la democracia (cfr. 199-212). La Ilustración es el correctivo de la democracia, pues los ciudadanos educados tendrán una función que media tanto la primera como la segunda. Nietzsche comprende que la democracia es imparable y en ese sentido aboga por una Ilustración del individuo. La democracia, por su parte, tendría una relación con el autor-artesano y con la dietética, pues el propio concepto va más allá de la esfera política a partir de dos cuestiones: “allmählich” [lo paulatino] orientado hacia la Ilustración y “plötzlich” [lo repentino] orientado hacia la revolución (cfr. 213). En cuestión, Nietzsche no posee una teoría sobre la democracia, sino que sus puntos de vista son favorables a la misma en razón del modelo temporal ‘estético’. Al final WS representa una democracia profiláctica preventiva que está conectada con la exigencia de una auto-Ilustración y los modos de escritura. La democracia ofrece la libertad de expresión y Nietzsche había pensado que sus obras estarían inscritas en ella.
El último capítulo, “Auf dem Weg zur Philosophie” [En camino a la filosofía], parte de aspectos biográficos de Nietzsche. Desde que dejó la cátedra en Basilea hasta que escribió WS él pensó en reiteradas veces escribir Miscellenbüchern [libros misceláneos] como ejemplo de una relación entre el autor y el respectivo contexto- material de escritura. Acentuó fuertemente el flujo de redacción y la forma de libro en un nivel elevado de productividad. Otro tópico frecuentado por los investigadores tiene que ver con la expresión “Philosophie des Werdens” [filosofía del devenir]: la misma no ofrece pensamientos definitivos, sino tan solo opiniones de Nietzsche; conectados con la forma real y viva, no meramente intelectual, dicha “filosofía del devenir” socaba el formato autor-filosófico. En definitiva, la escritura de St. Moritz tiene un aspecto experimental, en el sentido de ‘taller de filosofía’, pues se trata de pensamientos experimentales,5 conectados con el paisaje, los paseos, la dieta, el cuaderno y el lápiz.
En general, el detallado, minucioso estudio de Brücker abre un nuevo sendero en el tupido campo de interpretaciones sobre Nietzsche. El valor de su trabajo no solo resuelve la promesa de una obra sobre WS, sino que cierne sobre sí el propio trabajo filosófico, la materialidad de la escritura. Desde MA I, pasando por VMS hasta WS los métodos de trabajo, en plural, de escritura son frecuentes y tienen una importancia indiscutible junto con el trabajo artesanal tanto como las caminatas y la vida cotidiana. Nietzsche llevaría entonces el título de ‘cercano a las cosas’ a la hora de escribir; y al parecer es una tendencia de la presente obra. Se deja en suspenso la ‘reducción performativa’, es decir, la ‘materialidad’ como punto culminante podría ser socavada con aspectos del Nietzsche posterior; aunque el texto afirme que las “cosas cercanas” están presentes en dichas obras. Sin embargo, lo anterior obedece a otros márgenes de interpretación. En definitiva, el libro de Brücker debe recomendarse sin duda para el interesado en Nietzsche.