La edición científica ha tenido un papel fundamental en estos tiempos de confinamiento y coronavirus. Los investigadores han multiplicado el sometimiento de artículos a las revistas científicas, las cuales, además, han incrementado la velocidad en el tratamiento de los artículos que se presentan sobre el tema. Las editoriales de pago han puesto miles de textos en acceso abierto. No obstante, esta nueva condición ha puesto a los editores ante el reto de cubrir la revisión por pares y garantizar la calidad de estos artículos. Ya han aparecido numerosas críticas por poner en versión prepublicación (pre-prints) artículos sin evaluación, pues, dada la urgencia de contar con información sobre el tema, se ha provocado que la información disponible en estos portales sea usada sin que haya suficiente rigor en su producción. En este sentido, los editores cumplen una labor critica al asegurar que las evaluaciones permitan que lo publicado tenga el mayor control de calidad posible.

Por otro lado, es claro que el acceso abierto de la mayoría de las revistas de América Latina es una ventaja, como por ejemplo el tener los portales de la Biblioteca Virtual en Salud (bvs), SciELO y Redalyc, que multiplican la visibilidad de la publicación. Este es un momento en el que la región debe sentirse orgullosa de tener estos desarrollos y que la mayoría de sus revistas asumieran una opción por el acceso abierto, pues hoy más que nunca esta vía permite el acceso universal a los contenidos que produce la región.

Otro punto importante está asociado a los retos del desarrollo tecnológico. Así, es evidente que en la velocidad de publicación es relevante la celeridad del arbitraje, la flexibilidad que las editoriales puedan tener al publicar sin tener que esperar que el numero este completo, y que las revistas puedan publicar, una vez que los artículos pasen por arbitraje y por las correcciones que aseguren la calidad.

Por ultimo, es necesario que las estrategias de difusión se multipliquen, pues de nada vale que tengamos un importante avance en la gestión de contenidos y la calidad editorial si no logramos que este conocimiento se mueva en el dominio público, lo que se logra con la colaboración de los autores en la visibilidad de sus trabajos, en las estrategias de marketing digital de las editoriales para que ellos faciliten y promuevan que los contenidos se muevan en blogs, en las redes sociales y académicas (Twitter, Facebook, ResearchGate, Academia, entre otras) e, incluso, lleguen a los medios de comunicación.

determinante para asumir medidas de cuidado, autocuidado e incluso para ayudar al manejo de los problemas asociados con el aislamiento. El confinamiento en torno a esta pandemia pasa por garantizar la comunicación a la sociedad y contribuir con el contraste o la disminución del impacto dañino de las noticias falsas (fake news). En este sentido, es en un momento como este, cuando la humanidad atraviesa una situación tan crítica, que la edición científica desempeña un papel crucial.

La apropiación social del conocimiento, hoy por hoy, es determinante para asumir medidas de cuidado, autocuidado e incluso para ayudar al manejo de los problemas asociados con el aislamiento. El confinamiento en torno a esta pandemia pasa por garantizar la comunicación a la sociedad y contribuir con el contraste o la disminución del impacto dañino de las noticias falsas (fake news). En este sentido, es en un momento como este, cuando la humanidad atraviesa una situación tan crítica, que la edición científica desempeña un papel crucial.