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Co-herencia

Print version ISSN 1794-5887

Co-herencia vol.17 no.33 Medellín July/Dec. 2020

 

Editorial

Presentación

Efrén Giraldo* 

Mauricio Vásquez** 

* Doctor en Literatura, Profesor Investigador de la Universidad EAFIT, Colombia.

** Candidato a Doctor en Diseño y Creación, Profesor Asociado de la Universidad EAFIT, Colombia.


El contexto contemporáneo, más allá de las tensiones entre imagen y palabra instaladas en la modernidad, y entre mundo análogo y digital, tan importantes en la cultura contemporánea, apunta a direcciones signadas por la imbricación y la mixtura de formas expresivas y modos de aisthesis. Conceptos como metalepsis, écfrasis, remediación y transmediación se suman a un extenso repertorio de designadores para dar cuenta de amplias y plurales formas de hibridación presentes en obras y experiencias de sentido marcadas por la intermedialidad, es decir, por los diálogos cruzados entre lenguajes, formas de creación y modos de circulación y apropiación de los productos culturales.

La pregunta por las humanidades intermediales supone un cambio de registro respecto de la perspectiva de abordaje que proponen, por ejemplo, las recientemente nombradas “humanidades digitales”, en tanto esta como otras miradas hacen de manera implícita una referencia unidimensional a los modos de indagación, configuración y circulación; y ello, pese a que se propongan, por un lado, como alternativa a las humanidades centradas en la cultura escrita y, por el otro, a los estudios literarios y lingüísticos como marcos exclusivos de referencia para un segmento importante de la reflexión humanística.

Encontramos en distintas manifestaciones del pensamiento contemporáneo algunas claves para identificar un horizonte emergente de investigación que se mueve en las superficies de nuestras múltiples maneras de configurar la memoria y producir experiencia, las cuales aparecen estrechamente vinculadas con diversas formas de las relaciones intersubjetivas.

De ahí que se hubiera hecho el llamado a considerar las posibilidades de un campo emergente, que encara la pregunta por las convergencias y las mediaciones a través de lo que podemos, desde ya, denominar “humanidades intermediales”. La pregunta por la prevalencia de uno de los dos regímenes semióticos dominantes (el verbal y el visual) y entre formas de inscripción y consignación (el digital y el analógico) está en el corazón de una inquietud que ha reaparecido en los temas que los estudiosos de las humanidades digitales han puesto de presente: nuevos objetos culturales asociados a la digitalización, uso de métodos computacionales y algorítmicos en el estudio de los “viejos” objetos, democratización y acceso abierto a los datos y la cultura.

Luego de haber recibido un número importante de contribuciones, los editores de este número decidimos incluir un grupo de trabajos que discuten las relaciones entre medios y formas de creación y producción en marcos tan amplios como los estudios literarios, la crítica de arte, la estética y los estudios comunicativos y editoriales.

En esta ocasión, el “Pórtico” lo dedicamos a “Hacia un nuevo Laocoonte”, uno de los ensayos fundamentales de la teoría modernista, donde Clement Greenberg actualizó en 1940 la relevancia de los planteamientos de Gothold Ephraim Lessing en su importante libro de 1766: Laocoonte o sobre los límites de la pintura y la poesía. Además de recuperar la actualización que la crítica de arte y la estética hicieron del concepto de medio y establecer una distinción entre las artes de la palabra y las artes de la imagen, que en buena parte ha servido de fondo a la interrogación crítica, nos complace ofrecer por primera vez en lengua española un texto fundamental. Agradecemos a University of Chicago Press por la gentil cesión de los derechos de este texto y a Daniel Tobón por su esmerada traducción.

Es justamente el texto de Greenberg una piedra de toque para la reflexión en clave estética sobre el problema de la medialidad, de las materialidades expresivas y del carácter indisociable, para decirlo en términos macluhanianos, entre medio y mensaje.

Ocupándose del lenguaje videolúdico, el texto “El videojuego de temática histórica como arte visual: anacronías conscientes y licencias creativas en la representación de espacios urbanos de la saga Assassin’s Creed” explora las licencias creativas de los videojuegos en la elaboración de la historia, los anacronismos y los diversos recursos que estas prácticas expresivas se permiten para configurar modos particulares de experiencia interactiva. Es clara, desde este trabajo, la manera como los estudios sobre juegos o estudios sobre los procesos de ludificación constituyen un punto de partida sugerente para las humanidades intermediales.

En una dirección análoga, “Del autómata al personaje de animación: evolución de los sistemas de representación y reconocimiento del movimiento”, de Alejandro Guzmán, Felipe Ríos y David Aristizábal, da cuenta de los desarrollos de la teoría de la animación en cuanto reflexión sobre los problemas de delegación del movimiento en cuerpos materiales y representaciones dinámicas de diverso tipo. En este trabajo, Guzmán, Ríos y Aristizábal encaran la cuestión a través de un recorrido por diversos sistemas de pensamiento y técnicas concentradas en insuflar vida a entidades inanimadas, gracias a actos que pasan de la taumaturgia al automatismo y, de allí, a las sofisticadas técnicas de animación computarizada.

Por su parte, en su texto “Microrrelato hipermedial: hibridismo semiótico”, Ana Calvo indaga en los potenciales estéticos de microrrelatos escritos por Patricia Esteban Erlés, en una suerte de dialogismo intermedial entre piezas escritas y el trabajo visual de Diane Arbus, puestas en circulación en el contexto de las redes sociales. Escritura, hipermedialidad y visualidad se ponen en juego en un tipo de imbricación medial transada por la narración breve y fragmentaria que propone una superación de la dicotomía entre texto e imagen.

Una discusión sobre la intermedialidad debe ocuparse, casi que obligatoriamente, de dos asuntos que han entrado en la agenda de las humanidades contemporáneas: el cuerpo y el género. Por eso, hemos incluido el texto “Discursos de género en Contact Improvisation. Deliberación y acción coreográfica en torno a la revista Contact Quarter” de María Paz Brozas-Polo. Además de enriquecer la discusión con una aproximación a la danza contemporánea, el artículo analiza varios textos ocupados de una importante técnica de entrenamiento y experimentación para observar “el cuestionamiento de la masculinidad, las ideas de neutralización y de minimización de lo sexual y varios enfoques feministas entre los que se puede incluir la teoría queer”. Como su misma autora lo dice, se realiza una “observación crítica de las paradojas, tensiones y puntos de encuentro que se van reflejando en la práctica y van tejiendo una fecunda red discursiva”.

En un abordaje de espectro amplio y pretensiones teóricas, el texto de Roberto Rubio y Esteban Rodríguez, “¿Un nuevo a priori histórico? Análisis de propuestas de renovación de las Humanidades centradas en la noción de información”, aborda los planteamientos de Kittler y Simondon en torno al carácter epocal de los flujos informativos y sus determinaciones mediales, materiales y matemáticas, recuperando aproximaciones metodológicas que operan un descentramiento de los énfasis antropocentristas, para recuperar la cuestión técnica de magnitudes base del intercambio informacional, presentes en las teorías de Shannon y Weaver, cuyo abordaje es posible básicamente por medio del cálculo probabilístico. Lo anterior resulta posible, según elaboran los autores, a través de la tematización de las mutaciones en los vínculos entre sujetos y sistemas técnicos, operados gracias a los flujos de información, señalando una ruta distinta para la fundamentación de las ciencias humanas.

Como no podía ser de otra manera, la interrelación entre las artes visuales y las artes verbales aparece con un destacado lugar dentro de la revista. En primer lugar, con dos textos dedicados a la poesía y a sus posibilidades intermediales. En “Amílkar-U. Una travesía poética intermedial entre palabras, acciones e imágenes”, Juan José Cadavid ofrece una lectura del movimiento colombiano nadaísta desde una perspectiva interdisciplinaria que lleva la valoración de un movimiento literario y de uno de sus más importantes miembros a un ámbito que involucra dimensiones plásticas y performativas, lo que contradice su pueril recepción como movimiento vanguardista fallido. Por su parte, Elena Guichot-Muñoz en “Lecturas cinematográficas de Cinco metros de poemas: un acercamiento intermedial a la obra de Carlos Oquendo de Amat” discute el hallazgo de estrategias fílmicas extraídas de la semiología del discurso cinematográfico en la poesía del poeta peruano, figura clave de la poesía con imágenes y recursos tipográficos y editoriales que tan importante fue en América Latina a mediados del siglo xx.

Finalmente, María Isabel Villa y Diego Fernando Montoya presentan un análisis bibliométrico que soporta las elaboraciones, tensiones y nexos entre dos campos de particular auge en el estudio de las relaciones entre medios, como es el caso de la investigación académica acerca de los fenómenos de la transmedialidad y lo crossmedia. En este caso, los autores dibujan los paisajes intelectuales de tradiciones que encuadran, desde lugares y premisas distintas, los problemas de la convergencia de medios, señalando la manera en la que se da una suerte de geopolítica de los conceptos y se demanda una integración disciplinar que permita abonar con aires renovados el estudio de las relaciones en los sistemas de medios contemporáneos, considerando las perspectivas de diversas comunidades académicas, sus elaboraciones conceptuales, metodológicas y los efectos que ellas tienen sobre las definiciones teóricas.

Para esta edición, contamos con la obra de Juan Felipe Flórez, uno de los más talentosos artistas jóvenes del país, quien explora en sus instalaciones, objetos e intervenciones la relación problemática, pero fecunda, entre medios, la cual es una característica distintiva del arte de nuestro tiempo. Que en carátula tengamos una de las piezas de su instalación Que parezca un accidente no es tampoco gratuito ni mucho menos que la imagen de apertura sea la de una precaria luz que se cierne sobre un mapa. Lejos de cualquier alegoría gratuita, los tiempos que corren (dominados por una pandemia que ha reflejado la fragilidad social, política y humana de nuestra época) se manifiestan en la capacidad de inminencia revelada por el arte. Y es precisamente en ese poder de clarividencia, que ha vuelto a poner de presente las tensiones entre los medios como agentes de la ausencia y la presencia, de la actualidad y la virtualidad, donde las artes, la creación y la literatura siguen ofreciendo un espacio privilegiado para las ciencias sociales y las humanidades.

Para finalizar, conviene decir que el presente volumen es una sugerencia acerca de una de las direcciones de las humanidades por venir, una que presta atención a las perturbaciones de superficie que indican, lejos de la afirmación esencialista de una humanitas bien sea escritural o digital, la posibilidad de indagar por la experiencia humana en el marco de conjuntos de intersecciones entre múltiples maneras de percibir a través de sensoriums culturalmente modelados.

Al mismo tiempo, este vector de posibilidad nos permite pensar en los horizontes abiertos por el conjunto de extensiones deseables que se consolidan en la diversidad de ambientes protésicos y artificiales que nos hemos procurado. Se trata en cualquier caso de exploraciones y experimentaciones que se ocupan de la diversidad de tecnologías de pensamiento, memoria y expresión, en un repertorio de combinaciones potenciales que se actualizan en formas variadas de captura y muestreo del mundo, de abstracción y materialización, así como en multiplicidad de formas de creación, expresión y recepción.

Dos aspectos centrales recogen entonces las sugerencias vinculadas a la idea de unas humanidades intermediales posibles: la primera, vinculada a la afirmación presente en diversos campos intelectuales acerca de que todos los medios son medios mixtos, contenida en elaboraciones que van de Marshall McLuhan a W. J. T. Mitchell; la segunda, que plantea el hecho de que toda experiencia es el resultado tanto de múltiples mediaciones como de variadas mediatizaciones: indicación que recorre el pensamiento comunicativo de Jesús Martín-Barbero y desemboca inevitablemente en la otra cara de la moneda que representa el trabajo de Stig Hjarvard. Juntas, estas dos afirmaciones dejan al descubierto un amplio espectro de exploraciones que nos permiten comprender el devenir de lo humano en el contexto de los ambientes mediáticos que paulatinamente hemos logrado componernos para propósitos, al mismo tiempo, de comprensión del mundo, de educación de las sensibilidades y de expresión creativa.

La idea de unas humanidades intermediales posibles, reiteramos, se sitúa más allá de los esencialismos que ubican la cuestión en uno u otro polo de las tecnologías del pensamiento y la memoria, bien sea del lado del lenguaje, lo literario y lo escritural, como han hecho buena parte de los estudios humanísticos modernos; o que se quiera situar sobre el dominio de lo algorítmico y la computabilidad, como han intentado las humanidades digitales; por el contrario, en una orientación profundamente ontológica, la sugerencia de un giro intermedial de las humanidades propone el reconocimiento de una cuestión evidente, aunque a veces disimulada, que consiste en la admisión del carácter multimodal de nuestros modos de existir con infinitas variaciones culturales y regionales. Esas historias diversas de nuestros modos de pensar y sentir, esas genealogías múltiples de nuestros modos de mediar y mediatizar la realidad, esas variaciones regionales de nuestras historias técnicas, definen algunos vectores posibles de un programa de investigaciones alrededor de las humanidades intermediales que oscilan y ponen frente a frente lo nuevo y lo viejo, lo analógico y lo digital, el signo entendido en perspectiva semiótica; el medium en clave comunicativa y el código en la mirada computacional.

Felipe Florez. De la serie Que Parezca un Accidente, 2014. Detalle. Cajones de madera, canicas, acrílico, libro y bombilla. Dimensiones variables. 

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