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Introducción
Actualmente la motivación estimulada en sistemas adecuados de aprendizajes constituye, para la salud mental y emocional en niños y adolescentes, factores que desencadenan una variedad de atributos tales como la ampliación de las áreas perceptivas del individuo con efectos de aumentar sus competencias de análisis de observación, sus expectativas, valores, tomas de decisiones, así como la determinación en asumir sus responsabilidades, definición y logros de objetivos.
Por consiguiente, son manifestaciones del concepto de la autodeterminación que facilitan el aprendizaje autorregulado especialmente en el desarrollo emocional y conductual en niños y adolescentes.
Estos términos, sin duda, tendrían que cumplir con criterios de salud y bienestar como los plantea la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuando en 1948 hizo una apuesta plena de lucidez teórica y de repercusiones aplicadas sobre las que conviene volver una y otra vez: “La salud es un estado de bienestar completo, físico, social y psicológico, y no solamente la ausencia de enfermedad o de invalidez” (Blanco y Valera, 2007). Por tanto, se enmarcan estas características dentro de un análisis referencial basado en el bienestar subjetivo y psicosocial del desarrollo humano.
Es debido a la falta de focalización en el bienestar psicosocial y bienestar subjetivo que se ha observado incremento en problemas en el ambiente escolar tales como deserción escolar (Albor-Chadid et al., 2019), problemas en la convivencia escolar (Rodríguez-Burgos et al., 2019), incremento en la violencia escolar (Rodríguez-Burgos, 2020; Rodríguez-Burgos et al., 2020), falta de valores que promuevan la cultura de paz (Rodríguez-Burgos e Hinojosa, 2017; Rodríguez-Burgos et al., 2017; Lozano et al., 2015), así como la falta del uso de herramientas como de la mediación escolar (Miranda-Medina et al., 2020; Rodríguez-Burgos y Miranda-Medina, 2020).
Es por tanto que, desde estas medidas y atendiendo a una necesidad de cuidado en salud mental, se ha generado un interés en motivar en los niños y adolescentes las capacidades autodeterminantes manifestadas en las motivaciones intrínsecas y extrínsecas, para que a través de estas competencias la población asuma desafíos en aumentar las capacidades motivacionales, de capacidad de regulación mental y de decisiones asertivas para la toma de decisiones.
La motivación intrínseca se describe como el sentido de la autonomía que promueve la autoiniciación de los alumnos en los resultados de aprendizaje y rendimiento (Chen y Bozeman, 2013). Además, se define como el compromiso, la competencia y la autonomía para la consecución de objetivos autodeterminados, con propósitos de incentivar la autoconciencia, la comprensión y la autoaceptación, además de ser un mecanismo de acción dirigida a objetivos (Goble et al., 2017).
Hayward et al. (2018) señalan que entre las acciones específicas y concretas que se evidencian en el aprendizaje de la motivación intrínseca se aprecia en el individuo mayor motivación, apreciación por la complejidad de la enseñanza y la comunicación respetuosa, especificando que el individuo alcanza competencias en proporcionar comentarios oportunos y significativos; así como también la oportunidad para la toma de decisiones, y así, desde lo humano, tener un trato adecuado real con los seres vivos (Hong y Shull, 2009).
Desde los contextos escolares, la investigación intrínseca ha demostrado que desde la enseñanza se procura por una autorregulación intrínseca que aumenta el bienestar psicológico y el rendimiento académico (Burton et al., 2006). De aquí que con este tipo de investigaciones, los estudiantes deberían ser considerados y motivados a que sean buscadores activos de retroalimentación en lugar de receptores pasivos, con el objetivo de alcanzar nuevos aprendizajes y aumentar su rendimiento académico (De Jong et al., 2017).
Las intervenciones basadas en la motivación intrínseca incluyen varios conceptos, entre ellos la autodeterminación. Es por tanto que autores como Chen (2016), Cerasoli y Ford (2014), Ferriz et al. (2017) y Kwon y Yu (2020) especifican el vínculo existente de la intervención de la autodeterminación en la motivación intrínseca que puede aumentar los niveles de aprendizaje, promover la autonomía, así como adoptar estilos de vida saludables con efectos de necesidades psicológicas básicas satisfechas.
Otros autores como Fernández-Ozcorta et al. (2015) sostienen que la autodeterminación evalúa la intención de permanecer físicamente activos, es decir que aumenta el placer por el disfrute de las necesidades básicas psicológicas satisfechas. Entonces, se afirma que la motivación intrínseca aumenta el coeficiente de la autodeterminación, manifestada en acciones dirigidas a la diversión, el cuidado de la apariencia que predice satisfactoriamente logros en el futuro y, desde la conducta, ser físicamente activos (Durán-Vinagre et al., 2020).
Por tanto, se puede decir que la aplicación de la motivación intrínseca en los ámbitos educativos, con influencia de la teoría de la autodeterminación predice situaciones con pronósticos exitosos (Burton et al., 2006; Danowitz, 2016; Durán-Vinagre et al., 2020).
Las intervenciones basadas en la motivación intrínseca con objetivos de logros autodeterminados incluyen factores como la participación que los individuos cultivan en la autoconciencia, la comprensión y la autoaceptación para aplicarlo a la acción dirigida a objetivos, con cambios transformadores evidenciados en salud y bienestar (Goble et al., 2017). Entre estas aproximaciones se encontró que para medir la motivación intrínseca con incidencias autodeterminantes, permitiendo aprender aspectos psicológicos desde un programa de enseñanza de ciencias al aire libre, el disfrute por la naturaleza con incidencias de tener mayor flujo de disposición de enseñanza y autodeterminación, se puede en concordancia para medir la motivación, aplicar en la práctica directamente en contextos escolares al generar mayores oportunidades, así como facilitar que los profesores proporcionen comentarios oportunos y significativos, mayor toma de decisiones y la sensibilidad por el trato a los estudiantes como seres humanos (Hong y Shull, 2009; Amado et al., 2015; Dettweiler et al., 2015).
Estas intervenciones basadas en la autodeterminación, en donde a mayor satisfacción de las necesidades psicológicas básicas condiciona una mayor autorregulación más autónoma aunado a una mayor motivación en desarrollo y bienestar. Es así que autores como Lane et al. (2012), Hayward et al. (2018) y Hope et al. (2019) sostienen que desde una motivación intrínseca, en ámbitos educativos y de transición de alta calidad, tanto profesores como estudiantes organizan estrategias pedagógicas en las que planifican, enseñan y evalúan, así como proporcionan retroalimentación sobre el rendimiento de profesor-estudiante, la estructura del curso y los contenidos evidenciando una mayor motivación de objetivos autónomos con altos niveles en los componentes de la autodeterminación como es la toma de decisiones, la resolución de problemas, la fijación de objetivos, el logro, la autodefensa, el liderazgo, la autogestión, la autorregulación, la autoconciencia, el autoconocimiento y un mejor bienestar a lo largo del tiempo.
Teniendo como base lo anterior, además también se tiene que la incidencia de la teoría de la autodeterminación en la formación integral del individuo es primordial para el desarrollo del comportamiento prosocial manifestado a través de la regulación emocional y las habilidades sociales tal y como afirman en sus publicaciones autores como Bruce et al. (2016), Benita et al. (2017) y Chou et al. (2017).
Estos estudios básicamente se han desarrollado en población de niños, donde sugieren que la regulación emocional integradora predice el comportamiento pro-social de los estudiantes, desarrollándose a través de la mediación de la empatía hacia los compañeros de clase (Benita et al., 2017; Brandenberger et al., 2018), lo que también a su vez logra disminuir el estrés y los altos niveles de ansiedad.
Es por tanto que, desde la autodeterminación, otros conceptos de influencias psicológicas como el autoconcepto han generado gran interés ya que, como afirman Christova (2004) y Chou et al. (2017), los factores determinantes tales como la autonomía, la autorregulación, el empoderamiento psicológico y la autorrealización en estudiantes constituyen criterios significativos para el fortalecimiento del propio autoconcepto, manifestados desde la cognición en la conciencia del ser, la regulación de la atención; desde lo emocional, las capacidades de mantener situaciones autorreguladas; así como también el de focalizar, que permite examinar de modo particular cómo se transforman satisfactoriamente los propósitos en proyectos de vida, con flexibilidades psicológicas que promueven el avance de los ciclos vitales de una forma satisfactoria. Es por tanto que se identifica una tendencia hacia un aumento progresivo del peso relativo de los objetivos relacionados con la mejora de la salud física y el bienestar psicológico.
Entre los mecanismos de acción involucrados en la autodeterminación personal, desde el análisis de aprendizajes, se destaca la importancia del aprendizaje autorregulado que condicione al estudiante al incremento de sus capacidades y aptitudes en liderazgo basado en el autoconocimiento, la autovaloración y la autonomía (Caira y Lescher, 2013; Dybowski y Harendza, 2015; Adams y Olsen, 2017). Dentro de las intervenciones psicosociales que han focalizado el aprendizaje autorregulado con características de autodeterminación, está el trabajo articulado del apoyo y la motivación por enseñar del director con los estudiantes, donde el profesor aprecia las necesidades psicológicas de los estudiantes en el momento presente, sin prejuicios y sin juicios de valor, y es así que el estudiante integra sus capacidades y actitudes para lograr éxitos académicos, desde una autodeterminación, el aumento personal, desarrollando mayor autonomía, capacidad de decisiones asertivas y resolución de problemas (Adams et al., 2017).
Según investigaciones realizadas por Kanat-Maymon y Assor (2010), Jandrić et al. (2018) y Kadir et al. (2020), afirman que el aprendizaje autorregulado en la teoría de la autodeterminación está constituido por procesos cognitivos, metacognitivos y conductuales donde están involucradas estrategias de aprendizaje con enfoques de instrucción, que en la práctica se destacan como un análisis de logros en los estudiantes con efectos significativos para la resolución de problemas complejos e incremento en procesos motivacionales tales como autorregulación, compromiso, sentido de competencia, orientación a objetivos de tareas, aspiración educativa, aspiración profesional en ciencias, así como también desde lo personal, generando mayores habilidades para las respuestas empáticas y ampliación de las capacidades perceptivas en observar la vida cotidiana.
De igual forma, Ben-Eliyahu (2017) afirma que, para la incidencia de la autodeterminación para alcanzar logros de aprendizajes efectivos en los estudiantes, es necesario motivar factores internos tales como la motivación manifestadas en las orientaciones, expectativas y valores de cada individuo, el aprendizaje autorregulado basado en regulación emocional, incluyendo reevaluaciones cognitivas ante reacciones de distorsiones de realidades, así como responder con flexibilidad psicológicas, que conducen a resultados de logros adaptativos porque satisfacen las necesidades básicas competitivas, disminuyendo la competencia, lo que consecuentemente genera la liberación espontánea de recursos útiles y efectivos para el aprendizaje (Ben-Eliyahu y Bernacki, 2015).
A propósito de esta afirmación, Arvanitis et al. (2019) en su estudio afirman que de las experiencias de un locus de control interno se pueden ver afectados negativamente cuando existen valores predeterminados al fracaso. Entonces, es importante identificar las motivaciones de los estudiantes para informar los esfuerzos para mejorar las estrategias de instrucción que fomentan la autorregulación en función de aumentar la satisfacción de las necesidades básicas asociadas a la motivación (Austin et al., 2018).
Dado que dentro de las motivaciones asociadas a la autodeterminación se encuentra la autonomía, como criterio de crecimiento personal y académico, autores como Black y Deci (2000), Chirkov et al. (2007) y Bunce et al. (2019) consideran que los apoyos por aumentar la autonomía de los profesores a los estudiantes predicen mayores competencias autopercibidas que incrementan las competencias académicas, además existe un mayor disfrute por una cotidianidad dentro de un campo de adquisición de nuevos conocimientos con capacidad en que las imposiciones transcurran sin ansiedad y con focalización de objetivos de rendimiento, así como también hay un aumento de las competencias sociales, empatía, capacidad de reflexión y con pronósticos de adaptaciones exitosas para evitar las condiciones desfavorables y cumplir con los proyectos que tienen valor para subsistencias.
Específicamente, el objetivo de esta revisión sistemática consiste en explorar la denominación e influencia de aprendizajes satisfactorios con signos de bienestar psicosocial y subjetivo aplicados en niños y adolescentes dentro de áreas de influencias de motivación con conceptos afiliados de la autodeterminación.
Metodología
Se concretaron acciones dirigidas específicamente a una revisión sistemática de los estudios que expusieran la medición de la motivación con incidencias de la teoría de la autodeterminación. Se realizó exploración de información en base de datos Scopus, publicados en los últimos cinco años (2015-2020), usando palabras clave como autodeterminación, motivación intrínseca, extrínseca.
Se exploró y analizó un número total de 120 artículos publicados en revistas, en inglés o español, con un número de 600 citas identificadas en las búsquedas de la base de datos, para concretar acciones de resultados, con un número total de 30 estudios con metodologías de enfoques cualitativos y cuantitativos en la revisión sistemática.
Con base en lo anterior, otros criterios que se tuvieron en cuenta para la exploración, identificación y selección de los artículos científicos postulados, fueron que tuviera presencia de títulos, resúmenes y descriptores en inglés, relevancia e innovación científica de la publicación, actualidad del contenido, identificación, afiliación y país de origen de los autores, resumen en dos idiomas, índice de citación, así como versión electrónica accesible en Internet.
Resultados
Se seleccionó un total de 30 estudios para explorar la influencia del concepto de la autodeterminación y su influencia en el aprendizaje, aplicados dentro de los contextos educativos, cuyos criterios se exponen en la Tabla 1 que se encuentra al final del texto.
La descripción de los artículos fue organizada con base en los resultados de los estudios del concepto de la autodeterminación agrupados en dos ejes centrales como es el bienestar psicosocial y el bienestar subjetivo, en los que se muestra la teoría de la autodeterminación regulada por comportamientos claves para el desarrollo motivacional, autorregulado y el aumento de habilidades como la focalización de logros y la resolución de problemas.
Bienestar psicosocial
En las intervenciones científicas de Adams y Olsen (2017), estudio realizado en Estados Unidos, la investigación midió el efecto que tienen las interacciones entre el director-maestro, utilizando la teoría de la autodeterminación, como factor social y psicológico que contribuye al aprendizaje de los estudiantes. La hipótesis comprobó que de la recolección de datos obtenida, el apoyo del director a las necesidades psicológicas de los estudiantes es significativa ya que aumenta en el estudiante competencias autorreguladas, así como también actitudes de liderazgos. El estudio tuvo una recolección de datos de 3.339 estudiantes y 633 maestros en 71 escuelas ubicadas en un área metropolitana de una ciudad del suroeste de Estados Unidos.
A medida que estos estudios avanzan en Estados Unidos, Taiwán, España y Corea del Sur investigan la teoría autodeterminante desde un enfoque humanista, encontrados en autores como Cerasoli y Ford (2014), Chen (2016), Ferriz et al. (2017) y Kwon y Yu (2020), donde también indican la importancia de la participación del maestro para promover el interés, la motivación, la autonomía y el sentido de autoiniciación del estudiante que pronostique éxitos académicos, así pues también son factores consecuentes para la motivación en adoptar estilos de vida saludables y aumentar las expectativas acerca del desarrollo vocacional profesional. Cabe destacar que estas investigaciones se realizaron con poblaciones de adolescentes.
Por otro lado, en la misma línea de intervención, los estudios de Koestner et al. (2010), Fernández-Ozcorta et al. (2015), Durán-Vinagre et al. (2020), en Canadá y España, confirman la factibilidad y la eficacia de la teoría de la autodeterminación en permanecer físicamente activos. Los estudios fueron aplicados en estudiantes universitarios, en edades que oscilaban entre 17 y 51 años. Según los datos, el objetivo del enfoque de dominio predice la motivación autodeterminada en apoyar los patrones de ejercicio para alcance de objetivos de logros a través de actividades deportivas, con beneficios de generar regulación de comportamiento, bienestar en la salud mental, mejoras en la motivación por divertirse, cuidado de la apariencia física, prediciendo la regulación emocional y la intención de ser físicamente activos.
Asimismo, Burton et al. (2006), Danowitz (2016) y Durán-Vinagre et al. (2020) han demostrado que todos estos factores anteriormente citados tienen una autodeterminación demostrada en las autorregulaciones intrínsecas asociadas a una adaptación exitosa donde el individuo tiene sus recursos propios que predicen el bienestar psicológico, además, cuanto más demostraban los estudiantes una regulación académica identificada, más dependía su bienestar psicológico del rendimiento. También, se llegó a la conclusión de que la autorregulación intrínseca conduce a un mayor bienestar psicológico y a un mayor rendimiento académico.
Adicionalmente, los estudios de Hong y Shull (2009), Dettweiler et al. (2015) y Goble et al. (2017) muestran resultados, desde la teoría de la autodeterminación, donde determinaron que aprender programas de enseñanza en ciencias al aire libre permitía un comportamiento motivacional de aprendizaje autorregulado significativo, lo que a su vez reporta mayores compromisos con objetivos de cambios transformadores, específicamente cuando hay atención, seguimiento por parte de los tutores, promoviendo el compromiso, la competencia, las áreas de autonomía personal, la autorregulación, el empoderamiento psicológico y la autorrealización, evidenciando además factores protectores tales como cultivar la autoconciencia, la comprensión y la autoaceptación aplicándolos a acciones dirigidas a objetivos de autodeterminación. Estos estudios se realizaron con datos de exploraciones cualitativas en la motivación de aprendizaje de los alumnos durante la observación de campo, una entrevista grupal y cuestionarios abiertos, con la participación de estudiantes de secundaria entre las edades de 14 a 17 años.
Desde el estudio que hace Hong y Shull (2009) midieron el nivel de la autodeterminación a través de la calidad de la enseñanza y el tratamiento del estudiante como predictores del nivel de autodeterminación. Los hallazgos revelaron que hay tres temas comunes que los estudiantes anhelaban de sus maestros: (1) proporcionar comentarios oportunos y significativos, (2) ofrecer oportunidades para tomar decisiones, y (3) tratar a los estudiantes como seres humanos reales.
Ahora, con respecto a la aceptabilidad de los programas con aplicación de técnicas basadas en la autodeterminación, Lane et al. (2012)) y Hayward et al. (2018) realizaron investigaciones aplicadas en Estados Unidos, donde comprobaron que el profesor, utilizando la motivación en clases con fines de optimizar los entornos de enseñanza y los resultados de aprendizaje, le facilitó al estudiante aptitudes de mayor motivación interna en donde estos actúan como equipos pedagógicos estudiantiles, facilitando el aprendizaje activo, la apreciación por la complejidad de la enseñanza, la comunicación respetuosa, el desarrollo y bienestar; así como también el profesorado adquirió una perspectiva más amplia sobre la práctica en el aula, llegando a generar de manera integral una autorregulación más autónoma.
Hope et al. (2019), en Canadá, muestran que priorizar la motivación intrínseca sobre las aspiraciones extrínsecas conduce a una autodeterminación basada en motivación, desarrollo y bienestar. Este estudio fue realizado con 1.400 estudiantes universitarios donde se evalúo el impacto de las aspiraciones sobre los cambios en la satisfacción de las necesidades, la motivación de los objetivos y el bienestar. Los resultados mostraron que las aspiraciones intrínsecas relativas al inicio predijeron experimentar una mayor satisfacción de las necesidades, una mayor motivación de objetivos autónomos y un mejor bienestar a lo largo del tiempo.
Por último, en esta misma línea, Bruce et al. (2016), Benita et al. (2017) y Chou et al. (2017), en Israel y Estados Unidos, argumentan que la autodeterminación es una competencia motivacional básica para intervenir factores, entre ellos la sordoceguera. Como actividades, estimularon y motivaron la autodeterminación con efectos de aumentar la autorregulación emocional y disminuir la ansiedad. Este estudio aplicó un método científico basado en la investigación-acción colaborativa con un diseño de teoría fundamentada. Se encontraron hallazgos en que se produjeron desafíos como el logro de objetivos donde los adolescentes aprendieron a interactuar de manera más efectiva con los estudiantes más jóvenes mientras ensayaban habilidades de autodeterminación como la fijación de objetivos y la resolución de problemas.
Es por tanto, como afirman Benita et al. (2017), que la capacidad motivacional de autorregular las emociones es determinante para el aumento del desarrollo en las habilidades sociales, tal como lo comprobaron en un estudio aplicado a 240 estudiantes israelíes de sexto y séptimo grado y sus maestros con aplicación del modelo de ecuaciones estructurales, donde mostraron que la regulación emocional integradora predice el comportamiento prosocial de los estudiantes, con efectos de condicionar el aprendizaje de la mediación de la empatía hacia los compañeros de clase y aumento de habilidades sociales. Este hallazgo de intervención dirigido hacía la regulación emocional sugiere elementos significativos en la promoción del ajuste psicosocial de niños y adolescentes.
Estos tres estudios expuestos anteriormente, evidencian los efectos de estimular la motivación que conduzca a una autodeterminación de condicionar aprendizajes cognitivos con respuestas conductuales que generen la búsqueda de logros, en contextos familiares, escolares y culturales.
Por otro lado, en Estados Unidos, Lutz et al. (2008) realizaron un estudio que buscó examinar la cognición del proceso de metas como medio alternativo mediador de la relación entre las calificaciones motivacionales autodeterminadas y la participación extenuante en el ejercicio. Para ello, intervinieron estudiantes universitarios donde se evidenció el efecto de la autodeterminación mediado para el ejercicio en el ejercicio en tiempo libre a través de los procesos de autocontrol, planificación y excitación positiva para la consecución de logros del ejercicio. Después de la intervención, se observó que la utilidad de la cognición del proceso de consecución de objetivos mediados por la autodeterminación es influyente para la obtención de logros.
Bienestar subjetivo
Benita et al. (2017) realizaron un estudio en Israel que conceptualiza la teoría de la autodeterminación, regulada a través del desarrollo del comportamiento prosocial, aplicando un modelo a 240 estudiantes israelíes de sexto y séptimo grado. Los resultados del modelo, que tuvo una estructura secuencial con objetivos de logro, mostraron que la regulación emocional integradora aumenta el comportamiento prosocial de los estudiantes, con herramientas aplicadas de la mediación de la empatía hacia los compañeros de clase.
Estos hallazgos sugieren que la regulación emocional integradora puede reflejar una combinación de efecto del ajuste psicosocial y de comunicación de los niños en clase. Por otro lado, dentro de las estrategias de intervención de la teoría de la autodeterminación, los estudios de Bruce et al. (2016) y de Chou et al. (2017), en Estados Unidos, confirman que la teoría también se aplica en poblaciones de niños con limitaciones de audio y habla, en estudiantes con discapacidad intelectual y en estudiantes con discapacidades, con aplicación de líneas de aprendizaje en que se instruyen habilidades de autodeterminación, tales como el establecimiento de objetivos, la resolución de problemas y la toma de decisiones y otros factores psicosociales que incluyen autonomía, autorregulación, empoderamiento psicológico y autorrealización. Los autores evaluaron la efectividad del programa a través de una investigación-acción colaborativa, con un enfoque cualitativo. En los resultados observaron que se originaron desafíos de atención conjunta, donde los estudiantes adolescentes aprendieron a interactuar de manera más efectiva con los estudiantes más jóvenes mientras ensayaban habilidades de autodeterminación como la fijación de objetivos y la resolución de problemas. En el seguimiento encontraron que el apoyo de los adultos fue esencial para motivar la participación de los estudiantes adolescentes en los momentos de la autorreflexión y la autoevaluación en las sesiones de retroalimentación.
Por otra parte, Dybowski & Harendza (2015) realizaron una investigación donde intervinieron a un grupo de universitarios en seis facultades médicas alemanas, por medio de la aplicación fundamentada de la teoría de la autodeterminación, para evaluar las dimensiones de la motivación teniendo como base las acciones empíricas involucrando la autorregulación y autonomía, con resultados de la elaboración de un instrumento confiable y válido para evaluar la motivación en universitarios.
Adicionalmente, Brandenberger et al. (2018), en Suiza, realizaron pruebas para medir la motivación académica autodeterminada desde la infancia hasta la adolescencia, aplicando un diseño cuasiexperimental donde comparan dos grupos experimentales, un grupo combinado de estudiantes y docentes que participaron en la intervención y otro grupo solo para estudiantes, además de contar con un grupo de control. Los resultados mostraron un aumento significativo en la motivación intrínseca y el autoconcepto para los estudiantes en el grupo combinado de alumno/maestro. Por tanto, se evidencia que los resultados resaltan la importancia de la enseñanza y el aprendizaje co-construidos entre estudiantes y profesores.
Adicionalmente, los investigadores Jandrić et al. (2018), en Croacia, intervinieron la teoría de la autodeterminación mediante el aprendizaje autorregulado involucrando procesos cognitivos, metacognitivos y conductuales, con estrategias de aprendizaje entre pares. Esta investigación consistió en verificar las diferencias entre los participantes masculinos y femeninos, así como entre los estudiantes de quinto y séptimo grado, con respecto al valor intrínseco y extrínseco, la autoeficacia, la ansiedad ante los exámenes, las estrategias de aprendizaje y el aprendizaje entre pares. Los participantes fueron 172 estudiantes de quinto y séptimo grado de dos escuelas primarias, obteniendo como resultados que la motivación depende de las características propias del desarrollo de la personalidad, las condiciones y el ambiente académico, así como de la capacidad del aprendizaje autorregulado que tenga el estudiante.
Asimismo, Kadir et al. (2020) en una investigación reciente realizada en Australia, aplicaron a una población total de siete maestros y 427 estudiantes de grado séptimo el estudio de la teoría de la autodeterminación midiendo el rendimiento y la motivación de los estudiantes. La estrategia utilizada consistió en la aplicación de un enfoque llamado Instrucción de Doble Enfoque, con fines de estimular los aspectos cognitivos y no cognitivos del aprendizaje de los estudiantes. Se evalúo la aplicación a través de un diseño de asignación en grupos comparando los logros de motivación con los resultados de motivación obtenidos con los grupos de control e intervención. En el estudio se reportó que la aplicación del enfoque tuvo un efecto significativo en el logro de los estudiantes en la resolución de problemas complejos, así como en los atributos motivacionales tales como la autorregulación, el compromiso, el sentido de competencia, la orientación a objetivos de tareas, la aspiración educativa y la aspiración profesional en ciencias, tuvieron beneficios duales en logros en ciencia y motivación.
Kanat-Maymon y Assor (2010) y Ben-Eliyahu (2017), desde Israel, exploraron cómo la teoría de la autodeterminación predice la empatía, la asociación positiva, así como la preocupación empática por los demás; desarrollan los objetivos de dominio y la autodeterminación que conducen a resultados de logros adaptativos porque se satisfacen las necesidades básicas competitivas, disminuyendo la competencia y aumentando recursos para el aprendizaje.
Asimismo, Bunce et al. (2019), desde el Reino Unido, muestran resultados en que la teoría de la autodeterminación a través de los predictores psicológicos de la resiliencia, que involucra la inteligencia emocional, la capacidad de reflexión, la competencia social y la empatía, apoyan la resiliencia y protegen contra la angustia. Estos autores realizaron un análisis de los datos evaluados a través de un cuestionario con una población de 211 estudiantes de Trabajo Social, en el Reino Unido, demostrando que los factores de protección personales tales como la autonomía, la competencia y la relación predisponen a la resiliencia como un papel mediador para la toma de decisiones en disminuir angustias psicológicas.
Los autores demuestran que el bienestar subjetivo, incididos por la teoría de la autodeterminación, logra demostrar las consecuencias en desarrollos de aprendizajes significativos proporcionándoles recursos mediadores disponibles, que permite a los niños y adolescentes vivenciar sus propias experiencias acorde con sus intereses y necesidades con expectativas de evolucionar intelectual, emocional y conductualmente.
Discusión
Desde los hallazgos de las diversas investigaciones que evalúan la importancia que tiene la motivación en la teoría de la autodeterminación, se señalan criterios de bienestar psicosocial y subjetivos en niños y adolescentes en sus contextos naturales tales como el familiar y el escolar con grados de satisfacción que contribuyen progresivamente al alcance de metas y logros. En este sentido, todas las intervenciones midieron la validez y confiabilidad de aplicar la teoría de la autodeterminación en actividades de evaluación realizadas por profesionales y ejecutadas, verificadas de manera autónoma, con criterios de evaluación bien recibidos por los estudiantes demostrando resultados de aprendizajes y rendimiento con propósitos de incentivar la autoconciencia, la comprensión y la autoaceptación (Chen y Bozeman, 2013), y la evidencia del alcance de los aprendizajes que repercutió empáticamente en la comunicación asertiva propiciando el aumento del procesamiento de información para la toma de decisiones congruentes con la realidad (Hong y Shull, 2009).
Por su lado, Benita et al. (2017) sugieren que la teoría de la autodeterminación tiene un carácter funcional regulador entre la mente humana y las emociones, puesto que estas funciones están simultáneamente definidas para el incremento de la actividad con reforzamiento positivo de la conducta.
Desde estos componentes, los resultados obtenidos en la revisión de los análisis de los trabajos consultados, estiman y sugieren que la motivación a través de la teoría de la autodeterminación son tipos de reforzamientos positivos a nivel mental y conductual con suficiente aplicación y respaldo de estrategias basadas en el método científico con análisis experimental, en donde pretenden comprobar cómo el reforzamiento de la conducta tiene implicaciones favorables para el desarrollo de mecanismos de autorregulación, autocontrol, autoeficacia, como reforzadores vicarios aprendidos de un modelo después de haber sido observado, analizado, ejecutado y codificado (Riviere, 1990).
Estas estrategias basadas en los sistemas de investigación amplían la importancia de la aplicación de la motivación intrínseca en la adquisición de aprendizajes basados en la autodeterminación y promueven acciones eficaces que se enseñan desde la infancia con propios ritmos autónomos perdurables durante el avance de períodos de ciclos vitales. Sin embargo, aún falta mucho por explorar para que en países de América Latina se apropien del concepto de la importancia que tiene la autodeterminación en el ecosistema, donde se amplíen las investigaciones en esta fórmula de aprendizajes e ir más allá de las nuevas propuestas para aplicar la praxis en aumento por los nuevos resultados en ampliación del concepto y su constante aplicación.
Las investigaciones realizadas tuvieron en común que la población estudio estaba dirigida a niños, estudiantes de secundaria, universitarios y maestros preferiblemente de establecimientos escolares (Fernández-Ozcorta et al., 2015; Adams y Olsen, 2017; Durán-Vinagre et al., 2020); con aplicación de paradigma humanista, con tendencias a la continuidad de los trabajos exploratorios así como también desde los trabajos prácticos y la reflexión crítico-social.
Desde los hallazgos obtenidos en las investigaciones y con miras a fomentar futuras investigaciones con la teoría de la autodeterminación, se sugiere promover y mejorar la participación de los tutores académicos en sus papeles primordiales que direccionen la educación centrada en el estudiante mediante acciones de enseñanzas flexibles, espontáneas, libres, vivenciales con sentido que integre toda una comunidad académica por la calidad de la enseñanza y el valor del estudiante, como sujetos predictores del fomento de la autodeterminación.
Sería de mayor beneficio, para próximas investigaciones, que se logre concretar en América Latina con respecto a la temática que aborde poblaciones en edad, sexo, clase social, nivel de escolaridad, etnicidad para así explorar y tener mayor oportunidad de intervenir pedagógicamente con iniciativa, así como estimularlos a la necesidad de alcanzar logros, competencias óptimas de autodeterminación en la toma de decisiones, estimular la creatividad y la innovación para la resolución de problemas.
En resumen, se evidencia la importancia de los propósitos que tiene la motivación por el aprendizaje de la autodeterminación, y se considera primordial la aplicación de modelos de intervención con puntos de enseñanza que estimulen las áreas sensoriales del individuo en la búsqueda de reforzar los procesos mentales que condicionen respuestas reguladas para la activación y el buen mantenimiento de las respuestas conductuales así como también la ampliación de las capacidades perceptivas para la toma adecuada de decisiones.
Cabe decir que estos modelos de intervención desde sus diversas áreas sociales, humanas y educativas de aplicación, son procesos y estrategias que estimularían cambios significativos en el sujeto desde sus áreas psicológicas, psicosociales y de sensaciones subjetivas, con alcance de buenos pronósticos para el aumento de calidad de vida, así como la aplicación de recursos de mediación innatos para la resolución de problemas.
