SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número39PresentaciónLas lógicas de la competencia electoral en escenarios locales: Medellín, 1988-2007 índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • En proceso de indezaciónCitado por Google
  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO
  • En proceso de indezaciónSimilares en Google

Compartir


Estudios Políticos

versión impresa ISSN 0121-5167versión On-line ISSN 2462-8433

Estud. Polit.  n.39 Medellín jul./dic. 2011

 

SECCIÓN TEMÁTICA: PARTIDOS POLÍTICOS Y ELECCIONES

 

Mecanismos en la transformación política en Cali: fragmentación partidista, electorado cambiante y responsabilidad política (1988-2007)*

 

Mechanisms in the Political Trans formation of Cali: Party Fragmentation, Changing Electorate and Political Accountability (1988-2007)

 

 

María Teresa Pinto Ocampo1

 

1 Politóloga y magíster en Estudios Políticos y Ciencia Política. Profesora e investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales (IEPRI) de la Universidad Nacional de Colombia. Correo electrónico: mariatepi@yahoo.com.mx

 

Fecha de recepción: enero de 2011
Fecha de aprobación: octubre de 2011

 

Cómo citar este artículo: Pinto Ocampo, María Teresa. (2011). Mecanismos en la transformación política en Cali: fragmentación partidista, electorado cambiante y responsabilidad política (1988-2007). Estudios Políticos, 39, Instituto de Estudios Políticos, Universidad de Antioquia, (pp. 75-94).

 


Resumen

Este artículo examina la dinámica política en Cali tras la introducción de la elección popular de los ejecutivos locales y regionales, con el objetivo de entender los mecanismos del cambio político institucional. Describe la dinámica política en Santiago de Cali desde 1988 y presenta algunos mecanismos que explican las transformaciones sufridas en el sistema político local. Los mecanismos en los que enfatiza son las innovaciones en las formas de hacer política en el campo electoral, la fragmentación no exitosa del Partido Liberal, los cambios institucionales sufridos por la introducción de la responsabilidad electoral de los ejecutivos locales y, finalmente, los cambios en el electorado caleño.

Palabras clave: Política Local; Elección Popular; Democracia Local; Alcaldes; Sistema Político Urbano; Cali, Colombia.


Abstract

This article examines the politic al dynamics in Cali (Colombia) after the introduction of the local and regional popular election of executives in order to understand the mechanisms of institutional political change. First, it describes the political dynamics in Santiago de Cali in 1988 and, finally, presents some mechanisms that explain the transformations undergone in the local political system. The main political mechanisms here underscored are: innovations in the forms of electoral politics, the Liberal Party's unsuccessful fragmentation, institutional changes suffered by the introduction of electoral accountability of local executives and, finally, changes in Cali voters.

Keywords: Local Politics; Popular Election; Local Democracy; Mayors; Political Urban System; Cali, Colombia.


 

 

Introducción

Este artículo analiza los efectos políticos de la introducción de la elección popular de alcaldes en la ciudad de Santiago de Cali desde la óptica de la transformación en los sistemas políticos urbanos producto de los cambios en las reglas de juego de la democracia formal. Para lograr este propósito el artículo avanza en los elementos descriptivos y analíticos sobre la configuración de la dinámica política urbana desde 1988 para evaluar la introducción de la democracia en el ámbito del ejecutivo, sus efectos diferenciales sobre la política local y los mecanismos del cambio político institucional.1

El documento está estructurado en tres partes. Primero, describe la dinámica política institucional en Santiago de Cali desde marzo de 1988 y hasta la elección de Jorge Iván Ospina (2007), enfatizando en los procesos de selección de los candidatos, las votaciones obtenidas (tanto del ejecutivo como del legislativo local), las propuestas electorales, los marcos institucionales y sus cambios, las bases sociales de los proyectos urbanos, entre otros. Segundo, exhibe algunos mecanismos que explican las transformaciones sufridas en el sistema político urbano a fin de identificar algunas conexiones causales que pueden aportar en la agenda comparativa de la política local. Finalmente, presenta algunas reflexiones finales.

 

1. Cali y la implantación de la elección popular de los ejecutivos locales

1.1 Contexto político de la elección popular de alcaldes

La ciudad de Santiago de Cali, como buena parte de las ciudades de Colombia, estuvo dominada políticamente por las élites económicas locales, particularmente, por el sector agroindustrial liderado por la industria azucarera (Blasier, 1966, p. 406). Este monopolio se veía reforzado por el nombramiento, por parte del Presidente de la República, del Gobernador y, por este último, del Alcalde. El ejecutivo regional y el local eran, sobre todo, sensibles a los intereses de las élites locales y los esfuerzos con respecto al resto de los sectores sociales tenían como objetivo alivianar las condiciones adversas y no cambiar las estructuras de poder. Con la puesta en marcha del acuerdo político entre los partidos tradicionales que se expresó institucionalmente en el Frente Nacional (1957-1974), la paridad entre los partidos también se reflejó en los gobiernos locales. Todos los miembros de la burocracia política eran obligados a identificar su afiliación partidista como parte del proceso de selección del personal político y con base en esto se distribuían los puestos (Cf. Blasier, 1966, pp. 402).

Si bien en términos de filiación política, Cali ha sido considerada tradicionalmente como una plaza roja (Cf. Rozman, 1975, p. 248-249), de manera temprana la ciudad se configuró como un espacio de movimientos cívicos y discursos alternativos en Colombia. En cuanto a la configuración de espacios institucionales de mediación, en las décadas 1970 y 1980 la presencia del Movimiento Revolucionario Liberal (MRL), del Partido Comunista, de la Alianza Nacional Popular (Anapo), de la Unión Nacional de Oposición (UNO) y de diversos movimientos cívicos, configuraron a la capital del Valle como un espacio propicio para el florecimiento de discursos antipartido y alternativos a las organizaciones políticas tradicionales. Por ejemplo, en 1970 la Anapo llegó a obtener nueve concejales que, aliados con el concejal del Partido Comunista, constituían la mitad del concejo de la ciudad (Cf. Vásquez, 2001, p. 283). Asimismo, en las elecciones presidenciales que enfrentaron al candidato oficial del Frente Nacional, Misael Pastrana, y al exgeneral Gustavo Rojas Pinilla, en el Valle y Cali los resultados fueron ampliamente favorables para el segundo, quien además logro la mayoría en todos los Concejos Municipales (Cf. Éder de Zambrano, 1995, p. 342). Años más tarde, en la ciudad se desplegó un discurso anticorrupción liderado por el conocido ''populismo radial'', a cargo de José Pardo Llada (quien llegó a tener 7 concejales en 1978 y 1980) y de Henry Holguín Cubillos y Humberto Pava Camelo (a finales de 1980) (Ramos y Moreno, 1993). Ambos proyectos presentaron candidaturas a la primera elección popular de alcaldes: José Pardo Llada (Partido Movimiento Cívico) con la agenda de legalización de las invasiones de tierras y Henry Holguín Cubillos (Movimiento de Acción Social) con la propuesta de disminuir el costo de los servicios públicos,2 este último obtuvo significativo apoyo en los estratos bajos de la ciudad (Cf. Mercado y Hoyos, 1992) y perdió por muy pocos votos frente al candidato oficial del liberalismo, Carlos Holmes Trujillo.

En cuanto a los espacios no institucionales e informales de intermediación, como los movimientos sociales, durante 1970 se movilizó la ciudad bajo la consigna de lucha por la vivienda y los servicios públicos, liderada por los emigrantes que en las décadas previas habían ocupado la ciudad (Cf. Vásquez, 2001, pp. 266-278). Estos procesos organizativos en torno a demandas específicas fueron utilizadas por los políticos tradicionales (bajo la figura del ''padrino político'') y por grupos de empresarios (por ejemplo, la Fundación Carvajal) para transar estas demandas de manera formal y no formal a cambio de apoyo electoral o estabilidad social. Prácticas que se remontan a 1947-1951 cuando líderes políticos promovían invasiones de los ejidos de Cali y de predios particulares no urbanizados (Cf. Éder de Zambrano, 1995, p. 227) y cuando la invasión de predios era un mecanismo utilizado para resolver el problema social de la vivienda en Cali; lo que generó redes políticas y liderazgos no institucionales de los empresarios locales con el objetivo de mediar en las confrontaciones surgidas, a través del principio de la ''solidaridad'' bajo la matriz de los beneficios y no de los derechos.

En este sentido, la elección popular de alcaldes encontró a Cali con un modelo de gobierno en el que se autorrepresentaban las oligarquías o los miembros del poder económico (Cf. Sáenz, 2005). Esta hegemonía era ejercida y garantizada gracias a la construcción y reconstrucción de la identidad y la mentalidad ''caleña'', desarrollada por medio de dos prácticas para garantizar el dominio de los sectores políticos tradicionales y reducir los niveles de tensión social: la filantropía de algunos dirigentes urbanos en favor de los sectores populares (Cf. Camacho, 1986) y la estrategia de construcción cultural de Cali como una ciudad de consumo y goce —una ciudad bella, amable, deportiva y salsera— (Cf. Camacho, 1986; Velásquez y Muñoz, 1990; Velásquez, 1996a y 1996b; Ocampo Cepeda, 2008). La eficacia de este proceso de dominación se expresa en la favorabilidad que tenían los empresarios frente a los políticos como alcaldes a finales de los ochenta cuando una encuesta mostró que 43,5% de los caleños preferían a los empresarios frente al 26,2% que escogía a los políticos (Velásquez y Muñoz, 1990, p. 57).

Estos determinantes tradicionales del apoyo popular, como la emotividad y el afecto hacia los líderes tradicionales y sus partidos políticos, se fueron transformando de la mano de los cambios políticos puestos en marcha con el proceso de descentralización política. Los partidos tradicionales lentamente empezaron a perder liderazgo político en la localidad y surgieron nuevos movimientos entre los que resalta el Movimiento Cívico (bajo el liderazgo de José Pardo Llada) a principios de la década de 1980, y el Movimiento de Acción Social (bajo la tutela de Henry Holguín Cubillos y Humberto Pava Camelo) en 1987. Finalmente, la hegemonía de los partidos tradicionales en el ejecutivo local se rompe cuando Jhon [sic] Maro Rodríguez gana la alcaldía (periodo 2001 a 2003).

1.2 El sistema político urbano tras la elección popular de alcaldes

La primera elección popular de alcaldes (13 de marzo de 1988) estuvo institucionalmente enmarcada en el ''efecto arrastre'' ya que las elecciones regionales y locales coincidían con las elecciones legislativas (1986, 1988 y 1990). En este contexto, los primeros gobiernos ejecutivos elegidos popularmente en Cali mantuvieron en las urnas la lógica bipartidista heredada del Frente Nacional: entre 1988 y 1990 el Partido Liberal alcanzó la alcaldía con Carlos Holmes Trujillo García (con 77.365 votos)3 y en la gobernación fue nombrado Carlos Holguín Sardi del Partido Conservador. Según las propuestas políticas presentadas en la lucha electoral por la alcaldía en 1988, la agenda política estuvo enmarcada en las propuestas de recuperación y revisión de las Empresas Municipales de Cali (Emcali), la reducción de las tarifas de los servicios públicos y el no desalojo y posterior legalización de terrenos invadidos (Cf. Astudillo, 1995) y los resultados electorales estuvieron muy cerrados entre el candidato Liberal y Henry Holguín Cubillos por el Movimiento de Acción Social (quien obtuvo el apoyo de 70.214 ciudadanos).

En 19904 los partidos intercambian corporaciones con el Partido Conservador en la alcaldía (Germán Villegas Villegas con una votación de 107.802 votos5) y en la gobernación el liberal Mauricio Guzmán Cuevas (a quien sucede Luís Fernando Cruz en 1991).6 Igualmente, el Concejo estuvo constituido por mayorías provenientes de los partidos tradicionales, en 1990 de los 20 concejales los liberales lograron once curules y los conservadores siete. Gran parte del fracaso del Partido Liberal en mantener la Alcaldía de Cali estuvo mediada por la disputa interna entre las dos facciones de la organización en el Valle. En 1987 las dos corrientes del liberalismo en el Valle, el sector liderado por Carlos Holmes Trujillo y el conducido por Gustavo Balcázar Monzón, realizan un pacto para unir sus fuerzas en torno a la candidatura propuesta por cada corriente a la alcaldía de Cali en 1988 y 1990, respectivamente. Tras la elección de Trujillo García (hijo de Carlos Holmes Trujillo) en 1990 esta corriente declaró falta de garantías para cumplir el pacto con el sector de Balcázar y lanzó candidato propio, generando una ruptura en el Partido Liberal entre el candidato oficial (Federico Renjifo [sic] Vélez) y José Renán Trujillo (liberal disidente) (Cf. Clavijo, Soto y Vidal, 1992, p. 51).

De esta forma, durante esta primera etapa, los líderes electos eran herederos políticos de las tradicionales casas de la región y afrontaron el recrudecimiento de la violencia urbana en la ciudad, tanto por la presencia de las guerrillas como por el impacto del narcotráfico. Hito de este proceso es el intento de secuestro del alcalde, en junio de 1991, por parte del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el que resultó herido el hermano del alcalde (Diego Villegas Villegas) y fueron asesinados dos policías. Según comunicado del ELN, el plan pretendía secuestrar al alcalde para fiscalizar su gestión, entre otras cosas, para que rindiera cuentas de las investigaciones sobre corrupción y malversación de fondos en Emcali.7 De igual forma, varios concejales liberales fueron asesinados entre 1990 y 1991 (Heberth Orlando Carmona, del movimiento Avance Liberal Ya, y Luis Alfredo Restrepo) y otros heridos en atentados (como el expresidente del Concejo Reinaldo Sánchez Mayork).

Para la década de 1990, el Partido Liberal profundiza su crisis en el Valle perdiendo de manera consecutiva la gobernación (elecciones de octubre de 1991) y la alcaldía (elecciones de marzo de 1992) a manos de los conservadores Carlos Holguín Sardi y Rodrigo Guerrero Velasco, respectivamente. Durante estas elecciones se estrena la separación de las elecciones regionales de las elecciones legislativas, como lo había establecido la recién aprobada Constitución de 1991.8 El conservador Rodrigo Guerrero Velasco se presentó como candidato avalado por el movimiento Fuerza Cívica por Cali que le permitió obtener el respaldo tanto de las fuerzas tradicionales del conservadurismo (como Rodrigo Lloreda, Humberto González y Carlos Holguín) como de movimientos alternativos: Nueva Fuerza Democrática, Movimiento de Salvación Nacional, Alianza Democrática M-19 (AD M-19), Unión Patriótica (UP), Movimiento Unitario Metapolítico y el soporte de liberales independientes.9 En las urnas lo respaldaron 110.733 ciudadanos. Guerrero estuvo acompañado en su gestión por un Concejo con mayoría conservadora (con diez curules conservadoras, ocho liberales, una de la coalición AD M19-Anapo y otra del C4 Compromiso Cristiano con la Comunidad) y fue un alcalde con significativo apoyo popular durante su administración.10

En los comicios de octubre de 1994 coinciden por primera vez las elecciones de gobernadores, alcaldes, diputados, asambleístas y ediles. El mandato ejecutivo de 1995 a 1997 lo repiten los líderes que habían ejercido el mandato en 1990 intercambiando despachos: Guzmán Cuevas de alcalde (ahora como liberal independiente con 129.039 votos) y Villegas Villegas de gobernador (ahora como candidato cívico). Este proceso electoral se definió por la formación de una alianza política entre el Partido Liberal y el Conservador (llamada La Clave) aprovechando la concurrencia en el calendario electoral de estas dos corporaciones para distribuir la alcaldía y la gobernación, al mejor estilo del Frente Nacional. En este contexto, la candidatura de Guzmán fue apoyada por los principales grupos conservadores orientados por Rodrigo Lloreda Caicedo y Carlos Holguín Sardi y, como parte del acuerdo, Francisco José Lloreda es nombrado como director de Planeación Municipal. Fruto de la operación avispa del Partido Liberal, Guzmán compitió contra los liberales Álvaro Fernando Quintero y Claudio Barrero Quijano.

La alcaldía de Guzmán concluye abruptamente el 27 de agosto de 1997 cuando este renuncia a su cargo y se entrega a la justicia por la medida de aseguramiento sin beneficio de excarcelación que reposaba en su contra por el delito de enriquecimiento ilícito.11 Era la tercera vez que el liberalismo no terminaba un mandato. En la primera elección popular de alcaldes renuncia Carlos Holmes Trujillo García (siendo remplazado por el Secretario de Gobierno) y, en octubre de 1991, Guzmán había renunciado al cargo de Gobernador del Valle, pues sectores del liberalismo y algunos diputados lo habían acusado de participar en política para favorecer, incluso con dineros, a los candidatos Yolima Espinoza, a la Cámara, y a Guillermo Panchano, al Senado.

Los comicios de 1997 se enmarcaron en la crisis nacional de representación del Partido Liberal por la vinculación del narcotráfico en la campaña presidencial de Ernesto Samper Pizano (1994-1998) y una profunda crisis económica que se vio reflejada en el desempleo y en la inequidad. En el caso de Cali, el desempleo en las comunas más pobres ascendió al 30%, mientras que las más ricas solo al 10%, asimismo la pobreza y la miseria aumentaron de 30 al 40% y del 5,3 al 10% entre 1994 y 1998, respectivamente (Cf. World Bank, 2002, pp. 27 y 42). Cali fue la única ciudad grande de Colombia donde se aumentó tanto la concentración del ingreso como la inequidad durante esta crisis económica (Cf. World Bank, 2002, pp. 27 y 42).12 En este escenario se inicia el proceso de descongelamiento del sistema político en el departamento del Valle del Cauca y en el municipio de Santiago de Cali.

En las elecciones de 1998 son derrotados los candidatos de las élites económicas y empresariales. En la alcaldía Francisco Lloreda, avalado como candidato independiente, fue vencido por el conservador holguinista Ricardo Cobo Lloreda (con 160.816 votos),13 y en la gobernación dominó Gustavo Álvarez Gardeazábal frente a Carlos Holguín Sardi. Durante la campaña, Cobo Lloreda trató infructuosamente de replicar la exitosa alianza entre liberales y conservadores del periodo anterior (La Clave) pero Lloreda se negó a participar de esta alianza. En cuanto a la presencia del conservadurismo en el Concejo Municipal, durante estas elecciones se pierde la mayoría del periodo anterior. La gestión de Cobo Lloreda dejó las finanzas del municipio en crisis lo que condujo a la intervención de Emcali en 2000 bajo el argumento de su inviabilidad financiera.14 Frente a la falta de liquidez de Emcali, el alcalde Cobo propuso vender activos para capitalizar la empresa, poniéndose a tono con los intereses de los empresarios de la región quienes en 1996 habían empezado a ''hacer público su propósito de privatizar a Emcali, argumentando que en el nuevo marco de la globalización de la economía, el aumento de la demanda en infraestructura requiere elevados niveles de inversión'' (Cf. Celis, 2004a, p. 160; 2004b).

En 2000 se produce la primera elección popular de un candidato independiente y sin vínculos previos con la clase política y económica de la ciudad. Antes de ser elegido alcalde John Maro Rodríguez (2001-2003) ejercía como locutor de un popular noticiero de la cadena radial RCN (Las Noticias de Calidad), donde denunciaba la corrupción al mejor estilo del populismo radial de los años previos. Desde este espacio se lanzó para alcalde por el Movimiento Autonomía Ciudadana, liderando desde temprano las encuestas realizadas15 con la consigna ''Una propuesta de la gente decente''. Maro Rodríguez derrotó a los candidatos apoyados por los dirigentes tradicionales y los empresarios; por un lado, la exparlamentaria liberal Margarita Londoño, del movimiento Huella Ciudadana, y por otro lado, al exministro de Salud, Gustavo de Roux. Su candidatura no obtuvo apoyos políticos de la dirigencia tradicional del Valle o Cali pero sí de las organizaciones sociales de base. Producto de la gramática de confrontación de la contienda electoral con los liderazgos tradicionales, durante su mandato las relaciones con el Concejo Municipal se desenvolvieron en una permanente confrontación, en la cual los concejales bloqueaban las iniciativas del mandatario local.

Las administraciones locales y regionales de Maro Rodríguez y Villegas Villegas afrontaron el recrudecimiento de la guerra urbana de las FARC, con el secuestro de los diputados del Valle del Cauca en abril de 2002 que generó una situación de zozobra entre la ciudadanía. La gestión de Maro Rodríguez estuvo marcada por la crisis económica más grande de la historia del municipio, que se expresó en el no pago de las obligaciones financieras y en la firma de un acuerdo con el gobierno nacional.16 Gracias a la movilización del Sindicato de Trabajadores de las Empresas Municipales de Cali (Sintraemcali) y a la gestión del alcalde, se alcanzaron varios acuerdos con respecto a Emcali que implicaron un ahorro por concepto de intereses y un compromiso del gobierno nacional a no privatizar ni parcial ni totalmente la empresa.17 Sin lugar a dudas el forcejeo entre el gobierno nacional —apoyado por los empresarios locales quienes estaban a favor de la privatización de la empresa— y el gobierno municipal —a cargo de Maro Rodríguez y Sintraemcali quienes se oponían a esta iniciativa— marca un hito de la ruptura entre las élites económicas y los proyectos de gestión de ciudad. Las palabras de uno de los líderes del movimiento del sindicato, Alexánder López, daban cuenta de esta situación: ''Hoy declaro oficialmente que ningún trabajador de las Empresas Municipales de Cali le debe su trabajo a ningún político, se lo debe al pueblo de Cali'' (citado por Celis, 2004a, p. 169), con lo que hacía referencia a las épocas pasadas en que Emcali era considerado botín de los gobernantes locales. Al finalizar el mandato de John Maro Rodríguez el municipio tenía las finanzas saneadas y estaba reglamentado el cobro del incremento del precio comercial del suelo causado por la acción urbanística del municipio.18

Con la llegada al ejecutivo local de Apolinar Salcedo Caicedo (2004- 200719) del Movimiento Sí Colombia y Jorge Iván Ospina Gómez (2008-2011) del Movimiento Podemos Cali, la ciudad se consolida como una plaza independiente, donde la fractura de clase se politiza en las elecciones para alcalde. La gobernación del Valle del Cauca también mantuvo este rumbo con el triunfo del exministro y exdirigente sindical Angelino Garzón, por el Movimiento Convergencia Popular Cívica (periodo 2004-2007), y Juan Carlos Abadía Campo, por el Movimiento por un Valle Seguro20 (con 676.199 votos, periodo 2008-2011). Garzón derrotó a los líderes tradicionales de los partidos políticos: al conservador Carlos José Holguín Molina (hijo de Carlos Holguín Sardi, líder tradicional del Partido Conservador) y al liberal Carlos Holmes Trujillo García (primer alcalde elegido popularmente en Cali y Ministro del Interior de Ernesto Samper), pese a las acusaciones de ambos candidatos de que un triunfo de Garzón comprometería la seguridad democrática establecida por el presidente Álvaro Uribe. Garzón alcanzó más del 60% de los votos frente al 14 de Carlos Holmes Trujillo García, por el Partido Liberal, y el 8 de Carlos José Holguín Molina, del Partido Conservador.

Desde las primeras encuestas de intención de voto en la campaña de 2003, Salcedo contaba con mayor aceptación en los estratos medio y bajo. Por su parte Lloreda Mera, conservador avalado por un grupo independiente, era favorito en el estrato alto y contaba con el apoyo del exalcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, y de varios congresistas uribistas como Germán Vargas Lleras y Claudia Blum (El Tiempo, 2003, octubre 23, ''La lucha por las alcaldías'' y 2003, octubre 22, ''Salcedo, favorito para ganar alcaldía de Cali'').21 Esta ruptura socioeconómica del electorado caleño se conservó en la contienda de 2007 que enfrentó nuevamente a Francisco Lloreda Mera con Jorge Iván Ospina. Los datos presentados por Pinto (2008) y Herrera (2008) sobre intención de voto y resultados electorales revelan que Ospina gozaba del apoyo de los electores en los estratos bajos mientras que Lloreda se mantenía posicionado en los estratos altos.

Los apoyos que permitieron estas victorias en las urnas fueron variadas. Salcedo estaba respaldado por el Polo Democrático Independiente y, tras el retiro del candidato oficial del Partido Liberal Jaime Baena, por el bajo desempeño en las encuestas de intención de voto, recibió el aval de esta agrupación. Igualmente, fue favorecido por los vistos buenos de las congresistas Dilian Francisca Toro y María Isabel Urrutia, de los concejales liberales Tyrone Carvajal, Marino del Río y Roosevelt Rodríguez y del Movimiento Colombia Viva.22 Por su parte, las alianzas de Ospina fueron diversas, pero significativas: la entrega del bastón de mando por parte de las comunidades indígenas de la ciudad, el apoyo de los afrodescendientes y el favor de la agrupación política Convergencia Ciudadana. Apolinar Salcedo, finalmente, logra el respaldo de 177.477 ciudadanos y Jorge Iván Ospina de 268.950 votantes durante los respectivos comicios. En ambos casos derrotando al conservador Francisco José Lloreda Mera, en 2003 con el aval del Movimiento Cívico Independiente (cuando obtuvo 149.209 votos) y en 2007 con la agrupación política Cali una Nueva Ciudad (logrando 222.198 votos).

En cuanto a la distribución partidista del Concejo Municipal, las organizaciones tradicionales y sus fracciones siguieron dominando la escena, materializando la fractura en la Alcaldía y el Concejo que García (2002 y 2003) y Guzmán Pardo (2005) mostraron para el caso de Bogotá. Para el periodo 2004-2007 tenemos los resultados del cuadro 1:23

 

 

Para el período 2008-2011, el Concejo de Cali estuvo conformado tal
como se muestra en el cuadro 2:

 

24

 

Si bien los partidos tradicionales perdieron curules con respecto del periodo anterior (el Partido Conservador pasó de 8 a 6 y el Partido Liberal de 6 a 3), en la práctica lo que ocurrió fue que los miembros de estas colectividades se integraron a otros partidos y salieron elegidos por ellas: Tyrone Carvajal y Jorge Eliécer Tamayo se vincularon al Partido de la U y Carlos Andrés Clavijo a Cambio Radical.25

 

2. Elementos y mecanismos que explican las transformaciones en la política urbana en Cali

A partir de la presentación descriptiva de la dinámica política urbana, tras la introducción de la elección popular de alcaldes (y la de gobernadores), el presente apartado propone una primera explicación que identifique los mecanismos y procesos causales que generaron las transformaciones que sufrió la ciudad en el escenario de la política local. Los principales mecanismos identificados son: la innovación en las formas de hacer política, la fragmentación no exitosa del Partido Liberal, la responsabilidad popular de los ejecutivos locales y las transformaciones del electorado.

2.1 Innovación en los ropajes políticos

Una innovación en la forma de hacer política introducida por los líderes provenientes de los partidos tradicionales fue presentarse a los comicios con caparazones organizativos ''cívicos'' y alternativos. Si bien la política urbana había tenido previamente importantes movimientos cívicos, tras la elección popular de alcaldes, esta estrategia fue introducida por los dirigentes políticos tradicionales de manera exitosa (y no exitosa). Un dirigente del Partido Conservador, Rodrigo Guerrero,26 fue quien por primera vez salió vencedor del proceso de decoloración de su camisa ideológica. Su historia como director ejecutivo de la Fundación Carvajal desde 1982 donde había liderado importantes iniciativas en los sectores deprimidos de Agua Blanca, le permitió desarrollar un discurso cívico que le era propio y proponer que la creciente inseguridad que aquejaba a la ciudad era ''síntoma de un grave deterioro social''.27

El caso más emblemático de fracaso en la decoloración partidista fue el de las tres campañas del candidato conservador y miembro de la élite política y económica, Francisco José Lloreda Mera (jornada electoral de 1997, 2003 y 200728). Durante estos procesos electorales Francisco Lloreda no logró, de manera eficaz, situarse como un candidato independiente de las minorías selectas y el respaldo exclusivo de estos sectores no fue suficiente para ganar las elecciones.

La innovación en los membretes partidistas que produjo el descongelamiento del bipartidismo, pasando de un Concejo Municipal en 1990 con 18 miembros (de 20) de los partidos tradicionales a un Concejo con 14 y 9 concejales de dichas agrupaciones para 2004 y 2008, respectivamente. El desplazamiento de los partidos tradicionales fue producto del crecimiento de nuevas agrupaciones y de la desmembración de estas organizaciones políticas en estructuras como el Movimiento Equipo Colombia (con un concejal en 2004), el Partido de la U y Cambio Radical (con 3 curules cada uno en 2008). Finalmente, se produjo la desaparición del Partido Liberal y del Conservador de las elecciones del ejecutivo locales ya que no presentaron candidato propio para los comicios de 2003 y 2007.

Esta ampliación de las opciones políticas (tanto por el fraccionamiento en los partidos tradicionales como por la creación de nuevas propuestas por fuera de ellos) se expresó en la cantidad de listas inscritas para el Concejo. Para la elección de 1992 se registraron 80 listas para el cabildo caleño (la mitad liberales, veinte conservadoras y el resto integrado por grupos cívicos, metapolíticos y religiosos),29 en la elección de 1995 se presentaron 45 listas y en 1997, 172 listas (53 listas liberales puras, en coalición ocho listas, 20 listas conservadoras, cuatro listas de movimientos independientes y una coalición) (El Tiempo, 1997, agosto 9, ''Los indecisos hacen la mayoría''). Para 2007 se inscribieron 253 candidatos distribuidos en 16 listas, de las cuales la mitad estaban avaladas por movimientos políticos y la otra mitad por partidos políticos (Pinto, 2008, p. 206).

2.2 Fragmentación no exitosa del Partido Liberal (de la operación avispa a la desmantelación partidista)

Para estudiar y analizar la dinámica política local en Cali es necesario enfatizar en torno al Partido Liberal, ya que esta ciudad pasó de ser una plaza roja a un nicho de conservadores (en las primeras elecciones populares de alcalde) e independientes (desde 2001). De las ocho elecciones populares de alcaldes, el Partido Liberal ganó dos (Carlos Holmes Trujillo en 1988 y Mauricio Guzmán Cuevas en 1994), mientras que el Partido Conservador y los independientes lograron tres alcaldías cada agrupación (Villegas, Guerrero y Cobo por los conservadores y Maro, Salcedo y Ospina por los líderes independientes).

Varios elementos del escenario nacional, pero con especiales repercusiones y dimensiones en Cali, son los mecanismos que explican esta situación. Primero, los efectos de la ''operación avispa'' con la que el Partido Liberal apostaba a presentar listas diversas y así elegir a sus candidatos por residuo y no por cociente aprovechando la combinación del sistema electoral colombiano. Esta situación que estaba presente desde 1980 le permitió evitar la construcción de instancias partidistas de selección de candidatos y reglas claras a este respecto que llevaran a los candidatos a ''respetar la fila'' en los procesos de selección de candidaturas.

Por ejemplo, y para el caso particular de Cali, en los procesos electorales de 1990 y 1992 los candidatos conservadores e independientes se enfrentaron a dos candidatos liberales (uno oficial y otro disidente). En ambos casos esta situación manifestó la incapacidad del partido de respetar los pactos de selección de candidatos oficiales: en 1990 Carlos Holmes Trujillo incumple el pacto con el sector de Balcázar y en 1992 Raúl Caicedo Lourido no aceptó su derrota en el mecanismo definido para la selección del candidato oficial (una encuesta donde participaron 12 candidatos30). Los datos electorales dieron como ganadores a los conservadores Villegas (107.802 votos) y Guerrero (110.733 votos), este último nombrando al candidato liberal disidente, Raúl Caicedo Lourido, como gerente del Instituto de Vivienda y Reforma Urbana de Cali (Invicali).

De la misma forma, en la elección de octubre de 1995, Mauricio Guzmán, liberal apoyado por el Partido Conservador gracias a la alianza La Clave, se enfrentó en la campaña contra Claudio Borrero Quijano y Álvaro Fernando Quintero (secretario de Hacienda Municipal de la administración d e Rodrigo Guerrero), ambos candidatos del Partido Liberal.

En las elecciones para alcalde de 1997 se repite la historia de fragmentación dentro del Partido Liberal cuando se presentan los liberales Margarita Londoño (alcanzando 60.209 votos) y Luis Alberto Gómez (obteniendo 41.387 sufragios) quienes nuevamente pierden la alcaldía frente al candidato del Partido Conservador, Ricardo Cobo Lloreda con 160.816 votos. Ya para las elecciones de octubre de 2003 el Partido Liberal se queda sin candidato a la alcaldía de Cali, tras la renuncia de Alejandro Baena Giraldo debido a su baja aceptación en las encuestas.31 Baena Giraldo se adhiere al independiente Apolinar Salcedo32 quien lo nombra como Secretario de Salud en su gabinete.

El segundo elemento que explica la incapacidad del Partido Liberal para construir estructura partidista legal, fue la vinculación de algunos líderes con prácticas corruptas y con el narcotráfico, particularmente por el apoyo a sus campañas electorales y el lavado de activos. El caso representativo de estas relaciones con la ilegalidad fue el de Mauricio Guzmán cuando renunció a la alcaldía en agosto de 1997 y se entregó a la justicia para responder a la medida de aseguramiento sin beneficio de excarcelación por el delito de enriquecimiento ilícito. Estos problemas tuvieron un efecto electoral cuando en las elecciones regionales de marzo de 1992, tras la renuncia del gobernador Mauricio Guzmán, el Partido Liberal redujo su presencia en los legislativos locales y regionales. En el Concejo Municipal el liberalismo de 11 curules obtenidas en 1990 pasó a 8 y de manera particular los candidatos del movimiento político del exgobernador liberal, Nuevo Liderazgo, no alcanzaron representación (Sigifredo Restrepo y Rodrigo Vivas). Del mismo modo, en la Asamblea del Valle del Cauca el liberalismo perdió espacio frente al Partido Conservador entre 1990 y 1992. Asimismo, el exsenador liberal Carlos Herney Abadía Campo (padre del Gobernador), fue vinculado al proceso 8000 y condenado por recibir dineros del cartel de Cali.

2.3 Cambios institucionales que trajo la responsabilidad electoral de los ejecutivos locales

En el año 2000 no fue la primera vez en la historia de Cali que aparecían movimientos políticos diferentes a los partidos tradicionales, ya en la década de 1970 el Concejo de Cali había estado dominado por movimientos alternativos, particularmente la Anapo. ¿Qué cambió en 2000 con el nuevo escenario de crecimiento de las modalidades organizativas alternativas a los partidos? La transformación institucional principal fue que esta ruptura con los partidos tradicionales estuvo inscrita en la innovación que trajo consigo la elección popular de alcaldes, que permitió expresar estas nuevas identidades políticas en gobiernos urbanos efectivos ya que las ciudades tenían nuevas funciones y contaba con nuevos recursos.

Previo al 13 de marzo de 1988, el ejecutivo local estaba impermeabilizado frente a los electores, pues no había responsabilidad electoral con ellos, pero tras la entrada en funcionamiento de la elección popular de alcaldes, estos nuevos sectores alternativos que lograban apoyo popular pudieron construir gobierno urbano que les permitió contar con recursos de prestigio, dinero y poder para reproducir sus proyectos políticos. Un estudio de Dent (1974) sobre élites locales a principios 1970 en Cali, reveló que la esfera política tenía poco poder real y que las élites económicas tendían a dominar el proceso de decisión política producto del centralismo que sofocaba la iniciativa local en el ejecutivo y en el legislativo municipal.

Un caso que sobresale en estos nuevos compromisos electorales de los ejecutivos locales fue el intento de privatización de Emcali por parte de los empresarios locales aliados con el gobierno nacional a cargo de Andrés Pastrana.33 De manera sorpresiva, la gestión del Alcalde Maro Rodríguez y de Sintraemcali, permitieron establecer una alianza ganadora que derrotó a las élites económicas locales en un proyecto específico. Las nuevas responsabilidades frente al electorado de los alcaldes (y ya no frente a los sectores dominantes urbanos) constituyó una base de poder, alianza y estabilidad con ideas que se diferenciaban de las defendidas por las élites.

2.4 Cambios del electorado

Cuando se hace referencia a la democracia representativa y a las transformaciones del gobierno urbano necesariamente se deben analizar las bases sociales de los proyectos políticos que dirigen la ciudad durante cada periodo. En Cali, los proyectos alternativos a los partidos tradicionales tienen su apoyo en los sectores sociales más desfavorecidos de la ciudad. En la década de los setenta la Anapo obtenía su apoyo electoral exclusivamente de las clases bajas (según el estudio postelectoral de 1968 de Morcillo, Talbot, McCamant y Rizo, 1972) y en la primera elección popular de alcaldes en 1988 la votación de los partidos tradicionales era mayor en los estratos altos, mientras que movimientos independientes lograban la votación más alta en los estratos bajos (Cf. Astudillo, 1995). Esta situación se repitió en 2000 cuando los movimientos políticos que alcanzaron la alcaldía lo lograron gracias al sustento dado por los estratos económicos bajos y medios (Cf. Herrera, 2008 y Pinto, 2008).

En consecuencia, consideramos que los movimientos alternativos se basan (y profundizan) en cambios de la identidad política de los caleños. Los cambios identitarios exhibidos en las elecciones de Maro, Salcedo y Ospina se anclaron en una politización silenciosa de la fractura de clase y, en menor medida, étnica, que tradicionalmente habían estado invisibilizadas y silenciadas en Cali bajo la consigna de ''Cali la ciudad cívica, salsera y deportiva''. Estos proyectos alternativos tienen como estrategia discursiva la anticorrupción y la crítica a la forma de gestión del poder de las élites tradicionales y en las urnas se expresan en una diferencia de clase y étnica (que en Cali son coincidentes) de los electores: los ricos y blancos votan por Francisco Lloreda y los pobres y negros eligen a los alcaldes que se enfrentaban a este candidato (Salcedo y Ospina). En este sentido, lo ocurrido en Cali es mucho más profundo que la caracterización como ''voto protesta'' y ''vacío de poder llenado por líderes populistas'' que presentan varias voces de la transformación experimentada en Cali.34

Esta ruptura del proyecto hegemónico en la ciudad tuvo su expresión en la distancia entre los gobernantes de las élites económicas y políticas y aquellos favorecidos por los sectores populares en las urnas. Situación diferente a lo ocurrido en la década de 1980 cuando los ciudadanos preferían que gobernaran los empresarios frente a los políticos (Velásquez y Muñoz, 1990). Parte del distanciamiento actual es producto de las posturas de los dirigentes tradicionales y los empresarios frente a los gobiernos urbanos en crisis, por ejemplo, la reacción de apoyo a la gestión de Guzmán Cuevas por parte de los sectores económicamente poderosos de la ciudad tras la renuncia del alcalde por su vinculación con el narcotráfico.35

La presentación analítica exhibe que lo acontecido en Cali no es simplemente un voto protesta contra los partidos tradicionales, es una profunda escisión del proyecto hegemónico que gobernó la ciudad y que se basaba en un discurso de Cali como una ciudad rumbera y de una lógica que favorecía el modelo de la solidaridad frente al de los derechos.36 Esta ruptura se ejemplifica en la valla que apareció en Cali tras la crisis del gobierno de Apolinar Salcedo en una importante vía de la ciudad (la avenida Circunvalar), cerca de una zona residencial de sectores pudientes, donde se leía: ''Nunca más ni negros ni pobres''. Este cambio en el proceso identitario hizo ineficaz el modelo hegemónico previo, diversificó los mecanismos de interpretación hegemónicos de la ciudad y con ello el acuerdo tácito sobre los mejores proyectos de ciudad y sus gobernantes que habían existido en Cali durante las décadas de 1980 y 1990.

 

Algunas reflexiones finales

Este artículo tuvo como propósito aportar a la reconstrucción del proceso político en Cali e identificar algunos de los mecanismos que tienen un papel explicativo en los procesos políticos de esta ciudad. Aportó particularmente en la reconstrucción de los efectos políticos urbanos de la elección popular de alcaldes en Cali enfatizando en los escenarios del sistema político urbano institucional y de los procesos informales de gestión del poder municipal.

Sin lugar a dudas falta investigar agendas que han tenido desarrollos importantes para los casos de las ciudades de Bogotá, Medellín y Bucaramanga, entre ellos: las transformaciones de las prácticas políticas de los partidos, las transformaciones en la composición y caracterización de la dinámica política local en el Concejo de Cali y los mecanismos de gobernabilidad urbana. Avanzar en estas agendas comunes permite proponer proyectos comparativos de estudios de caso de ciudades en Colombia.

 

Referencias bibliográficas

1. Alcaldía de Santiago de Cali. (2000). Cali en Cifras [en línea]. Disponible en: http://santiago.cali.net/gobierno/depadm.htm. [Consultado 25 de enero, 2009].        [ Links ]

2. Alcaldía de Santiago de Cali. (2007). Cali en Cifras [en línea]. Disponible en: http://planeacion.cali.gov.co. [Consultado 25 de enero, 2009].        [ Links ]

3. Astudillo, Argemiro. (1995). Factores explicativos de la participación electoral en Cali durante la primera elección de alcalde municipal en Cali. Manuscrito no publicado. Trabajo de grado para optar al título de sociólogo, Universidad del Valle.        [ Links ]

4. Blasier, Cole. (1966). Power and Social Change in Colombia: The Cauca Valley. Journal of inter American Studies, 8 (3), julio, pp. 386-410.        [ Links ]

5. Camacho, Álvaro. (1986). Ciudad y poder: los trabajadores callejeros frente al poder. Cali: Cidse-Universidad del Valle.        [ Links ]

6. Celis, Juan Carlos. (2004a). Sindicatos y territorios. Dimensiones territoriales de la acción sindical. Aproximación teórica y descripción de experiencias colombianas. Medellín: Escuela Nacional Sindical (ENS).        [ Links ]

7. Celis, Juan Carlos. (2004b). Altibajos de la resistencia de Sintraemcali a la privatización [en línea]. Cultura y trabajo: Revista de la ENS, (63), septiembre. Disponible en: http://www.ens.org.co/articulos.htm?x=48572cmd=c-1-63. [Consultado 23 de agosto, 2008].        [ Links ]

8. Clavijo, Arcángel; María Fabiola Soto y Melba Leyner Vidal. (1992). Algunas consideraciones sobre el comportamiento electoral de las elecciones para alcalde de Cali en marzo 11 de 1990. Manuscrito no publicado. Trabajo de Grado para optar al título de maestría en Estudios Políticos. Cali, Universidad Javeriana.        [ Links ]

9. De Campos, Judith y José Martín. (1980). El comportamiento electoral en Cali, 1978. Cali: Cidse-Universidad del Valle.        [ Links ]

10. Dent, David. (1974). Oligarchy and Power Structure in Urban Colombia: The Case of Cali. Journal of Latin American Studies, 6 (1), mayo, 113-133.        [ Links ]

11. Éder de Zambrano, Doris. (1995). Los últimos veinticinco años. En: Weber L., Irving y Ocampo Z., Alfredo (Eds.). Valores, Desarrollo e Historia: Popayán, Medellín, Cali y el Valle del Cauca. (pp. 325- 350). Cali: Universidad del Valle y Tercer Mundo.        [ Links ]

12. Herrera, Wilson Fernando. (2008). Perfil del votante de Santiago de Cali: Un análisis exploratorio a partir del algoritmo de CHAID en las elecciones de alcalde de 2007. Primer Congreso de Ciencia Política [en línea]. Disponible en: http://congresocienciapolitica.uniandes.edu.co/. [Consultado 13 de junio, 2009].        [ Links ]

13. Mercado, Amelia y Hoyos, Herney. (1992). Análisis del comportamiento electoral en Cali por estrato socio-económico [sic] en las elecciones para alcalde de 1988- 1990 y análisis de las tendencias en elecciones para Concejo y Presidente en 1972-1990. Manuscrito no publicado. Trabajo de Grado para optar al título de magíster en Estudios Políticos. Cali, Universidad Javeriana.        [ Links ]

14. Morcillo, Pedro Pablo; Judith Talbot de Campos; John McCamant y Harold Rizo. (1972). Estudio sobre abstención electoral en las elecciones de marzo de 1968 en Cali. En: Colombia política: estadísticas 1935-1970, (pp. 57-80) Bogotá: DANE.        [ Links ]

15. Ocampo Cepeda, Francisco Javier. (2008). Sociología, ciudad y política: Cali en los últimos veinte años. En: Marco Córdova Montúfar (Eds.). Lo urbano en su complejidad: una lectura desde América Latina, (pp. 339-356) Quito: Flacso Ecuador y Ministerio de Cultura del Ecuador.        [ Links ]

16. Pinto, María Teresa. (2008). La disputa política en torno a la alcaldía de Santiago de Cali de 2007. Revista Sociedad y Economía, 14, 201-226.        [ Links ]

17. Ramos, Alberto y Héctor Alonso Moreno. (1993). Populismo radial en Cali, Cali: Universidad Libre, Seccional Cali.        [ Links ]

18. Rozman, Stephen. (1975). Conservadores y Liberales en Cali. En: Weber L., Irving y Ocampo Z., Alfredo (Eds.), Valores, Desarrollo e Historia: Popayán, Medellín, Cali y el Valle del Cauca, (pp. 245-273) Cali: Universidad del Valle y Tercer Mundo Editores.        [ Links ]

19. Sáenz, José Darío. (2005). Élite política y partidos políticos en Cali d e 1958 a 1998. Revista Sociedad y Economía, 8, abril, 61-86.        [ Links ]

20. Stoker, Gerry. (1998). Theory and Urban Politics. En: International Political Science Review, Vol. 19 (2), 119-129.        [ Links ]

21. Vásquez, Edgar. (2001). Historia de Cali en el siglo 20 [sic]. Sociedad, economía, cultura y espacio. Cali: Artes Graficas del Valle.        [ Links ]

22. Velásquez, Fabio y María Teresa Muñoz. (1990). Vida Local y Opinión Ciudadana. Documento no publicado. Centro de Investigación y Documentación Socioeconómica (Cidse). Cali: Universidad del Valle.        [ Links ]

23. Velásquez, Fabio. (1996a). Una mirada desde Cali. En: Medófilo Medina (Ed.), Nuevas formas de participación política. (pp. 33-37). Bogotá: Fescol-Iepri.        [ Links ]

24. Velásquez, Fabio. (1996b). Ciudad y participación, Cali: Editorial Universidad del Valle.        [ Links ]

25. World Bank. (2002). Cali, Colombia Toward a City Development Strategy. Washington: The International Bank for Reconstruction and Development, The World Bank.        [ Links ]

 

Fuentes virtuales y hemerográficas

1. El País. (2007, octubre 30). Elecciones: El nuevo mapa político del Concejo [en línea]. Disponible en: http://www.elpais.com.co/elpais/ediciones.php?p=oct302007. [Consultado 15 de enero, 2011].

2. El Tiempo. (1991, julio 1.°). Alcalde de Cali escapó ileso anoche a atentado [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-112508. [Consultado 18 de enero, 2011].

3. El Tiempo. (1991, julio 2). ELN, autor del atentado [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-113199. [Consultado 18 de enero, 2011].

4. El Tiempo. (1991, julio 3). Siguen atentados contra Ecopetrol [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-114001. [Consultado 18 de enero, 2011].

5. El Tiempo. (1992, enero 29). Doce aspirantes se le miden a la encuesta [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-23580. [Consultado 18 de enero, 2011].

6. El Tiempo. (1992, febrero 21). En Cali todos prometen [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-41654. [Consultado 18 de enero, 2011].

7. El Tiempo. (1992, febrero 27). Las alianzas se imponen en el Valle [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-47309. [Consultado 18 de enero, 2011].

8. El Tiempo. (1992, marzo 13). Escrutinios a media máquina [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-72817. [Consultado 18 de enero, 2011].

9. El Tiempo. (1993, mayo 30). Los alcaldes pasaron el año [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-143910. [Consultado 18 de enero, 2011].

10. El Tiempo. (1997, agosto 27). Conmoción en la torre de la Alcaldía [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-642431. [Consultado 22 de enero, 2011].

11. El Tiempo. (2000, octubre 9). Los favoritos a las alcaldías [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1285490. [Consultado 26 de enero, 2011].

12. El Tiempo. (2000, noviembre 8). Mensaje de desesperación [en línea]. Disponible en: Editorial. http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1248535. [Consultado 26 de enero, 2011].

13. El Tiempo. (2001, junio 14). Aval de $650.000 millones para Cali [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-490500. [Consultado 26 de enero, 2011].

14. El Tiempo. (2002, enero 23). Editorial: Cali y su señor alcalde [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1348038. [Consultado 26 de enero, 2011].

15. El Tiempo. (2003, septiembre 9). Fueron doce horas de tire y afloje [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1010850. [Consultado 26 de enero, 2011].

16. El Tiempo. (2003, octubre 10). Liberales: perder o adherirse [en línea]. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1020499. [Consultado 26 de enero, 2011].

17. El Tiempo. (2003, octubre 16). Desbandada en liberalismo [en línea]. http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1007754. [Consultado 26 de enero, 2011].

18. Revista Semana. (2007, agosto 11). Los Juan Carlos del Valle [en línea]. Disponible en: http://www.semana.com/nacion/juan-carlos-del-valle/105515-3.aspx. [Consultado 26 de enero, 2011].

19. Registraduría Nacional del Estado Civil. Resultados electorales por partidos con representación. Concejo Municipal de Cali (2004-2007) [en línea]. Disponible en: http://web.registraduria.gov.co/2003CC/e/pco31001.htm?1. [Consultado 31 de enero, 2011].

 

Notas

* Artículo desarrollado en el marco de la investigación ''La cotidianidad en la selección entre opciones políticas. Pesquisa del comportamiento electoral desde la vecindad y las redes sociales en la elección de alcalde en Cali'', financiada por la Dirección de Investigación, Sede Bogotá (DIB), Universidad Nacional de Colombia. Primera versión del artículo presentado como ponencia al VIII Seminario de Investigación Urbano-Regional de la Asociación Colombiana de Investigadores Urbano-Regionales (ACIUR), 29 septiembre de 2009. Bogotá, Universidad Nacional de Colombia. Mesa temática ''Gobierno de Municipios y Ordenamiento Territorial''. Agradezco los comentarios de los profesores Paul Bromberg, Jorge Hernández y de los lectores anónimos de la revista Estudios Políticos.

1 Para el caso de la ciencia política urbana en el ámbito internacional, Stoker (1998) presenta los principales temas en los debates teóricos llevados a cabo en la teoría política urbana: a) poder comunitario, coalición, regímenes y acción colectiva (¿Quién gobierna?), que enfatiza en el poder central de los empresarios y los rentistas en el modelaje del sistema urbano; b) protesta urbana y movimientos sociales; c) globalización, economía política de las ciudades y teoría de la regulación. El presente artículo se inscribe en el tema de coaliciones y regímenes urbanos.

2 Acompañado al Concejo por Humberto Pava.

3 Holmes Trujillo compitió en la jornada electoral contra los candidatos Henry Holguín, Nelson Garcés (Partido Conservador) y Harold Zangen (Nuevo Liberalismo). Carlos Holmes Trujillo García renuncia a su cargo y su periodo fue terminado por el entonces secretario de Gobierno Antonio José Orejuela.

4 Las elecciones se celebraron el 11 de marzo de 1990 y se eligieron senadores, representantes, diputados, concejales y alcaldes. Asimismo, se realizó la primera consulta popular del Partido Liberal para la selección de candidato a la presidencia y con la llamada ''séptima papeleta'', que promovía la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente. En ese mismo año se eligió presidente y se realizó la consulta popular sobre la convocatoria a una Asamblea Constituyente (27 mayo) y se designaron los miembros de la Asamblea Constituyente (9 de diciembre).

5 Germán Villegas derrotó a: Federico Vélez (candidato oficial del Partido Liberal), José Renán Trujillo (liberal disidente), Antonio Navarro Wolff (Movimiento M-19) y Humberto Pava (Movimiento Acción Social).

6 Como parte de su política de gobierno el presidente César Gaviria (1990-1994), nombró a todos los gobernadores del Partido Liberal.

7 ''Alcalde de Cali escapó ileso anoche a atentado''. (1991, julio 1.°). El Tiempo, ''ELN, autor del atentado''. (1991, julio 2). El Tiempo, ''Siguen atentados contra Ecopetrol''. (1991, julio 3). El Tiempo.

8 El calendario electoral de la primera elección de gobernadores coincidió con la de Congreso, el 27 de octubre de 1991.

9 ''Las alianzas se imponen en el Valle''. (1992, febrero 27). El Tiempo.

10 ''Los alcaldes pasaron el año''. (1993, mayo 30). El Tiempo.

11 El mandato de Guzmán fue finalizado por su Secretario de Gobierno, Julio César Martínez.

12 El coeficiente de Gini pasó de 0,51 en 1994 a 0,54 en 1998 (Santamaría, 1999, en: World Bank, 2002, p. 43).

13 Según encuesta realizada por la firma Napoleón Franco entre los invitados al foro sobre previsión macroeconómica y sectorial organizado en Cali por Anif y Fedesarrollo a un total de 115 personas. Véase: ''Preferencias de banqueros por Lloreda''. (1997, agosto 14). El Tiempo. Francisco Lloreda estaba apoyado por los banqueros y los analistas económicos con el 71% de favoritismo. Mientras este sector apoyaba en el 12% al conservador holguinista Ricardo Cobo, 7% a la liberal Margarita Londoño y 4% al liberal Luis Alberto Gómez, 6% al resto de los candidatos. Si bien Ricardo Cobo Lloreda no era el candidato predilecto de las élites económicas, su propuesta de campaña de congelar el impuesto predial y el impuesto de industria y comercio lo acercó a estos sectores.

14 Son conocidas las denuncias por corrupción en Emcali, particularmente por la entrega de contratos y clientelismo por parte de los partidos tradicionales. Desde mediados de la década de los ochenta estas denuncias se relacionaron con los sobrecostos en la construcción de la Planta de Tratamiento de aguas Residuales (PTAR) en el río Cauca y la construcción de la Planta de Tratamiento de Puerto Mallarino, que convierte en agua potable las aguas del río Cauca, a pocos kilómetros del lugar se vertían las aguas negras, generando inmensos sobrecostos en la potabilización del agua. En la década de los noventa Emcali nuevamente fue denunciada por su participación en la construcción de tres generadoras de energía a través de gas y vapor (Termoemcali, Termopacífico y Termocauca) que nunca fueron sostenibles económicamente (Cf. Celis 2004a: 159-189 y 2004b). Según datos oficiales publicados por El Tiempo (''Emcali se niega a morir''. [2003, enero 28]) la deuda en pesos de Emcali tuvo el siguiente aumento: 1992 y 1994 (Rodrigo Guerrero Velasco): 101.000 millones; 1995 (Mauricio Guzmán): 157.000 millones; 1996 (Mauricio Guzmán): 400.000 millones; 1998 (Ricardo Cobo Lloreda): 635.000 millones; 2003 (John Maro Rodríguez): 560.000 millones.

15 ''Los favoritos a las alcaldías''. (2000, octubre 9). El Tiempo.

16 ''Aval de $650.000 millones para Cali''. (2001, junio 14). El Tiempo.

17 Editorial: ''Cali y su señor alcalde'' (2002, enero 23). El Tiempo; ''Fueron doce horas de tire y afloje''. (2003, septiembre 9). El Tiempo.

18 Según los datos de la Alcaldía de Santiago de Cali (2000, p. 97 y 2007, p. 95) sobre ejecución de ingresos y gastos de la Administración Central a precios corrientes, fue en 2003 cuando Cali supero los déficits fiscales que tenía el municipio desde 1996. Según los datos, 1996: -67.990 millones de pesos; 1997: -39.805 millones de pesos, 1998: -23.435 millones de pesos, 1999: -25.360 millones de pesos, 2000: -360.182 millones de pesos, 2001: -112.168 millones de pesos, 2002: -185.890 millones de pesos y 2003: 53.645 millones de pesos. El acuerdo que establecen las normas para la aplicación de la participación en la plusvalía es el Acuerdo 0111 de 2003 del Concejo de Cali.

19 Salcedo fue destituido por la Procuraduría General de la Nación por manejos indebidos en la adjudicación de contratos. Tras la destitución quedó como alcalde encargado Hernán Sandoval Quintero mientras el Gobernador del Valle del Cauca designaba al remplazo de la terna presentada por el partido Sí Colombia del alcalde saliente Apolinar Salcedo. El candidato seleccionado fue el presidente de la Sociedad de Agricultores y Ganaderos del Valle, Sabas Ramiro Tafur Reyes (quien ejerció como alcalde de los caleños entre mayo y diciembre de 2007). Tafur tuvo desempeño aprobado por los caleños: en julio el 43%, en septiembre el 37% y en noviembre el 40% de los ciudadanos aprobaban la gestión del alcalde (''Un gobernante súper aprobado [sic]''. 2007, noviembre 23). El País, pp. A4-23).

20 Si bien Juan Carlos Abadía hace parte de la tendencia de elegir candidatos para alcaldes y gobernadores en Cali y en el Valle por fuera de los partidos políticos tradicionales, tiene vínculos con la clase política tradicional del Valle y, aunque inscribió su candidatura respaldado por firmas, cuenta con el apoyo de Convergencia Ciudadana, algún sector del uribismo, liberales y conservadores disidentes (Revista Semana, 2007, agosto 11, ''Los Juan Carlos del Valle''). El padre del gobernador Abadía, Carlos Herney Abadía y fundador del Movimiento Popular Unido (MPU), fue condenado a 50 meses de cárcel por enriquecimiento ilícito y vinculado a un proceso por extinción de dominio como parte del proceso 8000.

21 Según la misma encuesta, Salcedo tenía el apoyo de liberales e independientes mientras que Lloreda contaba con el respaldo mayoritario de los conservadores.

22 ''La lucha por las alcaldías''. (2003, octubre 23). El Tiempo.

23 En las elecciones del 26 de octubre de 2003 se estrenó el sistema electoral basado en la cifra repartidora y en los umbrales, que remplazó al sistema de cocientes y residuos para repartir las curules de las asambleas departamentales, concejos municipales y juntas administradoras locales. Asimismo, el 25 de octubre de 2003 se realizó el primer referendo del gobierno de Álvaro Uribe Vélez (2002-2006 y 2006-2010) que preguntaba sobre: pérdida de derechos políticos, voto nominal, eliminación de las suplencias, participación de la comunidad en la elaboración del presupuesto, separación de las funciones administrativas y legislativas del Congreso, reducción del Congreso, nuevas causales de pérdida de investidura, tope a pensiones y sueldos, supresión de contralorías territoriales, eliminación de auxilios parlamentarios, aumento de recursos para educación y salud (siempre y cuando se eliminaran las contralorías departamentales, municipales y distritales), reforma de las regalías, congelación de gastos del Estado, endurecimiento de los criterios de reconocimiento de la personería jurídica e institucionalización de las bancadas políticas.

24 Para las elecciones de 2007 el Partido Convergencia Ciudadana absorbió al Movimiento Popular Unido. ''Elecciones: El nuevo mapa político del Concejo''. (2007, octubre 30). El País.

25 ''Elecciones: el nuevo mapa político del Concejo''. (2007, octubre 30). El País.

26 Alcalde en el periodo 1992-1994.

27 ''En Cali todos ponen''. (1992, febrero 21). El Tiempo.

28 Para una descripción detallada del proceso de disputa política en torno a la alcaldía véase: Pinto (2008).

29 ''Escrutinios a media máquina''. (1992, marzo13). El Tiempo.

30 En la encuesta participaron Cecilia Balcázar de Buscher, Raúl Caicedo Lourido, Germán Romero Terreros, Óscar Emiro Mazuera, Claudio Borrero Quijano, Fabio Rodríguez, Guillermo Vega Londoño, Leonilde Arredondo, Álvaro Palau Aldana, Harold Rizo Otero, Gustavo Zafra y Alfredo Cadena Copete. ''Doce aspirantes se le miden a la encuesta''. (1992, enero 29). El Tiempo. Finalmente Gustavo Zafra logró 62.880 votos y Raúl Caicedo 17.574 votos.

31 ''Liberales: perder o adherirse''. (2003, octubre 10). El Tiempo. En Bogotá el Partido Liberal también retiró la candidatura de Jaime Castro y acordó la adhesión al Polo Democrático.

32 ''Desbandada en liberalismo'' (2003, octubre 16). El Tiempo.

33 La agenda de Emcali se constituye en un hito de la confrontación entre las élites locales y nuevos liderazgos. En este artículo se presentó cómo, desde finales de 1970, la defensa de la empresa frente a la corrupción de los partidos tradicionales fue defendida por los ''populismos radiales'' como parte de su crítica a la dirigencia tradicional.

34 ''Mensaje de desesperación''. (2000, noviembre 8). El Tiempo, Editorial.

35 ''Conmoción en la torre de la Alcaldía''. (1997, agosto 27). El Tiempo.

36 Sin lugar a dudas, parte de esta ruptura estuvo mediada por el asenso del narcotráfico con un impacto diferenciado a través de las clases.

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons