SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 issue36Archaeology for Latin America in the 21st CenturyThe Rebel Potters: A Vision of Gender Relations, Female Oppression, and Patriarchy Based within Ecuadorian Archaeology author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • On index processCited by Google
  • Have no similar articlesSimilars in SciELO
  • On index processSimilars in Google

Share


Antipoda. Revista de Antropología y Arqueología

Print version ISSN 1900-5407

Antipod. Rev. Antropol. Arqueol.  no.36 Bogotá July/Sept. 2019

https://doi.org/10.7440/antipoda36.2019.02 

Meridianos

Coleccionando naturaleza, creando cultura: construcción de la dicotomía naturaleza/cultura en museos*

Collecting Nature, Creating Culture: The Construction of the Nature/Culture Dichotomy in Museums

Colecionando natureza, criando cultura: construção da dicotomia natureza/cultura em museus

Henrik B. Lindskoug** 

** Doctor en Ciencias Antropológicas de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina; magíster en International Museum Studies y magíster y licenciado en Arqueología de Göteborg University, Suecia. En la actualidad es académico de Arqueología del Departamento de Antropología, de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, Universidad Católica de Temuco, Chile. Entre sus últimas publicaciones están: (en coautoría con Bernarda Marconetto) “Reconstruction of Fire History Using ‘Dry’ Sediments, an Approach for Microcharcoal Studies from the Sierras Pampeanas, NW Argentina”, Environmental Archaeology 24, n.o 1 (2019): 61-78; “Paisajes de fuego. Reconstrucción del espacio y prácticas de abandono durante la ocupación Aguada en el Valle de Ambato”, Cuadernos del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano 6, n.o 1 (2018): 103-125. henrikblindskoug@gmail.com


Resumen:

Objetivo/contexto:

En este trabajo discutimos la importancia de estudiar colecciones de museos a la luz de teorías antropológicas, empleando la alegoría de excavar el museo como un sitio arqueológico, recuperando nueva información sobre objetos y también acerca de nuevos contextos y ensamblajes. Consideramos que esta práctica de “excavar” nos acercará no solo a los artefactos, sino también a una arqueología del pasado contemporáneo que puede abrir nuevas formas de interactuar con la cultura material y nuestra sociedad. En este debate, son centrales las colecciones y los archivos que pueden utilizarse para difundir la historia de diferentes disciplinas, como la antropología y la arqueología.

Metodología:

A través de diversos museos universitarios de Argentina discutimos la historia y formación de las colecciones en la historia de la arqueología, haciendo especial referencia a la colección de von Hauenschild del Museo de Antropología (Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba). Esta colección proviene de Santiago del Estero, y ha sido estudiada y analizada por nosotros en varias ocasiones.

Conclusiones:

Argumentamos que las nuevas formas de interpretar las colecciones, utilizando conocimiento etnográfico e indígena y trabajando con las comunidades de origen, son capaces de crear nuevas relaciones con los objetos y poner en relieve otras historias de vida que se pueden incorporar al entorno de un museo, siempre cuidando de no reproducir un paradigma colonial en este contexto. Consideramos que las colecciones “hablan” sobre las personas que las excavaron, catalogaron, clasificaron, estudiaron e interpretaron una vez en el tiempo.

Originalidad:

Para cerrar proponemos una agenda de investigación de colecciones en los museos, mediante la “excavación” de material de archivo y reexaminando artefactos arqueológicos.

Palabras clave:  antropología; archivo; arqueología; colección; museo; naturaleza/cultura

Abstract:

Objective/context:

In this paper, we discuss the importance of studying museum collections in new light of anthropological theories, using the allegory of excavating the museum as an archaeological site, retrieving new information about objects and about new contexts and assemblages. We believe that this practice of "excavating" will bring us closer obviously to the artifacts, but also to an archaeology of the contemporary past that can open up new means of interacting with material culture and our society. Central to this debate are the collections and archives that can be used to disseminate the history of different disciplines, such as anthropology and archaeology.

Methodology:

Through various university museums in Argentina, we discuss the history and formation of collections in the history of archaeology, focusing on the von Hauenschild collection at the Museo de Antropología (Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba). The collection, which we have studied and analyzed on several occasions, originates in Santiago del Estero.

Conclusions:

We argue that, while being careful not to reproduce a colonial paradigm in this context, new ways of interpreting collections, using ethnographic and indigenous knowledge and working with communities of origin, allow us to create new relationships with objects and highlight other life histories that can be incorporated into the museum environment. We believe that collections "speak" about the people who excavated, catalogued, classified, studied, and interpreted them at some point in time.

Originality:

To conclude, we propose a research agenda to study collections in museums, by "excavating" archival material and re-examining archaeological artifacts.

Keywords: Anthropology; archaeology; archive; collection; museum; nature/culture

Resumo:

Objetivo/contexto:

Neste trabalho discutimos a importância de estudar coleções de museus à luz de teorias antropológicas, empregando a alegoria de escavar o museu como um lugar arqueológico, recuperando nova informação sobre objetos e também a respeito de novos contextos e montagens. Consideramos que esta prática de “escavar” nos acercará não só aos artefatos, mas também a uma arqueologia do passado contemporâneo que pode abrir novas formas de interagir com a cultura material e com nossa sociedade. Neste debate, são centrais as coleções e os arquivos que podem ser utilizados para difundir a história de diferentes disciplinas, como a antropologia e a arqueologia.

Metodologia:

Através de diversos museus universitários da Argentina discutimos a história e a formação das coleções na história da arqueologia, fazendo especial referência à coleção de von Hauenschild do Museo de Antropología (Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba). Esta coleção provem de Santiago del Estero, e tem sido estudada e analisada por nós em várias ocasiões.

Conclusões:

Argumentamos que as novas formas de interpretar as coleções, utilizando conhecimento etnográfico e indígena e trabalhando com as comunidades de origem, são capazes de criar novas relações com os objetos e pôr em destaque outras histórias de vida que podem ser incorporadas ao contexto de um museu, sempre cuidando de não reproduzir um paradigma colonial. Consideramos que as coleções “falam” sobre as pessoas que as escavaram, catalogaram, classificaram, estudaram e interpretaram uma vez no tempo.

Originalidade:

Para fechar, propomos uma agenda de pesquisa de coleções nos museus, mediante a “escavação” de material de arquivo e reexaminando artefatos arqueológicos.

Palavras-chave: antropologia; arqueologia; arquivo; coleção; museu; natureza/cultura

Los trabajos sobre la historia de la arqueología en Argentina se han incrementado notablemente durante los últimos diez años, habitualmente relacionados con personalidades, museos e instituciones científicas claves, así como con los estudios patrimoniales. Algunos de estos se han centrado en las redes de poder creadas entre las distintas instituciones relacionadas con la arqueología (Bonnin y Soprano 2011; Curtoni y Politis 2006; Lindskoug 2012, 2008a; Nastri 2014, 2004; Nastri y Catania 2011; Nastri y Menezes 2010; Podgorny 2013b, 2009, 2004; Politis 2003; Politis y Curtoni 2011; Politis y Pérez 2008; Zabala 2016); otros, en los estudios sobre patrimonio y restitución de restos humanos desde museos (Curtoni 2004; Endere 2014, 2001, 2000), y algunos más se han hecho eco de los reclamos indígenas y campesinos (Curtoni y Chaparro 2008). Si bien no profundizaremos en estos temas en este espacio, consideramos que la historia de la disciplina en Argentina es una red compleja de diferentes relaciones entre personas, instituciones, sitios arqueológicos y cosas (artefactos). En palabras de Hodder (2012, 2011), se puede ver la historia de la disciplina como un entanglement entre personas, cosas y el ambiente que se construye en la dinámica de las relaciones entre ellos.

La arqueología es una ciencia nacida desde la modernidad, con raíces nacionalistas y colonialistas, íntimamente relacionada con el patrimonio y los museos a través de sus prácticas de formar colecciones (Harrison 2013a; Thomas 2004; Trigger 1984). Esta disciplina, como muchas otras ciencias, es hija de la modernidad y está atravesada por la dicotomía moderna naturaleza/cultura. Partimos de la premisa de que las bases filosóficas de la modernidad, entre las cuales desarrollamos nuestras vidas y nuestra práctica disciplinar, han constituido una metanarrativa acerca del tiempo y la materialidad que permea la arqueología y a instituciones como los museos. A través de distintos mecanismos, la modernidad organizó el mundo en dicotomías, en inclusiones y exclusiones, en distintos planos que comprenden también el discursivo. El pensamiento moderno fue construyendo un sujeto individual racional diferenciado y distinto del mundo de lo no-humano definido como externo, ambos ámbitos sujetos a reglas posibles de dilucidar (Descola 2013; Elias 2000, 1956; Foucault 1996, 1980, 1970; Latour 1993; Thomas 2004).

Asimismo, la idea de cultura se fue delineando como el resultado de la acción racional de los humanos en la naturaleza, la cual fue mutando en su definición y características -creación, organismo, máquina, pasiva o activa, etc.-, pero siempre objetivada y sujeta a experimentación y explotación (Descola 2013; Latour 1993; Thomas 2004). Dentro de estos dos ámbitos, pero más cercana a la naturaleza en tanto materia inerte, la materialidad creada por los humanos también era posible de ser estudiada transformada en evidencia, operación que si bien no es exclusiva de la modernidad resulta muy afín a este modo de entender el mundo como externo (Thomas 2004, 1996). Para fines del siglo XVIII y principios del XIX, también el “Hombre” era objeto de estudio y ya no solo el sujeto del cual emanaba la racionalidad (Foucault 1970; Thomas 2004).

En este contexto, un elemento valioso para investigar la consolidación de la dicotomía naturaleza/cultura en el mundo moderno son las colecciones de museos. Varios de los museos en Argentina apuntan a exhibir la variabilidad cultural humana. En ellos, la dicotomía naturaleza/cultura, que sienta las bases de la modernidad, continúa reproduciéndose sobre todo en la forma de coleccionar. Consideramos que sería interesante analizar estos espacios a partir de las discusiones que se están desarrollando desde la antropología con respecto a distintos modos de componer mundos (Descola 2016, 2013, 1996). El propósito de este trabajo es discutir y presentar otras maneras de analizar las colecciones en nuestros museos desde perspectivas novedosas e innovadoras; siguiendo algunas discusiones del llamado giro ontológico y poniendo el foco en la dicotomía naturaleza/cultura, sugerimos incorporar el concepto de agencia (sensuGell 1998) para demostrar que las colecciones están conectadas a una red de relaciones entre agentes sociales y ensamblajes de materiales en redes complejas, además de ser el producto de relaciones sociales pasadas (Byrne et al. 2011). Buscamos reflexionar acerca de las voces excluidas y su biografía cultural (sensuKopytoff 1986) para explorar sus formaciones (entanglement [sensuHodder 2012, 2011]) y composiciones en el ámbito de los museos. Esta base teórica nos posibilita analizar colecciones y artefactos desde nuevos puntos de vista e incorporar, por ejemplo, voces excluidas, como conocimiento indígena o de otras minorías en la narración nacional u oficial.

Nuestra finalidad es delinear una agenda para futuros estudios de esta índole en Argentina. En este contexto, consideramos que la idea de “excavar” los archivos y depósitos en los museos (Hicks y Stevenson 2013), para alcanzar nueva información de los artefactos y sus contextos, permitirá generar estas otras visiones de la cultura material y el patrimonio. Asimismo, argumentamos la importancia de estudiar la agencia, no solo mediante artefactos sino también en relación con las representaciones en los museos de diferentes actores sociales. Para lograr estos objetivos debemos primero presentar y analizar la historia de los museos en Argentina, su constitución, así como la historia de la conformación de sus colecciones. De esta forma vamos a discutir y analizar algunos trabajos sobre museos, patrimonio, colecciones y manejo de colecciones, enfatizando la Colección von Hauenschild del Museo de Antropología (MDA), dependiente de la Facultad de Filosofía y Humanidades (FFyH) de la Universidad de Córdoba (UNC), Argentina, como caso de estudio. Hemos trabajado con esta colección, compuesta en su mayoría por objetos arqueológicos de la provincia de Santiago del Estero, desde diferentes perspectivas históricas, recreando la historia de Jorge von Hauenschild y la formación y trayectoria de la colección (Lindskoug 2012, 2009, 2008b, 2008a).

Queremos señalar que la forma de coleccionar y el coleccionismo de los museos reproducen un paradigma. Las colecciones son potenciales fuentes de información sobre sus creadores, sus intereses particulares, sus ideales, sus maneras de coleccionar, y evidencian las relaciones entre investigadores e instituciones, tanto en el plano nacional como en el internacional (Byrne et al. 2011; Edwards, Gosden y Phillips 2006; Lindskoug 2012, 2008a; Pearce 1995, 1994; Venn 2006). También nos informan acerca de las relaciones establecidas con las comunidades donde se originaron.

La modernidad y la dicotomía naturaleza/cultura en los museos

La discusión acerca de la división entre naturaleza y cultura, relacionada con la modernidad y con el dualismo cartesiano entre conceptos como naturaleza/cultura o materia/mente en nuestro mundo occidental, ha dado lugar a un amplio debate dentro del campo de la antropología, casi desde el inicio de la formación de la disciplina, especialmente desde las discusiones de Boas y Taylor. A partir de la mitad del siglo XX, la dicotomía naturaleza/cultura ha sido un dogma central en el debate antropológico (Descola y Pálsson 1996). En los últimos treinta años se ha vuelto a discutir la construcción de estos dos conceptos, especialmente con la participación activa de Descola y su obra (Descola 2013, 2009; Descola y Pálsson 1996), a partir de lo que se ha denominado el giro ontológico. Según Descola, se puede dividir el mundo en cuatro ontologías (naturalismo, animismo, analogismo y totemismo) y la división entre naturaleza y cultura está asociada al naturalismo. La naturaleza ha sido vista como un recurso/fuente posible de explotación que cambia según determinaciones culturales e históricas. Esta composición está íntimamente vinculada a nuestro mundo moderno occidental, a lo que se suma el lazo indiscutible entre colonialismo y modernidad. Ambos términos de la ecuación son inseparables, se retroalimentan. Descola argumenta desde la etnografía que esta visión no es universal, que el concepto de naturaleza no se puede aplicar a múltiples culturas, y presenta ejemplos que muestran que la gente interactúa con su ambiente físico (la naturaleza, para nosotros) de maneras en las que se visibiliza que no hay una división clara entre naturaleza y cultura. Existen, además, variaciones de parentesco entre humanos y no-humanos (plantas y animales, por ejemplo) que muestran otras relaciones y límites posibles entre la naturaleza y la cultura vinculados a diferentes composiciones del mundo.

En nuestra ontología occidental y moderna esta división está presente desde la segunda mitad del siglo XIX, y se manifiesta, por ejemplo, en la manera en que dividimos las ciencias: por un lado, las ciencias “naturales” (biología, química, física) y por otro las ciencias que estudian la cultura (ciencias “humanas” o “sociales”, como la antropología, la arqueología, la historia y la sociología). Al examinar esta división, vemos que no es tan clara como pensamos y que va variando en contextos culturales e históricos diferentes. El naturalismo implica una naturaleza única con múltiples culturas; esto nos lleva a preguntarnos: ¿qué interviene y actúa con más fuerza, el medio (el medioambiente, la naturaleza), o la cultura y la vida social? ¿Cuál es la relación entre las categorías naturaleza/cultura? Son interrogantes difíciles. Según Descola (2013), son las diferentes relaciones de intencionalidades subjetivas o almas (interioridades) y cuerpos (exterioridades) y su continuidades-discontinuidades las que nos separan en las diferentes ontologías propuestas por él en su esquema clasificatorio. El naturalismo se caracteriza por la discontinuidad de interioridades/alma pero continuidad de exterioridades/material/cuerpo. Para nosotros, los humanos occidentales, es el alma lo que nos diferencia de los no-humanos, en oposición al animismo en el que las relaciones se plantean al revés.

En varias de sus obras, Latour (2012, 1993) también desarrolló y argumentó un tipo de razonamiento similar al de Descola con respecto a la separación entre naturaleza y cultura en la modernidad, en este caso centrado en su concepto de humanidades científicas. Latour (1993) argumenta que dicha separación proviene del desarrollo del concepto de modernidad en el comienzo del siglo XVIII, vinculada a una ontología occidental, y que es a partir del siglo XVII cuando esta segregación comienza a vincular lo humano a la cultura y lo que no lo es, a la naturaleza. Junto con el establecimiento de esta separación, se llevó a cabo otra entre lo humano y lo no humano, basada en el desarrollo de la conciencia individual y la priorización de relacionarse con el mundo desde el enfoque del conocimiento científico. Latour (2012) elaboró estos argumentos sobre todo a propósito de los vínculos entre decisiones políticas y desarrollos en el campo de la ciencia, incluso en términos de cómo estos transforman nuestra concepción del mundo y el medio ambiente, lo que, en consecuencia, afecta al resto de nuestra cultura.

Descola (2013) llama a esto ontología naturalista, una particular composición del mundo que resultó inseparable del posterior desarrollo de la ciencia y la técnica por parte de Occidente. Tal esfera disociada de lo humano podía tornarse un gran campo de experimentación que posteriormente llevaría a avalar la explotación misma de los recursos, además de discernir qué era coleccionable y “musealizable” y qué no. Esa “naturaleza”, a la que Europa comenzaba a conocer en sus colonias, contaba también con algunos habitantes cuyo estatus de humanidad solía ser objeto de debate. Desde el siglo XVII, en las colonias desembarcaban, además de tropas militares, ciertos elementos vitales de la modernidad junto con sus dicotomías fundantes, entre ellas la separación entre naturaleza y cultura, el racionalismo y el desarrollo científico. Los científicos entrenados en el campo de las ciencias naturales (viajeros, exploradores, antropólogos, arqueólogos, botánicos, zoólogos) seguían los pasos de los militares y los acompañaban en sus campañas (incluso bajo el nombre de campañas científico/militares), para clasificar y cartografiar (mapear) los territorios nuevos junto con los seres humanos y no-humanos en una conquista de conocimiento en nombre de la ciencia.

Las cosas, los restos humanos y las personas terminaron en los museos como objetos coleccionados, y las elecciones de qué coleccionar se centraron en los “hombres modernos”, excluyendo la voz de las comunidades indígenas y de los otros. Esto nos dejó solo con la representación o visión del hombre blanco moderno (europeo) sobre los indígenas en la mayoría de los museos. Tal política de exclusión de la agencia de las comunidades indígenas o locales, acerca de qué coleccionar y su representatividad en los museos, es una manifestación clara de las relaciones de poder asimétricas y coloniales que se desarrollaron durante gran parte del siglo XIX y el XX. Estas relaciones han sido discutidas recientemente, entre otros, por Harrison (2013b). Este autor, utilizando la teoría actor-red de Latour (2005), argumenta la importancia de analizar en los museos las redes entre diferentes actores sociales y cosas, poniendo el foco en la agencia o su ausencia por parte de las comunidades indígenas en estos espacios. Partiendo de esta perspectiva es que consideramos de suma importancia tratar de desarrollar nuevas formas para entender estas redes de interacción social y material, en el contexto de crear y organizar colecciones en los museos. Creemos fundamental generar discusiones en estos ámbitos para generar nuevos conceptos para el cuidado y manejo de las colecciones, especialmente incorporando otras voces, en particular las de las comunidades indígenas.

Los museos y su rol en la sociedad

Los museos son el reservorio de nuestro patrimonio y un reflejo de nuestra sociedad y sus valores. Durante años han sido discutidos ampliamente en la literatura como lugares de poder que reflejan las ideas de la clase dominante, normalmente una élite blanca occidental; como depósitos o mausoleos donde se guarda bajo llave el patrimonio de “los otros”, los dominados; el museo construido a través de ideales europeos (Chaparro 2013; Domínguez 1986; Hooper-Greenhill 1992; Macdonald 2003; Pearce 1995, 1994; Swain 2007). El concepto de museo, tal como se desarrolló en Europa y en los primeros museos de Argentina a inicios del siglo XX, seguía ese modelo (Podgorny 1995; Podgorny et al. 2014). Esencial para la lógica de estas instituciones fue recolectar, clasificar y presentar objetos en orden, siguiendo esquemas secuenciales y evolutivos similares a los generados en el campo de las ciencias naturales y en la antropología y la historia de esos momentos (Macdonald 2006). Ese modelo se originó a partir de una visión moderna, evolucionista, derivada de Linneo y su taxonomía. Por eso, numerosas instituciones de esa época alineaban filas y filas de objetos, ordenados a partir de las ideas de progreso y evolución.

Por lo tanto, el sistema taxonómico es un invento cultural que no existe en la naturaleza sino una elaboración occidental creada para entender y ordenar el mundo. Aún hoy en muchos museos regionales y locales se sigue ese orden clasificatorio. Estas prácticas están íntimamente relacionadas con la modernidad, de la cual también es hija la arqueología (Thomas 2004). Harrison (2013a) argumenta que el proceso de clasificación, ordenamiento y catalogación es una parte integral de lo que significa ser moderno. Macdonald (2003) indica que antropología, historia y sociología se hallan intrínsecamente conectadas a la lógica de los museos. Los museos contribuyeron a la formación del Estado-nación (Macdonald 2003) y al ordenamiento del mundo y las cosas, incluyendo gente y culturas desde una visión colonial. En muchos casos, el objetivo de los museos fue justamente objetivar “al otro”, como se ha observado en el caso de varios grupos indígenas, lo que avaló la expansión colonial y acrecentó el coleccionismo durante los siglos XIX y XX, en lo que ha sido denominado “el proyecto occidental” de los museos (Méndez 1996; Mignolo 2005; Rivera 1987). En muchas de estas instituciones donde hay áreas orientadas a las ciencias naturales, al mismo tiempo hallamos sectores en los que se exhiben diferentes culturas, y mantienen así una división estricta entre la naturaleza y la cultura. Alberti (2015) discute esto, especialmente la construcción de la naturaleza/cultura y la taxonomía cultural “atrás del vidrio”.

Durante las últimas décadas han surgido nuevos tipos de museos, como los ecomuseos o museos comunitarios, que reflejan otros manejos e intereses que los propios de la clase dominante (Davis 2011). Estos espacios han apoyado a varias minorías a crear nuevas estrategias orientadas hacia un desarrollo sustentable. Estos factores promueven a los museos como lugares ideales para analizar e investigar la trayectoria del campo académico, las redes institucionales, los diferentes conflictos de poder a través de las cosas y los artefactos que dejaron huellas en el registro material en sus archivos y depósitos.

El comienzo del coleccionismo en museos de Argentina

Para el caso de Argentina, la formación de los museos y sus colecciones está relacionada con la disciplina antropológica, que se inició a comienzos del siglo XX desde los museos universitarios, especialmente en los centros urbanos de Buenos Aires, La Plata, Córdoba y Tucumán (Farro 2008; Guber, Bonnin y Laguens 2007; Podgorny 2000; Podgorny et al. 2014; Pupio 2012; Stagnaro 1993), e incluso en algunos museos provinciales más pequeños, como el de Santiago del Estero (Martínez, Taboada y Auat 2003).

La división entre naturaleza y cultura está muy vigente también en el ámbito de muchos museos en el mundo. Esta separación se encuentra además en los museos históricos donde muchas veces “lo indígena” y su cultura material no forman parte de la historia nacional. Ellos, “los otros”, formaban parte de la naturaleza, no de la historia, tal como lo postulaban las corrientes evolucionistas del siglo XIX en casi todo el mundo, con excepción de Europa, donde la arqueología se asoció más con la historia que con la antropología (Mignolo 2005; Tuhiwai 1999). El Museo Adán Quiroga en Catamarca es un ejemplo de pervivencia de la narrativa colonial en el diseño de las exhibiciones “de los otros” (Quesada, Moreno y Gastaldi 2007). Considero que es fundamental que los museos incorporen las voces de los otros para comenzar a descolonizar estas instituciones y “tornar serio” el conocimiento ancestral/indígena.

Los primeros investigadores y coleccionistas (antropólogos, arqueólogos y folkloristas) que trabajaron en estas instituciones, y en muchos casos proveyeron de materiales a estos museos, eran viajeros, exploradores y “sabios” educados en el campo de las ciencias naturales, como los Ambrosetti, Ameghino o Wagner. Hombres con una clara visión moderna que propiciaban una separación entre las cosas “producidas” por la naturaleza y las cosas “producidas” por los hombres. También es interesante reflexionar sobre esta disputa a la luz de la discusión que se estaba dando contemporáneamente en el mundo académico alemán entre Naturvölker y Kulturvölker, materializada en las exhibiciones en los museos.

En el mismo sentido, el Museo de La Plata posee una larga historia de formación de colecciones arqueológicas y antropológicas reunidas por investigadores y coleccionistas con orientaciones desde las ciencias naturales (Arena 2008). Un ejemplo típico fueron las exposiciones del siglo XIX de restos humanos, y simultáneamente la presencia de individuos y familias pertenecientes a pueblos originarios que vivían en el subsuelo del museo, tras la “Conquista del Desierto” (Peralta 2001; Podgorny y Politis 1992). Descola (2016, 2013, 2011) ha analizado la separación de naturaleza y cultura en varios muesos; entre otros, ha discutido el caso del Museo de La Plata y la división bien marcada entre naturaleza y cultura que se observa en la estructuración de sus exposiciones y colecciones, y lo vincula al inicio de la formación de la antropología como ciencia en Argentina (Descola 2011). Según se mencionó al inicio, considero que esta visión de la naturaleza en las exhibiciones de los museos fomentó su percepción como un recurso a explotar y analizar desde una visión occidental moderna. Descola (2011) demuestra cómo nuestra manera de clasificar los objetos “naturales”, como minerales, animales y plantas, y las cosas hechas por los hombres, como piedras talladas, cestería y cerámica (materiales culturales), responde a la división entre naturaleza y cultura en las exhibiciones del museo donde las categorías evolucionistas son la base de tal clasificación.

En el Museo de La Plata el primer piso está dedicado a la naturaleza, (mineralogía, zoología y botánica), mientras el segundo presenta los logros de los hombres, desde las culturas “primitivas de cazadores-recolectores” (Patagonia, Pampas y Amazonia) hasta las culturas más avanzadas del noroeste argentino (incluyendo Tiwanaku y el Imperio incaico), con cerámica elaborada y metalurgia, y presenta así una visión de progreso lineal y evolucionista en el desarrollo cultural en Sudamérica1. En el primer piso, la clasificación taxonómica según Linneo es clara; en cambio, en el segundo la división entre naturaleza y cultura es más difusa. ¿Cómo ordenar y clasificar las herramientas de piedra, por ejemplo? ¿U otros artefactos fabricados por el hombre con materias primas de la naturaleza? Cómo argumenta Descola, esta separación entre naturaleza y cultura es un reflejo de nuestro mundo (nuestra industria, simbolismo y organización social) y crea un microcosmos de cómo nosotros ordenamos el mundo desde hace alrededor de dos siglos, tratando de separar la naturaleza de la cultura, ya que esta separación en muchos casos no está muy clara. Hay una marcada división entre, por una parte, ordenar las cosas del mundo mineralógico, botánico y zoológico y, por otra parte, las del mundo cultural, el arte, la sociología y la historia de las técnicas (Descola 2011). En este sentido, la naturaleza es sorda y muda pero nosotros logramos que ella nos comunique y la entendamos a través del orden y la clasificación. Según Descola, este orden está íntimamente relacionado con nuestra ontología o composición del mundo, el naturalismo (Descola 2016, 2013, 2011).

Un nuevo rol para las colecciones arqueológicas

Coleccionar es una práctica íntimamente relacionada con los museos; sin embargo no todos los museos la han ejercido. Son estas prácticas las que conforman las colecciones y en la mayoría de los casos son coloniales, dependen de un rango diverso de actores sociales, incluyendo curadores, mercado negro, huaqueros, antigüedades, colecciones privadas y donaciones (Domínguez 1986). El impulso a los estudios vinculados a colecciones de museos viene configurado por varias causas, entre ellas los conflictos con comunidades indígenas u otros agentes locales, los inconvenientes económicos en la realización de campañas arqueológicas, la concientización de que la arqueología es una disciplina destructiva al momento de excavar un sitio, además de la preocupación y necesidad de preservar nuestro patrimonio y sitios para futuras generaciones de arqueólogos.

“Excavando” en los museos y los archivos

Los archivos y la documentación que acompañan las colecciones son otra gran fuente de información a partir de la cual es posible entender no solo las prácticas de coleccionar sino también la historia de las diferentes disciplinas (Baird y McFadyen 2014; Hicks y Stevenson 2013; Lindskoug y Gustavsson 2015). En los últimos años ha surgido lo que se ha llamado el “arqueólogo de museo”. Hicks y Stevenson (2013) han argumentado que trabajar con/en los museos y sus colecciones es una nueva manera de “excavar” para obtener mayor información. Sus depósitos y archivos representan los sitios arqueológicos para el arqueólogo de museo. Otros autores han argumentado que el trabajo con colecciones es como una prospección de superficie que permite armar y desarmar ensamblajes con artefactos e información, y así mejorar el contexto de estos (Harrison 2011; Wingfield 2018).

Considero fundamental empezar a analizar y trabajar las colecciones desde nuevas perspectivas, y una de ellas es ver al museo como un sitio o ensamblaje de archivos arqueológicos. De esta manera vamos a poder generar nueva información arqueológica. Es importante enfatizar que los trabajos con colecciones no son solo un suplemento de la investigación arqueológica, sino también una manera de generar información acerca de las diferentes redes entre personajes o grupos e instituciones a nivel nacional e internacional, y sus valores e intereses no están solo en el pasado sino también en el presente. El trabajo con colecciones se constituiría en una gran herramienta para analizar el rol de la conformación de la arqueología/antropología en Argentina, y al mismo tiempo estudiar la creación de la idea de nación durante los siglos XIX y XX.

Colecciones, artefactos, objetos y agencia

Una perspectiva de análisis posible es el estudio de la agencia de las colecciones en los museos a fin de entender las relaciones entre personas, instituciones y prácticas de coleccionismo (Byrne et al. 2011), no solo construyendo la historia de las colecciones sino estableciendo una arqueología del pasado contemporáneo. En este sentido, Gell (1998) argumenta que se puede ver a los objetos como actores sociales, y que estos construyen e influyen en el campo de la acción social de maneras únicas. Según Byrne et al. (2011) hay que pensar los museos, sus colecciones y sus objetos como procesos que viven, tienen sus propias historias y continúan teniendo agencia actualmente. Hay conexiones sociales complejas tras las colecciones. Appadurai (1986) argumenta que el contexto de la cultura material es lo más importante y que tenemos que estudiar las circunstancias sociales y políticas para acercarnos a este. En este sentido, para analizar el contexto, considero que la utilización de un enfoque biográfico (Gosden y Marshall 1999) nos va a permitir acercarnos a estudiar la agencia de los objetos. Gosden (2005) argumenta que la agencia, sus formas y las trayectorias históricas de los objetos tienen efectos sociales en las personas y que las propiedades de estos artefactos pueden ser de largo plazo. Estas perspectivas teóricas nos servirán como orientadoras para estudiar diferentes colecciones en museos y poder recrear redes entre personas y cosas.

Para analizar las colecciones es fundamental poder recrear su biografía cultural (Kopytoff 1986) y contar con la documentación que les corresponde. Según Gosden y Marshall (1999), la idea central de la biografía es que la gente y los objetos acumulan tiempo, movimiento y cambios; que están en constante trasformación, y estas transformaciones están ligadas entre sí. Esto hace que el objeto reúna historias y que su significación actual esté asociada a personas o eventos interconectados. Esto nos permitirá entender las interacciones sociales a través de la vida de un objeto o colección desde otro punto de vista, activar colecciones que durante mucho tiempo no han sido investigadas, obtener mayor información acerca de ellas y dar comienzo a un manejo más respetuoso, no solo para la materialidad sino también para los actores sociales involucrados en su activación.

Conocimiento local

Otra fuente muy importante para analizar las colecciones y objetos es trabajar directamente con las comunidades de origen e incorporar su conocimiento ancestral, como varios museos han hecho para poder entender los objetos en sus colecciones y completar sus bases de datos. Esto también permitirá comprender prácticas coloniales y contemporáneas de coleccionismo y crear nuevas interacciones entre personas y comunidades que han sido marginalizadas y usadas como objeto de estudio (Muñoz 2009). Al tiempo, abre nuevas historias y biografías que luego pueden incorporarse en el ambiente del museo y construir nuevas exhibiciones relacionadas con temas más actuales de nuestra sociedad. Sería fundamental que estas otras voces fueran “tomadas en serio” para no perpetuar el paradigma colonial desde donde seguimos estudiando al “otro”.

Tal propuesta está en línea con las nuevas prácticas de conservación y preservación; según algunas comunidades, ciertos objetos no son hechos para ser preservados eternamente, como en nuestra sociedad occidental, y algunos son tan sagrados que no deberían estar a la vista de otros grupos (o de hombres o mujeres), y mucho menos exhibidos, como es el caso, por ejemplo, de los restos humanos, mientras que en otras sociedades el orgullo por sus ancestros propicia la exhibición de los restos materiales y humanos (Muñoz 2009). Ello implica nuevos desafíos para los curadores y museólogos, así como la generación de nuevas y más respetuosas estrategias para su manejo (Henderson y Nakamoto 2016; Heritage y Golfomitsou 2015; Sease 1988), que sean particularmente sensibles en relación con el tema de la restitución de restos humanos a comunidades indígenas y la inclusión de otras voces omitidas en los discursos de los museos y sitios patrimoniales. Recientemente, la naturaleza de la heterogeneidad de las voces de “otros grupos” (minoridades de otra etnicidad) ha sido criticada (González-Ruibal, González y Criado-Boado 2018). Estos autores argumentan que, en el campo de la arqueología pública y los estudios patrimoniales, durante mucho tiempo tales grupos han sido idealizados, y tanto comunidades como patrimonios son en realidad mucho más diversos, fragmentados y complejos. Asimismo, piensan que los arqueólogos con demasiada frecuencia se han quedado con una visión simplificada de la sociedad, ya que está constituida por una gran variedad de subgrupos y minoridades.

La Colección von Hauenschild

El estudio de una colección de Santiago del Estero nos ha acercado a la conformación de la historia de la disciplina arqueológica y nos ha mostrado la importancia que han tenido en algunas regiones ciertos coleccionistas autodidactas. Tal es el caso de Jorge von Hauenschild para la arqueología en Santiago del Estero y la formación inicial de las colecciones de lo que hoy es el Museo de Antropología, FFyH-UNC (Lindskoug 2012, 2009, 2008b, 2008a). Esta colección, formada entre 1928 y 1951, posee más de 4.000 objetos, piezas cerámicas en su mayoría, e incluye también artefactos líticos, óseos (fauna) y restos humanos. Asimismo, tiene un rico acervo documental, el Fondo Documental Jorge von Hauenschild (FDJvH), conformado por cartas, recortes de diarios, manuscritos inéditos y croquis de sitios. Este fondo documental ya ha sido digitalizado y se encuentra on-line en el Repositorio Digital UNC (https://rdu.unc.edu.ar/handle/11086/893). La colección fue ensamblada por von Hauenschild, quien siendo autodidacta terminó trabajando en el museo de la UNC y estudió su propia colección con técnicas modernas para su época. La colección fue el resultado de sus excavaciones en Santiago del Estero durante casi treinta años y sus publicaciones más académicas reflejan su interés por la cerámica (von Hauenschild 1951, 1949). El FDJvH demuestra su amplia red de relaciones con arqueólogos, antropólogos, historiadores (unas pocas mujeres) de Argentina y el exterior. Las cartas cuentan acerca de intercambios de artículos y libros, pero también de relaciones personales y profesionales con un amplio rango de personas importantes de las ciencias antropológicas en Argentina. Se destacan, entre los más conocidos, Salvador Canals Frau, Antonio Serrano, José Imbelloni, Osvaldo L. Paulotti, W. A. Ruysch van Gorkum, Carlos Rusconi, Alberto Rex González, Emilio y Duncan Wagner; en Chile, Grete Mostny; en Suecia, Gerhard Lindblom, Sigvald Linné, Stig Rydén y Magnus Mörner; y en Alemania, Karin Hissink y Hermann Trimborn.

El interés por la arqueología de von Hauenschild empezó en una época cuando las ciencias naturales estaban todavía en el proceso de institucionalización en Argentina. Los límites entre arqueólogos/antropólogos (“los hombres de las ciencias naturales”), con una inserción académica, y del otro lado coleccionistas privados, exploradores, viajeros y huaqueros eran difusos. Esto se ve muy claro en la correspondencia personal de von Hauenschild, quien contaba con una red de relaciones profesionales y personales con todos estos actores (Lindskoug 2008a). Esto también les ocurría a otras personas que trabajaban en museos de esa época, quienes dependían de esa red para construir sus colecciones en los museos universitarios de las grandes ciudades de Argentina (Farro 2008; Podgorny 2000; Pupio 2012). Las prácticas científicas de ese momento eran hibridas, en palabras de Latour (2012, 1993), entre profesionales y aficionados, y el conocimiento científico se construía a través de redes de circulación de objetos e información.

Los objetos que excavó von Hauenschild no circulaban solo en Argentina, ya que llegaron incluso a los países escandinavos, por ejemplo a Suecia, a los museos etnográficos en Estocolmo y Gotemburgo, gracias al interés del arqueólogo Stig Rydén por las culturas de las tierras bajas (Lindskoug 2012), y al Museo Nacional en Copenhague, Dinamarca, a través del antropólogo danés Niels Fock. Existen referencias en el FDJvH sobre el intercambio de materiales con otras personas e instituciones, entre ellos Edwin K. Burnett, quien en 1936 le escribió desde el Museum of the American Indian (Heye Foundation, que hoy forma parte del National Museum of the American Indian, dependiente del Smithsonian Institution) en Nueva York, con la intención de comprar o intercambiar materiales de su coleccionen de “dúplicas”. George G. Heye, el director del museo, se convirtió en uno de los coleccionistas más grandes del mundo, y se especializó en objetos indígenas de las Américas. Francisco de Aparicio le escribió desde el Museo Etnográfico en Buenos Aires para consultar sobre la procedencia de una urna funeraria que el museo había adquirido en un remate de propiedades del Sr. Marcelo T. de Alvear, la cual fue excavada por von Hauenschild (carta datada el 30 de abril de 1943, FDJvH).

Esta correspondencia muestra que los bienes arqueológicos en ese momento poseían un valor monetario y circulaban tanto entre personas como entre instituciones. Jorge von Hauenschild participó en varias ferias en Argentina con su colección. Durante la Feria Industrial en Palermo, Buenos Aires, en 1934, parte de esta fue exhibida junto con dibujos de objetos arqueológicos de los Wagner y artefactos artesanales de Santiago del Estero. En estas ferias las provincias exhibían sus productos naturales y culturales detrás de vitrinas, en sus respectivos pabellones, los cuales reflejaban la manera en que cada provincia se autorreferenciaba; von Hauenschild envió un total de 272 artefactos a la feria, en su mayoría pucos y urnas funerarias, al pabellón de Santiago del Estero. Allí se presentaron cuatro paneles donde se expusieron la industria forestal, la agrícola, las minas de Ojo de Agua y las Termas de Río Hondo. Se exhibieron telares, colecciones de alfombras y cestería junto con productos agrícolas y minerales. Durante el discurso inaugural de la feria, el Dr. Lorenzo Fazio Rojas, del pabellón de Santiago del Estero, habló del progreso de la provincia y acerca de las culturas que vivieron allí mucho antes el descubrimiento del Nuevo Mundo, y cómo estas llegaron a un alto grado de progreso material y de cultura espiritual. La idea central del discurso fueron el progreso y la modernidad, así como la importancia de los productos naturales nobles y su industria forestal que habían entregado sus recursos vírgenes en aras del progreso nacional; relató cómo la tierra fue liberada para que el hombre pudiera seguir trabajando y cosechando sus inagotables frutos. Ese discurso muestra la importancia que se otorgaba a demostrar el progreso de la provincia y su alineamiento en el proceso progresista, a la par de las otras provincias argentinas (La Nación, 3 de febrero de 1934; El Mundo, 4 de febrero de 1934; La Prensa, 12 de abril de 1934, figura 1)2.

Fuente: publicado originalmente en La Prensa, 12 de abril de 1934.

Figura 1 Vitrina con objetos de la colección von Hauenschild expuesta en la Feria Industrial en Buenos Aires 

Repensando la colección, su conformación y las transformaciones que sufrió, se observa una división entre naturaleza y cultura. Esto se puede analizar tanto en la conformación en sí de la colección, como en los recortes periodísticos del FDJvH y su correspondencia. También es visible en la manera en que sus colecciones fueron interpretadas y expuestas durante diversas ferias, pero también en su casa y en el MDA hoy, y en exhibiciones pasadas. De este modo, los estudios que realiza von Hauenschild demuestran su claro interés por la cerámica; en cambio, los restos faunísticos y óseos fueron recolectados de manera parcial y después enviados a diferentes especialistas para su clasificación (Lindskoug 2008b, 2008a). Esta colección es otro ejemplo de cómo creamos cultura a través de la naturaleza y cómo los valores del siglo XX se siguen representando a través de colecciones y exhibiciones presentes actualmente en diversos museos, particularmente en la provincia de Córdoba.

Conclusiones

Como resultado de estas prácticas, pensamos poder desarrollar líneas innovadoras de investigación en el campo de la arqueología argentina, a través del estudio y análisis de colecciones arqueológicas, etnográficas e históricas dentro los depósitos de nuestros museos, que forman la base central del acervo patrimonial en Argentina. Creemos que empezar a trabajar con colecciones de museos desde las perspectivas aquí planteadas nos permitirá generar nueva información arqueológica, pero también comprender las distintas historias vinculadas a la antropología, la arqueología y disciplinas afines. Además, posibilitará generar nuevos contextos para los artefactos en los depósitos y archivos de los museos y crear nuevo material para exhibiciones que involucren otras perspectivas y voces, sobre todo las de las comunidades, incluyendo nuestra sociedad. También pensamos que sería una tarea importante identificar y analizar estas diferentes voces de grupos y comunidades, pasadas y presentes.

Hemos intentado mostrar cómo los coleccionistas crearon cultura a través de la naturaleza y cómo esta dicotomía se observa aún hoy en algunos museos y en sus colecciones, que recrean así la trayectoria de una parte de la historia del coleccionismo asociado a la práctica antropológica y arqueológica en Argentina. Consideramos que estos estudios nos permitirán en el futuro analizar representaciones de las comunidades indígenas en los museos y otras voces excluidas de sus discursos en la narrativa nacional, incluyendo sus interpretaciones de la cultura material. Esto abriría la posibilidad de empezar a trabajar temas relacionados con el desarrollo sustentable, así como otros asuntos de relevancia para la sociedad. Recrear la trayectoria de los objetos es una manera de lograrlo. La tarea será comenzar a generar y enfocar recursos hacia los museos y sus depósitos para revalorizar su patrimonio en forma de “nuevas” colecciones y archivos. Al mismo tiempo, esto nos ayudará a sacar a la luz y generar discusiones en torno al patrimonio como construcción social y política, centrándonos en su dimensión social, para poder activar y también desnaturalizar en algunas instancias a los propios museos y sus colecciones. Estas historias son escasas y recientemente se están empezando a trazar en Argentina. También es importante desarrollar estrategias para el manejo de colecciones y conservación preventiva por parte de curadores, en instituciones que aún no poseen un plan estratégico de conservación, con el propósito de crear nuevos vínculos con la patrimonialización de colecciones y buscar nuevas historias que contar a través de exhibiciones.

El estudio de la dicotomía naturaleza/cultura es fundamental para romper con el pensamiento moderno occidental y empezar a analizar desde nuevos enfoques las colecciones arqueológicas/etnográficas que provienen de otras sociedades distantes en espacio y tiempo. La metodología propuesta de “excavar” las colecciones y los archivos documentales es una manera innovadora y no destructiva de acercarnos al estudio de la dicotomía naturaleza/cultura. Analizar la trayectoria de los objetos y las relaciones entre los diversos coleccionistas a lo largo del siglo XX generará nueva información sobre estos actores y las cosas, pero sobre todo permitirá considerar de una manera respetuosa aspectos sensibles y culturales de tantas voces excluidas en estos museos.

Referencias

Alberti, Samuel J. M. M. 2015. “Constructing Nature Behind the Glass”. Museum and Society 6 (2): 73-97. [ Links ]

Appadurai, Arjun. 1986. “Introdution: Commodities and the Politics of Value". En The Social Life of Things: Commodities in Cultural Perspective, editado por Arjun Appadurai, 3-63. Cambridge: Cambridge University Press. [ Links ]

Arena, Maria Delia. 2008. “Documentación e identidad de los materiales arqueológicos del Museo de La Plata”. Museo 3 (22): 37-49. http://naturalis.fcnym.unlp.edu.ar/repositorio/_documentos/sipcyt/bfa005387.pdfLinks ]

Baird, Jennifer A. y Lesley McFadyen. 2014. “Towards an Archaeology of Archaeological Archives”. Archaeological Review from Cambridge 29 (2): 14-32. [ Links ]

Bonnin, Mirta y Germán Soprano. 2011. “Antropólogos y antropología entre las universidades nacionales de La Plata, Litoral y Córdoba. Circulación de personas, saberes y prácticas antropológicas en torno del liderazgo académico de Alberto Rex González (1949-1976)”. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología 26: 37-59. [ Links ]

Byrne, Sarah, Anne Clarke, Rodney Harrison y Robin Torrence. 2011. “Networks, Agents and Objects: Frameworks for Unpacking Museum Collections”. En Unpacking the Collection: Networks of Material and Social Agency in the Museum, editado por Sarah Byrne, Anne Clarke, Rodney Harrison y Robin Torrence, 3-26. Nueva York: Springer. [ Links ]

Chaparro, María Gabriela. 2013. “Acerca de los museos: su problemática actual, su historia y su vinculación con el patrimonio”. En Temas patrimonio cultural, editado por María Luz Endere, María Gabriela Chaparro y Carolina Inés Mariano, 52-69. Tandil, Buenos Aires Facultad de Ciencias Sociales, Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. [ Links ]

Curtoni, Rafael Pedro. 2004. “La dimensión política de la arqueología: el patrimonio indígena y la construcción del pasado”. En Aproximaciones contemporáneas a la Arqueología Pampeana. Perspectivas teóricas, metodológicas, analíticas y casos de estudio, editado por Gustavo Martínez, María Gutiérrez, Rafalel Pedro Curtoni, Mónica Berón y Patricia Madrid, 437-449. Buenos Aires: Facultad de Ciencias Sociales, Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. [ Links ]

Curtoni, Rafael Pedro y Gustavo G. Politis. 2006. “Race and Racism in South American Archaeology”. World Archaeology 38 (1): 93-108. https://doi.org/10.1080/00438240500510080Links ]

Curtoni, Rafael Pedro y María Gabriela Chaparro. 2008. “El espejo de la naturaleza y la enfermedad histórica en la construcción del conocimiento”. Intersecciones en antropología 9: 213-227. [ Links ]

Davis, Peter. 2011. Ecomuseums: A Sense of Place: Londres Continuum. [ Links ]

Descola, Philippe. 2016. La composicion de los mundos. Buenos Aires: Capital Intelectual. [ Links ]

Descola, Philippe. 2013. Beyond Nature and Culture. Chicago: University of Chicago Press. [ Links ]

Descola, Philippe. 2011. “Más allá de la naturaleza y la cultura”. En Cultura y naturaleza. Aproximaciones a propósito del Bicentenario de la Independencia de Colombia, editado por Leonardo Montenegro Martínez, 76-97. Bogotá: Jardín Botánico de Bogotá José Celestino Mutis, Alcaldía Mayor de Bogotá, D.C. [ Links ]

Descola, Philippe. 2009. “Human Natures”. Social Anthropology 17 (2): 145-157. https://doi.org/10.1111/j.1469-8676.2009.00063.xLinks ]

Descola, Philippe. 1996. “Constructing Natures”. En Nature and Society, editado por Philippe Descola y Gísli Pálsson, 82-102. Londres: Taylor & Francis. [ Links ]

Descola, Philippe, y Gísli Pálsson. 1996. “Introduction”. En Nature and Society, editado por Philippe Descola y Gísli Pálsson, 1-21. Londres: Taylor & Francis . [ Links ]

Dominguez, Virginia R. 1986. “The Marketing of Heritage”. American Ethnologist 13 (3): 546-555. https://doi.org/10.1525/ae.1986.13.3.02a00100Links ]

Edwards, Elizabeth, Chris Gosden y Ruth B. Phillips, eds. 2006. Sensible Objects. Colonialism, Museums and Material Culture. Oxford: Berg Publishers. [ Links ]

Elias, Norbert. 2000. The Civilizing Process: Sociogenetic and Psychogenetic Investigations. Oxford: Wiley, Blackwell Publications. [ Links ]

Elias, Norbert. 1956. “Problems of Involvement and Detachment”. The British Journal of Sociology 7 (3): 226-252. https://doi.org/10.2307/587994Links ]

Endere, María Luz. 2014. “Archaeological Heritage Legislation and Indigenous Rights in Latin America: Trends and Challenges”. International Journal of Cultural Property 21 (3): 319-330. https://doi.org/10.1017/S0940739114000174Links ]

Endere, María Luz. 2001. “Patrimonio arqueológico en Argentina. Panorama actual y perspectivas futuras”. Revista de Arqueología Americana (20): 143-158. [ Links ]

Endere, María Luz. 2000. “Patrimonios en disputa: acervos nacionales, investigación arqueológica y reclamos étnicos sobre restos humanos”. Trabajos de Prehistoria 57 (1): 5-17. http://dx.doi.org/10.3989/tp.2000.v57.i1.258Links ]

Farro, Máximo Ezequiel. 2008. “Historia de las colecciones en el Museo de la Plata, 1884-1906: naturalistas viajeros, coleccionistas y comerciantes de objetos de historia natural a fines del siglo XIX”. Tesis doctoral, Facultad de Ciencias Naturales y Museo, Universidad Nacional de La Plata. [ Links ]

Foucault, Michel. 1996. ¿Qué es la ilustración? Madrid: Las Ediciones de la Piqueta. [ Links ]

Foucault, Michel. 1980. El orden del discurso. Buenos Aires: Tusquets Editores. [ Links ]

Foucault, Michel. 1970. La arqueología del saber. Ciudad de México: Siglo XXI Editores. [ Links ]

Gell, Alfred. 1998. Art and Agency: An Anthropological Theory. Oxford: Oxford University Press. [ Links ]

González-Ruibal, Alfredo, Pablo Alonso González y Felipe Criado-Boado. 2018. “Against Reactionary Populism: Towards a New Public Archaeology”. Antiquity 92 (362): 507-515. http://dx.doi.org/10.15184/aqy.2017.227Links ]

Gosden, Chris. 2005. "What do Objects Want?". Journal of Archaeological Method and Theory 12 (3): 193-211. http://dx.doi.org/10.1007/s10816-005-6928-xLinks ]

Gosden, Chris e Yvonne Marshall. 1999. “The Cultural Biography of Objects”. World Archaeology 31 (2): 169-178. https://doi.org/10.1080/00438243.1999.9980439Links ]

Guber, Rosana, Mirta Bonnin y Andrés Laguens. 2007. “Tejedoras, topos y partisanos. Prácticas y nociones acerca del trabajo de campo en la arqueología y la antropología social en la Argentina”. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología 32: 381-406. [ Links ]

Harrison, Rodney. 2011. “Surface Assemblages. Towards an Archaeology in and of the Present”. Archaeological Dialogues 18 (2): 141-161. https://doi.org/10.1017/S1380203811000195Links ]

Harrison, Rodney. 2013b. “Reassembling Ethnographic Museum Collections”. En Reassembling the Collection: Ethnographic Museums and Indigenous Agency, editado por Rodney Harrison, Sarah Byrne y Anne Clarke, 3-35. Santa Fe: School for Advanced Research Press. [ Links ]

Harrison, Rodney. 2013a. Heritage. Critical Approaches. Nueva York: Routledge. [ Links ]

Henderson, Jane y Tanya Nakamoto. 2016. “Dialogue in Conservation Decision-Making”. Studies in Conservation 61 (S2): 67-78. https://doi.org/10.1080/00393630.2016.1183106Links ]

Heritage, Alison y Stavroula Golfomitsou. 2015. “Conservation Science: Reflections and Future Perspectives”. Studies in Conservation 60 (S2): 2-6. https://doi.org/10.1080/00393630.2015.1117858Links ]

Hicks, Dan y Alice Stevenson, eds. 2013. World Archaeology at the Pitt Rivers Museum: A Characterization. Oxford: Archaeopress. [ Links ]

Hodder, Ian. 2012. Entangled: An Archaeology of the Relationships between Humans and Things. Malden: Wiley-Blackwell. [ Links ]

Hodder, Ian. 2011. “Human-Thing Entanglement: Towards an Integrated Archaeological Perspective”. Journal of the Royal Anthropological Institute 17 (1): 154-177. https://doi.org/10.1111/j.1467-9655.2010.01674.xLinks ]

Hooper-Greenhill, Eileen. 1992. Museums and the Shaping of Knowledge, The Heritage: Care-Preservation-Management. Londres: Routledge. [ Links ]

Kopytoff, Igor. 1986. “The Cultural Biography of Things: Commoditization as Process”. En The Social Life of Things: Commodities in Cultural Perspective, editado por Arjun Appadurai, 64-91. Cambridge: Cambridge University Press . [ Links ]

Latour, Bruno. 2012. Cogitamus: seis cartas sobre las humanidades científicas. Buenos Aires: Paidós. [ Links ]

Latour, Bruno. 2005. Reassembling the Social. An Introduction to Actor-Network-Theory. Oxford: Oxford University Press . [ Links ]

Latour, Bruno. 1993. We Have never Been Modern. Cambridge: Harvard University Press. [ Links ]

Lindskoug, Henrik B. 2012. “Jorge von Hauenschild: From Amateur Collector to Professional Archaeologist in a Remote Corner of Argentina”. Collections: A Journal for Museum and Archives Professionals 8 (2): 127-149. https://doi.org/10.1177%2F155019061200800204Links ]

Lindskoug, Henrik B. 2009. “Redescubriendo el patrimonio Santagueño en el subsuelo de la universidad. La colección von Hauenschild en el Museo de Antropología, FFYH, UNC”. VI Encuentro Interdisciplinario de Ciencias Sociales y Humanas, Universidad Nacional de Córdoba, Facultad de Filosofía y Humanidades. Córdoba, septiembre de 2009. https://rdu.unc.edu.ar/handle/11086/1965Links ]

Lindskoug, Henrik B. 2008b. “Mysteries from the Inside of the Earth, Heritage Hidden away in the Depths of a Deposit: A Study in Collection Management of the von Hauenschild Collection at the Museo de Antropología, UNC, Argentina”. Tesis de Maestría, IMS-programme, Museion, Göteborg University. [ Links ]

Lindskoug, Henrik B. 2008a. “En la sombra de la arqueología argentina: Jorge von Hauenschild y la formación de la Colección von Hauenschild del Museo de Antropología (Universidad Nacional de Córdoba)”. Revista del Museo Antropología 1 (1): 61-70. http://dx.doi.org/10.31048/1852.4826.v1.n0.5396Links ]

Lindskoug, Henrik B. y Anne Gustavsson. 2015. “Stories from Below: Human Remains at the Gothenburg Museum of Natural History and the Museum of World Culture”. Journal of the History of Collections 27 (1): 97-109. https://doi.org/10.1093/jhc/fhu036Links ]

Macdonald, Sharon. 2006. “Expanding Museum Studies: An Introduction”. En A Companion to Museum Studies, editado por Sharon Macdonald, 1-12. Malden: Blackwell Publishing Ltd. https://doi.org/10.1002/9780470996836.ch1Links ]

Macdonald, Sharon. 2003. “Museums, National, Postnational and Transcultural Identities”. Museums and Society 1 (1): 1-16. [ Links ]

Martínez, Ana Teresa, Constanza Taboada y Luis Alejandro Auat. 2003. Los hermanos Wagner: entre ciencia, mito y poesía. Arqueología, campo arqueológico nacional y construcción de identidad en Santiago del Estero, 1920-1940. Santiago del Estero: Ediciones Universidad Católica de Santiago del Estero. [ Links ]

Méndez G. Cecilia. 1996. “Incas Sí, Indios No: Notes on Peruvian Creole Nationalism and its Contemporary Crisis”. Journal of Latin American Studies 28 (1): 197-225. https://doi.org/10.1017/S0022216X00012682Links ]

Mignolo, Walter D. 2005. The Idea of Latin America. Oxford: Blackwell Publishing. [ Links ]

Muñoz, Adriana, ed. 2009. The Power of Labelling. Göteborg: Museum of World Culture. [ Links ]

Nastri, Javier H. 2014. “Investigadores, habitantes y restos arqueológicos”. En Multivocalidad y activaciones patrimoniales en arqueología: perspectivas desde Sudamérica, editado por María Clara Rivolta, Mónica Montenegro, Lúcio Menezes Ferreira y Javier Nastri, 257-285. Buenos Aires: Fundación de Historia Natural Félix de Azara, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad Nacional del Centro de la Pcia. de Buenos Aires. [ Links ]

Nastri, Javier H. 2004. “Los primeros amerricanistas (1876-1900) y la construcción arqueológica del pasado de los Valles Calchaquíes (Noroeste Argentino)”. En Hacia una arqueología de las arqueologías Sudamericanas, editado por Alejandro F. Haber, 91-114. Bogotá: Uniandes, Ceso, Facultad de Ciencias Sociales. [ Links ]

Nastri, Javier H. yLúcio Menezes Ferreira , eds. 2010. Historias de arqueología sudamericana. Buenos Aires: Fundación de Historia Natural Félix de Azara, Universidad Maimónides. [ Links ]

Nastri, Javier H. y Bruno D. Catania. 2011. “Contexto intelectual de surgimiento del americanismo en Argentina (1845-1880)”. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología 36: 61-77. [ Links ]

Pearce, Susan M. 1995. On Collecting: An Investigation into Collecting in the European Tradition. Londres: Routledge . [ Links ]

Pearce, Susan M. 1994. “Museum Objects”. En Interpreting Objects and Collections, editado por Susan M. Pearce, 9-11. Londres: Routledge . [ Links ]

Peralta, Amanda. 2001. “Indianerna på Museet. Om Vetenskapens Härjningar i 1880-Talets Argentina”. En Identitetens Omvandlingar. Black Metal, Magdans och Hemlöshet, editado por Ove Sernhede y Thomas Johansson, 21-55. Göteborg: Bokförlaget Daidalos. [ Links ]

Podgorny, Irina. 2013b. “Travelling Museums and Itinerant Collections in Nineteenth-Century Latin America”. Museum History Journal 6 (2): 127-146. https://doi.org/10.1179/1936981613Z.00000000014Links ]

Podgorny, Irina. 2013a. “La eternidad de lo provisorio. El sistema de Enrique Delachaux y el orden de las colecciones antropológicas en la Argentina”. En Geografía y cultura visual. Los usos de las imágenes en las reflexiones sobre el espacio, coordinado por Carla Lois y Verónica Hollman, 129-153. Rosario: Prohistoria Ediciones. [ Links ]

Podgorny, Irina. 2009. El sendero del tiempo y de las causas accidentales. Los espacios de la prehistoria en la Argentina, 1850-1910. Rosario: Prohistoria Ediciones . [ Links ]

Podgorny, Irina. 2004. “‘Tocar para creer’. La arqueología en la Argentina, 1910-1940". Anales del Museo de América 12: 147-182. [ Links ]

Podgorny, Irina. 2000. El argentino despertar de las faunas y de las gentes prehistóricas: coleccionistas, estudiosos, museos y universidad en la creación del patrimonio paleontológico y arqueológico nacional (1875-1913). Buenos Aires: Eudeba, Universidad de Buenos Aires. [ Links ]

Podgorny, Irina. 1995. “De razón a facultad: ideas acerca de las funciones del Museo de La Plata en el período 1890-1918”. Runa 22 (1): 89-104. [ Links ]

Podgorny, Irina, y Gustavo G. Politis. 1992. “¿Qué sucedió en la historia? Los esqueletos araucanos del Museo de La Plata y la Conquista del Desierto”. Arqueología Contemporánea 3: 73-79. [ Links ]

Podgorny, Irina , Máximo Ezequiel Farro, Alejandro Martínez y Diego Ballestero. 2014. “Caballeros de la noche. Antropología y museos en la Argentina de las últimas décadas del siglo XIX”. En Las ciencias en la formación de las naciones americanas, editado por Sandra Carreras y Katja Carrillo Zeiter, 201-228. Madrid: Iberoamericana. [ Links ]

Politis, Gustavo G. 2003. “The Theoretical Landscape and the Methodological Development of Archaeology in Latin America”. American Antiquity 68 (2): 245-272. https://doi.org/10.2307/3557079Links ]

Politis, Gustavo G. y José Antonio Pérez Gollán . 2008. “Latin American Archaeology: From Colonialism to Globalization”. En A Companion to Social Archaeology, editado por Lynn Meskell y Robert W. Preucel, 333-373. Malden: Blackwell Publishing. https://doi.org/10.1002/9780470693605.ch15Links ]

Politis, Gustavo G. y Rafael Pedro Curtoni . 2011. “Archaeology and Politics in Argentina during the Last 50 Years”. En Comparative Archaeologies: A Sociological View of the Science of the Past, editado por Ludomir R. Lozny, 495-525. Nueva York: Springer New York. [ Links ]

Pupio, María Alejandra. 2012. “Profesionales y aficionados en la conformación, interpretación y exhibición de las colecciones arqueológicas. Coleccionistas y museos de la provincia de Buenos Aires”. Tesis doctoral, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires. [ Links ]

Quesada, Marcos, Enrique Moreno y Marcos Gastaldi. 2007. “Narrativas arqueológicas públicas e identidades indígenas en Catamarca”. Revista Arqueologia Pública 2 (1[2]): 57-71. https://doi.org/10.20396/rap.v2i1.8635811Links ]

Rivera Cusicanqui, Silvia. 1987. Oppressed but not Defeated: Peasant Struggles among the Aymara and Qhechwa in Bolivia, 1900-1980. Ginebra: United Nations Research Institute for Social Development (Unrisd). [ Links ]

Sease, Catherine. 1988. “Codes of Ethics for Conservation”. International Journal of Cultural Property 7 (1): 98-115. https://doi.org/10.1017/S0940739198770092Links ]

Stagnaro, Adriana Alejandrina. 1993. “La antropología en la comunidad científica: entre el origen del hombre y la caza de cráneos-trofeo (1870-1910)”. Alteridades 3 (6): 53-65. [ Links ]

Swain, Hedley. 2007. An Introduction to Museum Archaeology. Cambridge: University Press. [ Links ]

Thomas, Julian. 2004. Archaeology and Modernity. Londres: Routledge . [ Links ]

Thomas, Julian. 1996. Time, Culture and Identity. An Interpretative Archaeology. Londres: Routledge . [ Links ]

Trigger, Bruce G. 1984. “Alternative Archaeologies: Nationalist, Colonialist, Imperialist”. Man 19 (3): 355-370. https://doi.org/10.2307/2802176Links ]

Tuhiwai Smith, Linda. 1999. Decolonizing Methodologies. Research and Indigenous Peoples. Londres: Zed Books Ltd. [ Links ]

Venn, Couze. 2006. “The Collection”. Theory, Culture & Society 23 (2-3): 35-40. https://doi.org/10.1177/026327640602300203Links ]

von Hauenschild, Jorge. 1951. Influencias paranaenses y pampeanas. Córdoba: Universidad Nacional de Córdoba. [ Links ]

von Hauenschild, Jorge. 1949. Ensayo de clasificación de la documentation arqueológica de Santiago del Estero. Córdoba: Universidad Nacional de Córdoba . [ Links ]

Wingfield, Chris. 2018. “Collection as (Re)assemblage: Refreshing Museum Archaeology”. World Archaeology 49 (5): 1-14. https://doi.org/10.1080/00438243.2017.1406395Links ]

Zabala, Mariela Eleonora. 2016. “‘Tiestos dispersos’. Una etnografía sobre arqueólogos y antropólogos en Córdoba en la década de 1960”. Tesis doctoral, Ciencias Antropológicas, FFyH, Universidad Nacional de Córdoba. [ Links ]

Cómo citar este artículo: Lindskoug, Henrik B. 2019. “Coleccionando naturaleza, creando cultura: construcción de la dicotomía naturaleza/cultura en museos”. Antípoda. Revista de Antropología y Arqueología 36: 11-32. https://doi.org/10.7440/antipoda36.2019.02

* Este artículo es el resultado del proyecto de investigación “Paisajes patrimoniales: temporalidades, lugares y materialidades en la provincia de Córdoba, Argentina”, Proyecto Formar 2018-2019, Secretaría de Ciencia y Técnica, Universidad Nacional de Córdoba (UNC), [Resolución 411/18], dirigida por mí y radicada en el Centro de Investigaciones de la Facultad de Filosofía y Humanidades (CIFFyH) - UNC. Quiero agradecer a Bernarda Marconetto, Claudina González y María Marschoff por la ayuda con la corrección del castellano del manuscrito y varios comentarios valiosos que ayudaron a mejorarlo; también a Adriana Muñoz y Mirta Bonnin que leyeron una versión temprana de este trabajo y me hicieron sugerencias en el mismo sentido.

1Al mismo tiempo debemos tener en cuenta que la clasificación de los materiales de las colecciones de los museos en Argentina también está relacionada con la división en zonas geográficas del territorio, siguiendo a Delachaux, un geógrafo suizo que trabajó en el Museo de La Plata a comienzos del siglo XX (Podgorny 2013a).

2Tomado del Fondo Documental de Jorge von Hauenschild.

Recibido: 03 de Octubre de 2018; Aprobado: 09 de Abril de 2019

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons