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En el municipio colombiano de La Macarena, departamento del Meta, se encuentra el lugar geográfico y sitio turístico denominado "Caño Cristales". Este sitio es de destacada belleza natural, ecológica, productiva y cultural, ya que es el encuentro entre los ecosistemas andino, amazónico y orinocense; por lo cual, esta sierra goza de una gran diversidad biológica y paisajes hermosos con ríos abundantes en donde la llanura y la selva se mezclan (Marín, 2017, 2018).
La región, por muchos años, estuvo en el centro del conflicto armado colombiano. Desde los primeros inicios de los acercamientos de paz en el periodo presidencial de Andrés Pastrana, formó parte del área desmilitarizada de más de 42.000 kilómetros cuadrados, que entre 1999 y 2002, era la guerrilla la única que tenía acceso a esa maravilla natural, hasta el punto de que a Caño Cristales le llamaban "el balneario de las Farc" (Agencia EFE, 2017).
Posteriormente, con la firma del proceso de la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Caño Cristales surge como un atractivo de primera categoría en la variada oferta turística de Colombia, denominado como "el río más bonito del mundo", por las características únicas y endémicas del lugar, en donde Colombia promueve procesos de paz (Agencia EFE, 2017).
En el Plan Nacional de Desarrollo, 2014-2018, "Todos por un nuevo país", se propuso una sociedad en paz, educada y equitativa para desarrollar el sector turístico: "... en concordancia con la visión de país, (el cual) ha demostrado ser un importante factor de desarrollo que genera territorios de paz" (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, 2014) y dentro de este entorno, surge posteriormente, el programa "Turismo y paz", en donde se presentaron cuatro experiencias piloto seleccionadas: la serranía de la Macarena en el Meta, el Camino Teyuna en la Sierra Nevada de Santa Marta, el Valle de Sibundoy y Mocoa en Putumayo, y el Urabá Darién entre Antioquia y Chocó. (Bonilla, 2020; Ministerio de Industria y Turismo, 2018).
Esta nueva posibilidad permitió encontrar en el fin del conflicto armado el factor más relevante para que el turismo en Colombia generara un crecimiento económico en la región: "Hace ocho años, cuando apenas recibíamos 2,6 millones de visitantes extranjeros, no imaginábamos que para 2017, un año después de finalizar una guerra de medio siglo, esa cifra llegaría a 6,5 millones" (PARES [Fundación Paz y Reconciliación], 2018, p. 1).
Caño Cristales, como piloto, puede convertirse en un modelo que puede llegar a replicarse, teniendo en cuenta que se fortalece a partir de las economías locales, y con recursos propios de las familias, propone algunos de los elementos estratégicos que confluyen para el éxito del sistema turístico en el lugar. Pero, sin duda, uno de los más importantes, es la organización de la población en torno a la actividad turística como centro de desarrollo local, que no solo beneficia de forma directa a las familias vinculadas al proceso, sino que también puede fomentar el desarrollo de otros procesos productivos sostenibles en iniciativas con valor agregado, así como el cuidado del ecosistema y el fortalecimiento de las prácticas culturales propias de la región. A través del desarrollo del turismo de naturaleza y ecoturismo, se posibilitan estrategias de conservación para las áreas protegidas y la oportunidad de mantener o restaurar los valores naturales y culturales asociados a estos atractivos, a la vez que se promueve la sensibilización del visitante, se dinamiza la economía en su área de amortiguación y evita o minimiza la generación de externalidades negativas que se puedan producir por la propia actividad turística:
Al hacer partícipe a la población local de los procesos de manejo de las áreas protegidas, particularmente en los procesos de ecoturismo, es factible disminuir las presiones antrópicas que comprometen el estado de conservación de los ecosistemas. Así todos los actores interinstitucionales y de la cadena de valor del municipio de la [La] Macarena, reconocen que las bondades que han recibido por estar ubicados en un área con tanta riqueza del país, los convierte en defensores y precursores de nuevas formas de aprovechamiento del territorio (Cormacarena & Parques Nacionales Naturales de Colombia, 2016, p. 1).
El presente documento busca presentar esta iniciativa desde el punto de observación del modelo de cooperación comunitario, que puede extrapolarse mediante la metáfora biológica organizacional (Montoya, Montoya & Rojas, 2018, 2019), como un modelo de mutualismo tipo simbiótico con procesos coevolutivos, lo cual refleja el importante éxito económico, social y ambiental que este piloto seleccionado ha demostrado en los últimos años.
Modelos de cooperación en turismo: la posibilidad de la metáfora de la simbiosis
El mutualismo, en la biología, es un tipo de relación entre especies bien diferenciadas también llamado "relación interespecífica", como se observa en la figura 1, en el cual los dos individuos involucrados obtienen un beneficio mutuo. Las relaciones de mutualismo son muy importantes en las dinámicas ecológicas, en especial porque favorecen el incremento de la biodiversidad y permiten el aprovechamiento máximo de los recursos naturales disponibles, así como propician caminos que toma la evolución.
Estas interacciones biológicas se diferencian si son de individuos de la misma especie o no. Aquellos que son de la misma especie (intraespecíficas) pueden ser de ayuda y cooperación o de competencia, ya sea por recursos, crecimiento o dominación. Cuando los agentes de la cadena son de la misma categoría, pueden surgir procesos de cooperación en la competencia, esto se ha denominado la "coopetencia" (Gómez-Díaz, García-Garnica & Curiel-Avilés, 2019).
En cuanto a las relaciones de diferentes, es decir, de los miembros de la cadena turística, que no son competencia directa, pero se necesitan, se encuentran las relaciones simbióticas. Estas pueden ser de tres tipos: el mutualismo (ganancia para todos), comensalismo (uno gana sin afectar a otro) o el parasitismo (en donde una de las especies se encuentra en desventaja por el aprovechamiento de la otra). Estas relaciones se dan de acuerdo con:
Relaciones recurso-recurso. En ellas, las dos especies intercambian algún tipo de sustancia o recurso biológico que es indispensable para ambas, de manera que su relación brinde una ganancia material a cada una.
Relaciones servicio-recurso natural. En ellas se da el intercambio de algún recurso producido, como en el caso anterior, a cambio de alguna acción o conducta que resulte beneficiosa.
Relaciones servicio-servicio. Es el tipo menos frecuente de relación, en la cual lo intercambiado por las especies es algún tipo de conducta o actuación, de modo tal que ambas salen beneficiadas (Del Val & Boege, 2012).
Por su parte, la simbiosis como tipo de mutualismo, es en el que se da un grado muy estrecho de asociación entre las dos especies. Tanto así, que llevan una vida conjunta y a menudo resultan indiscernibles una de otra. Obviamente, esta cooperación presenta beneficios significativos para ambas especies, conocidas en adelante como "simbiontes", y con el tiempo la interacción es tan fuerte que evolucionan conjuntamente, lo que se denomina "coevolución" (Hawksworth, 1989).
En los procesos de metaforización de los modelos biológicos (Montoya, Montoya & Valencia, 2016) se encuentra cómo la comparación biológica y los procesos empresariales resultan muy útiles para el entendimiento y aplicación de elementos de colaboración interempresarial. El ecosistema, por ejemplo, en el que el modelo de simbiosis y coevolución se aplica a nivel empresarial como una comunidad de organizaciones e individuos (o grupos) que interactúan (Robinson, Baum, Golubovskaya, Solnet & Callan, 2019). En cuanto a las relaciones simbióticas, Brun (2018) señala que no solo se limitan a la biología y la ecología: el término "simbiosis" también se utiliza para describir las relaciones económicas o financieras, y ha sido empleado en trabajos de investigación que estudian colaboraciones en innovación.
Fan (2019) propuso, por ejemplo, un modelo de sistema simbiótico para las organizaciones en un sector productivo. Se fundamentó en las relaciones de interacción que denominó "energía simbiótica", de esta manera logró precisar los beneficios económicos directos, el desarrollo de los mercados y las ventajas de la cocreación de valor. La figura 2 propone la modelización que el autor desarrolla en su modelo, en donde priman la construcción de estándares de las relaciones y los mecanismos de transferencia de distintos niveles de complejidad.
En este modelo ecosistémico en donde las organizaciones que interactúan cooperan para desarrollar modelos de negocios, tanto proveedores como competidores con el tiempo, coevolucionan en capacidades y funciones, y tienden a alinearse. Es por esto por lo que algunas organizaciones asumen roles de liderazgo que pueden cambiar con el tiempo, pero la función de líder del ecosistema es valorada por la comunidad porque permite a los miembros alinear sus objetivos estratégicos para desarrollar funciones de apoyo mutuo (Adner, 2017), lo cual debe fundamentarse en reglas claras y procesos de confianza establecidos en el tiempo (Walls & Paquin, 2015).
Metodología
La metodología propuesta en este documento se fundamenta en una estrategia constructivista a partir del análisis de la realidad (López-Roldán & Fachelli, 2015; Sánchez-Gómez, Rodríguez & Costa, 2018). La cual puede observarse en la figura 3, en donde los autores proponen, desde la teoría y la realidad empírica, una articulación y tipificación de la realidad social, con la posibilidad, incluso, de ser intervenida. Se señala que desde la realidad empírica se realiza una inducción y abstracción. En el presente trabajo se analiza la teoría para encontrar la relación con los hallazgos en campo, los cuales se tomaron gracias a las entrevistas con la comunidad (más de diez habitantes integrados en la cadena de valor del turismo en la región), en octubre de 2019, en La Macarena.
El turismo en La Macarena: turismo de naturaleza
Todo proceso de desarrollo del turismo está acompañado de fuertes impactos económicos, socioculturales y ambientales, asociados a las implicaciones que produce el traslado de los turistas, su modo de actuar y la satisfacción de sus necesidades en los destinos receptores; en especial, porque con volúmenes mayores de turistas, más grandes son los impactos (Castro, 2003; González, 2018).
El turismo de naturaleza está relacionado directamente con el desarrollo y el turismo sostenible, y se encuentra inspirado en hábitats naturales y en su biodiversidad, donde adquieren gran relevancia los parques naturales, las reservas protegidas, el ecoturismo, el medio rural, el agro-turismo, el concepto de territorio y el involucramiento de la población perteneciente al área turística con su entorno cultural (Martínez, 2017).
Los modelos de turismo, en general, se centran en mostrarles nuevas oportunidades a las personas que en otros entornos no tienen acceso. El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo (2013) señala, en la figura 4, las características de las nuevas formas de turismo: naturaleza, cultural, de bienestar y científico, centrando los de naturaleza en ecoturismo, de aventura y turismo rural, en el cual el territorio es un elemento destacado.
Fuente: adaptada de Ministerio de Comercio, Industria y Turismo (2013).
Figura 4 Caracterización de los modelos de turismo
Para MinComercio (2013), la potencialidad de los productos turísticos de naturaleza se centra en los de ecoturismo y aventura, los cuales tienen un crecimiento medio y alto y desarrollo en el volumen de su mercado mundial, que puede observarse en la figura 5.
Una de las condiciones fundamentales es la protección del ecosistema, lo cual se dificulta cuando la carga de los turistas empieza a presionar el sistema natural; es allí en donde de nuevo se encuentra el sistema biológico y el económico. MinComercio (2013) propone unos elementos para posibilitar la aplicación de principios de sostenibilidad, que se observan en la figura 6.
Fuente: adaptada de MinComercio (2013).
Figura 6 Aplicación de los principios de sostenibilidad de turismo de naturaleza
Uno de los elementos fundamentales se centra en el desarrollo sostenible turístico, el cual, según la Organización Mundial de Turismo (OMT), propone:
Dar un uso óptimo a los recursos ambientales que son un elemento fundamental del desarrollo turístico, manteniendo los procesos ecológicos esenciales y ayudando a conservar los recursos naturales y la diversidad biológica.
Respetar la autenticidad sociocultural de las comunidades anfitrionas, conservar sus activos culturales arquitectónicos y sus valores tradicionales, contribuyendo al entendimiento y a las tolerancias interculturales.
Asegurar unas actividades económicas viables a largo plazo, que reporten a todos los agentes unos beneficios socioeconómicos bien distribuidos, entre los que se cuenten oportunidades de empleo estable y de obtención de ingresos y servicios sociales para las comunidades anfitrionas, contribuyendo a la reducción de la pobreza.
El desarrollo sostenible del turismo exige la participación informada de todos los agentes relevantes, así como un liderazgo político firme para lograr una colaboración amplia y establecer un consenso. El logro de un turismo sostenible es un proceso continuo y requiere un seguimiento constante de los impactos, para introducir las medidas preventivas o correctivas que resulten necesarias (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, 2012, p. 25).
Se encuentra, entonces, que en La Macarena se configuran los elementos de turismo de naturaleza, en especial con un enfoque sostenible que permita el desarrollo económico y que posibilite el cuidado de los recursos naturales.
Elementos del ecosistema de turismo de naturaleza
Se requiere una infraestructura sólida y estable de capital humano (el cual es capacitado no solo en el espacio físico, sino también en atención al cliente, cuidado del medioambiente, y conocimientos en ciencias básicas para la protección de los recursos), recursos físicos y planeación, de tal manera que el turismo de naturaleza permita un entorno competitivo, en el cual cada uno de los elementos de la cadena de valor interactúen para que se encuentre el modelo colaborativo-simbiótico. En general, los elementos de sostenimiento son la infraestructura, con servicios de ingeniería, bienes raíces y servicios financieros, el desarrollo de un capital humano, un desarrollo de mercado y el apoyo de organizaciones nacionales, regionales y de apoyo privado como agremiaciones y organizaciones sectoriales. La figura 7 señala los elementos de la cadena de valor que deben considerarse como "individuos" dentro del modelo ecosistémico y que contiene relaciones simbióticas, de tal forma que todos sean tenidos en cuenta y que encuentren interacción en cada uno de ellos.
Fuente: MinComercio (2013).
Figura 7 Elementos de la cadena de valor del turismo de naturaleza - simbiontes coevolutivos
Otros elementos que deben tenerse en cuenta dentro del modelo simbiótico de turismo de naturaleza, son propuestos por Martínez (2017), y adaptados para este estudio, que se analizan en la tabla 1.
La Macarena
La región de La Macarena cuenta con seis municipios que rodean la serranía: San Juan de Arama, La Macarena, Mesetas, Puerto Rico, Uribe y Vista Hermosa. Está conformada por la zona de influencia de los parques nacionales naturales, Sierra de la Macarena, Tinigua, Cordillera Picachos y una parte del Sumapaz. Los seis municipios forman parte, en su totalidad, del Área de Manejo Especial de La Macarena (AMEM), con una extensión de 35.875,9 km2; el 90 % de su área está en el departamento del Meta y el 10 % en el departamento del Guaviare (Decreto 1989 de 1989), conformando, con 16 municipios del Meta y Guaviare, una región integral para el manejo ambiental (Mejía, 2014):
El Parque Nacional Natural Sierra de La Macarena está localizado al noroccidente del departamento del Meta, y es considerado uno de los refugios de vida silvestre más significativos del planeta. Según expertos, es uno de los hitos naturales más importantes del Continente, con una flora y fauna muy particulares en las que sobresale una concentración de más de 450 especies de aves, sin comparación en el mundo. Presenta, además, yacimientos arqueológicos con petroglifos y pictogramas de las culturas indígenas que habitaron allí (Sacristán, 2007, p. 1).
La planeación del gobierno Colombiano incentiva emprendimientos que se consoliden con el acuerdo de paz, por medio de propuestas concretas en los territorios que han sufrido el conflicto armado. Dos importantes programas son "Turismo, paz y convivencia" y "Seguro te va a encantar", en donde el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo (MinCIT) pone en marcha el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018 y el Plan sectorial Turismo para la Construcción de Paz, para permitir nuevas oportunidades en las comunidades logrando beneficios económicos y sustentabilidad. (Bonilla, 2018).
El desarrollo del turismo en La Macarena ha posibilitado la consolidación de agencias de turismo que trabajan en común acuerdo con la cadena de servicios del sector, el SENA que capacita todos los bachilleres, la organización de viajes y reservas, transporte, alojamiento, bebidas y comidas, artesanías y compras, activos turísticos, actividades de ocio y servicios de apoyo (PARES, 2018). De acuerdo con los propios agentes:
"El turismo ha sido la mejor opción para nuestro pueblo. Todos nos beneficiamos", dice Henry Quevedo, llanero auténtico, nacido en estas tierras, que dirige la agencia de viajes Ecoturismo Sierra de La Macarena. Son 600 familias beneficiadas de la actividad turística, según cuentas de la Corporación Autónoma de La Macarena (Cormacarena), que custodia el lugar (Mojica, 2018, p. 1).
Para gestionar a las organizaciones encargadas para el liderazgo de la Agenda 21 en la región amazónica, el Ministerio delegó al Instituto Sinchi, que ha coordinado el proceso en los seis departamentos amazónicos y en el Área de Manejo Especial de La Macarena (AMEM), junto con Corpoamazonia, la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Norte y el Oriente Amazónico (CDA), Cormacarena, la Unidad Administrativa Especial del Sistema de Parques Naturales Nacionales (UAESPNN) y la Organización de Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana (OPIAC). Sinchi es un instituto de investigación orientado a la generación y transferencia de conocimiento científico y tecnológico para la región, entiende y asume el reto que significa emprender acciones esencialmente políticas como estas; región considerada uno de los refugios de vida silvestre más significativos del planeta. Según los entendidos, se trata de uno de los hitos naturales más importantes del Continente, con una flora y fauna muy particulares en las que sobresale una concentración de más de 450 especies de aves, sin parangón en el mundo. Presenta, además, yacimientos arqueológicos con petroglifos y pictogramas de las culturas indígenas que habitaron allí (Sacristán, 2007).
Desde el punto de vista turístico, algunos de los lugares más interesantes son Caño Cristales (con presencia de una planta endémica que proporciona diferentes colores, que hace de este una maravilla visual), Caño Canoas, Caño Indio, el Salto del Águila, el Salto del Gato, Cascada del Cuarzo y la Ciudad de Piedra. También están los termales de las veredas Monserrate y Charcos, lo mismo que el salto de la quebrada La Curia. Todo esto habla por sí solo del potencial turístico del municipio para el desarrollo sostenible (Sacristán, 2007).
La organización de los diferentes actores liderada por la organización campesina Ecoamen, contribuye a construir la paz por medio de la integración de las comunidades a la economía nacional (Marín, 2018) y se apoya en el proyecto del Viceministerio de Turismo a través del proyecto "Turismo, Paz y Convivencia", el cual posibilita "preparar al sector turístico en contexto de paz, integrando a las regiones que han sido víctimas del conflicto armado a un mercado turístico incluyente que brinde opciones a las comunidades locales" (Moscarella, 2014, p. 22), y permitiendo la transformación de escenarios de guerra a territorios de paz mediante la práctica del turismo consciente y sostenible, con el apoyo de las entidades territoriales, gremios, empresarios turísticos y la academia (Ministerio de Industria y Turismo, 2018).
En marzo de 2013, Cormacarena, Parques Nacionales Naturales y el Consejo Local de Turismo del municipio de La Macarena conforman una mesa de trabajo para definir en forma conjunta la intervención y con ello ordenar el desarrollo de las actividades turísticas para Caño Cristales, cuyos componentes principales son: interpretación ambiental de los senderos ecoturísticos, reglamentación, capacitación y acompañamiento a operadores turísticos del municipio (Cormacarena & Parques Nacionales Naturales de Colombia, 2016), lo que posibilita la estrategia "Ecoturismo por la paz", que espera generar desarrollo económico en la naturaleza, con el ecoturismo contribuye al proceso de paz como algo positivo. Genera valor para el extranjero, y de orgullo e identidad en los destinos.
Las estadísticas dan cuenta del éxito de las estrategias implementadas:
Desde que se abrió el parque en 2012, Caño Cristales ha recibido 15.438 turistas según reportes de Cormacarena, la corporación que está a cargo del parque; de ellos, cerca de 10 mil[10.000] son colombianos, 3.489 extranjeros, 758 locales y 621 institucionales. De ese número de extranjeros, los países de los que más visitantes llegan son los Estados Unidos, seguidos por Francia, España, Alemania, Italia e inclusive[incluso] taiwaneses, tailandeses y coreanos, extranjeros procedentes de 77 países (Ritoré, 2019, p. 1).
Además, en el 2019, La Macarena es declarada como destino turístico sostenible (Martínez, 2019), lo cual se favorece teniendo en cuenta el desarrollo del turismo comunitario en zonas desfavorecidas:
Puede ayudar a generar recursos económicos en las poblaciones locales, contribuyendo así al desarrollo social y económico de la población y del destino. Además, esta forma de turismo puede generar una mayor concienciación de la comunidad local, fomentando aspectos como la conservación y respecto [sic] hacia la naturaleza y demás recursos existentes en el destino (cultura, patrimonio, etc.). El principal beneficiario del turismo comunitario es la comunidad, pues su éxito se basa en la participación local para garantizar una adecuada gestión del territorio, procurando la integración de relaciones para proteger el patrimonio turístico mientras desarrollan sus actividades de la vida cotidiana (García, Doumet & Mendoza, 2018, p. 84).
Turismo, paz y convivencia
La estrategia del desarrollo del turismo en la región ha sido fundamental para posicionar los parques y ecosistemas, posibilitar medios económicos de subsistencia y encontrar un desarrollo sostenible con enfoque territorial, desarrollando elementos culturales y mejorando el entorno económico y social. Para ello, PARES (2018) destaca las dimensiones del proceso que pueden observarse en la tabla 2.
Además, se proponen tres estrategias fundamentales centradas en la construcción del tejido social, la transformación y desarrollo de entornos de paz y desarrollo sostenible, como se observa en la tabla 3.
Resultados de la estrategia
El modelo de cooperación simbiótico resulta particularmente importante, porque a medida que se desarrolla el turismo se requiere que los agentes que participan en esta cadena de valor se adapten evolucionando conjuntamente. Las reglas y normas tanto legales como propias del sistema favorecen la interacción y resulta interesante la transparencia de los procesos y la baja cantidad de dificultades en el modelo, en el cual, la comunidad tiene plena claridad de la necesidad del trabajo conjunto, de los procesos coevolutivos que surgen a partir de las nuevas necesidades y de las oportunidades de la interacción simbiótica entre las diferentes organizaciones.
En especial, se destacan los mecanismos de coevolución planteados, debido a la restricción ecológica que tiene la planta endémica Macarenia clavigera, que da los siete característicos colores del caño y caños cercanos, pero que tiene su mayor esplendor desde junio a noviembre, y que propone alternativas de turismo para los meses de diciembre a junio, planteando actividades que durante este periodo se centren en el turismo ecológico y sostenible y que permitan a todos mantener su entorno económico estable. Así como el cuidado de todo el entorno natural que es vulnerable y debe protegerse.
Dentro de las estrategias establecidas por el Gobierno, que se observan en la tabla 3, se pueden destacar las siguientes:
1. Construcción de tejido social
Se encuentra la integración de un importante tejido social en torno de la sostenibilidad y el turismo, con la consolidación de:
Cuatro asociaciones de guías; de las cuales una es de guías profesionales, otra de expertos locales y dos de acompañantes. Los expertos locales son conocedores del territorio, pero sin la tarjeta profesional y los acompañantes son personas que están en proceso de formación.
Dos asociaciones de canoas.
Una asociación de hoteles y restaurantes.
Dos de transporte terrestre, con los vehículos especiales para el tipo de terreno de este destino.
Una de moto-taxistas; estos son los encargados de llevar las maletas a los hoteles.
Una de operadores locales; los cuales se reúnen para hablar de ventas, conciliar precios para que no haya competencia desleal. Cuando un operador brinda un valor agregado en su servicio, tiene autorización de aumentar su precio en concordancia con lo acordado.
Una asociación en la vereda La Cachivera (López, Giraldo, Posada & Mejía, 2017).
De acuerdo con las entrevistas efectuadas en la región, se aprecia que los participantes están comprometidos en la evolución de la comunidad en general, son participativos, evitan los conflictos y tratan de encontrar la equidad y el desarrollo para todos. Buscan procesos de innovación colectiva, en la cual los procesos de coevolución son determinantes para alcanzar los objetivos propuestos y se evidencia una simbiosis de tipo mutualista, en la que los actores comparten sus activos, capacidades e intereses con un objetivo común: la satisfacción del turista.
2. Transformación y desarrollo en entornos de paz
La transformación se consolida en la capacidad empresarial, la orientación al consumidor y el mercado y la estructuración de servicios turísticos complejos en los cuales se trata de incluir la mayor cantidad de población posible. El fortalecimiento de una estrategia de mercadeo enfocada a diferentes tipos de consumidores con productos y servicios agrupados alrededor de las expectativas, alcanza importantes niveles de satisfacción en turistas nacionales y extranjeros.
Se destaca la importancia del Consejo Municipal de Turismo, mecanismo de regulación de la relación simbiótica, como un superorganismo que es presidido por un empresario de la zona y en el cual tienen participación los presidentes de las diferentes asociaciones con presencia en la zona. Este órgano funcional para la gestión del turismo en La Macarena colabora, en contacto directo, con la institucionalidad nacional y departamental; además, porque la información y la comunicación fluyen de forma directa entre los diferentes asociados, gracias a los lazos de amistad existentes y el respeto por el trabajo de los otros. Aquí, la coevolución permite que se tenga claro que el desarrollo de uno de los componentes de la cadena favorece el desarrollo de todo el ecosistema turístico de la región (López et al., 2017).
3. Desarrollo sostenible
Es un aspecto tan complejo que requiere de la multiinteracción de los organismos públicos, de orden nacional y privados para la protección del recurso natural, eje fundamental de la propuesta turística. El balance de las cargas del sistema y los turistas permiten mantener los procesos biológicos estables. La estrategia propuesta para dar el liderazgo a las autoridades ambientales para que proporcionen los permisos de ingreso de turistas a los operadores registrados mantiene un altísimo control. La Asociación de Operadores Locales creó una figura para atender a las personas que llegan de forma independiente; sin embargo:
...se pretende que todas las personas lleguen con el paquete adquirido y que los operadores externos realicen todos los contactos y negociaciones con los operadores locales. Para entrar a La Macarena, es obligatorio el seguro de asistencia y la entrada de cada turista está organizada con anterioridad para no superar la capacidad de carga (López et al., 2017, p. 27).
Las tres dimensiones resultan oportunas en el caso de estudio; ya que, si bien aún existen algunas deficiencias en infraestructura, la propuesta ha sido un trabajo conjunto, consolidado y que demuestra la colaboración simbiótica entre los participantes, permitiendo colocar al país en la lista de destinos que serán tendencia en el 2020, según la Asociación de Turoperadores de Estados Unidos (USTOA, por sus siglas en inglés). Por segundo año consecutivo, el país quedó en el top 10 del escalafón y, por primera vez, comparte el primer lugar con Egipto y Croacia (El Tiempo, 2019).
El desarrollo sostenible busca que tres importantes dimensiones como la social, la económica y la ambiental se integren para que de manera conjunta el territorio se desarrolle. Estas dimensiones pueden verse en la tabla 4.
Tabla 4 Dimensiones del desarrollo sostenible
Fuente: elaboración a partir de Rivera-Cabrera y Echeverri-Rubio (2020).
Conclusión
En síntesis, en este documento se señala cómo la implementación territorial de los acuerdos de paz y la prevención de las violencias en el posconflicto (Tabarquino, 2018), deben fortalecer los tejidos comunitarios, que mediante la estrategia de turismo simbiótico como metáfora biológica aplicada, resulta interesante para entender los procesos de cooperación y confianza comunitarios, en los cuales, el trabajo mancomunado se fortalece a través de procesos altamente coevolutivos, en donde las innovaciones en una de las áreas promueven innovaciones en otras.
Esta estrategia permite, con el apoyo de la comunidad y el criterio de territorio como un área ambiental, geográfica, social y cultural, construir instancias de perdón, mediante la participación y el reconocimiento de todos los actores implicados en la violencia (Marín, 2017).
La asociatividad en los territorios fortalece las relaciones con el Estado, el ordenamiento territorial (instrumento de política pública), el reconocimiento de la vocación de los territorios y las regiones (recursos y capacidades) y el desarrollo de apuestas estratégicas sólidas de mayor envergadura (inclusión social), además de la protección del territorio y sus recursos (Marín, 2017).
De acuerdo con la aplicación de la metáfora biológica para las organizaciones, se propone la utilización del concepto de "simbiosis coevolutiva" para entender los procesos, ya actuales de asociatividad y cooperación entre los diferentes eslabones de la cadena del turismo de naturaleza, fortaleciendo procesos de sostenibilidad social, económica y ambiental. La figura 8 relaciona los principales elementos de la cadena en un entorno ecosistémico, en el cual las relaciones intraespecíficas (es decir, competidores directos de la cadena) e interespecíficas (los otros eslabones de la cadena) están perfectamente coordinados para alcanzar los objetivos propuestos que además de ser de desarrollo económico y social favorecen los procesos de paz.
El desarrollo sostenible requiere coopetición (Manzhynski & Figge, 2019), pero para que funcione, deben existir mecanismos sólidos de confianza, además de una estructura muy clara de reglas, normas y sanciones para aquellos que no la cumplen ayudan a mantener la estructura cooperativa, en general; así como en la naturaleza, se demuestra que es más eficiente estar dentro del entorno competitivo que estar por fuera como castigo por no haber entendido el proceso. Otra de las características que se emula con la naturaleza, es que tanto más personas entren en el modelo simbiótico más personas querrán estar en él, por las ventajas intrínsecas que tiene; y, por otro lado, es posible heredar los puestos de antecesores que fueron competitivos y que permiten seguir con negocios familiares sostenibles en el tiempo. En este sistema, aquellos individuos que se salen de los acuerdos son penalizados moralmente por los otros miembros, dando la oportunidad de evitar los agentes que no desean cooperar.
