Introducción
Las microangiopatías trombóticas (MAT) son un conjunto de entidades que tienen en común la presencia de anemiahemolítica microangiopática, trombocitopenia y compromiso de órganos 1. En los pacientes adultos sin cáncer, la púrpura trombocitopénica trombótica es la forma más frecuente de MAT y la piedra angular de su manejo es la plasmaféresis. Sin embargo, en pacientes con microangiopatía trombótica asociada a cáncer (MTAC) este manejo no ha demostrado tener beneficios 2. La prevalencia de detección MTAC está subestimada hoy en día debido a la baja sospecha clínica de esta, lo que promueve una reducción en las opciones terapéuticas que de por si son limitadas 2.
Caso clínico
Mujer de 72 años de edad que consultó al servicio de urgencias por dolor progresivo de dos meses de evolución en la región lumbar, con irradiación a cara dorsal de ambos muslos de características lacerantes; el dolor se exacerbaba con los movimientos y mejoraba parcialmente con el uso de opioides y antiinflamatorios no esteroideos. Adicionalmente, previo al inicio de los síntomas también refierió: tos seca; disnea con medianos esfuerzos; astenia; adinamia; hiporexia, y pérdida de 9 kg de peso de 2 meses de evolución. Como antecedentes médicos de importancia se encontraban: hipertensión arterial y diabetes mellitus 2 controladas.
Al examen físico la paciente se encontraba alerta, orientada, sin signos de dificultad respiratoria con signos vitales estables y facies álgica; llama la atención taquicardia, diaforesis profusa y en la exploración del abdomen se detectó la presencia de distensión abdominal con movimientos intestinales, abdomen no doloroso a la palpación, sin adenopatías o megalias, resto de exploración normal.
Pruebas complementarias
Al ingreso presentaba un hemograma normal, a excepción de una trombocitopenia y neutrofilia leve, proteinograma, trasaminasas y función renal normal. Por otra parte, gamma glutamiltransferasa (GGT) 149 UI/L (7- 43Ul/L), lactato deshidrogenasa (LDH) 610 UI/L (< 395 Ul/L) y fosfatasa alcalina (FA) 449 UI/L (< 100 Ul/L). La paciente asiste con estudio de gammagrafía ósea y tomografía de columna dorsal sin contraste realizados ambulatoriamente un mes previo al ingreso que muestran múltiples lesiones óseas localizadas en región parietal bilateral y frontal izquierda de calota craneal, columna vertebral, pelvis, hombro derecho, clavícula derecha, esternón y tercio proximal de fémur. Ante el posible diagnóstico de cáncer metastásico de origen desconocido, se solicitaron mamografía, radiografía de tórax, proteinuria en 24 horas e inmunofijación, ecografía de tiroides y tomografía de cráneo, sin reportar hallazgos sugestivos de lesión neoplásica primaria. En tomografía axial computarizada toraco-abdominal se describieron nuevamente múltiples lesiones óseas dorsales y lumbares, sobre todo en D11 y D12 compatibles con metástasis, sin especificar presencia de alguna lesión tumoral torácica o intraabdominal; no obstante, se evidencia patrón en vidrio esmerilado en la ventana pulmonar en ambos campos pulmonares y una ocupación nodular de morfología oval en aurícula izquierda. En ecocardiograma se confirmó la presencia de una imagen circular exógena de 1,6 cm x 2,1 cm localizada en aurícula izquierda, de bordes bien definidos y poco móvil, que no fue ocupada por contraste, y no fue posible diferenciar entre un trombo intracavitario o mixóma auricular. Cardiología sugirió cardioresonancia que no se realizó por tórpida evolución clínica de la paciente.
Evolución
Por los hallazgos ecocardiográficos, sin descartarse un trombo intraauricular, se decide iniciar anticoagulación plena con heparina de bajo peso molecular (1 mg/kg/12 horas). La paciente desde el inicio presentó un curso clínico tórpido por pobre control del dolor y al cabo de 5 días después del ingreso presentó signos de dificultad respiratoria y se descartó tromboembolismo pulmonar por angioTAC. Posteriormente, desarrolló anasarca, descenso de la hemoglobina a 8,2g/dL (previa 12,9 g/Dl) con adecuada respuesta medular (reticulocitos 9,3%) y disminución del conteo plaquetario (plaquetas 66.000 cel/m3, previa 121 cel/m3). Se extendió estudio de anemia hemolítica que mostró: hiperbilirrubinemia (bilirrubina total 24,8 umol/L, previa 12,2 umol/L); test de Coombs directo negativo, LDH 5.300 UI/L; presencia de esquistocitos y anisocitosis en frotis de sangre periférica (fig. 1), y alteración en las pruebas de función hepatobiliar (alanina-aminotransferasa 1.116 UL/L, aspartat-aminotrasfersa 1.256 UL/L, GTT 453 UL/L, FA 540 UL/L) y renal (creatinina 152,4 umol/L, previa 75,9 umol/L). Por el deterioro multiorgánico y el pronóstico pobre de la paciente, se determinó junto a la familia iniciar pauta de sedación farmacológica y la paciente falleció al séptimo día de hospitalización.
Diagnóstico
Microangiopatía trombótica (MAT) inducida por cáncer metastásico de origen primario desconocido.
Discusión
El síndrome de MAT está compuesto por la presencia de anemia hemolítica microangiopática, trombocitopenia y lesión Microangiopatía trombótica en paciente con cáncer de origen desconocido isquémica de órgano. La MTAC está presente en el 6% de los pacientes con carcinomas metastásicos y el adenocarcinoma es el subtipo histológico más comúnmente asociado1. También puede ocurrir en pacientes sin metástasis conocida o incluso puede ser la presentación cl nica de cáncer no diagnosticado3. Los principales mecanismos en pacientes con cáncer están dados por metástasis microvasculares inducidas por el propio cáncer, coagulación intravascular diseminada o inducida por quimioterapia y que pueden estar asociadas a toxicidad dosis dependiente (gemcitabina, mito-micina, interferón alfa y cisplatino) o reacción mediada por anticuerpos (oxiplatino) 4-6.
Existen otras causas de MAT, entre estas la púrpura trombocitopénica trombótica (PTT) que es la causa más frecuente en pacientes sanos (46%) y ocurre como resultado de la deficiencia severa de ADAMTS13 (<5%). La terapia de elección por su efectividad es la plasma-féresis, con una sobrevida postratamiento del 80%, lo que demanda un rápido diagnóstico y tratamiento y, aunque no es frecuente en pacientes con cáncer, es importante descartarlo en busca de una posible opción terapéutica 7,8.
Para realizar un correcto diagnóstico de MTAC en pacientes con cáncer es necesario documentar si está recibiendo algún medicamento de los mencionados previamente y determinar si los síntomas son súbitos o insidiosos en sospecha de respuesta mediada por anticuerpos o toxicidad dosis dependiente, respectivamente. Por último, si se no demuestra exposición a medicamentos inductores de MTAC es imprescindible descartar PTT por lo que se han descrito características cl nicas diferenciales entre MTAC y PTT presentadas en la tabla 1.
Respecto al pronóstico, este es ominoso. Se estima una sobrevivencia de 3 días, por lo que las opciones terapéuticas son limitadas y es necesario decidir entre quimioterapia o plan de cuidados paliativos, esto si se conoce la neoplasia de base y su pronóstico 9.
En conclusión, se presenta este caso para dar a conocer su difícil manejo, dado el rápido deterioro clínico, además del desconocimiento de la patóloga de base, lo que limitó el inicio de una terapia dirigida. Sin embargo, la evidencia tanto de metástasis óseas con un tumor primario desconocido, síndrome constitucional progresivo, trombocitopenia, como hallazgos de anemia hemolítica microangiopática y disfunción orgánica múltiple, nos hizo pensar que estábamos ante un caso de MTAC cuyo pronóstico desde el inicio era desalentador.
Responsabilidades éticas
Protección de personas y animales. Los autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre la publicación de datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los autores declaran que en este art culo no aparecen datos de pacientes.