SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 issue24Testicular Development and Puberty in Guzerat Males from Weaning to 36 Months of Age Raised at the Sierra Minera author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • On index processCited by Google
  • Have no similar articlesSimilars in SciELO
  • On index processSimilars in Google

Share


Revista de Medicina Veterinaria

Print version ISSN 0122-9354

Rev. Med. Vet.  no.24 Bogotá July/Dec. 2012

 


La medicina veterinaria: pasado, presente y futuro

A través de la historia de la humanidad, ha sido clara nuestra relación de dependencia con el mundo natural para sobrevivir. Cada época, de acuerdo con las capacidades del ser humano, su grado de desarrollo científico y tecnológico y su entendimiento del mundo, ha gestado una versión de veterinarios que generaron las condiciones para que el sector agropecuario fuera capaz de proveer los medios suficientes y necesarios para fomentar el avance de la sociedad al fortalecer su estructura y aumentar su complejidad.

En la actualidad, cuando pensamos en el ejercicio profesional de las ciencias veterinarias, es común hacer relaciones conceptuales con asuntos de salud y enfermedad de animales domésticos, lo que conduce a aspectos particulares de las disciplinas como la patología, la parasitología, la clínica, la cirugía, etc. Relaciones también con la agricultura, lo que le da un contexto histórico relacionado con la satisfacción de necesidades básicas de los seres humanos, al tiempo que le confiere una responsabilidad desde la perspectiva de una disciplina importante para la conservación de la fauna silvestre y la diversidad. O desde el concepto de una salud, con el servicio a la humanidad, ayudando a solucionar algunos problemas emergentes de la sociedad.

Cada una de estas perspectivas de las ciencias veterinarias no pueden verse y asumirse como la esencia misma de la profesión. En cambio, deben tomarse como la expresión de una necesidad del momento y como los aportes históricos de la profesión a la sociedad. Sustenta esta afirmación con un ejemplo: en aquel momento de la historia, en el que el caballo fue vital para garantizar el éxito de los asuntos políticos y militares, los profesionales de las ciencias veterinarias actuaron como albéitares, cuidando la salud y las patas de los caballos. Aunque este trabajo ayudó a garantizar el avance de las naciones en su crecimiento, no se puede usar para definir en su totalidad a la profesión.

Si rompemos la barrera de lo inicialmente evidente y analizamos con mayor profundidad el aporte hecho por las ciencias veterinarias, es posible notar que no ha sido solamente curar a los animales, generar poder militar, controlar enfermedades, garantizar alimentos de buena calidad para la sociedad, etc., sino que ha sido el actuar como la base fundamental para el desarrollo de la sociedad.

El avance de la civilización humana ha estado respaldado por los adelantos de las ciencias agropecuarias y las ciencias veterinarias como integrantes fundamentales. El paso de estructuras sociales simples, como las tribus, a más complejas, como las naciones-Estado, no hubiera sido posible sin el aporte de las ciencias veterinarias, que generaron aquellas condiciones necesarias para permitir el crecimiento de la población humana y la aparición de formas sociales con una mayor capacidad de interacción y de creación de nuevas realidades.

Una vez reconocida la función social de las ciencias veterinarias, la generación de las condiciones que sustenten el crecimiento y el avance de la sociedad, es imposible no detenerse por un instante y reflexionar sobre el futuro de la profesión. En el mundo moderno, los cambios se han convertido en las constantes de todas las dimensiones y realidades humanas. Como miembros de la sociedad, de instituciones, de grupos gremiales, de colectivos humanos, comprobamos, que las estructuras definidas y los marcos conceptuales subyacentes ya no son capaces de satisfacer las necesidades de una sociedad en constante avance.

Por esta razón, es el deber ser de los involucrados en el gremio de la profesión iniciar una reflexión profunda y colectiva sobre los retos, la proyección y la prospectiva de nuestras actividades. Considerando la importancia histórica y la relevancia futura de la medicina veterinaria, es necesario abordar su función social, no en aras de garantizar la sobrevivencia de una profesión en el tiempo, sino para darle un sentido de propósito y servicio para la humanidad.

El futuro de la medicina veterinaria debe obedecer a una determinación de su importancia social, lo que deja el verdadero reto de la perspectiva sobre nuestra capacidad de integrar cada uno de sus componentes en el contexto del bienestar social, en la estructuración de comunidad y en su capacidad de sustentar la existencia humana en los números poblacionales en crecimiento.

La construcción de una visión que satisfaga estos requerimientos debe hacerse en consenso, de tal manera que construya la posibilidad de que todos los profesionales y la sociedad se puedan comprometer con ella.

Con el presente número de la Revista de Medicina Veterinaria, hacemos un aporte a la construcción de nuestra sociedad.

Juan Fernando Vela Jiménez
Director
Programa Medicina Veterinaria
Universidad de La Salle