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Revista de Estudios Sociales

Print version ISSN 0123-885X

rev.estud.soc.  no.18 Bogotá May./Aug. 2004

 

Apuntes sobre una historia del paradigma dominante de la psicología social

Julio Eduardo Cruz*

* Profesor Asociado del Departamento de Psicología, Universidad de los Andes, Bogotá, Colombia. Correo electrónico: jecruz@uniandes.edu.co


Resumen

El artículo procura ofrecer una síntesis del desarrollo histórico del paradigma dominante de la psicología social. El texto trata sobre el origen del rótulo, la definición, los autores y los eventos que, tradicionalmente, son considerados como los fundadores de ésta especialidad psicológica; adicionalmente, señala los hechos, las teorías y obras, los métodos y los temas que resultan más significativos en el corto transcurso de ésta tradición empírico-analítica de la psicología social. Del mismo modo, ofrece una valoración de los manuales y publicaciones seriadas que resultan definitivas para el desarrollo del campo y, finalmente, muestra su singular impacto en la disciplina psicológica.

Palabras clave:

Psicología social, historia de la psicología, teorías, métodos de investigación, psicología social experimental.


Abstract

This article tries to offer a synthesis of historical development of the dominant paradigm in social psychology. It approaches to the origin of the concept, definition, authors and events that traditionally are considered like the foundation of this psychological field; additionally, it indicates the facts, theories, works, methods, and issues that are more significant in the short course of the empirical-analytical tradition in social psychology. In the same way, it offers an assessment of handbooks and serial publications that are definitive ones for the development of the field, and, finally, the paper shows its unique impact in psychological science.

Key words:

Social psychology, history ofpsychology, theories, research methods, experimental social psychology.


"Es necesario tener algún conocimiento de la historia si queremos comprender por qué los psicólogos sociales hacen lo que hacen y la forma en que lo hacen" (Grawman, 1992, p.21).

El uso del término psicología social (en adelante PS) se remonta a finales del siglo XIX y comienzos del XX cuando dicho rótulo es utilizado por autores como Baldwin (Morawski, 2000); pero esa larga tradición no es exclusiva a la denominación; también, por la misma época, se reconocen las primeras aproximaciones a los fenómenos de éste particular campo de conocimiento.

Grawmann (1990), por ejemplo, presenta como los primeros desarrollos de la especialidad a aquellos estudios de Binet y Henri sobre sugestionalidad que fueron publicados en 1894; por su parte, Jones (1998) y Haslam (2001) nos recuerdan el experimento de Triplett en 1898 y, finalmente, Brehm, Bassin y Fein (2002) nombran el trabajo de Max Ringlemann sobre Holgazanería Social en la década de 1880.

A pesar de que el reconocimiento de la PS como especialidad sólo suele establecerse con la aparición de dos textos, el del sociólogo Edward Ross y el escrito por el psicólogo William Mc Dougall en 1908, los historiadores que le otorgan una aparición más tardía prefieren citar el libro de F. H. Allport como el evento constituyente del área (Jones, 1998).

Son muchos los argumentos emitidos para sustentar tal disparidad de conceptos respecto al momento en que surge la PS -debate que, por cierto, algunos autores denominan como el "mito de los orígenes" (Morawski, 2000)-; uno de ellos, por ejemplo, sostiene que la hegemonía ejercida durante un largo período por la PS norteamericana y su comunidad de especialistas en la delimitación de este particular campo del conocimiento humano ha impedido una aproximación más consensual al tema.

De acuerdo con éste punto de vista, la interpretación norteamericana del área, producto del contexto e intereses específicos de su sociedad, jugó un papel definitivo en el desarrollo de la especialidad por varias décadas y condujo a una visión unilateral respecto a cuál es la definición constitutiva de la PS y, en consecuencia, a cuáles son los eventos que deberían ser considerados como más relevantes en su historia y consolidación.

Pero el dominante punto de vista de la PS americana fue prácticamente absoluto hasta finales del siglo pasado cuando los psicólogos sociales europeos emprendieron varios esfuerzos colectivos de construcción acerca de los orígenes y desarrollo de la especialidad en ese continente -sin que, por ello, se descuente la fuerte influencia de la PS americana en el viejo continente ó el papel definitivo que algunos emigrantes europeos jugaron en la americana (Jones, 1998)-.

A la labor recientemente promovida por los psicólogos sociales europeos, se suma otra tendencia minoritaria pero igualmente constante en fijar su propia versión de la PS, la de los científicos sociales y, especialmente, los sociólogos (Jones, 1998). Sin embargo, conviene insistir al respecto, tanto en la interpretación principal o dominante -aquella correspondiente a la PS americana (Jones, 1998)- acerca de los orígenes y desarrollo de la PS, como en las producidas por otras visiones disidentes (como, por ejemplo, las planteadas por la PS sociológica) resulta fácil notar que dichas aproximaciones son sesgadas en tanto que se encuentran supeditadas a una singular noción sobre la especialidad.

Adicionalmente, resulta oportuno recordar que las distintas iniciativas que se emprenden con el propósito de trazar la trayectoria de la PS hasta sus tendencias actuales son el resultado de un ejercicio de reconstrucción -y no de descripción- donde inevitablemente se otorga relevancia y significado a unos criterios y, a la vez, se descartan otros. Entre las diversas formas de reconstruir la historia y, por consiguiente, de fijar los parámetros para establecer los personajes y eventos que resultan definitivos se encuentran aquellas que, por ejemplo, se basan en zonas geográficas -PS Americana, PS Europea y PS Latinoamericana-, en los marcos disciplinares que dominan en su interior -PS psicológica y PS sociológica-, en los presupuestos -PS discursiva y PS experimental (Kroger y Wood, 1998). Las grandes diferencias entre los diversos modos de entender y hacer PS anteriormente señaladas junto con las distintas formas en que se establecen los criterios discursivos son responsables de que la tarea de proponer o formular una panorámica histórica de la especialidad resulte poco atractiva, dado el amplio margen de error y la ineludible polémica que conlleva dicha labor. El número de publicaciones realizadas y, en general, las iniciativas por lograr una visión histórica de la especialidad son tan escasas que, sin duda, es una asignatura que permanece pendiente (Allport, 1968). No obstante, si se consideran los siguientes motivos que expone Grawmann (1990), la reconstrucción del curso histórico de una especialidad como la PS es una tarea necesaria y urgente:

- Identifica los autores y/o ideas que han determinado los rumbos del área y, en consecuencia, los antecedentes del quehacer del profesional e investigador de hoy.

- Establece los rasgos distintivos de los diferentes desarrollos de la PS, dada la diversidad de objetos, conceptos, métodos y teorías originadas en sus propios marcos o gracias a la utilización de modelos provenientes de otras especialidades psicológicas o, incluso, otras ramas del saber.

- Muestra los nexos entre las formulaciones, los investigadores y los hallazgos más prominentes y, quizás, mejor conocidos de la PS; con ello, a su vez, se realzan los esfuerzos realizados por los diferentes estudiosos del área.

- Finalmente, además de indicar los logros obtenidos, señala los caminos y temas particularmente productivos así como los errores y limitaciones de varias iniciativas emprendidas en la especialidad.

Junto a los motivos esgrimidos por Carl F. Grawmann existen argumentos adicionales que justifican cualquier esfuerzo en ésta línea de pensamiento, entre ellos están:

- Identifica los vínculos existentes entre los desarrollos académicos de la especialidad y aquellos que provienen de las necesidades o propósitos de la sociedad que alberga a quienes investigan en éste singular campo de la psicología.

- Señala cuáles son las relaciones que ha establecido la PS con otras especialidades psicológicas y, del mismo modo, con otras disciplinas del saber humano.

- Evita la pérdida de esfuerzos al asegurar que las formulaciones, logros y errores de los investigadores no pasen inadvertidas por los nuevos especialistas; una forma expedita de prevenir la "re-invención" de fenómenos, conceptos y procedimientos (Kruglanski, 2001).

Los siguientes párrafos contienen una propuesta para entender el desarrollo de lo que hoy se conoce como el paradigma dominante de la PS. Se procura con ello resaltar algunos de los autores, conceptos, métodos y eventos que resultan cruciales para lo que, evidentemente, es una forma de entender la especialidad y su curso histórico. Así mismo, como lo sostiene Allport (1954a), facilitar la comprensión de las tendencias contemporáneas que caracterizan a éste singular campo de conocimiento es otro de los objetivos.

El concepto de psicología social

Durante los primeros años de la especialidad, cuando apenas emprendía su paulatina consolidación como un rótulo que procura albergar a un conjunto de iniciativas, la PS se enfrentó a dos grandes tendencias de producción: la sociológica y la psicológica (Allport, 1954).

Sin embargo, la tendencia sociológica, que en los Estados Unidos se materializa con la obra de E. A. Ross, alcanza una más limitada difusión frente a la psicológica si se consideran criterios como el número de los primeros textos que se ocupaban de los logros de la especialidad (Allport, 1954), la cifra de publicaciones periódicas, la cantidad de manuales que desde dicha perspectiva se proponen para los cursos de la especialidad (Jones, 1998), etc. El predominio temprano de la perspectiva psicológica de la PS conduce a que termine imperando la siguiente definición de la especialidad:"...un intento por entender y explicar cómo el pensamiento, sentimiento y la conducta de los individuos son influidos por la presencia actual, imaginada o implicada de otros seres humanos (Allport, 1954, p.5).

La vinculación de la PS como un campo específico de la psicología, en contra de otras perspectivas (Jones, 1998), implicó un paso definitivo en términos de fijar el objeto, los conceptos y métodos que resultan constitutivos de ésta singular forma de entender la especialidad y, con ello, permitió precisar aquellos elementos que son distintivos respecto a otras especialidades y disciplinas.

Los elementos que suelen ser nombrados como más distintivos de ésta forma de interpretar la PS son:

1. El énfasis en el individuo.

2. El carácter de especialidad psicológica.

3. El predominante papel de la investigación experimental.

4. La formulación de un conocimiento que permita la descripción, explicación y predicción del comportamiento.

Historia del paradigma dominante de la psicología social

De acuerdo a Allport (Grawmann, 1990), tres rasgos sobresalientes imperan durante el desarrollo de la PS en norteamérica: el conductismo, el método experimental y el énfasis en el individuo.

No obstante, una adecuada descripción de la especialidad, a través de su curso en el tiempo, no puede dejar de lado eventos determinantes como: las críticas a la investigación en laboratorio (fuera de los contextos sociales reales); los aportes y/o la emigración de autores de origen distinto al norteamericano (con ello, la influencia de algunas escuelas provenientes de otras partes del mundo -Kart Lewin con su teoría del campo, para citar un caso europeo, y Jacobo Varela con la tecnología social para nombrar uno en el continente americano-); el refinamiento metodológico; el paso de lo conductual a lo cognitivo; el desplazamiento de teorías de "rango amplio" por unas más "restringidas" (Grawmann, 1990);1 el carácter dinámico y, por decirlo así, expansionista del área -tanto en otras especialidades psicológicas como frente a otras disciplinas científicas- (Berscheid, 1992). A partir de los intentos por hacer una sinopsis de los eventos más sobresalientes de ésta forma de entender la PS emprendidos en los capítulos introductorios de los manuales de PS escritos por Brehm, Kassin y Fein (2002), Worchel, Cooper, Goethals y Olson (2002) y Franzoi (2000), se puede presentar el siguiente resumen:

La historia de las teorías en la psicología social

La PS, como cualquier especialidad psicológica, ha experimentado varios momentos teóricos a lo largo de su trayectoria histórica. Son escasos los intentos emprendidos con el propósito de describir esas distintas etapas y la secuencia en que sucedieron. Una forma sencilla de presentar las épocas de la PS consiste en considerar el papel que juegan, en la especialidad, las grandes perspectivas teóricas de la psicología -un análisis interesante del comportamiento de dichas tendencias en la disciplina puede encontrarse en el artículo de Robins, Grosling y Craik (1999)-.

De acuerdo con Allport (1954a), la PS en sus momentos previos y primeras décadas cursó una época en la que primaron "las teorías simples y soberanas" -llamadas así por tratarse de formulaciones que procuraban ofrecer la razón o clave fundamental de la conducta social-. Posteriormente, la PS experimentó una segunda etapa donde las grandes perspectivas teóricas de la psicología se constituyeron en su materia prima -el psicoanálisis, la Gestalt y el conductismo temprano son las tendencias que más esfuerzos congregan-.

La tercera etapa teórica se caracterizó por el predominio de las postulaciones de rango medio -denominadas así por tratarse de formulaciones que procuran abarcar algunos y no todos los fenómenos psicosociales que ocupan la atención de sus especialistas-.

Finalmente, el cuarto y actual momento puede describirse como el de la hegemonía cognoscitiva y, en general, el del resurgimiento de las grandes formulaciones teóricas (Kruglanski, 2001). Por consiguiente, son claros sus vínculos con los grandes debates que ocurren en el interior de la disciplina.

Respecto a la última etapa propuesta por Allport, Kruglanski (2001) señala el renovado interés que están recibiendo las formulaciones teóricas de amplio rango -"high level"- en la especialidad y confía en que, dentro de unos años, la PS no esté exclusivamente orientada hacia los datos y profundice sobre los aspectos teóricos. En su esfuerzo por ofrecer un balance del desarrollo y, en particular, de las teorías que resultan definitivas en la constitución de la PS, Jones (1998) resalta: (1) la teoría de campo de Kart Lewin; (2) la teoría de los procesos de comparación social de Leon Festinger; (3) las teorías de la consistencia cognoscitiva -donde nuevamente Leon Festinger juega un papel definitivo con su teoría de la consistencia cognoscitiva-; (4) las teorías conductuales -incluyendo posturas neoconductistas como la de Bandura y Berkowitz-; (5) la teoría cognoscitivo-social, presentada como el marco de referencia dominante.

Sin embargo, la generación de "doctrinas" psicosociales es poco usual en la especialidad. Como lo señala Arie W. Kruglanski (2001), en varios momentos y durante largos periodos de la PS se le ha prestado muy poca atención a los asuntos teóricos.

La raíz de este "desapego" por los asuntos teóricos puede encontrarse tanto en cuestiones conceptuales y metodológicas, como en simples "preferencias" de sus especialistas (Kruglanski, 2001); pero, de igual forma, tiene sus consecuencias.

Algunas de las consecuencias que señala Kruglanski de esa particular "aversión" -un término empleado por el propio autor- por los aspectos teóricos son: (1) la carencia de una continuidad conceptual en la especialidad que conduce a prácticas tan cuestionables como ". la invención de nuevos nombres para viejos conceptos." (Kruglanski, 2001, p.873); (2) una fragmentación de la PS que resulta de la dificultad para encontrar elementos en común; (3) la pérdida de impacto de aquellos desarrollos de la disciplina y, con ello, (4) el "aislamiento" y la "marginación" frente a los debates académicos y sociales tanto en la disciplina y otras ciencias, como en la sociedad en general.

La historia de los métodos en la psicología social

En el texto de Gordon W. Allport (1954a), The historical background of modern social psychology, se formula un apartado con el título "The Beginnings of Objective Method" donde señala el papel fundamental que ejerce la experimentación en la constitución de la psicología y, necesariamente, en la PS. La importancia que se le otorga a éste método en el desarrollo de la especialidad es un concepto compartido mayoritariamente por los autores -ver, por ejemplo, Kruglanski (2001)-.

Gordon Allport (1954a) presenta a Tripplet como el primer autor que responde experimentalmente a una pregunta de carácter psicosocial -"Qué cambio ocurre en el desempeño normal solitario en un individuo cuando otras personas están presentes?" (Allport, 1954, p. 46)- y, a la vez, inaugura un tema de singular productividad para la PS en cuanto al número de esfuerzos que agrupa tanto en la investigación básica como aplicada: el de la facilitación social. Adicionalmente, Allport (1954a) sostiene que la observación controlada fue la segunda gran estrategia metodológica que resultó definitiva en la constitución de la PS; autores como Galton, G. Stanley Hall, Soon Starbuck, James, entre otros, son reseñados como pioneros. Entre las técnicas de ésta categoría, el autor resalta las escalas sobre actitudes y la sociometría.

Jones (1998), por su parte, propone una descripción donde la medición de las actitudes se constituye en el método fundamental y distintivo de la PS en sus primeras décadas -en especial, nombra los esfuerzos de Thurstone, Chave y de Likert; igualmente, en la síntesis que presenta el autor, resalta la importancia de otros métodos como los estudios de opinión y la observación sistemática -sobresalen Dorothy Thomas y Bales-; la sociometría y, naturalmente, la experimentación. Sobre el método experimental en la PS, Jones (1998) señala dos grandes etapas: (1) la pre-experimental que empieza con los trabajos de Triplett y culmina con la aparición del Handbook of Social Psychology de Murchison en 1935 y (2) la propiamente experimental donde se constituyen como puntos clave los trabajos de Bartlett, Sherif y Lewin.

La historia de los autores en la psicología social

Otra manera de conocer el desarrollo de la PS, sus conceptos, procedimientos, instrumentos y temas o problemas se puede obtener al identificar aquellos autores que sobresalen por su participación en la configuración del diario quehacer de la especialidad.

Una aproximación que para algunos puede ser bastante apropiada si se acepta que el desarrollo de éste campo de conocimiento es el resultado de iniciativas personales -un momento de la producción en PS denominado por Jones (1998) como "subdisciplina personalizada"- que, sólo posteriormente, son acogidas por la comunidad. En la tarea de identificar aquellos investigadores que resultan definitivos en la configuración de la disciplina se puede recurrir a una estrategia que consiste en consultar publicaciones que procuran describir el campo y precisar aquellos autores que son citados por todas las fuentes confirmando sus aportes. El resultado parcial de dicho ejercicio en el caso de los manuales de PS de Brehm, Kassin y Fein, S. (2002), Kenrick, Neuberg y Cialdini (2002), Worchel, Cooper, Goethals y Olson (2002), Aronson, Wilson y Akert (2002), Franzoi (2000), Myers (2000, 2004), y Feldman (2001) es el que se presenta a continuación:

La historia de las publicaciones en la psicología social

Como señala Allport (1954a), los libros de texto son una fuente valiosa a la hora de estudiar el desarrollo de una especialidad como la PS. A partir de su revisión se puede configurar y, si se quiere, reconstruir los conceptos, métodos y autores que sobresalen en los distintos momentos de éste particular campo del conocimiento. Igualmente, los libros de texto o manuales de la especialidad tienen un gran impacto en los procesos de formación y, por consiguiente, en la noción que los estudiantes de psicología y con frecuencia de otras disciplinas llegan a registrar acerca de la PS, sus presupuestos, objetos, conceptos y métodos.

El impacto incuestionable de los manuales en la consolidación de visión de la disciplina se ve reflejado en el estudio que sobre ellos realizan aquellos autores interesados en lograr una visión histórica del desarrollo de la PS. En el temprano balance que publica Gordon W. Allport en 1954 aparece una contabilidad de esos textos y en ella se hace evidente una tendencia creciente de publicación de títulos -sólo interrumpida por la Segunda Guerra Mundial-.

En su análisis de los manuales publicados en inglés entre 1908 y 1952, Allport (1954a) encontró que los contenidos de los textos variaban entre dos grandes polos: los que procuraban consignar la investigación empírica realizada en los distintos temas de la especialidad y los que se proponían vincular los distintos desarrollos en formulaciones teóricas que les otorgaran una coherencia. Adicionalmente, en su artículo The Historical Background of Modern Social Psychology, Allport (1954a) observa otras dimensiones interesantes acerca de los textos mencionados: (1) los libros difieren en las consideraciones teóricas desde los que implican un solo enfoque hasta los de carácter pluralista; (2) los manuales pueden mostrar una perspectiva disciplinar en particular: psicológica, McDougall (1908) y Allport (1924), o sociológica, Ellwood (1925); así mismo, pueden procurar la integración de las dos ciencias, Newcomb (1950). Finalmente, (3) la producción en términos de número de publicaciones de carácter psicológico es mayor -dos terceras partes del total- que la de cualquier otra índole.

Es importante notar que la tendencia dominante en la producción de textos por parte de aquellos autores de la perspectiva psicológica de la PS que identificó Allport en 1954 se mantuvo en la posterior edición del Handbook (Allport, 1968) y, nuevamente, se vio ratificada en la obra de Jones (1998) con unos porcentajes que muestran una diferencia más marcada -75% psicólogos y 22% sociólogos (el 3% restante corresponde a trabajos conjuntos)-.

En la PS, la perspectiva psicológica no sólo es predominante en los libros de texto o manuales, también lo es en el número de publicaciones periódicas de la disciplina. Jones (1998) señala que la mayoría de revistas de la especialidad con alto impacto son editadas y soportadas por psicólogos (la lista de donde se sustenta tal afirmación se publica en la siguiente tabla).2

Una lista de revistas de gran impacto que algunos autores aumentarían con los Advances in Experimental Social Psychology(Green, Wheeler, Hermann y Brock, 1998), Personality and Social Psychology Review (Kruglanski, 2001) y, finalmente, el Journal for the Theory of Social Behavior y el Theory and Psychology -para el caso de los aspectos teóricos- (Kruglanski, 2001).

Los títulos de éstas publicaciones periódicas han recibido, incluso, una evaluación con el propósito de determinar su influencia a partir de la frecuencia con que se les cita. El estudio de Feingold (1989) que consideró el impacto en el Social Science Citation Index-SSCI- y las revistas de la American Psychological Associaction -APA- señala el siguiente orden: 1. Journal of Personality and Social Psychology; 2. Journal of Experimental Social Psychology; 3a3. Personality and Social Psychology Bulletin; 3b. Social Psychology Quarterly; 5a. European Journal of Social Psychology; 5b. Journal of Applied Social Psychology; 7. Journal of Social Psychology; 8. Basic and Applied Social Psychology; 9. Social Behavior and Personality.

Kruglanski (2001), por su parte, señala dos aspectos interesantes relacionados con las publicaciones periódicas: (1) la PS empieza a hacer patente su renovado interés por los aspectos teóricos de la especialidad con la relativamente reciente aparición de revistas como Journal for the Theory of Social Psychology y Personality and Social Psychology Review, e igualmente, (2) resulta interesante observar la incursión de los psicólogos sociales en publicaciones de alto impacto en toda la disciplina psicológica como Psychological Review y Psychological Bulletin.

La historia de los temas en la psicología social

Esta sección procura identificar los temas que a través del tiempo ocupan la atención y los mayores esfuerzos de los psicólogos sociales. Este objetivo, como los anteriores, es una labor susceptible de cuestionamientos dada la ausencia de acuerdo que existe acerca del concepto y, por consiguiente, el desarrollo de la especialidad -cuestión que ya ha sido tratada en el presente texto-.

El trabajo que supone establecer aquellos temas que resultan claves en la PS es emprendido por todos los autores que procuran ofrecer una visión global de la especialidad. Entre ellos se encuentran las dos publicaciones de Allport (1954 y 1968) y la de Jones (1998) en el Handbook of Social Psycology.

Edward Jones (1998) al introducir la sección que trata sobre los ejes temáticos que más esfuerzos de investigación han ocupado en la PS, señala algunos de los determinantes del por qué ciertos asuntos llegan a tomar preponderancia en la especialidad: el ambiente social y político de la sociedad, la "productividad" de las formulaciones teóricas dominantes, los avances técnico-instrumentales, el prestigio de los autores e instituciones, las políticas de apoyo económico, el "espíritu innovador y emprendedor" de determinados autores, son todos ejemplos en ese sentido.

Del mismo modo, Jones (1998) enuncia motivos por los que un asunto de la PS llega a declinar en la especialidad: la solución del problema que lo originó, la carencia de apoyo empírico a formulaciones, la identificación de debilidades metodológicas, y finalmente, cambios en los aspectos éticos o de soporte a temas o procedimientos de investigación.

En su artículo The Historical Background of Modern Social Psychology, Allport (1954a) señalaba un elemento para explicar la dificultad implícita en la dilucidación de los temas fundamentales en la PS: desde sus inicios, la especialidad muestra varias unidades de análisis como el instinto, el hábito, la actitud y los sentimientos. Sin embargo, en un esfuerzo por organizar las principales formulaciones de la especialidad, Allport (1954a) estableció que la producción en la PS se puede ubicar en dos polos: uno referido a los aspectos disposicionales y el otro vinculado a los situacionales.

Entre los asuntos que reseña Allport (1954a) como temas centrales de la PS están la facilitación social y el comportamiento en grupo -que incluye aspectos como el desempeño, la cooperación, etc. Por su parte, Jones (1998) establece los siguientes ejes de investigación: comunicación, persuasión y cambio de actitudes; interdependencia y dinámica grupal -que incorpora temas como conformidad, influencia, solución de problemas, etc-.

Una forma de establecer los temas dominantes de la PS es identificando y ofreciendo una síntesis de los temas que aparecen en las publicaciones de mayor relevancia como, por ejemplo, a partir de las cuatro ediciones del Handbook of Social Psychology (Lindzey, 1954; Lindzey y Aronson, 1968; Lindzey y Aronson, 1985; Gilbert, Fiske y Lindzey, 1998) que se presenta en la siguiente tabla.

La historia de la psicología social, sus aplicaciones y los temas sociales

La historia de la PS está signada por las dinámicas sociales que enfrentan las sociedades que la cultivan (Allport, 1954; Jones, 1998). Por ésta razón varios de los desarrollos más distintivos de la especialidad presentan un vínculo directo con la comprensión e intervención de "grandes problemas sociales".

La manera como los psicólogos sociales abordan los "temas sociales" puede variar desde los que lo hacen con un afán conceptual o metodológico -por ejemplo probar una hipótesis derivada de la teoría- hasta aquellos cuya preocupación fundamental es el hecho mismo (Jones, 1998).

A continuación ofrecemos una lista de los temas de "relevancia social" que han ocupado la atención de los investigadores (Jones, 1998):

Una lista que, sin lugar a dudas, estaría más completa si se nombraran los esfuerzos realizados en las organizaciones -fundamentalmente, en las de carácter productivo-.

Conclusiones

La revisión que se ha hecho del desarrollo de lo que comúnmente se conoce como el paradigma dominante de la PS muestra que, desde sus primeros momentos hasta nuestros días, ésta perspectiva ha estado en permanente actividad y crecimiento -tanto en la profundización de los problemas que tradicionalmente le han ocupado como en la exploración de nuevos temas-.

La comunidad que acoge éste particular paradigma de la PS sigue manteniendo un claro compromiso con la tradición empírico-analítica que la vio nacer y, del mismo modo, le permitió consolidarse desde sus más tempranas décadas como la aproximación más influyente; una afirmación que es constatada por distintos métodos de verificación como, por ejemplo, el número de publicaciones (manuales y publicaciones periódicas), citaciones, etc.

Finalmente, el paradigma dominante de la PS no sólo se constituye en el principal polo de desarrollo de la especialidad sino que en la actualidad es el punto de referencia para la justificación y configuración tanto de otras "viejas formas" de entender éste particular campo como, también, para la emergencia de nuevas aproximaciones.


Comentarios

1 Una panorámica de la PS en los últimos tiempos es sugerida por Eiser (1989) de la siguiente manera: la PS de finales de los 70 enfatizó en "cognición", procesamiento de la información y toma de decisiones; en los 80 retomó el concepto de cognición social con una mayor definición y adicionó en sus explicaciones: la motivación, la emoción, las capacidades limitadas del individuo, etc. Distinción que ha tomado fuerza a raíz de las aún recientes polémicas suscitadas entre la ciencia cognoscitiva y la psicología cognitiva.

2 Es importante notar que Franzoi (2000) también señala al The Journal of Personality and Social Psychologyy al Social Psychology Quarterly como las revistas más influyentes de las aproximaciones psicológicas y sociológicas -respectivamente- a la psicología social.

3 Las numeraciones a y b corresponden a los casos en que dos revistas alcanzaron los mismos puntajes.


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