El comunismo, un camino distante de lo establecido por Dios^*

Communism, a distant way from that established by God

Juan Carlos Rodríguez-Campo^**

^* El presente artículo de investigación se deriva del marco teórico de mi proyecto doctoral adelantado en el programa del Doctorado en Ciencias Políticas de la Universidad de Zulia de Venezuela.
^** Doctorante en Ciencia Política de la Universidad del Zulia - Venezuela, Ingeniero Ambiental y Sanitario, Magíster en Hidrosistemas e integrante de la comunidad cristiana Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional - IDMJI; durante cinco años ha estudiado la doctrina cristiana a través de los Estudios Bíblicos y del Instituto Bíblico realizados en la IDMJI. juanrcampo@gmail.com

Recibido: 2 de septiembre de 2013 / Aceptado: 15 de noviembre de 2013

Resumen

El presente artículo de investigación, es origen del análisis realizado a las principales posturas que difieren entre el sistema comunista y el capitalista como elementos decisorios en una integración regional. En este artículo, se realiza un riguroso y amplio análisis de uno de dos temas esencialmente controvertido, la religión y el comunismo. El objetivo no consiste en reprochar la tendencia atea de los marxistas y/o comunistas, sino en demostrar que las principales posturas del comunismo van en contra de lo establecido por Dios, Jehová; motivo por el cual, se puede inferir que este tipo de sistema aunque se implemente en un país nunca cumplirá sus objetivos. El análisis se basa en el artículo realizado por Woods (s.f.) titulado El marxismo y la religión; en él señala que los primeros cristianos eran comunistas, lo cual demuestra que existe una mala interpretación de la doctrina y de ciertos eventos bíblicos. Para ello se sustenta esta postura basado en la Biblia Reina-Valera 1960.

Palabras clave: Comunismo, Integración, Marxismo, Política, Religión, Socialismo.

Abstract

The present article of investigation, it is an origin of the analysis realized to the principal positions that differ between the communist system and the capitalist as decision-making elements in a regional integration. In this article, a rigorous and wide analysis is realized of one of two topics essentially controversial, the religion and the communism. The aim does not consist of reproaching the atheistic trend of the marxists and/or communists, if not in demonstrating that the principal positions of the communism go in opposition to the established for God, Jehova; I motivate for which, it is possible to infer that this one type of system though it is implemented in a country will never fulfill his aims. The analysis is based on the article realized by Woods (s.f.) graduate Marxism and religion, in him indicates that the first Christians were communist, which demonstrates that there exists a bad interpretation of the doctrine and of certain Biblical events; for it this position is sustained based on the Bible Reina-Valera 1960.

Key words: Communism, Integration, Marxism, Politics, Religion and Socialism.

Introducción

Desde la perspectiva de la política internacional, la integración regional en los países latinoamericanos, es progresiva, no obstante, en los Estados partes que hacen parte de esta idea supranacional, existen sistemas antagónicos como el comunista y el capitalismo, lo cual para los efectos de este trabajo se analizarán las posturas que podrían ser determinantes en un proceso de integración.

Cancino & Albornoz (2007) afirman: La integración regional surge como una posibilidad para superar la dependencia económica, mediante el fortalecimiento y la diversificación de la industria, en un escenario de mercados compartidos y generación de valor a través de la incorporación de tecnología en las exportaciones. Pero las decisiones nacionales no se toman en el vacío, sino en medio de la confrontación de concepciones opuestas de la integración y de conflictos entre poderosos intereses, que señalan caminos divergentes para las naciones latinoamericanas (p. 121).

Como se mencionó anteriormente, la integración no solo incluye el tema económico, es mucho más amplio y complejo ya que abarca un sinnúmero de aspectos sociales, culturales, religiosos, políticos, entre otros, los cuales se deben ir superando poco a poco para lograr dicha integración.

Uno de los aspectos tratados hace referencia lo esencial que es para la integración definir inicialmente el modelo económico que se aplicará, allí es donde empieza seguramente uno de los obstáculos más representativos para la integración de las naciones cuando los países interesados difieren en este tema, más en Latinoamérica donde en los últimos años se ha visto una creciente tendencia comunista.

Llama la atención ciertas posturas que contempla el comunismo, que evidentemente no se tienen en cuenta con la integración entre naciones, sin embargo, si se hace un peso de manera indirecta, esencialmente en la religión, se observaran los aspectos en que más difieren los sistemas capitalistas y socialistas respecto a la doctrina cristiana, tal y como se verá más adelante. El análisis estará basado en el documento realizado por Alan Woods (s.f.) titulado El marxismo y la religión. Para contextualizamos, presentaré a continuación dos generalidades sobre el capitalismo y el socialismo.

Rand (1967) establece:

el capitalismo es el único sistema que reconociendo la naturaleza "racional" del ser humano, y, por tanto, la "libertad" como exigencia de esta, se fundamenta en la relación existente entre la inteligencia, la libertad y la supervivencia del hombre. Solo en la sociedad capitalista los hombres gozan de libertad para pensar, disentir y crear, y fue esa libertad, la que permitió que el capitalismo superara a todos los sistemas económicos anteriores (p. 64).

Respecto al socialismo, Harnecker (1979) señala:

Es la etapa de desarrollo social que comienza con el triunfo de la revolución proletaria. Se trata de una etapa que viene directamente del capitalismo y durante la cual se ajustan y transforman los elementos heredados de este sistema. Durante esta etapa van desapareciendo los elementos negativos y se van fortaleciendo los elementos que conducen al comunismo, a la etapa de la sociedad en la que desaparecen las clases sociales y el Estado como mecanismo de represión.

Debido al carácter transitorio de esta etapa, se la suele llamar también transición al socialismo; sin embargo, siguiendo las reflexiones de Marx y Lenin, en ese caso nos parecería más correcto hablar de transición al comunismo (p. 13).

Woods (s.f.), reconocido como uno de los grandes defensores e influyentes del marxismo tanto en Inglaterra como a nivel internacional, en su artículo El marxismo y la religión, hace una fuerte crítica respecto el por qué la humanidad sigue todavía creyendo en la existencia de un ser sobrenatural si la ciencia en los últimos años ha demostrado que la humanidad ha evolucionado, donde dice textualmente:

"Los últimos descubrimientos finalmente han demostrado lo absurdo que es el creacionismo. Han terminado con la idea de que las especies fueron creadas por separado y el hombre, con su alma eterna, fue creado especialmente para cantar alabanzas al Señor. Ahora es evidente que los humanos no son creaciones únicas" (p. 1).

Con estas y otras afirmaciones que hace, reafirma, como siempre lo ha dicho en la mayoría de sus escritos, que una de las corrientes en que se basa el socialismo es el materialismo filosófico, negando toda posibilidad de la existencia de Dios, lo que conlleva que los partidarios del socialismo y del comunismo en su mayoría sean ateos.

La pregunta que seguramente se hacen en estos momentos es, ¿qué tiene que ver que los socialistas sean ateos con la integración internacional?, es verdad, nada seguramente, si se sabe que después que haya voluntad política entre las partes a negociar esto se puede superar sin ningún problema, pero no se puede desconocer que la religión y la política siempre han estado de la mano.

Desde la década de los 90, y especialmente desde el 11-S, tiene lugar un hecho de por sí novedoso en el ámbito académico de las Relaciones Internacionales. Irrumpe a partir de entonces un importante volumen de literatura que reconoce el interés por las religiones y la urgente necesidad de incorporarlas a las explicaciones de política internacional contemporánea.

De este modo, la religión, calificada en una ocasión como el "factor olvidado" por excelencia de las Relaciones Internacionales (...), pasa a principios del siglo XXI no solo a formar parte de su agenda de investigación sino a ocupar un lugar central en ellas (Iranzo, 2012, p. 17).

Lo que se quiere resaltar no es el ateísmo por parte de los marxistas, eso es respetable, ni tampoco demostrar qué tanto se puede ver afectada la integración regional por haber diferencias religiosas; lo que busco con esta reflexión es mostrar que el modelo comunista va en contra de lo que Jehová ha dispuesto, lo que significa que nunca cumplirá con sus objetivos, motivo por el cual, aplicarlos en un país o tratar de tenerlo en cuenta en una integración sería tiempo perdido; para sustentar mi postura me basaré en lo que está escrito en la Biblia versión Reina-Valera 1960.

Dentro de los postulados que caracterizan al comunismo y que difiere notablemente del capitalismo están la abolición de la propiedad privada y el control de los medios de producción, pasando estos últimos a manos de los trabajadores, de todo el pueblo, buscando una distribución igualitaria para acabar con la pobreza; Engels (citado por el Instituto de Marxismo-Leninismo, 1980) comenta, "la propiedad privada debe también ser suprimida y ocuparán su lugar el usufructo colectivo de todos los instrumentos de producción y el reparto de los productos de común acuerdo, lo que se llama la comunidad de bienes" (p. 43). Estas posturas son las que de alguna manera van en contra de lo que Jehová ha dispuesto para la humanidad, por lo anterior, me centraré en estos dos puntos y en ciertas afirmaciones que realiza Woods (s.f.) en su artículo.

El inicio de la humana, una historia poco conocida

Seguramente este es el punto más transcendental ya que distancia a los creacionistas de los materialistas, y es aquí donde el marxismo se desvía totalmente de la realidad (El hombre jamás ha creado nada, todo sale de la Biblia, las constituciones de las naciones todas coinciden con los escritos bíblicos, las sociedades antiquísimas que fueron organizadas directamente por Dios, como la poesía, que muchos figuran como creadores y compositores cuando este género literario abunda en los escritos de la Biblia), y este desacierto tumba las posturas ya mencionadas; Alan Woods ha tratado de demostrar con resultados científicos que se ha logrado en las últimas décadas demostrar que el hombre no es producto de la acción divina, sino de la evolución de la humanidad, y que esta como el de muchas otras especies evolucionaron a partir de la materia orgánica hace millones de años. Entonces debemos preguntarnos si lo que han sufrido las especies es adaptación a un medio que los rodea o evolución; porque ya han pasado cientos de años y no seguimos evolucionando, ¿será que la evolución se detuvo?

Woods (2013) publicó el artículo "La revolución filosófica de Marx - Reflexiones sobre las tesis sobre Feuerbach"; en él hace la siguiente aseveración:

El materialismo rechaza la noción de que la mente, la conciencia, el alma, etc. sean algo separado de la materia. El pensamiento no es más que el modo de existencia del cerebro, que, como la vida misma, solo es materia organizada de determinada manera. La mente es lo que llamamos la suma total de la actividad del cerebro y del sistema nervioso. Pero, dialécticamente, el todo es mayor que la suma de las partes.

Este punto de vista materialista, se corresponde estrechamente con las conclusiones de la ciencia, que está descubriendo poco a poco el funcionamiento del cerebro y revelando sus secretos. Por el contrario, los idealistas persisten en la presentación de la conciencia como un "misterio", algo que no podemos comprender. En este punto, nuestro viejo amigo el Alma reemerge triunfante acompañado por el Dios sagrado, los ángeles, el diablo y todo el resto de la parafernalia mística que la ciencia debería haber enviado a un museo hace mucho tiempo.

Esta claro, los marxistas están totalmente equivocados respecto al origen de la humanidad, pero este error no es seguramente voluntario, el que sean ateos tiene sus orígenes muy claros; la distorsión de la doctrina. Marx como muchos otros filósofos seguramente se decepcionaron al ver como la iglesia en ese tiempo abusaba de su poder y de alguna manera desfiguraron el verdadero mensaje de Jehová. Tal lo dijo el Apóstol Pablo en el libro de Hch. 20; 29-30 (Reina-Valera 1960), 29. "Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño, 30.Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos".

Woods (s.f.), en su trabajo El marxismo y la religión, resalta un episodio el cual llamó la lista cínica de infamias, textualmente escribió lo siguiente:

En el año 1517 el papa León X publicó la Taxa Camarae destinada a vender indulgencias y salvar almas a cambio de una modesta suma de dinero. No existía ningún crimen por vil que este fuese que no pudiera ser absuelto. Entre sus 35 artículos podemos leer:

1. El eclesiástico que incurriere en pecado carnal, ya sea con monjas, ya con primas, sobrinas o ahijadas suyas, ya, en fin, con otra mujer cualquiera, será absuelto, mediante el pago de 67 libras, 12 sueldos.

2. Si el eclesiástico, además del pecado de fornicación, pidiese ser absuelto del pecado contra natura o de bestialidad, debe pagar 219 libras, 15 sueldos. Mas si solo hubiese cometido pecado contra natura con niños o con bestias y no con mujer, solamente pagará 131 libras, 15 sueldos.

3. El sacerdote que desflorase a una virgen, pagará 2 libras, 8 sueldos.

4. La religiosa que quisiera alcanzar la dignidad de abadesa después de haberse entregado a uno o más hombres simultánea o sucesivamente, ya dentro, ya fuera de su convento, pagará 131 libras, 15 sueldos.

5. El que ahogase a un hijo suyo, pagará 17 libras, 15 sueldos (o sea 2 libras más que por matar a un desconocido), y si lo mataren el padre y la madre con mutuo consentimiento, pagarán 27 libras, 1 sueldo por la absolución.

6. El asesinato de un hermano, una hermana, una madre o un padre, se pagarán 17 libras, 5 sueldos. (...) (p. 14).

La verdad, al ver estos sucesos y muchas otras desagradables que nos ha mostrado la historia seguramente hubiese terminado siendo ateo, no los culpo. Recordemos que la mejor manera de evangelizar o conquistar adeptos es el buen testimonio, en otras palabras, nuestro actuar debe ser coherente con lo que predicamos y pensamos. Evangelio = Ley del Espíritu = Ética aplicada, Valores, la Moral, Comportamientos virtuosos.

No es por justificar al papa León X, pero creo que como muchas otras religiones él simplemente estaba aplicando todavía la Ley de Moisés ya que en ella todo era físico. El verdadero problema radica en el desconocimiento y mala interpretación del Evangelio y la Ley (La mejor interpretación de una obra la da aquel quien la escribió, la Ley de Moisés y el Evangelio fueron inspiradas por el Espíritu de Dios) y en la falta de buen ejemplo por parte de los que profesan ser enviados por Dios, no de doctrina, la doctrina dada por Dios a través de los profetas y del Señor Jesucristo es clara, justa y perfecta.

Dri (2000), en su ensayo titulado La religión en la concepción política de Maquiavelo, resalta que en los discursos de Maquiavelo, su crítica no iba dirigida a la religión como tal. Dice textualmente: "todo lo contrario, la religión es uno de los fundamentos de la buena marcha de un Estado. El problema es la corrupción de la religión, sobre todo en su cabeza, en aquellos que se presentan como sus pastores" (p. 105).

Por todo lo anterior, voy a sustentar la verdadera historia de la humanidad basado en las escrituras de la Biblia como evidencia real de esta.

En el principio Dios creó todo, el cielo, la tierra, árboles, hierba, las estrellas, la luna, el sol, animales según su género y todo el universo, y todo lo que habita en el planeta tierra; Gn. 1:26, Entonces dijo Dios:

Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza (entonces sabemos que Dios tiene ojos, boca, corazón, en la Biblia encontramos frases como, la mano de Dios); y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.

Está claro que Dios nos dio la potestad sobre todas las cosas, y desde entonces hemos disfrutado de eso, así lo confirma en Gn. 1:27-28, 27.

Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó, 28. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

El que nos enseñoreáramos de todas las especies no significaba que las arrasáramos y que hoy en día estuviéramos sufriendo los problemas ambientales que nos aquejan; por eso, seguramente cuando Dios daba las leyes estableció lo siguiente:

Dt. 22:6 Cuando encuentres por el camino algún nido de ave en cualquier árbol, o sobre la tierra, con pollos o huevos, y la madre echada sobre los pollos o sobre los huevos, no tomarás la madre con los hijos.

Dt. 22:7 Dejarás ir a la madre, y tomarás los pollos para ti, para que te vaya bien, y prolongues tus días.

Considero que esta fue la primera vez que se habló sobre proteger los recursos naturales, el medioambiente, para poder prolongar nuestros días.

Dios creó todo en siete días, no son siete días humanos como se piensa normalmente, en 2 P. 3:8 Pedro dice: "Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día".

Siguiendo con la historia, la Biblia también nos habla que Dios plantó un huerto en Edén y puso allí al hombre y a la mujer que había formado para que lo labrara y lo guardase (allí comienza nuestra historia laboral). La misma Biblia nos señala que este estaba ubicado en Mesopotamia por las descripciones que da respecto a los ríos que lo rodeaban. En el Edén, Jehová hizo nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista, y bueno para comer; también el árbol de vida (este árbol simbolizaba a Cristo Jesús) en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal (representaba el conocimiento de lo bueno y de lo malo que el hombre tendría, y de esta manera tendría que tomar decisiones respecto qué camino seguir) (Gn. 2:9).

Uno de los momentos más importante en la historia de la humanidad aconteció cuando el hombre desobedeció a Dios. La serpiente, que como sabemos era satanás en forma de serpiente, persuadió a Eva para que junto con Adán comieran del árbol que Jehová les había prohibido, el del bien y del mal. Ellos estaban en un estado de inocencia no conocían lo bueno o lo malo.

Gn. 3:7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales. (Empezaron a sentir vergüenza).

Gn. 3:13. Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí.

Gn. 3:14. Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.

Ya que para los materialistas son importantes las evidencias científicas, les comento que en un reciente estudio se descubrió un fósil de 95 millones de años aproximadamente que demuestra que las serpientes tenían patas, seguramente estas desaparecieron cuando Dios las castigó.

Una evidencia de mucho peso, es cuando el señor profetizó sobre algo que ocurriría siglos después, hay que recordar que el libro de Génesis fue escrito por Moisés revelado por Dios.

Gn. 3:15 Y pondré enemistad entre ti (satanás) y la mujer (La iglesia de Dios), y entre tu simiente (los seguidores del diablo, los seguidores del pecado) y la simiente suya (Cristo Jesús); esta te herirá en la cabeza (esto ocurrió cuando el señor Jesucristo resucitó al tercer día venciendo a la muerte y al diablo), y tú le herirás en el calcañar (satanás hirió al señor cuando él tuvo que pasar por todos los sufrimientos y luego la crucificción).

Gn. 3:16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti. Gn. 3:17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.

Estas son algunas consecuencias que hoy vivimos por la desobediencia de Adán y Eva, la mujer sufrir en su preñez, y los hombres tener que trabajar con más esfuerzo, con más dificultad.

Después que Adán y Eva fueron expulsados del Edén siguieron multiplicándose y expandiéndose en toda la tierra, Mesopotamia; con el relato de estos acontecimientos le queda claro a la humanidad la existencia de Dios y del ser humano como creatura suya; el verdadero origen de la creencia de un Dios; no como lo expresa Woods (s.f.) donde dice que:

Las raíces de la religión están en el pasado lejano, cuando los humanos luchaban para librarse del mundo animal de donde procedemos. Para encontrar sentido a los fenómenos naturales (...), los humanos tenían que acudir a la magia y al animismo (p. 30).

Muchos años después por causa de la maldad del hombre Dios decide acabarlos, pero encuentra en Noé, descendiente de Adán, a un hombre justo y le da la orden de construir el Arca. Pasaron 120 años desde que Dios le dio la orden a Noé hasta que ocurrió el diluvio, después de esto Jehová deja como señal del pacto que hace con Noé de no volver a destruir el mundo con otro diluvio lo que hoy llamamos arcoíris. También cabe resaltar que hace un par de años científicos han declarado que hay una alta posibilidad de que hayan encontrado enterrado lo que posiblemente es el Arca de Noé.

Gn. 9:13 Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y la tierra.

Gn. 9:14 Y sucederá que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se dejará ver entonces mi arco en las nubes.

Gn. 9:15 Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mí y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más diluvio de aguas para destruir toda carne.

Así mismo les dio la orden que se multiplicaran, es importante resaltar que para que se multiplicaran de gran manera debieron pasar muchos siglos desde el diluvio, tanto, que la Biblia dice que Noé después de este evento vivió 350 años y murió a la edad de 950 años.

Los hijos de Noé se dispersaron de la siguiente manera, los descendientes de Jafet forman los pueblos indo-europeos o arios; las naciones camitas (descendientes de Cam) fueron la raza que se establecieron en África, en el litoral oriental del Mediterráneo en Arabia y en Mesopotamia; las naciones semitas (descendientes de Sem) poblaron el Asia desde las playas del Mediterráneo hasta el Índico. De esta raza Dios escogió a su pueblo (Kemp, 1969).

De esta manera el hombre se dispersó por todo el mundo, llevando consigo el conocimiento de la existencia de Jehová, claro está que seguramente muchas generaciones se olvidaron de Jehová, hasta que Dios se volvió a manifestar siglos después haciéndole el llamado a Abram. Seguramente en este tiempo mientras se poblaba la tierra el hombre por la necesidad de tener a Dios creó sus propios dioses, los cuales vemos cómo hoy en día idolatran a la luna, al sol, a la muerte, a animales, a otras personas, entre otras.

Teniendo en cuenta lo anteriormente mencionado puede que Woods (s.f.) tenga razón al expresar en su artículo lo siguiente:

Esta relación psicológica entre los seres humanos y las deidades que crean para sí mismos, nos dicen mucho sobre la verdadera situación de la raza humana. No es un secreto que las deidades de una sociedad determinada son un reflejo de esa sociedad, de su modo de producción, las relaciones sociales, la moralidad y los prejuicios. Asimismo añade, (citado por Woods & Grant, 1995) no fue dios quien creó al hombre a su propia imagen, sino, por el contrario, el hombre quien creó dioses a su propia imagen y semejanza (p. 8). Pero a Woods se le ha olvidado que existe un solo Dios, Jehová, y ese es el gran problema de la humanidad, los otros dioses son como él lo comentaba, hechos a imagen del hombre.

Volviendo a las evidencias, el verdadero origen de muchos de nuestros comportamientos y que seguramente los materialistas desconocen está en lo que ocurrió cuando Adán y Eva comieron del árbol del bien y del mal, en ese momento empieza a funcionar la conciencia y ahí comienza a funcionar su libre albedrío. Es por eso que muchos de los que estudian el comportamiento humano no lo han podido descifrar ya que no tienen en cuenta esta realidad y otras que seguramente en este momento no lo entenderían.

Una vez alguien me dijo que podíamos considerar a satanás como un pensamiento, algo que siempre nos está invitando a hacer lo malo con el fin de ofender a Dios, lo que va en contra de la ley, lo prohibido, o por qué será que cuando algo nos es prohibido nos llama más la atención, o por qué será que todas las cosas que Dios prohibió porque le desagradan como la ira, la idolatría, la fornicación, la mentira, adulterio, lascivia, hechicería, enemistades, ambición, entre otras, son las que más se ven en el mundo, o es acaso que no sentimos esa lucha interior de esas dos semillas (del bien y del mal) sembradas en nuestra carne por ver cuál de las dos crecerá más en cada uno de nosotros.

Más que parafernalia mística, hay un conjunto de evidencias palpables dadas por Dios hace muchísimos años a través del hombre y que hoy las vivimos. Ro. 2:15 "mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos".

Cuando Woods (s.f.) hace referencia a que la ciencia ya ha descubierto cómo funciona el cerebro, solo se está refiriendo a que la ciencia apenas está logrando entender qué utilizó Dios para crear las cosas, es muy similar a que una persona hoy en día aprenda y descubra cómo funciona una computadora o la Internet, porque una cosa es saber cómo funciona el cerebro o el cuerpo humano, pero otra cosa es saber en realidad cómo se crea. Hace un par de años le escuche decir a un científico del cual no recuerdo su nombre, que la ciencia solo explica lo natural, lo que se ve a simple vista, pero no es capaz de explicar lo sobrenatural.

Distinto a lo que se piensa, la conciencia no es algo místico, o algo difícil de entender, el alma o la conciencia, es lo que se encarga de ir ante Dios cuando morimos, la que mueve toda la carne, es la encargada de señalarnos por lo malo que hagamos, claro está, hasta el día en que la cauterizamos como hacen los asesinos, los corruptos, los injustos.

Los primeros cristianos, ¿comunistas?

Los primeros cristianos eran comunistas y esto se puede ver con claridad al leer los Hechos de los Apóstoles. El propio Jesucristo andaba entre los pobres y desposeídos y con frecuencia atacaba a los ricos. No es casualidad que su primer acto al entrar en Jerusalén fuera atacar a los cambistas del templo. También dijo que sería más fácil que un camello pasara por el ojo de una aguja a que un rico entrara en el reino de dios (Lucas, 18-24) (Woods, s.f., p. 10).

El que Alan Wood se haya apoyado en diferentes situaciones que aparecen en la Biblia como los mencionados anteriormente para afirmar que los primeros cristianos eran comunistas, demuestra que existe una mala interpretación de la doctrina y de algunos eventos. Por esta misma razón en el mundo existen muchas religiones.

La historia

Todo se remonta cuando Dios quiso conformar un pueblo único para él (recordemos que ya habían pasado siglos y la tierra estaba poblada), para que le sirviera, le alabara y le fuera fiel, de esta manera Dios siempre los iba a proteger y prosperar, ese pueblo fue el pueblo judío, el mismo que hoy conocemos, que dejó de ser el pueblo de Dios por sus pecados. Todo empezó con el llamamiento que Dios le hizo a Abram.

Dios siempre quiso prosperar a su pueblo elegido, los demás éramos gentiles, no teníamos posibilidad de la salvación; por medio de Moisés los libró de la esclavitud que vivían en Egipto (fue en Egipto donde en realidad se formó el pueblo judío), pero antes de ser esclavos fueron muy prósperos en esas tierras extranjeras durante aproximadamente 430 años, desde la llegada de José (cuando fue vendido) hasta que Dios decidió sacarlos y llevarlos a la tierra prometida por medio de Moisés.

El por qué el pueblo terminó siendo esclavo lo encontramos en los siguientes versículos:

Ex. 1:6 Y murió José, y todos sus hermanos, y toda aquella generación. 7. Y los hijos de Israel fructificaron y se multiplicaron, y fueron aumentados y fortalecidos en extremo, y se llenó de ellos la tierra (Egipto). 8. Entretanto, se levantó sobre Egipto un nuevo rey que no conocía a José; y dijo a su pueblo: 9. He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros.

Es cuando Dios decide que ya era el momento de que su pueblo fuese llevado a la tierra prometida, ya que no contaban con un territorio, la tierra de Canaán, esta se encontraba habitada y el Señor se las entregó por medio de batallas, las tierras fueron repartidas entre las 12 tribus que conformaban al pueblo de Israel, y se repartieron en su mayoría al azar sin tener en cuenta qué tan productiva era o no la tierra que les tocara; ¿de qué otra manera se podía ser equitativo?

Nm. 33:53 y echaréis a los moradores de la tierra, y habitaréis en ella; porque yo os la he dado para que sea vuestra propiedad.

Nm. 33:54 Y heredaréis la tierra por sorteo por vuestras familias; a los muchos daréis mucho por herencia, y a los pocos daréis menos por herencia; donde le cayere la suerte, allí la tendrá cada uno; por las tribus de vuestros padres heredaréis.

Durante años el pueblo vivió en Canaán dirigidos por Dios a través de los profetas, hasta que el pueblo le pidió rey al señor (esto disgustó mucho al Señor), y Jehová establece al primer rey en el pueblo judío, el rey Saúl, la primera monarquía, seguido de él vinieron el Rey David, Salomón hijo de David y después el hijo de Salomón, Roboam, quien por imponer impuestos más altos que los de su padre, el pueblo se dividió en dos, el reino del norte, llamado Israel y el reino del sur, llamado Judá.

Hasta este momento de la historia Dios ha demostrado que él prospera conforme a su voluntad, el rey Salomón se considera que fue uno de los más ricos que existieron y el rey David uno de los más guerreros y poderosos.

Que el pueblo se haya rebelado por el abuso del rey Roboam es algo muy natural en los seres humanos cuando sentimos que se nos vulneran nuestros derechos, lo vimos en esa época, lo vemos hoy y lo veremos siempre.

Cuando llegó el Señor Jesucristo aproximadamente 430 años después que Dios entregó al pueblo judío en manos del rey de Babilonia para que lo destruyera (dejando un remanente de siete mil) por sus pecados y alejarse de Dios; el mensaje era otro, los gentiles teníamos la oportunidad como los judíos de ganarnos la vida eterna y de disfrutar del respaldo de Dios siempre y cuando cumpliéramos con su voluntad y creyéramos en Cristo Jesús. Recordemos que para el pueblo judío Jesucristo fue un profeta y no el hijo de Dios.

Como las evidencias científicas son importantes para los materialistas, quiero comentar que en la Biblia encontramos muchas profecías dadas por Dios a través de los profetas sobre la destrucción de Israel (el pueblo judío), profecías dadas muchos años antes de estos eventos. A continuación, hago mención de una profecía que Dios dio por medio de Jeremías.

Jer. 25:8 Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos: Por cuanto no habéis oído mis palabras.

Jer. 25:9 he aquí enviaré y tomaré a todas las tribus del norte, dice Jehová, y a Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y los traeré contra esta tierra y contra sus moradores, y contra todas estas naciones en derredor; y los destruiré, y los pondré por escarnio y por burla y en desolación perpetua.

Jer. 25:10 Y haré que desaparezca de entre ellos la voz de gozo y la voz de alegría, la voz de desposado y la voz de desposada, ruido de molino y luz de lámpara.

Jer. 25:11 Toda esta tierra será puesta en ruinas y en espanto; y servirán estas naciones al rey de Babilonia 70 años.

Jer. 25:12 Y cuando sean cumplidos los 70 años, castigaré al rey de Babilonia y a aquella nación por su maldad, ha dicho Jehová, y a la tierra de los caldeos; y la convertiré en desiertos para siempre.

Si no me equivoco, en la actualidad Babilonia y los caldeos no existen, no han podido ser restablecidos, en la Biblia también se menciona cómo Dios castigó y maldijo a otras naciones vecinas del pueblo de Israel que fueron usadas para destruirlos, hoy en día algunas ciudades o pueblos bíblicos todavía existen pero parte del castigo fue que el mal iría de nación en nación; entre ellos podemos mencionar a Egipto, Gaza, Siria, Damasco, entre otras; es posible que así como hoy todavía sufrimos de la maldición proferida a Adán y a Eva, estas naciones estén viviendo dicho castigo, eso solo lo sabe Dios.

¿Por qué entre los pobres?

La verdadera razón por la que el Señor Jesucristo anduvo con los pobres (no económicos, sino pobres en el conocimiento de lo de Dios) se debe a que él vino exclusivamente a enseñarles a los judíos el evangelio, no a los gentiles (fue el Apóstol Pablo el encargado de esta labor); entre judíos se encontraban los escribas y fariseos que siendo los sabios, poderosos y conocedores de la Ley de Moisés no lo ponían en práctica, pero sí obligaban al pueblo a cumplirlo. Eran injustos, no daban buen testimonio, a ninguno les interesaban las almas, lo que les interesaban eran los intereses personales, sus riquezas era lo que les preocupaba. Andando con los pobres en el conocimiento de lo de Dios los humillaba ya que a través de ellos (los primeros judíos convertidos al cristianismo) empezó a enseñar el Evangelio.

Mt. 23:1 Entonces habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo:

Mt. 23:2 En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos.

Mt. 23:3 Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen.

Mt. 23:4 Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.

Además, no aceptaron al Señor Jesucristo porque consideraban que blasfemaba al decir que él era el Mesías, el hijo de Dios; ya que ellos no esperaban que el Cristo viniera de un carpintero y sobre todo de Nazaret (Jn 1:45 Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret. Juan 1:46 Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve), ya que esta era una de las ciudades que Dios ordenó que se construyeran por medio de Moisés, llamadas ciudades de refugio, donde iban homicidas a refugiarse.

Nm 35:9 Habló Jehová a Moisés, diciendo:

Nm. 35:10 Habla a los hijos de Israel, y diles: Cuando hayáis pasado al otro lado del Jordán a la tierra de Canaán,

Nm. 35:11 os señalaréis ciudades, ciudades de refugio tendréis, donde huya el homicida que hiriere a alguno de muerte sin intención.

Nm. 35:12 Y os serán aquellas ciudades para refugiarse del vengador, y no morirá el homicida hasta que entre en juicio delante de la congregación.

Adicionalmente, al predicar el Evangelio les enseñaba a los judíos que ya no era necesario tantos rituales, tantas cosa físicas que tenían que cumplir (por ejemplo, la circuncisión, guardar el día sábado, las fiestas solemnes, el ojo por ojo, los sacrificios, entre otros), hay que recordar que toda la Ley de Moisés era física; que ahora lo importante es lo espiritual; nada más imagínense como se sentirían los judíos al escuchar estas palabras, sentir que se les estaba dando una nueva religión, que tendrían que cambiar algo que llevaban practicando durante siglos y que fue dado por Dios a sus antepasados.

En realidad nada ha cambiado respecto a la Ley de Moisés, esta sigue vigente, fue derogada con Cristo Jesús en la cruz del calvario dándole paso a la Ley del Evangelio de Cristo, en otras palabras, cambió la forma de salvación, antes había solamente que cumplir la Ley de Moisés, hoy en día debemos creer en Cristo Jesús y dar cumplimiento al Evangelio. Las leyes siguen vigentes en nuestro corazón, como lo comenté anteriormente hoy todo es en sentido espiritual, no físico.

Ro. 3: 27 ¿Dónde, pues, está la jactancia (jactancia de ser el pueblo elegido por Dios)? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras (Ley de Moisés)? No, sino por la ley de la fe (Ley de Cristo, el Evangelio).

Ro. 3:28 Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe (el Evangelio) sin las obras de la ley (Ley de Moisés).

Ro. 3:29 ¿Es Dios solamente Dios de los judíos? ¿No es también Dios de los gentiles? Ciertamente, también de los gentiles.

Ro. 3:30 Porque Dios es uno, y él justificará por la fe a los de la circuncisión (judíos), y por medio de la fe a los de la incircuncisión (gentiles).

Ro. 3:31 ¿Luego por la fe invalidamos la ley? En ninguna manera, sino que confirmamos la ley.

Sigue siendo la misma Ley de Dios, con la diferencia que hoy tenemos al Espíritu Santo quien fue enviado por Dios para que nos ayudara a cumplirla, ayuda que no tuvieron los judíos. Entre los ejemplos del cambio encontramos los siguientes, el ojo por ojo, ya la venganza es de Dios, no de nosotros; La Pascua no se debe festejar cada año como estaba establecido, puesto que el señor Jesús fue crucificado el día de la Pascua, él es la Pascua, la Pascua a Jehová. Por eso cada cristiano que cumple la Ley está festejando la Pascua, ya es algo permanente, puesto que Cristo la hizo una sola vez por última vez. Los sacrificios que se hacían a Dios (no humanos, sino de animales) en la Ley, hoy en día ese sacrificio vivo somos nosotros, cambiando nuestra manera de vivir, dejando todo aquello que le desagrada a Dios, nuestra lucha interna. En pocas palabras "hoy en día seguimos practicando el judaísmo" (Piraquive, 2012).

¿Por qué contra los ricos?

El señor Jesucristo y los Apóstoles no estaban en contra de los ricos por tener dinero y/o propiedades, hay que recordar que es Dios el que prospera, el que decide a quién le da y a quién no. Él lo que cuestionaba era la falta de generosidad, el que no fuesen misericordiosos, el que no le tendieran la mano a los necesitados, el que utilizaran esa posición económica para humillar, el que fuesen injustos, el que pusieran al dinero por encima de lo de Dios.

Mt. 6:26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Mt. 6:27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?

Mt. 6:28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan.

En la sociedad encontramos personas de las mismas clases sociales que han tenido prácticamente las mismas oportunidades económicas y de estudios, por qué será que uno prospera y el otro no, así mismo, vemos situaciones en que una persona tiene todas las posibilidades económica, sociales, educativas y profesionales sobre otra de clase baja, y esta última logra salir adelante y prospera más que la primera.

No importa que sistemas económicos nos inventemos y se establezcan en un país, todos seguramente tendrán cosas muy positivas y otras negativas; lo que no permitirá que estos funcionen como lo desearían sus defensores, es la condición humana, esa lucha interna que llevamos dentro, donde muchas veces dejan que florezca la ambición, la envidia, la corrupción, la pérdida del control por el poder.

El Apóstol Pablo en 1 Ti. 6:17 dice, "A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos".1 Ti. 6:18 "Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos".

Muchas religiones en el mundo dicen que Dios no prospera a las personas, confunden la humildad y la sencillez con ser pobres, muy equivocadas están, en la Biblia encontramos casos muy particulares en que Jehová prosperó a algunas personas, Abraham fue uno de ellos, al mismo pueblo judío. Seguramente alguien puede decirme que en la Biblia también encontramos frases como: La raíz de todos los males es el amor al dinero, y tienen toda la razón, pero esto ocurre cuando nos dejamos llevar por la codicia, la ambición, y por amor al dinero hacemos mucho daño.

Mt. 6:32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mt. 6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia (la transformación del ser), y todas estas cosas os serán añadidas.

Woods (s.f.), en su equivocada idea de demostrar que los primeros cristianos eran comunistas presenta en el documento un pasaje de la Biblia de la epístola de Santiago donde resalta:

Ahora les toca a los ricos: lloren y laméntense porque les han venido encima desgracias. Los gusanos se han metido en sus reservas y la polilla se come sus vestidos; su oro y su plata se han oxidado. El óxido se levanta como acusador contra ustedes y como un fuego les devora las carnes. ¿Cómo han atesorado, si eran los últimos tiempos?

El salario de los trabajadores que cosecharon sus campos se ha puesto a gritar, pues ustedes no les pagaron; las quejas de los segadores ya habían llegado a los oídos del Señor de los ejércitos. Han conocido solo lujo y placeres en este mundo, y lo pasaron muy bien, mientras otros eran asesinados. Condenaron y mataron al inocente, pues ¿cómo podía defenderse? (Santiago, 5-1). Esta es la voz de la lucha de clases, sin "sis" y sin "peros". La Biblia está llena de estas expresiones (p. 11).

Claro que la Biblia está llena de esas expresiones, como lo he comentado antes, Dios no le agrada las personas que hacen el mal, injustas, sean ricos o pobres; estas no son expresiones comunistas, son expresiones de reproche a los injustos, corruptos, malintencionados, egoístas, envidiosos, ambiciosos; y mucho menos es una voz de lucha de clases, es una voz de respeto, valorar a los demás, de amor al prójimo, el de cumplir con lo establecido por Dios.

La lucha de clases

Estoy de acuerdo respecto a la abolición de las luchas de clases que propone el comunismo; claro, de la explotación, de la opresión y de la lucha entre los humanos por pisotear a los otros, ya que no debería ser así, todo esto va en contra del Evangelio, esas luchas y explotaciones inhumanas se dan por el egoísmo y la falta de amor por el prójimo. Pero acabar con la pobreza en toda la humanidad considero que será algo muy difícil de lograr, casi imposible, esta ha existido siempre y existirá hasta el fin de los tiempos. Lo que comparto es que sí se debe buscar la manera de mejorar la calidad de vida de las personas, de nuestras comunidades, el darles un mejor vivir, que tengan más oportunidades y espacios para desarrollar sus potencialidades.

En la Biblia encontramos una expresión dada por Jesús respecto a la existencia de los pobres:

Mt. 26:6 Y estando Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso,

Mt. 26:7 vino a él una mujer, con un vaso de alabastro de perfume de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de él, estando sentado a la mesa.

Mt. 26:8 Al ver esto, los discípulos se enojaron, diciendo: ¿Para qué este desperdicio?

Mt. 26:9 Porque esto podía haberse vendido a gran precio, y haberse dado a los pobres. Mt. 26:10 Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué molestáis a esta mujer? pues ha hecho conmigo una buena obra.

Mt. 26:11 Porque siempre tendréis pobres con vosotros, pero a mí no siempre me tendréis.

Woods (s.f.) en el documento destaca que en la mayoría de las religiones existe un sueño de tener un mundo mejor en el que no habrían opresores ni oprimidos, el cual lo llama una ilusión, donde dice literalmente:

Tanto en las iglesias cristianas como en las mezquitas musulmanas, esta ilusión persiste en la "comunión" o hermandad de todos los creyentes, en la idea que todos son "iguales a los ojos de dios" y otras cosas por el estilo. Pero al día siguiente, el empresario rico cristiano o musulmán volverá a explotar, robar, insultar y estafar a sus trabajadores como lo hacía antes de la "comunión". Cuando se menciona esta flagrante contradicción entre la teoría y la práctica de la religión, sacudirán tristemente la cabeza y entre dientes se culpará a la imperfección de los seres humanos en este mundo de pecado, y esto es muy poco consuelo para el trabajador (p. 10).

Lastimosamente estas contradicciones las podemos encontrar en todas las sociedades, en todos los tiempos, se repiten y se repetirán una y otra vez en cualquier momento de la historia porque las contradicciones las producen los hombres, no Dios. Quién puede asegurar que esto no ocurrirá en el socialismo o en el comunismo, puesto que de alguna manera será implementado y dirigido por los hombres; eso que llama ilusión sí se puede lograr en una comunidad, no en todo el mundo, siempre y cuando haya un cambio en el ser de cada persona, insisto en que todo depende si somos capaces de escuchar nuestra conciencia, y permitir que crezca en nosotros la semilla del bien.

Como Cristiano, discrepo con Woods (s.f.) respecto a la siguiente afirmación:

La religión no puede explicar nada de lo que está ocurriendo hoy en el mundo. Su papel no es explicar, sino consolar a las masas con sueños y untarles con el bálsamo de una falsa promesa. Pero uno siempre se despierta del sueño, y los efectos del bálsamo, más dulce, pronto desaparecen. La condición previa para ganar nuestra libertad como seres humanos es la ruptura radical con los sueños, y ver el mundo y a nosotros mismos tal como somos: mortales, luchando por una existencia de seres humanos sobre esta tierra (p. 32).

Mi desacuerdo con Woods radica (teniendo en cuenta que cuando hablo de religión estoy refiriéndome a la cristiana) en que sí existen muchas evidencias de fondo respecto a la creación del hombre y del universo por acción divina, y que a su vez pueden explicar lo que ocurre en el mundo; si se leyera y/o estudiara la Biblia con detenimiento tanto en un contexto histórico como espiritual la humanidad le encontraría sentido a todo lo que ocurre alrededor de cada uno. El verdadero problema es que se han mal interpretado ciertas partes de las Escrituras y algunos han abusado para jugar con los sentimientos de las personas lo que ha permitido que existan un sinnúmero de religiones e iglesias.

Tratar de convencer al mundo de la existencia de Dios es muy difícil, pero considero que la evidencia más contundente es ese vacío que la humanidad siente en su corazón, como si algo les faltara a pesar que se tenga todo; ese vacío es la falta de Dios.

Conclusiones

El comunismo siempre fracasará como sistema económico mientras estos sigan con la idea de acabar con la propiedad privada, y de las ideas igualitarias, ya que esto va en contra de lo establecido por Dios; ejemplos muy claros podemos encontrar en los países que han querido establecerlo o se han establecido. De esta manera sería difícil que en una integración regional se pensara tener en cuenta este sistema económico.

La religión siempre estará de la mano con la política, aunque muchos como Lenin crean que es mejor que estas estén distantes, pero es muy difícil puesto el que llegue al poder tendrá siempre la necesidad de actuar conforme a su religión o creencias. Comparto con Woods la idea de que siempre se debe respetar las tendencias religiosas de las personas, que lo importante es trabajar por el bienestar de las comunidades y buscar el máximo beneficio para las personas.

La verdadera transformación de la sociedad ocurrirá definitivamente cuando busquemos a Dios de corazón, eso significa que transformemos nuestro ser, que alimentemos más la semilla del bien para que crezca en nosotros la justicia, la honestidad, la transparencia, el respeto hacia los demás, ya que cuando esto falta en el hombre este siempre tiende a ser corrupto, y por la corrupción se acaban naciones y las integraciones nunca serán justas; el solo hombre le es difícil transformarse completamente. Por esta misma razón, en el comunismo también se verán contradicciones como las que Woods mencionaba, donde el hombre siempre tendrá la tendencia de hacer lo indebido, al segarse por el poder, la ambición, el egoísmo.

La pregunta en este momento es cómo solucionará el marxismo el tema de la transformación del ser, puesto que Woods (s.f.) comenta que cuando el hombre controle su vida y su destino, podrá ser libre, esto sí me parece que son parafernalias ya que no hay hombre que pueda controlar su propio destino, qué sabe el hombre qué es lo que le conviene a él y a los demás.

Más que una conclusión quiero hacer una aclaración personal, no es que esté en contra del comunismo, y a favor del capitalismo de manera radical, considero que cada uno tiene sus fortalezas y sus debilidades. Del socialismo puedo resaltar el gran interés de proteger los recursos naturales, de no sobreexplotarlos y el buscar el bienestar permanente de la comunidad, aunque hoy en día en el capitalismo se están luchando por la protección del medioambiente y el mejorar y proteger las condiciones laborales.

Aunque Woods (s.f.) comenta es su artículo que el socialismo permitirá el libre desarrollo de los seres humanos, considero que es muy difícil que se dé, ya que para que haya un verdadero desarrollo no debe existir limitaciones y/o barreras que lo impidan, y el comunismo de alguna manera limita el desarrollo personal, económico e intelectual, al querer mantener la idea igualitaria. Recordemos que es Dios quien decide a quién prospera y a quién no, las habilidades y destrezas también son dadas por él, no por la evolución. De alguna manera el comunismo se convierte en un sistema egoísta.

El origen de todos los males y la lucha de clases no es la propiedad privada, como lo dije anteriormente es la falta de humanismo, la ambición, las injusticias, el egoísmo, la ira, la falta de tolerancia por parte de los seres humanos. Lo que llamaríamos los pecados, pero en realidad qué pasa cuando pecamos, no solamente ofendemos a Dios, sino que le hacemos daño a un tercero. Dios sí prospera en lo económico, todo depende de cómo nos manejamos cuando contamos con riquezas.

Los primeros cristianos no eran comunistas, el que buscaran desde los inicios el bienestar de los demás, la ayuda a los más necesitados, el acabar con las injusticias y la explotación no los hace comunistas, en realidad buscaban establecer las leyes dadas por Dios para que hubiese un verdadero cambio en el ser.

Más bien considero que los marxistas se contradicen al decir que no creen en Dios ya que de alguna manera buscan practicar el Evangelio de manera indirecta, puesto que se comportan con un pensamiento cristiano ya que su sentir de acabar con la opresión y explotación humana no es inventado por Marx, siglos atrás Dios ya había dado leyes para acabarlas y evitarlas; el problema radica en que el método que propone el comunismo va en contra de lo dispuesto por Dios.

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