Editorial

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Reconocimiento a los Investigadores de la Corporación Universitaria Lasallista

¹Directora de Investigación. Corporación Universitaria Lasallista

Hablar de Grupos de Investigación es hablar de construcción colectiva del conocimiento, concepto relativamente nuevo, como también es reciente en la historia de la humanidad la manera de hacer ciencia como la conocemos hoy, y más aun, la presencia de la investigación en las universidades y su papel fundamental en materia de calidad de la educación superior. Desde los años 90 del Siglo XX, Colciencias estableció un observatorio de los grupos de investigación que hoy son el epicentro del Sistema. En este contexto, vale la pena destacar los logros de los grupos de investigación de la Corporación que sólo llevan siete, cuatro y dos años de estar conformados.

Para la Corporación, el resultado de la medición de sus grupos, por el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, evidencia fortalezas y debilidades. Fortalezas por cuanto la institución puede mostrar indicadores de ciencia y tecnología a la comunidad académica y científica y a la sociedad en general. Además, está en capacidad de presentar proyectos a organismos financiadores, una de cuyas exigencias es que los investigadores estén dentro del sistema como garante de su potencial para administrar con eficiencia los recursos asignados. Sin grupos de investigación no hubiera sido posible presentar proyectos a convocatorias externas. Sin grupos de investigación que soporten la formación, en términos de actualización, de experiencias investigativas para que los estudiantes formulen preguntas y busquen las formas de resolverlas, sería impensable someterse a la evaluación de pares con miras a la acreditación y no tendría sentido la edición de la Revista LASALLISTA de Investigación.

La presentación voluntaria a esta medición y a la evaluación externa, que somete a la crítica y al debate los métodos y los hallazgos de la investigación, es un criterio valorado por la comunidad científica, y ya los integrantes de esta comunidad académica han dado pruebas de que pueden y saben hacerlo.

He indicado también, que en estos procesos afloran las debilidades, las mismas que deben superarse a partir de planes de sostenibilidad que fortalezcan el desarrollo y cualificación de los grupos. Más que pensar en aumentar el número, el esfuerzo debe dirigirse a fortalecer los existentes.

Entre las debilidades que será necesario intervenir en el mediano plazo están: la inestabilidad de los investigadores en cada uno de los nichos y la escasa formación doctoral. Para las dos situaciones seguramente las directivas de la Corporación diseñarán las estrategias a seguir.

Ahora bien, los investigadores deben responderse a sí mismos y al grupo, si sus preguntas de investigación están enfocadas a cuestiones prioritarias, y si lo están, esas prioridades son para quién. ¿Qué esperan comprender, conocer y transformar en el mediano y largo plazo dentro de una línea de investigación, qué estrategias favorecen la formación de una escuela de pensamiento en el interior de los grupos; cómo se articula el proyecto del grupo con el plan de desarrollo de la institución, con las necesidades de las comunidades y con los desarrollos necesarios a las disciplinas y profesiones que se ofrecen en la Corporación? Porque la investigación no es una isla, es articulación con la docencia, compromiso con la formación de profesionales y generaciones nuevas de investigadores que impacten seriamente el ámbito nacional. También es preguntar cómo llegar en la entrega del conocimiento a los tomadores de decisiones, a los pequeños y grandes empresarios, a los campesinos, a las comunidades urbanas y a la opinión pública. La investigación se puede cerrar en términos administrativos con la publicación de un artículo, pero el compromiso social del investigador no termina ahí, porque su reto es presentar propuestas transformadoras fundamentadas en el conocimiento.

Si el país se pregunta cuál es la retribución que tendrá por entregar el 1% del PIB a la investigación, la Corporación ya tiene la respuesta, al asignar el 2.5% de sus ingresos por matrícula a esta actividad: siete grupos de investigación clasificados dentro del Sistema Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación, uno de ellos con perfil de excelencia, dos cercanos a alcanzarla, cuatro con posibilidades de continuar en el ascenso, y uno registrado con potencialidades de desarrollo. La participación de los investigadores en eventos nacionales e internacionales; un reporte cuantitativamente importante sobre la consulta mensual de los artículos derivados de las investigaciones que se publican en la Revista LASALLISTA de Investigación y dos aspirantes a becas doctorales, son indicadores muy alentadores para continuar confiando recursos a un talento humano que responde positivamente.

El reto para la institución, es diseñar el nuevo plan de desarrollo que será la brújula orientadora orientadora de las políticas de Investigación. Definir estrategias para contar, a mediano y largo plazo con un grupo de doctores que lideren la gestión científica en la Corporación, gestión que incluye la certificación de los laboratorios, las orientaciones técnicas de la clínica veterinaria, la fundamentación curricular en pre y posgrado, así como las relaciones con las comunidades, las empresas y el Estado. Definir sus prioridades en materia de investigación es tarea inaplazable para la Corporación, y éstas deben consultar las necesidades sociales y el potencial investigativo de los grupos, explorar nuevas fuentes de recursos para el Fondo de Investigación y finalmente, ofrecer a los investigadores las mejores condiciones para realizar su tarea y garantizar la estabilidad necesaria a sus mejores científicos.

Enhorabuena, llega el resultado de esta segunda medición, a la que se sometieron los grupos que han crecido al calor de este claustro, bajo los principios de la Salle y con el apoyo decidido de sus directivas.

Muchas gracias a todos los investigadores por ser portadores de buenas noticias y felicitaciones por sus logros que lo son, indiscutiblemente también, de sus directivas, representadas en el Honorable Consejo Superior, y en el señor Rector que los ha respaldado siempre.

María Consuelo Castrillón Agudelo
Directora de Investigación
Corporación Universitaria Lasallista
12 de agosto de 2009