SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.31 issue1Racism in multicultural neighbourhoods in Chile: Housing precarity and coexistence in a migratory contextResilience and conservation in Magical Towns of Mexico. The cases of Pátzcuaro and Mexcaltitán author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • On index processCited by Google
  • Have no similar articlesSimilars in SciELO
  • On index processSimilars in Google

Share


Bitácora Urbano Territorial

Print version ISSN 0124-7913On-line version ISSN 2027-145X

Bitácora Urbano Territorial vol.31 no.1 Bogotá Jan./Apr. 2021  Epub June 15, 2021

https://doi.org/10.15446/bitacora.v31n1.86645 

Dossier Central

Movilidad itinerante y entorno construidos [1]

Roading mobility and built environments

Mobilidade itinerante e ambientes construídos

Mobilité itinérante et environnements construits

Mariela Blanco1 

1Dra. de la Universidad de Buenos Aires, área Geografía Centro de Estudios e Investigaciones Laborales (CEIL-CONICET) Argentina mblanco@ceil-conicet.gov.ar https://orcid.org/0000-0001-6521-6521


Resumen

Durante cuatro meses al año la ciudad de Pomán, provincia de Catamarca -Argentina-, experimenta la llegada de trabajadores migrantes para la cosecha del olivo. La ley Nacional de Desarrollo Económico N° 22.021 y su modificatoria 22.702 impulsaron esta actividad transformando los espacios productivos y sociales. Se estima que entre febrero y mayo la población presenta un crecimiento demográfico de alrededor del 30%. Este artículo analiza qué problemas enfrenta la ciudad frente a esta movilidad itinerante y qué tipo de entornos se construyen a partir de la sociabilidad entre los migrantes y los habitantes locales. Para esto se analizan los espacios de la residencia migrante y su forma de habitarlos; la organización material de la ciudad durante la migración (salud, educación y economía) y la producción de sociabilidad como elemento legitimador de este tipo de movilidad. El trabajo se basa en un estudio cualitativo con entrevistas en profundidad a diferentes actores locales y migrantes durante la época de la migración. Entre los principales resultados se destaca la ausencia de políticas públicas para sostener los procesos de movilidad, la producción de una economía migrante a nivel local y la instauración de eventos simbólicos a favor de la estabilidad de esta itinerancia.

Palabras clave: Migrantes; movilidad laboral; vida cotidiana; interacción social; Argentina

Abstract

Each year, a great number of seasonal agricultural workers arrive at the city of Pomán located in Catamarca province, Argentina, to take part in the olive harvest for a period of four months. This activity, that has been promoted by the Industrial Promotion law 22,021 and its amendments, gives rise to a social and productive transformation of the local surroundings during the harvest season. According to some estimations, this represents a population growth of about 30% between February and May. This paper discusses what problems the city faces due to the arrival of this itinerant workforce and what kind of environments are built from the relationship between migrants and locals. To answer these questions, the analysis is focused on the migrant residence and the inhabitance of the space; the provision of public services such as health and education; the development of a particular economy; and the building of sociability as a legitimizing source of this type of mobility. The study is based on qualitative in-depth interviews performed with different local actors and workers during the migration season. Among the main results, we can mention the absence of public policies to sustain mobility processes, the development of a migrant economy at the local level, and the establishment of symbolic events that encourages this itinerant work.

Keywords: migrant workers; labour mobility; everyday life; social interaction; Argentina

Résumé

Pendant quatre mois par an, la ville de Pomán, province de Catamarca -Argentine, reçoit des travailleurs migrants pour la récolte des olives. Les lois nationales de développement économique n ° 22.021 et sa modification 22.702 ont favorisé cette activité en transformant les espaces productifs et sociaux. On estime qu'entre février et mai, la croissance démographique est d'environ 30%. L'article analyse les problèmes auxquels la ville est confrontée face à cette mobilité itinérante et quels types d'environnements sont construits à partir de la sociabilité entre migrants et habitants locaux. Pour cela, les espaces de résidence des migrants et leurs façons de les habiter seront analysés; l'organisation matérielle de la ville pendant le séjour des migrants (santé, éducation et économie) et la production de sociabilité comme élément légitimant de ce type de mobilité. Le travail est basé sur une étude qualitative, qui comprend des entretiens en profondeur avec différents acteurs locaux et migrants pendant la période de migration. Parmi les principaux résultats, on peut noter l'absence de politiques publiques pour soutenir les processus de mobilité, la production d'une économie migrante au niveau local et la mise en place d'événements symboliques en faveur de la stabilité de cette itinérance.

Mots-clés: travailleur migrants; mobilité de la main-d'oeuvre; vie quotidienne; interaction social; Argentine

Resumo

Durante quatro meses por ano, a cidade de Pomán, província de Catamarca - Argentina, experimenta a chegada de trabalhadores migrantes para a colheita da azeitona. A Lei Nacional de Desenvolvimento Econômico n° 22.021 e sua modificação 22.702 promoveram essa atividade, transformando os espaços produtivos e sociais. Estima-se que entre fevereiro e maio a população apresente um crescimento demográfico de cerca de 30%. Este artigo analisa quais problemas a cidade enfrenta diante dessa mobilidade itinerante e que tipo de ambiente é construído a partir da sociabilidade entre migrantes e habitantes locais. Para isso, serão analisados os espaços da residência do migrante e sua maneira de habitá-los; a organização material da cidade durante a migração (saúde, educação e economia) e a produção da sociabilidade como elemento legitimador desse tipo de mobilidade. O trabalho baseia-se em um estudo qualitativo com entrevistas aprofundadas com diferentes atores locais e migrantes durante o período de migração. Dentre os principais resultados, destacam-se a ausência de políticas públicas de apoio aos processos de mobilidade, a produção de uma economia migrante em nível local e o estabelecimento de eventos simbólicos em favor da estabilidade desse roaming.

Palavras-chave: trabalhador migrante; mobilidade laboral; vida quotidiana; interação social; Argentina

Estos procesos de adaptación al nuevo contexto de integración global son también acompañados por procesos de "reterritorialización", producto de la formación de nuevas identidades por el entre-cruzamiento de las simultáneas escalas e identidades de pertenencia (Blanco y Neiman, 2017).

Introducción

Las desigualdades regionales en la Argentina han sido un denominador común, hecho que se explica a partir de diferencias estructurales, históricas y geográficas. Durante la década del 80', el Estado busca promover políticas de beneficios impositivos con la Ley Nacional de Desarrollo Económico (1979) y su modificatoria 22.702 (1984), con el fin de atenuar esas diferencias, incluye a las provincias de La Rioja, San Luis y Catamarca. El régimen permitía a empresas de distintos sectores diferir obligaciones impositivas a cambio de inversiones en regiones productivas marginales. Se caracteriza por empresas formadas, en su mayoría, por capitales ajenos al sector agropecuario y de neto corte empresarial (Atlas Catamarca, 2020).

En Catamarca, en la década del 90' el sector privado presenta proyectos agropecuarios de inversión, siendo el departamento Pomán (situado en la región oeste de la Provincia de Catamarca), uno de los subespacios provinciales que experimentó una importante transformación socio-territorial.

Pomán es uno de los dieciséis departamentos de la Provincia de Cata-marca, localizado a 164 km de la ciudad Capital de la provincia. Comprende 4.859 km2 (un 4,8 % del territorio provincial) y se encuentran conformados por tres municipios (Saujil, Mutquín y Pomán), con una población total de 10.774 habitantes (INDEC, Censo 2010).

Posee un marco físico singular, delimitado por imponentes sierras que demarcan paisajes montañosos, de desiertos y salares. Sus cortos y esporádicos ríos que descienden del cordón del Ambato-Manchao, son utilizados para actividades productivas agrícolas tradicionales, entre las que se destacan el nogal, la vid y el olivo. La ganadería y la producción de carbón de leña también forman parte de la economía familiar.

Desde el punto de vista espacial se pueden reconocer en dicho departamento dos áreas de ocupación del suelo, resultado de la estrecha reciprocidad entre las condiciones naturales y las formas de organización y funcionamiento de las unidades productivas. Por un lado, se encuentran localidades situadas sobre los faldeos de las Sierras de Ambato (Villa de Pomán, Rosario de Colana, Retiro de Colana, Mutquín y Rincón), en tanto que hacia las zonas llanas se ubican las localidades de El Pajonal, Siján, Saujil y Colpes, entre las más representativas.

La producción de olivo se expande cuando grandes empresas se instalan en las zonas llanas como producto de la Ley Nacional de Desarrollo Económico[1]. Aunque esta actividad ya se encontraba en la zona -sobre todo en la producción de aceitunas de mesa-, la superficie cultivada ha sufrido un gran incremento (alrededor de 18000 hectáreas de las cuales un 40% pertenece al departamento de Pomán -Informe Productivo Provincial, 2019) cuyo destino principal es la elaboración de aceite para el mercado internacional. Los altos volúmenes de producción, productividad y los déficits de mano de obra local incidieron en la presencia de trabajadores migrantes transitorios.

Fuente: ETISIG Equipo Interdisciplinario en Sistemas de Información Geográfica.

Figura 1 República Argentina. Provincia de Catamarca. Departamento Pomán 

Durante fines de enero y principio de febrero, contingentes de migrantes arriban al área de estudio para la cosecha del olivo que se extiende hasta fines de junio. Si bien el período de estadía de la mano de obra migrante varía según las estrategias laborales de los trabajadores, algunos permanecen en la zona durante toda la temporada (febrero - julio), otros llegan más tarde porque vienen de otra cosecha o se insertan más tardíamente sólo en la de aceituna industrial (marzo -junio) y también están aquellos que varían el período de permanencia en Pomán según los ingresos a los que puedan acceder. Se estima que arriban alrededor de 3000 trabajadores[2]. Si comparamos con la población residente en el departamento vemos que, para el período analizado, la población se incrementa en aproximadamente un 30%. La procedencia de los trabajadores es heterogénea pero la mayoría proviene de las provincias vecinas de Salta y Santiago del Estero y, en menor medida, de Tucumán y Jujuy.

El perfil sotiodemográfico de los trabajadores que llegan al lugar es heterogéneo y varía según las particularidades de sus lugares de origen. Sin embargo, todos comparten la experiencia de la migración que tiene la particularidad de ser un desplazamiento que nunca es individual por más que el trabajador viaje solo. De esta manera, se detectaron trabajadores que llegan solos, acompañados por sus familias o por grupos de parentesco más extendidos, de amigos o de vecinos. En general, son trabajadores jóvenes (menores de 30 años de edad) que viajan con amigos, parientes cercanos, vecinos o pareja y entre los de edad adulta (mayores de 30) es común que se desplacen junto a su grupo familiar cercano (cónyuge e hijos).

Más allá de los cambios productivos en el departamento de Pomán, este artículo analiza las transformaciones que ocurren en la ciudad y sus alrededores a partir de la llegada de los migrantes. Las preguntas que guían este análisis son: ¿Cómo los migrantes construyen sus entornos? ¿Qué elementos especificos de la sociabilidad migrante se ponen en juego en este habitar transitorio? ¿Qué cambios generan en las prestaciones de salud y educación en la dinámica local de la ciudad? ¿Cómo se adapta la economía local durante el momento de la migración? ¿Qué procesos simbólicos y culturales se inauguran para dirimir los conflictos y tensiones entre la población local y los migrantes con el propósito de legitimar esta movilidad itinerante durante una época del año?

Esta particular forma de movilidad erige un espacio a partir de procesos de sociabilidad que se expresan en la práctica de la vida cotidiana de los sujetos y en las transformaciones materiales de los territorios derivadas de los desplazamientos de trabajadores.

En definitiva, se busca dar cuenta de cómo actualmente los procesos de movilidad reconfiguran las dinámicas demográficas de los territorios y los espacios de vida entre los que llegan y los habitantes locales.

La metodología en la cual se sustenta este artículo es cualitativa, centrada en la realización de entrevistas en profundidad. Se seleccionaron actores locales como funcionarios, encargados de empresas olivícolas, intermediarios, autoridades de escuelas y hospital, comerciantes locales y trabajadores migrantes durante su estadía en Pomán; con el propósito de reconstruir la magnitud del fenómeno migratorio, los cambios y significados que atribuyen los locales a este proceso y la experiencia de la migración de los trabajadores. Se realizaron un total de 25 entrevistas durante abril de 2015, momento de cosecha.

La movilidad itinerante y los entornos construidos

En la actualidad los estudios sobre movilidad buscan interpretar cómo los desplazamientos y sus itinerarios construyen cartografías diferenciadas que no necesariamente se reflejan en escalas como la ciudad, la metrópolis e incluso el país. Un punto central en la explicación de estos desplazamientos tiene que ver con la división internacional del trabajo a escala mundial, en donde el capital busca valorizarse a través de nuevos anclajes territoriales. Estos anclajes trasladan implicancias para la población local, debido a que se pueden generar puestos de trabajo en condiciones más precarias que en los países de origen del capital, aunque también se puede excluir a la población de dichos procesos e, incluso, obligarla a moverse de su lugar (Harvey, 2000; Tarrius, 2000; Bendini, M. y Steimbreger, N., 2015). Estos procesos de adaptación al nuevo contexto de integración global son también acompañados por procesos de "reterritorialización", producto de la formación de nuevas identidades por el entrecruzamiento de las simultáneas escalas e identidades de pertenencia (Blanco y Neiman, 2017).

De esta manera, la movilidad supone un análisis más complejo de los desplazamientos de los grupos sociales que no se limita a la conexión entre origen/ destino, sino que en las necesidades de trasladarse se entremezclan experiencias relacionadas con los motivos, recursos y sentidos que moldean nuevas formas de habitar (Espinosa Ortíz, F. 2019; Kaufmann, V. 2002; Cresswell, T. 2001). Sin embargo, hay un acuerdo en entender a los movimientos de las personas, antes que nada, como estrategias para acercarse a oportunidades contextuales más favorables (Delaunay, 2007).

También, desde el punto de vista de los estudios de las migraciones laborales, en las últimas décadas, se vislumbra la complejidad de estos movimientos. Frente al esquema que interpretaba a las migraciones como resultados de desequilibrios entre la demanda y la oferta de trabajo y de las diferencias salariales, surgen nuevos enfoques a partir de otras dimensiones que explican la dinámica de estos desplazamientos más allá de lo estrictamente económico. Cuestiones relacionadas con el hogar, la familia, la cultura, el territorio, las redes sociales, la identidad y las percepciones, entre otras; dan cuenta de la diversidad de situaciones y de las múltiples dimensiones involucradas (Sánchez Saldaña, 2012; Quesnel, 2010; Cortes, 2009, Lara Flores, 2006; Tarrius, 2000; etcétera). Además, se destaca el carácter no excepcional de estos procesos de manera tal que las migraciones temporarias constituyen un fenómeno habitual que adquiere sentido en un determinado orden social. Aspectos económicos y sociales interrelacionan condiciones de carácter estructural y el papel de agencia de los actores en contextos sociales específicos (Quaranta G. y Blanco, M. 2012).

La construcción de este colectivo es un proceso mutuamente condicionado por las prácticas de los migrantes y por quienes los reclutan y contratan, y donde los trabajadores refuerzan la noción dominante de los atributos que deben reunir para su buen desempeño en esos mercados (Blanco, M., Bardomás, S. y Mingo, E. 2017). Las prácticas concretas, a través de las cuales los trabajadores -así como lo hace el capital- se despliegan en el espacio y lo usan, comprende la participación en la producción espacio - temporal del trabajo (Venturini, J. y Castro, H., 2018).

La producción de la movilidad espacial es selectiva demográficamente, no existe una indiferencia respecto de la edad, el sexo o la situación familiar (Módenes, J. 2007). Se puede considerar como una relación compleja entre procesos sociales y condiciones materiales, que hacen que las territorialidades sean muy dinámicas (cambiantes y flexibles) (Alberti, A., Bardomás, S. y Schiavoni, G., 2015).

Un aspecto poco estudiado de estos desplazamientos tiene que ver con el fenómeno que acontece en los espacios en donde se sitúa esta movilidad de manera transitoria, pero a la vez de forma itinerante. Es decir, en una determinada época del año. En demografía, tanto en el análisis tradicional como en los modernos métodos de análisis multinivel, la consideración del contexto territorial ha sido fundamental para la comprensión de procesos y comportamientos. El papel del entorno espacial inmediato se enriquece evidentemente si integramos en la ecuación los efectos de la movilidad espacial (Módenes, J. op. cit.). Estos movimientos crecientes y decrecientes a nivel demográfico se complementan con la edificación de un sistema de relaciones sociales que se construyen en las formas peculiares de habitar la ciudad según el momento de expansión o contracción. La movilidad permite valorizar las especificidades de los lugares, facilitar la interrelación entre ellos y habilitar los procesos de readecuación de quienes la transitan (Carrizo, L. y Blanco, M. 2012).

Los territorios que se erigen como resultados de las migraciones laborales transitorias revisten una alta complejidad, que involucran interacciones sociales, dimensiones institucionales y culturales, y relaciones de poder (Radonich, M., Trpin, V. y Vecchia, T. 2009). En términos morfológicos los mercados de trabajo han dado lugar a una diversidad de espacialidades, convirtiéndose en instituciones concretas dentro de un espacio social y geográfico, los cuales imprimen sus características en los procesos de regulación del mercado. La región de la economía del café, en la zona central de Colombia, no sólo creó cafetales sino también una cultura con un fuerte carácter regional producto del asentamiento de población trabajadora migrante (Ortiz, S., 1999). La mayoría de estas localizaciones se establecen en áreas marginales (terrenos fiscales, calles cerradas, bordes de caminos) con elevados índices de vulnerabilidad en el acceso a servicios e infraestructura. El importante crecimiento de algunas de estas territorialidades derivó en su consolidación y reconocimiento por parte de los municipios (Radonich, M.; Trpin, V. y Vecchia, T., 2009, Moreno, M.S., 2019).

Estos espacios se constituyen en "nudos" de oportunidades que los tornaron elegibles para la radicación y tránsito de nuevos migrantes. Las redes de intercambio, un mundo de vida compartido, la adscripción étnica o un origen en común, sientan las bases de un entramado de relaciones y plurilocalizaciones territoriales que facilitan y estructuran la circulación (Radonich, M.; Trpin, V. y Vecchia, T., 2009, Moreno, M.S., 2019). Algunos autores se refieren a estos procesos como una "industria de la migración" que promueve la llegada de trabajadores desde sus regiones de origen, su alojamiento y alimentación (Lara Flores, S. y Sánchez Saldaña, K., 2015) pero también, que a través de los territorios migratorios se desarrollan nuevas identidades y formas de sociabilidad, se construyen redes y se elaboran estrategias (Lara Flores, op.cit., 2006).

De esta manera, los entornos construidos por la movilidad suponen cambios de los sistemas espaciales que se estructuran por los desplazamientos y también por la circulación de una red de sociabilidad (Cortés, J. 2009). Estos espacios de vida inauguran nuevas lógicas del habitar la ciudad en la cual emergen readecuaciones, conflictos y legitimidades que articulan diferentes formas de apropiación.

Las políticas nacionales de desarrollo económico orientadas a las empresas han generado fuertes procesos de movilidad a su alrededor en los que intervienen grupos diferentes (locales y migrantes, circulares o población asentada) y han dado lugar a espacios de alta densidad relacional (Lara Flores, S. 2012).

Los entornos construidos: espacios residenciales y procesos de sociabilidad migrante

La forma que va a adquirir el espacio durante la estadía de los trabajadores en Pomán está asociada a las estrategias que utilizan las empresas para acceder a esta mano de obra. El reclutamiento de los trabajadores en sus lugares de origen puede realizarse a través de intermediarios de las mismas empresas, intermediarios que sólo se ocupan de buscar a la gente para el trabajo y, también, trabajadores que viajan solos a medida que ganan experiencia en la migración y cuentan con recursos para realizar el viaje.

En el caso de los intermediarios de las empresas, los migrantes son movilizados directamente hacia el interior de la empresa. Las condiciones de alojamiento varían según el tipo de empresa, las más grandes cuentan con residencias construidas específicamente para estos fines. Son edificios de material con habitaciones en donde duerme el personal temporario, cuentan con servicios sanitarios y lugares comunes para recreación y recibir las comidas. En otras empresas son alojados de manera muy precaria; los dormitorios se forman con carpas estructurales que alojan a gran cantidad de trabajadores, cuentan con baños y los espacios comunes en su mayoría son al aire libre. En muchos casos se trata de galpones que son reacondicionados para oficiar de dormitorios. En estos espacios residenciales se evidencia un tipo de sociabilidad más restringida, la organización de la vida, el ocio y la recreación se encuentran supeditados a reglas de comportamiento y tiempos establecidos por la empresa y/o el intermediario, con escasos márgenes de libertad para los trabajadores.

En las otras dos situaciones de traslados, sin estar involucradas directamente las empresas, los trabajadores son alojados en los bordes de la ciudad de Pomán o en localidades muy cercanas.

Llamativamente no se evidencian inversiones de los lugareños para la oferta de estos servicios de alojamiento como consecuencia del nuevo boom productivo. Salvo algunas excepciones en las cuales se tienen casas para alquilar (bastantes precarias) o la edificación de algún local o galpón para estos fines, los trabajadores se instalan en lugares reacondicionados para dormir. Puede ser un gran local donde se colocan filas de cuchetas, galpones, etcétera. Si bien disponen de algún espacio para cocinar, este es mínimo y con muy pocas comodidades (por ejemplo, heladeras familiares que no alcanzan para cubrir la demanda de a veces 40 o más trabajadores que comparten un espacio) y otros que sólo cuentan con habitación y deben contratar servicios de comida a algún vecino o compañero de la migración. El pago de los alquileres es por noche y por persona.

En cuanto a la organización de estos entornos, los trabajadores ocupan los espacios en función de la pertenencia a un mismo lugar de origen, por compartir la experiencia de la migración y sin un origen común de residencia y por lazos de parentesco. Es importante destacar que la distribución de los espacios de vida siempre se sustenta de manera grupal, según las distintas adscripciones que compartan los migrantes.

Esta estructuración en función de lo común, también se verifica en la organización de las tareas domésticas. En el "grupo de alimentación"[3] los trabajadores comparten los gastos de alimentos y la tarea de cocinar. De alguna manera se crean una multiplicidad de hogares. Las redes de sociabilidad se organizan en los espacios colectivos de la residencia como pueden ser los lugares donde se encuentran los fogones, el terreno del frente, el patio o el espacio que queda entre las distintas piezas (Bardomás, 2012). Cuando viajan con la familia son las mujeres las encargadas de estas tareas, quienes se quedan preparando el pan, las comidas y el aseo de la vestimenta, mientras otros miembros se encuentran trabajando. Desde la perspectiva de la división sexual del trabajo se considera que el trabajo de reproducción en la esfera doméstica es un trabajo, ya que contribuye a sostener la reproducción del trabajador. Tiene la particularidad de ser un trabajo no remunerado. Por eso, cuando las mujeres se asalarizan, se considera que el trabajo se desarrolla en una doble jornada laboral en la que se incluye el empleo y el trabajo reproductivo (Mingo, 2011). Los principales conflictos mencionados son las condiciones de alojamiento y la calidad de la comida entre quienes se alojan en las empresas, y el precio de los alquileres y de los alimentos por aquellos que viven en la ciudad.

Todo el entramado de sociabilidad que se instituye en los bordes de las empresas deriva en mayor autonomía para el trabajador tanto para organizar su vida cotidiana y las reglas del habitar, como también para decidir cambiar de empresa ante la emergencia de un conflicto o de la posibilidad de obtener una mejor remuneración.

Los espacios de servicios en torno a la movilidad

El incremento poblacional durante los meses de la migración, lleva a habitar lugares que la mayor parte del año están vacíos o con escasa población. Esto va a afectar también la dinámica de los servicios disponibles a nivel local. Los principales cambios se pueden visibilizar en las dimensiones de la educación, de la salud y en la económica. En este espacio institucional, la diversidad de la migración cede terreno a la adscripción de una identidad de 'trabajador migrante' o 'trabajador foráneo', que entra en vínculo con los residentes locales a partir del uso de espacios institucionales en donde las fronteras son más claras.

En cuanto a la educación se evidencia, como es lógico, un incremento significativo de la matrícula. Pero más allá de la magnitud del fenómeno, este proceso ha conducido a una readecuación de los roles del personal educativo. La carencia de competencias para trabajar con alumnos de diferentes niveles educativos, la presencia de actos de discriminación entre los alumnos y la procedencia de distintas culturas dificulta el trabajo en el aula. Los docentes consideran que cada vez se está trabajando mejor para evitar este tipo de conflictos y lograr la permanencia en el establecimiento de los alumnos migrantes. Asimismo, expresan que aumentan la carga horaria de trabajo ya que, muchas veces, se tienen que trasladar hasta los espacios donde residen las familias, con el propósito de persuadir a los padres para que envíen a los hijos a la escuela. Otro aspecto que se torna crítico es el abastecimiento de alimentos en los comedores; las escuelas no reciben presupuestos diferenciales para cubrir los gastos en los que se incurre durante la permanencia de los alumnos durante la migración. Estos cambios en la sociedad local han reformulado la tarea del docente, teniendo en la actualidad mayor peso el trabajo 'asistencialista' que el educativo. "Sabés qué pasó, que detrás de la migración ha hecho que la escuela se transforme en asistencialista. Tenemos que ver que coman bien y con un impacto de mucha pobreza" (Docente nivel primario, abril 2015).

Una situación similar se presenta en los servicios de salud. A las mayores demandas que tienen que ver con el propio trabajo que realiza el migrante, quien puede sufrir algún accidente de trabajo como caídas, golpes, cortaduras, se suma el temor del ingreso de enfermedades foráneas. En estos casos, son las empresas las que corren con los costos de los gastos en el hospital.

No obstante, la oportunidad de acceder a un hospital lleva a que muchos migrantes realicen controles de embarazo, controles de la salud en general, servicios odontológicos, etcétera. Esta mayor afluencia en muchos casos obedece a que los trabajadores no cuentan en sus lugares de origen[4] con hospitales para acceder a esos servicios. Desde el sistema de salud se identifica a las empresas como responsables del cambio de esta situación y se las interpela en busca de mayor colaboración con los gastos de la atención a los trabajadores (traslados, medicamentos, combustible, etcétera).

"Debemos buscar mayor calidad de comunicación y colaboración de las empresas con el hospital" (Director hospital de Pomán, abril 2015).

Asimismo, por más que los trabajadores se encuentren percibiendo los beneficios de la seguridad social como la cobertura en salud, el tiempo de la estadía en el trabajo choca con los desequilibrios burocráticos entre la cobertura y el acceso al beneficio; de manera tal que el hospital no alcanza a percibir esos recursos.

Otra dimensión que reconvierte su actividad durante la época de la migración es la economía local. En ese tiempo crecen la cantidad de comercios de servicios de transporte (remiserías), de comunicación y, sobre todo, de alimentos que impactan en nuevos puestos de trabajo para la población local. Se identifica claramente un antes y un después de la migración. El testimonio que sigue es un poco extenso, pero resulta significativo del impacto económico de la migración y los reacomodamientos que acontecen en la economía local.

Se benefician todos. Principalmente remiserías, el que brinda comunicación y el que brinda comestibles. Bueno, el que brinda diversión también. Pera hasta que estas empresas se han instalado acá, el comercio de Pomán no es lo que es hoy. Andaban en esa época con serios problemas financieros y la estación de servicio estaba en venta; los comercios se prestaban cheques uno a otro y salían corriendo a cubrir sus descubiertos. El parque automotor de los comerciantes era viejo. Había una sola panadería y hoy hay dos o tres panaderías. Este negocio de comunicaciones que hay acá, cuando vienen los cosecheros venden no sé...centenares de celulares. Muchos. Ni hablar de la cantidad de tarjetas, recargas, las cabinas (Secretario de Producción, Municipalidad Pomán, abril 2015).

El negocio compra más cosas cuando vienen... Uno sabe cuándo es la fecha de cobrar y te preparás con mercadería, las ventas son el 50% más. Los supermercados trabajan bien porque le dan de comer al obrero o la misma empresa está comprando en la misma zona. Económicamente se nota, los chicos jóvenes gastan, compran ropa (Comerciante de cabinas telefónicas y celulares, abril 2015)

El sistema comercial recambia la oferta, aparecen nuevos productos y servicios por parte de los comerciantes. Cuando los trabajadores viven en los establecimientos, la empresa arregla con algún comercio local para el suministro de alimentos y otros bienes. Los pedidos los hacen los trabajadores a alguien de la empresa y ésta los pasa al comerciante quien los prepara y lleva hasta la empresa. Toda esta cadena implica una reorganización del trabajo al interior de los comercios, encontrándose en la situación de contratar personal para ese período. A su vez, al tratarse de un consumidor cautivo, los comercios abastecen con nuevos productos para satisfacer esa demanda especial (ropa interior, herramientas para el trabajo -guantes, cintas, calzado, medicamentos de venta libre, etcétera). Al comerciante le paga la empresa y, posteriormente, la empresa le descuenta el gasto al trabajador.

"Tenemos bien diferenciado el trimestre de mucha actividad y luego cae, es una época sin horario. Antes teníamos la esperanza comercial en el turismo, sólo en enero. Ahora es mejor, es positivo el impacto comercial." (Comerciante de alimentos I, Pomán, abril 2015).

"En el supermercado se trae alimentos que consumen ellos. Se les vende a crédito a los que ya son conocidos y se les cobra cuando la empresa les paga." (Comerciante de alimentos II, Pomán abril 2015)

Construcción de entornos de sociabilidad

El entramado social entre los que llegan y los lugareños reviste distintos gradientes, razón por la cual se pone en juego el encuentro de identidades bien diferenciadas.

Existen situaciones en las que la población local propulsa el distanciamiento con respecto al otro. Aquí, las diferencias revisten un carácter negativo hacia el migrante. Palabras como "invasión", "falta de formación", "miseria", actúan como espacios de fronteras en la comunicación. A veces las malas condiciones de vida que se dan en la migración se adjudican como un atributo del trabajador. La ausencia de políticas orientadas a cubrir demandas de infraestructura como vivienda, salud, educación son adjudicadas a la "forma de vida migrante". Durante el momento de la movilidad es común la mayor presencia de policías y gendarmes como referencia de seguridad para la población, a veces se contratan los servicios de seguridad de la policía durante el fin de semana dentro de las empresas.

A pesar de estos elementos de discriminación, hay un reconocimiento generalizado en relación que el desequilibrio que opera en la ciudad obedece a cuestiones políticas a tratar y remediar por las autoridades. "Ayer tuve que hacer un relevamiento y había 4 o 5 familias viviendo en forma muy precaria. Esas son las situaciones que no se prevén con políticas de estado o de gobierno para que no afecte tan negativo a la población" (Jueza de Paz, Pomán, abril 2015). Desde los funcionarios municipales se demanda una mayor interlocución con el Estado, pero también con las empresas como responsables de este crecimiento poblacional y de las condiciones en que se encuentran los migrantes durante su estadía.

Para terminar, es interesante señalar otros elementos de carácter más positivo que favorecen la sociabilidad en búsqueda de construir un entorno común en la ciudad. En los espacios públicos de recreación como las plazas se organizan torneos de fútbol. Los jóvenes frecuentan los fines de semana los lugares para bailar y muchos han terminado formando su familia en la ciudad, cambiando de residencia de forma definitiva. En la búsqueda de afianzar la itinerancia a la que se encuentra sujeta, la ciudad se ha instituido como elemento simbólico y legitimador de la migración: la Fiesta del Cosechero. Se celebra en la ciudad con bailes, campeonatos de fútbol y participan tanto los migrantes como los lugareños.

Surgió una idea muy endógena, ¿no? De una gente que ha dicho, bueno somos los reyes de la cosecha, hagamos el festival de la cosecha. Se han hecho un par de festivales, tres o cuatro. Eso es interesantísimo. Por eso te digo que culturalmente se ha metido muy mucho este tema de la migración (Secretario de Producción, Municipalidad de Pomán, abril 2015).

Reflexiones finales

El artículo buscó analizar cómo los procesos de movilidad poblacional, con residencias itinerantes, movilizan todo un set de recursos en los cuales se construyen entornos sobre la base de un sistema social que se actualiza en un momento del año. La perspectiva de la movilidad resulta fructífera para comprender la integración de los territorios a comportamientos demográficos diferenciados, como también a la construcción de entornos que generan lazos novedosos de sociabilidad sin estar ausentes las tensiones o conflictos. Se destaca cómo las prácticas de los sujetos erigen espacios desde la dinámica de las relaciones sociales de la migración. Los que llegan organizan su vida cotidiana a partir de la pertenencia a un grupo y, por sobre esto, la participación en el colectivo de la migración.

Desde lo sociodemográfico, el incremento poblacional se produce en dos morfologías de asentamiento bien diferenciadas. Una de características más "invisibles" que se distingue por procesos de sociabilidad restringidos, que tienen lugar cuando los trabajadores son alojados en los mismos establecimientos en que trabajan. En esta modalidad, los mecanismos de control y disciplinamiento se encuentran más norma-tizados (horarios y espacios de vida cotidianos). El otro con mayor "visibilidad" se establece en las zonas aledañas a la ciudad, en donde son los propios trabajadores los que establecen los modos de compartir y organizar las actividades fuera del trabajo. En estos espacios de mayor autonomía, el despliegue de la sociabilidad es más amplio y además le brinda al trabajador mayores márgenes para cambiar de empleador, frente a una mejor oferta de trabajo.

A su vez, este enfoque permitió observar los procesos que desencadena la movilidad en espacios más amplios al del propio circuito migrante derivados de las transformaciones en el uso material del territorio. Esto es, los vínculos que desencadena la migración con los lugareños, como también los efectos que tiene sobre el uso en común de los espacios materiales. Las situaciones más críticas se detectan en la provisión de servicios de salud y educación. La ausencia de políticas públicas y de responsabilidad de las empresas que contemplen la situación de movilidad, hacen que las demandas recaigan directamente sobre el personal de los establecimientos, alentando situaciones de segregación hacia la población migrante.

Como contracara, la organización de una economía para un entorno migrante impacta favorablemente en el comercio local. La circulación de la población es acompañada por la circulación de productos de consumo que sólo se ponen a disposición durante el momento de la migración (alimentos, indumentaria, artefactos de comunicación, transporte, etcétera).

Finalmente, la necesidad de legitimar los procesos de movilidad condujo a la creación de entornos más amplios, desde articulaciones simbólicas en donde los espacios de recreación y eventos festivos coadyuvan a cimentar procesos de sociabilidad entre los que llegan y los lugareños.

En resumen, las políticas de desarrollo impulsadas desde arriba han contribuido al crecimiento de actividades económicas en el país. No obstante, fue necesario instituir desde abajo un encadenamiento de entornos a partir de las prácticas sociales que contribuyen a sostener aquel proceso en el cual, llamativamente, se destaca la ausencia del Estado y de las empresas beneficiadas. Así como el capital y los estados definen territorios, también los trabajadores poseen una "agencia geográfica" (Venturini, J. y Castro, H., 2018) que remite a su capacidad de uso y producción del espacio en busca de su propia reproducción social.

Bibliografía

ALBERTI, A., Bardomás, S. y Schiavoni, G. (2015): "Temporalidad cíclica y territorio móvil. Los trabajadores forestales del nordeste argentino", Revista Estudios del Trabajo ASET, 48, 1- 30. [ Links ]

ATLAS CATAMARCA Dirección Provincial de Planificación (2020). Consultado en: http://www.atlas.catamarca.gov.ar/index.php?option=com_content&view=artide&id=40:poli&catid=8&Itemid=3 19&showall=1&limitstart=. [ Links ]

BARDOMÁS, S. (2012). "La migración estacional a producciones agrarias de un área de Argentina: el Valle de Uco, provincia de Mendoza", Papeles de Población, 18(72), 39-62. Universidad Autónoma del Estado de México. [ Links ]

BENDINI, M.I. y STEIMBREGER, N.G. (2015). Trabajo predial y extrapredial en áreas de vulnerabilidad social y ambiental de Argentina; en Riella, A. y Mascheroni, P. (comp.) Asalariados Rurales en América Latina, primera edición, (pp. 147-164). Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Departamento de Sociología -FCSoc UDELAR. [ Links ]

BLANCO, M. y NEIMAN, M. (2017) "Las dinámicas globales y las nuevas movilidades en el contexto de la expansión del cultivo de soja en la provincia de Santiago del Estero, Argentina", Relaciones Internacionales, [S.l.], n. 36, .1-22. [ Links ]

BLANCO, M., BARDOMÁS S. y Mingo, E. (2017). "Migrantes y trabajo: un estudio sobre los dispositivos sociales para acceder al trabajo en tres circuitos migratorios de la Argentina". AGER, Revista de Estudios sobre Despoblación y Desarrollo Rural 22, 35-60. DOI: 10.4422/ager.2016.07. [ Links ]

CARRIZO, L. y BLANCO, M. (2012) "Mutaciones laborales: ida y vuelta. Condiciones de trabajo y de vida de los trabajadores migrantes en Catamarca, Argentina", Revista Geográfica de América Central, Número Especial 2(47) E . Consultado en: [ Links ]

CATAMARCA ACTUAL (2018), Informe de prensa. Consultado en: https://www.catamarcactual.com.ar/economia/2018/2/2/catamarca-provincia-mayor-cantidad-hectreas-olivo-150444.html. [ Links ]

CORTES, G. (2009). "Migraciones, construcciones transnacionales y prácticas de circulación. Un enfoque desde el territorio". Párrafos Geográficos 8 (1): 36-53. [ Links ]

CRESSWELL, T. (2001) "Introduction: Theorizing Place.Intersecting: Place, Sex and Race. Mobilizing Place", Placing Mobility: The Politics of Representation in a Globalized World. G. Verstraet and T. Cresswell. Amsterdam: Rodopi, 11-32. [ Links ]

DELAUNAY, D. (2007): "Relaciones entre pobreza, migración y movilidad: dimensiones territorial y contextual", Revista Notas de Población, 84, 87-130. CEPAL. [ Links ]

ESPINOSA, F. (2019). "Movilidades cotidianas y nuevos modos de habitar: Un análisis en y desde la periferia metropolitana". Revista Entorno Geográfico, 18, 1-21, DOI: 10.25100/eg.v0i18.8595. [ Links ]

HARVEY, D. (2000) Spaces of Hope , Edimburgh University Press. [ Links ]

INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos) (2010), Censo Nacional de Población. https://www.indec.gob.ar/indec/web/Nivel4- Tema-2-41-135Links ]

INFOME PRODUCTIVO PROVINCIAL CATAMARCA (2019). Subsecretaría de Programación Microeconómica. Ministerio de Hacienda de la Nación. Consultado en: https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/sspmicro_informes_productivos_provinciales_ catamarca.pdfLinks ]

KAUFMANN, V. (2002). Re-thinking Mobility . Contemporary sociology. Aldershot: Ashgate. [ Links ]

LARA, S. (2006). "Control del espacio y territorialidad en las migraciones rurales. Un empleo en el caso de México". En VII Congreso Latinoamericano en Sociología Rural (Quito, Ecuador). [ Links ]

LARA, S. (2012): "Los territorios migratorios como espacios de articulación de migraciones nacionales e internacionales. Cuatro casos del contexto mexicano", Revista Política y Sociedad, 49 (1), 89102. doi.org/10.5209/rev. [ Links ]

LARA, S. y Sánchez, K. (2015) "En búsqueda del control: enganche e industria de la migración en una zona productora de uva de mesa en México", en Riella, A. y Mascheroni, P. (comp.) Asalariados Rurales en América Latina, primera edición, 73-94. Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Departamento de Sociología - FCSoc UDELAR. [ Links ]

MENEZES, M. (2002). Redes e enredos nas trilhas dos migrantes . Um estudo de familias de camponeses migrantes, Relume Dumará, Editora Universitaria, UFPB, Río de Janeiro. [ Links ]

MINGO, E. (2013) "Género y relaciones laborales en la agroindustria frutícola del Valle de Uco en la Provincia de Mendoza, Argentina", Revista Iluminuras, 14, 244 - 261. [ Links ]

MÓDENES, J. (2007). Movilidad espacial: uso temporal del territorio y poblaciones , Centred'Estudis Demográfics. Consultado en: http://www.ced.uab.es/publicacions/PapersPDF/Text311.pdfLinks ]

MORENO, M, S. (2019) "Territorialidad inmigratoria de trabajadores bolivianos en Mendoza (Argentina). Aproximación etnográfica a partir de tres casos de estudio emplazados en espacios rurales". Revista Territorios, 41, 23- 4 3 . Universidad del Rosario, Colombia. [ Links ]

QUARANTA, G. y BLANCO, M. (2012). "Formas actuales de circulación y conformación de patrones migratorios de hogares rurales en la Provincia de Santiago del Estero, Argentina". RURIS Revista do Centro de Estudos Rurais, 6 (1), 127-158. [ Links ]

QUESNEL, A. (2010). "El concepto de archipiélago: una aproximación al estudio de la movilidad de la población y a la construcción de lugares y espacios de vida". En: Migraciones de trabajo y movilidad territorial, coord. S. Lara Flores, 19-46. México: Miguel Ángel Porrúa. [ Links ]

RADONICH, M.; Trpin, V. y Vecchia, T. (2009). Movilidad de trabajadores y construcción social del territorio en el Alto Valle de Río Negro. AVA, Revista de Antropología, 15, 85-102. Consultado en: http://www.ava.unam.edu.ar/index.php/ava-15Links ]

SÁNCHEZ, K. (2012). "Un enfoque multidimensional sobre los intermediarios laborales en el medio agrícola". Política y Sociedad 49 (1): 73-88. Consultado en: https://www.academia.edu/24127545/Un_enfoque_multidimensional_sobre_los_intermediarios_laborales_en_el_medio_agr%C3%ADcola_A_multidimensional_approach_to_labor_intermediaries_in_ agricultural_areasLinks ]

TARRIUS, A. (2000). "Leer, describir, interpretar. Las circulaciones migratorias: conveniencia de la noción de territorio circulatorio. Los nuevos hábitos de la identidad". Revista Relaciones. Estudios de Historia y Sociedad, 83, 38-66. Consultado en: https://www.redalyc.org/pdf/137/13708303.pdfLinks ]

TRPIN, V. (2004) "Cuando el trabajo en las chacras no alcanza. Reproducción social de familias chilenas en el norte de la Patagonia". Revista Estudios Migratorios Latinoamericanos, 18, 55, 581-592. https://ri.conicet.gov.ar/handle/11336/49562Links ]

VENTURINI, J. y Castro, H. (2018) "La espacio- temporalidad de los trabajadores agrarios transitorios. Notas para un abordaje teórico-conceptual y metodológico", Eutopía. Revista De Desarrollo Económico Territorial, 14, 63-82. https://revistas.flacsoandes.edu.ec/eutopia/issue/view/172 [ Links ]

[1]Este artículo se realizó con la información recopilada en una investigación más amplia, en el marco del proyecto “El trabajo migrante transitorio en la Argentina”, financiado por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica de la Argentina (Ministerio de Ciencia y Tecnología), en el Centro de Estudio e Investigaciones Laborales (CEIL-CONICET).

1La provincia de Catamarca ocupa el primer lugar en términos de hectáreas implantadas con olivares en el país (el 27%). La Argentina se ubica en quinto lugar como exportador mundial siendo los principales destinos Estados Unidos, España y Brasil. https://www.catamarcactual.com.ar/economia/2018/272/cata-marca-provincia-mayor-cantidad-hectreas-olivo-150444.html

2En la Argentina no existen estadísticas sobre los asalariados ocupados en los procesos migratorios. La estimación se construyó a partir de la información brindada por funcionarios públicos de Pomán, sindicatos y empresas olivícolas.

3Menezes (2002) utiliza este término para referirse a pequeñas comunidades que se organizan para las tareas cotidianas (alimentación, aseo y compras). Se agrupan según relaciones de parentesco y amistad, el origen común o compartir la experiencia de la migración.

4Gran parte de los trabajadores provienen de áreas rurales dispersas o localidades rurales con poco acceso a la salud. El hospital de Pomán provee una significativa cantidad de servicios (odontología, vacunación, equipos para controles de embarazos, laboratorios, etc.).

Cómo citar este artículo: BLANCO, M. (2021). "Movilidad itinerante y entornos construidos". Bitácora Urbano Territorial, 31 (1): 183-194. https://doi.org/10.15446/bitacora.v31n1.86645

Autora

Mariela Blanco Investigadora Adjunta CEIL-CONICET. Dra. de la Universidad de Buenos Aires, Facultad de Filosofía y Letras, con mención en Geografía. Magister en Sociología y Ciencias Políticas (FLACSO, Argentina). Lic. en Sociología, Universidad de Buenos Aires. Profesora de la Universidad de Buenos Aires, Facultad de Ciencias Sociales, Carrera de Sociología. Especialista en Sociología Rural con especial interés en los procesos de trabajo, movilidad y migraciones.

Recibido: 29 de Abril de 2020; Aprobado: 08 de Junio de 2020

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons